Las quemaduras son una causa común de morbilidad que afecta a más de un millón de personas por año. Al producirse una quemadura, se producen respuestas locales y sistémicas. El tratamiento depende de la gravedad de la quemadura e incluye limpieza, analgesia y tratamiento de fluidos. Las quemaduras mayores requieren hospitalización e incluyen tratamiento quirúrgico y control de infecciones.