El documento discute la importancia de la ética en las organizaciones. Explica que la ética es necesaria para las empresas debido a que su fin es satisfacer las necesidades humanas y desarrollar las capacidades de sus empleados. También destaca que la ética y el servicio están correlacionados, y que valores como la calidad, la honestidad y el respeto son fundamentales para una empresa ética. Finalmente, señala que los líderes con valores pueden lograr buenos resultados a través del trabajo en equipo y orientando a las personas hacia el bien común.
2. Hay asuntos organizacionales en los que una
decisión es condicionada principalmente por
los criterios éticos, y ello ha impulsado las
investigaciones y análisis acerca de si es
posible formular normas universales de
conducta que permitan determinar cuándo
una decisión es mejor o peor que otras
posibles soluciones. Más que una moda, la
ética es en la actividad empresarial, para
cualquier organización, una necesidad, una
exigencia que se hace más apremiante
conforme crece la complejidad del tejido
social.
3. El tema de la ética en la mayoría
de las empresas en la actualidad,
más que un asunto de principios
igualmente es de naturaleza
estratégica, porque se vincula con
la sobrevivencia de las mismas, y
con la convivencia de las personas
que trabajan en ellas.
4. El fin de las organizaciones guarda un
fin social, porque toda organización se
crea para proporcionar unos bienes o
servicios, en virtud de los cuales
queda legitimada su existencia ante la
sociedad, y éste es un punto central
en la elaboración de un código ético.
Es necesario discernir qué
relación debe existir con las
distintas actividades y
organizaciones, así como
también entre los bienes
internos y externos a ellas; y
por último, determinar cuáles
son los valores de la moral
cívica de la sociedad en la que
se inscribe; después es
necesario saber qué derechos
reconoce esa sociedad a las
personas. Es decir, cuál es la
conciencia moral alcanzada por
la sociedad.
Además se plantea cómo la distinción entre la racionalidad comunicativa y
estratégica será de gran interés a la hora de construir una ética de la
empresa; porque tradicionalmente se suele entender a la empresa como
regida por una racionalidad estratégica, dirigida a obtener el máximo
beneficio, mientras que el momento moral es el de racionalidad comunicativa,
apareciendo entonces, empresa y ética como aparentemente incompatibles.
La meta de la actividad empresarial
es la satisfacción de necesidades
humanas a través de la inversión de
un capital, que es parte esencial el
capital humano, es decir, los
recursos humanos o dicho de otra
forma, las capacidades de cuantos
cooperan en la empresa.
5. Fin interno de
la Empresa
Consiste en lograr satisfacer esas necesidades y, de forma inseparable, en desarrollar al máximo las
capacidades de sus colaboradores para lograr un desempeño laboral deseable a través de un buen
liderazgo, metas ambas que no podrá alcanzar si no es promocionando valores desde el modo especifico
en que la empresa puede y debe hacerlo. Asimismo, al hablar de satisfacer necesidades humanas se
estaría hablando de servicio, donde el objetivo primordial es lograr la satisfacción del cliente y superar
sus expectativas, lo que se logra ofreciendo un excelente servicio con los estándares éticos que posee la
empresa y los valores del capital humano, logrando así el desempeño laboral apropiado.
De allí que se promueve una correlación entre ética y servicio, o lo que es similar ética empresarial y
desempeño laboral. El servicio es un atributo de esencia ética, y la ética es filosofía traducida en
servicio. En definitiva, el carácter activo de una empresa procede de la capacidad de dar, más que de la
posibilidad de recibir. Esto significa que su potencialidad competitiva y su margen cooperativo proceden
de la ética, de su atmósfera organizacional y del servicio que pauta su desempeño. La correspondencia
entre ética y servicio viene acompañada por el rechazo de sus desviaciones y sesgos: servicio no es
servilismo, como ética no es ascetismo.
Todos pueden servir así como todos deben asumir una conducta ética sin traspasar los umbrales de
suprema dignidad y sin caer en los extremos de sus caricaturas. El servicio y la ética de manera
semejante a lo que ocurre con el conocimiento crecen mientras más se traducen en ejecuciones
concretas. También se produce una semejanza entre ambos aspectos, en cuanto a que ellos generan
más dividendos y acrecientan más la imagen de las organizaciones que la que procede por la venta de
productos tangibles.
Es en este sentido, en el que la ética de la empresa tiene por valores irrenunciables la calidad en los
productos y la gestión, la honradez en el servicio, el mutuo respeto en las relaciones internas y externas
a la empresa, la cooperación por la que conjuntamente se aspira a la calidad y la solidaridad al alza.
Los valores anteriormente expuestos consisten en explotar al máximo las propias capacidades de modo
que el conjunto de personas pueda beneficiarse de ellas, la creatividad, la iniciativa, el espíritu de
riesgo; valores que definitivamente lograran que los colaboradores de una empresa obtengan un
excelente desempeño laboral movidos en conjunto por un interés común, el mismo que persigue la
organización.
6.
7. El líder busca resultados, y si no los obtiene su
condición se pone en duda. Pero esos resultados se
manifiestan en un bien para los demás, o en que se
acrecienta el bien común de un grupo, empresa,
familia o sociedad. El líder con valores obtiene
resultados y resuelve problemas precisamente
porque no se limita a ejercer el poder como
dominio o la persuasión como capacidad de
convencimiento sobre otros para que lo sigan
ciegamente o dominados por el áurea de una
persona. Su liderazgo surge desde dentro, de su
capa íntima de valores interiores que lo llevan a
servir, a labrarse un prestigio con base en lo que
es, no en lo que tiene.
El liderazgo basado en valores y principios tendrá
como consecuencia un buen trabajo en equipo,
éste líder puede enfrentar situaciones difíciles
durante su camino o decisiones difíciles de tomar
pero lo sacará adelante siempre sus valores.
8. Conclusión
Los líderes hacen cambiar de opinión a las personas y las impulsan
desde las preocupaciones egoístas hacia el servicio al bien común,
esto requiere la aptitud para orientar a las personas. Los líderes
pueden cambiar el enfoque de la energía de las personas con
intervenciones directas o hacerlo de manera indirecta ajustándose a
los sistemas de manera que las personas cambien de manera natural
hacia la dirección necesaria. De tal manera, que existen ciertos
métodos de liderazgo directos que incluyen las órdenes, las decisiones
acerca de los recursos y ascensos y la orientación personal de los
individuos y los equipos. Cuando las organizaciones se hacen más
grandes y más complejas, las intervenciones directas por los líderes de
categoría superior pueden tener una menor influencia.