RESUMEN DEL POSTCAST EL COVID 19 Y SU IMPACTO QUE HA TENIDO EN LA DESIGUALDAD Y EN LA POBREZA

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FACULTAD CIENCIAS DE LA EDUCACIÓN
PEDAGOGIA DE LOS IDIOMAS NACIONALES
Y EXTRANJEROS
MODALIDAD EN LÍNEA
ASIGNATURA:
DOCENTE:
ALUMNA:
TEMA:
CURSO:
PERIODO LECTIVO
2022-2023

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RESUMEN DEL POSTCAST EL COVID 19 Y SU IMPACTO QUE HA TENIDO EN LA
DESIGUALDAD Y EN LA POBREZA
El COVID-19 ha tenido un impacto significativo en la desigualdad y la pobreza a nivel
mundial. La pandemia ha afectado desproporcionadamente a los grupos más vulnerables y
ha exacerbado las desigualdades preexistentes.
En términos de pobreza, se estima que la pandemia ha empujado a más de 100 millones de
personas a la pobreza extrema en 2020, según datos del Banco Mundial. La pandemia ha
afectado especialmente a los trabajadores informales y a aquellos en sectores más afectados,
como la industria del turismo y la hostelería.
En términos de desigualdad, la pandemia ha afectado desproporcionadamente a los grupos
más vulnerables, como las personas de bajos ingresos, las minorías étnicas y los migrantes.
Además, la pandemia ha afectado de manera desproporcionada a las mujeres, ya que muchas
de ellas se han visto obligadas a abandonar sus trabajos para cuidar a sus familias.
La pandemia ha resaltado la necesidad de abordar la desigualdad y la pobreza de manera
efectiva y ha puesto en evidencia la importancia de contar con sistemas de protección social
sólidos para apoyar a los grupos más vulnerables durante las crisis económicas y sanitarias.
La respuesta a la pandemia ha demostrado la necesidad de un enfoque de política integral
que aborde la desigualdad y la pobreza de manera efectiva para lograr una recuperación
económica justa y sostenible.
El coeficiente de Gini se calcula como el área entre la línea diagonal y la curva de Lorenz,
dividida por el área total debajo de la línea diagonal. El resultado es un número entre 0 y 1,
donde 0 representa una distribución perfectamente igualitaria de los ingresos y 1 representa
una distribución perfectamente desigual.
El coeficiente de Gini se utiliza comúnmente para evaluar la desigualdad económica en un
país o región determinada. Un coeficiente de Gini alto indica una gran desigualdad en la
distribución de los ingresos, mientras que un coeficiente de Gini bajo indica una distribución
más equitativa de los ingresos. La medición del coeficiente de Gini es importante para
identificar las desigualdades en la distribución de ingresos y para desarrollar políticas para
abordar estas desigualdades.
El umbral de pobreza es el nivel de ingreso necesario para satisfacer las necesidades básicas

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de una persona o familia. Este umbral se establece en función de diversos factores, como el
costo de vida, el tamaño de la familia y la ubicación geográfica. En muchos países, el umbral
de pobreza se establece en función del ingreso familiar anual promedio, y se define como un
porcentaje del ingreso mediano de la población.
La medición de la pobreza por ingreso se utiliza para evaluar la magnitud de la pobreza en
una población determinada y para desarrollar políticas y programas para reducirla. Los
indicadores comunes utilizados para medir la pobreza por ingreso incluyen la tasa de
pobreza, que se refiere al porcentaje de la población que vive por debajo del umbral de
pobreza, y la brecha de pobreza, que mide la distancia entre el ingreso promedio de las
personas pobres y el umbral de pobreza. Se menciono algunas razones por las que la
desigualdad y la pobreza son importantes:
Justicia social: La desigualdad y la pobreza son contrarias a la justicia social. La justicia
social implica que todas las personas deberían tener igualdad de oportunidades y derechos.
La desigualdad y la pobreza socavan la justicia social al limitar el acceso a recursos y
oportunidades y al perpetuar las diferencias de poder y privilegio.
Impacto económico: La desigualdad y la pobreza tienen un impacto negativo en la economía.
La pobreza puede limitar el consumo y la inversión, lo que a su vez puede afectar el
crecimiento económico y la competitividad. La desigualdad también puede reducir el
crecimiento económico, ya que puede crear inestabilidad y descontento social.
Salud y bienestar: La desigualdad y la pobreza pueden tener efectos perjudiciales en la salud
y el bienestar de las personas. Las personas que viven en la pobreza tienen un mayor riesgo
de enfermedades, falta de acceso a atención médica, mala nutrición y una menor esperanza
de vida. La desigualdad también puede tener un impacto negativo en la salud mental, la
autoestima y la calidad de vida de las personas.
Cohesión social: La desigualdad y la pobreza pueden socavar la cohesión social y aumentar
la polarización y la división en una sociedad. La desigualdad y la pobreza pueden crear
resentimiento y desigualdad de oportunidades, lo que puede conducir a la exclusión social y
a la inestabilidad política.

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ANÁLISIS PERSONAL
Después de ver el video y la explicación del Msc. Diego Ontaneda puedo decir que este tema
es de mucha importancia, asi como su impacto en la sociedad, y cómo la pandemia de
COVID-19 ha exacerbado estos problemas, es evidente que es necesario abordar estos
problemas de manera efectiva y urgente. Es importante tener en cuenta que la desigualdad y
la pobreza no son solo problemas económicos, sino que también tienen consecuencias en la
salud, la educación, el bienestar y la cohesión social. Es necesario que los gobiernos, la
sociedad civil y el sector privado trabajen juntos para diseñar e implementar políticas
públicas y programas que reduzcan la desigualdad y la pobreza, promuevan la igualdad de
oportunidades y mejoren el acceso a los recursos básicos para todos los miembros de la
sociedad. Esto puede implicar la implementación de políticas fiscales progresivas, la
inversión en educación y capacitación, la mejora del acceso a la atención médica etc.
Es importante reconocer que abordar la desigualdad y la pobreza es un desafío complejo que
requiere un enfoque a largo plazo y una visión estratégica. Es necesario un compromiso
continuo para abordar estos problemas de manera efectiva y asegurar un futuro más justo y
equitativo para todas las personas. En el caso de Ecuador, la desigualdad y la pobreza son
problemas importantes que afectan a gran parte de la población. Según datos del Banco
Mundial, el 25% de la población ecuatoriana vive en la pobreza y el 7% en la pobreza
extrema. La pandemia de COVID-19 ha exacerbado estos problemas, especialmente en los
sectores más vulnerables de la población, como los trabajadores informales y los migrantes.
Además, la crisis sanitaria ha tenido un impacto negativo en la economía del país, lo que ha
llevado a un aumento del desempleo y a una disminución de los ingresos de las personas.
Por ejemplo, el gobierno ha implementado programas de ayuda alimentaria y apoyo
financiero para los trabajadores informales y ha lanzado planes de inversión en
infraestructura y sectores clave para impulsar la recuperación económica. Concluyo diciendo
que es importante que la sociedad civil, el sector privado y el gobierno trabajen juntos para
abordar estos problemas de manera efectiva y asegurar un futuro más justo y equitativo para
todas las personas en Ecuador. Solo así se podrá lograr una sociedad más igualitaria y
próspera para todos.