La programación orientada a objetos se basa en los principios de abstracción, encapsulamiento, herencia y polimorfismo. La abstracción implica generalizar los atributos y propiedades de los objetos, mientras que el encapsulamiento agrupa los elementos de un objeto y oculta sus detalles de implementación. La herencia permite que las clases heredes atributos y métodos de otras clases, y el polimorfismo significa que un objeto puede tomar diferentes formas.