La web 2.0 se caracteriza por dar protagonismo al usuario, que pasa de ser un mero consumidor de información a generarla y compartirla de manera sencilla e intuitiva. Otros rasgos clave son el uso de la web como plataforma universal accesible desde cualquier ordenador y la apariencia clara de sus aplicaciones con interfaces sencillas. Los marcadores sociales se han convertido en un símbolo de la web 2.0 debido a que permiten a los usuarios crear y compartir fácilmente contenidos pequeños.

1. Los marcadores sociales en el contexto de la llamada Web 2.0
Desde que Tim O´Reilly acuñara el término web 2.0 en 2004 el uso (y el abuso) del mismo se ha
adueñado de la web. Y es que no hay servicio o empresa en la red que no aspire a ser calificada de
tal; el ámbito de la educación no ha escapado a la fiebre.
¿Qué es la web 2.0?
No deseo extenderme en este punto más de lo necesario. Dejando aparte los aspectos técnicos diría
que, como usuarios y como docentes, los aspectos que más nos interesan de este fenómeno son:
1.- El uso de la web como plataforma universal. Ello supone acceso fácil a las aplicaciones desde
cualquier ordenador con conexión independientemente de la plataforma y el sistema operativo (pc ,
mac)
2.- Por encima de cualquier otro rasgo lo que caracteriza a la web 2.0 es el protagonismo que se
concede al usuario que pasa de ser un mero consumidor de información a generarla, compartirla y
construir conocimiento de una manera sencilla e intuitiva.
Yo me quedaría con estos dos rasgos, aunque relacionados con ellos también podemos citar:
• Frente a los grandes sitios de la web 1.0 el nuevo modelo no ofrece productos sino servicios
• La apariencia típica de estas aplicaciones es muy clara y su interfaz sencilla y muy intuitiva;
Google es el paradigma.
• Los usuarios crean microcontenidos fáciles de compartir y reutilizar
• Se aprovecha de la inteligencia colectiva
• Promueve un sentido de la propiedad colectivo
• Produce una experiencia participativa y enriquecedora para el usuario
• Importancia del enfoque social
Bajo estas premisas es fácil entender por qué los marcadores sociales se han convertido en bandera
de la web 2.0