Este documento proporciona información sobre el tejido sanguíneo y sus componentes principales. Resume que la sangre contiene eritrocitos, leucocitos como neutrófilos, eosinófilos, basófilos, linfocitos y monocitos, y plaquetas suspendidas en plasma. Describe las características y funciones de cada uno de estos elementos figurados de la sangre.
LA PEDAGOGIA AUTOGESTONARIA EN EL PROCESO DE ENSEÑANZA APRENDIZAJEjecgjv
La Pedagogía Autogestionaria es un enfoque educativo que busca transformar la educación mediante la participación directa de estudiantes, profesores y padres en la gestión de todas las esferas de la vida escolar.
Ponencia en I SEMINARIO SOBRE LA APLICABILIDAD DE LA INTELIGENCIA ARTIFICIAL EN LA EDUCACIÓN SUPERIOR UNIVERSITARIA. 3 de junio de 2024. Facultad de Estudios Sociales y Trabajo, Universidad de Málaga.
Presentación de la conferencia sobre la basílica de San Pedro en el Vaticano realizada en el Ateneo Cultural y Mercantil de Onda el jueves 2 de mayo de 2024.
2. Sangre
Es un tejido conectivo adaptado para circular dentro de los vasos y su matriz
extracelular (plasma) es líquida.
Es roja y contiene varios tipos de células: los eritrocitos, varios tipos de leucocitos y las
plaquetas. Dado que los eritrocitos y las plaquetas no son células completas sino
derivados celulares, las células sanguíneas reciben colectivamente el nombre de
elementos figurados o elementos formes.
Circula por todo el cuerpo dentro de los vasos sanguíneos, fuera de los cuales coagula, es
decir, sus células se aglutinan junto con componentes del plasma. E1 sobrenadante del
coágulo es un líquido amarillento llamado suero.
EI volumen de la sangre (volemia) representa aproximadamente el 8% del peso corporal.
EI plasma y los elementos formes constituyen el 55% y el 45% del volumen sanguíneo,
respectivamente.
El valor normal del pH de la sangre varía de 7,3 a 7,5.
Gracias a la sangre, el organismo puede transportar sustancias nutritivas, desechos
metabólicos, O2, CO2, vitaminas, iones, hormonas, elementos del sistema inmunitario, etc.
Además, regula el equilibrio acidobásico del medio interno y la temperatura corporal.
3.
4. Plasma
EI plasma sanguíneo es un líquido amarillo pálido, compuesto por agua (90% de
su volumen), iones, proteínas, lípidos y glúcidos.
Iones: Los más importantes son el Na+, el K+, el Cl-, el Ca2+, el Mg2+, el
PO4-, el HCO3- y el SO4-,
Proteínas: Cada 100 ml de plasma sanguíneo contienen entre 6 y 8 gramos de
proteínas. Las más importantes son: la albúmina, las globulinas, las
gammaglobulinas o inmunoglobulinas, el complemento, varias proteínas que
intervienen en la coagulación sanguínea y hormonas proteicas. Además, el
plasma contiene aminoácidos y sustancias derivadas del metabolismo proteico.
Lípidos: Cada 100 ml de plasma contienen entre 600 y 760 mg de lípidos. Los
más importantes son: el colesterol, los triglicéridos y las hormonas esteroideas.
Glúcidos: Principalmente glucosa. Cada 100 mI de plasma contienen entre 70
y 120 mg de este monosacárido, cifra que suele aumentar después de las
comidas. Con la actividad física intensa, en el plasma sanguíneo suele aparecer
ácido Iáctico, derivado de la degradación de glucosa a través de la glucólisis
anaerobia.
Pigmentos: En determinadas circunstancias, el plasma exhibe un tinte dorado
debido a la presencia de pigmentos, los cuales pueden ser endógenos como la
bilirrubina (derivada de la degradación de la hemoglobina) o exógenos, que
derivan de la ingestión de alimentos que contienen lipocromos o carotenos.
6. Eritrocitos
Llamados también glóbulos rojos o hematíes.
Tienen forma de disco bicóncavo y miden entre 6.5 y 8 μm de
diámetro.
Son flexibles, lo cual les permite circular por los capilares
sanguíneos más pequeños.
En la mujer hay aproximadamente 4 800 000 eritrocitos por ml
de sangre. mientras que en el varón hay 5 400 000.
No poseen núcleo ni organoides y su membrana plasmática está
asociada a un citoesqueleto singular (filamentos de espectrina
conectados con filamentos de actina cortos).
Tienen un período de vida de 20 días.
Poseen en su interior la proteína hemoglobina, que se encarga
de transportar O2 y CO2.
8. Leucocitos
También llamados glóbulos blancos.
Se dividen en granulocitos y agranulocitos, según contengan
gránulos fácilmente detectables o no en sus citoplasmas.
◦ Granulocitos: Se subdividen en neutrófilos, eosinófilos y basófilos.
◦ Agranulocitos: Se subdividen en linfocitos y monocitos.
Todos los leucocitos poseen núcleo; se pueden encontrar entre
5 000 y 8 000 leucocitos por cada ml de sangre.
Los leucocitos forman parte del sistema inmunitario, de modo
que intervienen en la defensa del organismo cuando es invadido
por moléculas extrañas, microorganismos, etc.
La sangre hace circular a los leucocitos y los acerca a los lugares
afectados. Cuando los alcanzan, los leucocitos salen de la sangre
filtrándose por poros que se forman en las células endoteliales
de los capilares y las vénulas.
9. Leucocitos
Neutrófilos:
Miden entre 12 y 15 μm de diámetro. Se identifican por la forma de su núcleo,
que presenta dos a cinco 1óbulos unidos por puentes de cromatina, por lo que
también se le dice granulocito polimorfonuc/ear.
Contiene dos clases de gránulos citoplasmáticos: los azurófilos (lisosomas) y
los específicos. Entre las sustancias contenidas en los gránulos se destacan la
mieloperoxidasa, la peroxidasa, la Iisozima, las colagenasas, las elastasas, la
fosfatasa alcalina y las fagocitasas (propiedades bactericidas).
Después de abandonar la circulación, el neutrófilo se moviliza en busca de los
agentes extraños, atraído por sustancias emitidas por ellos o segregadas por
células vecinas. Este mecanismo de atracción se llama quimiotaxis.
Un neutrófilo se pone en contacto con bacterias mediante receptores
presentes en su membrana plasmática; los cuales por lo general no reaccionan
de manera directa con la bacteria sino con moléculas provistas por el sistema
inmunitario (opsoninas), que se adosan previamente a Ia superticie bacteriana.
Los neutrófilos fagocitan a las bacterias o a las partículas y las digieren con
sustancias que se liberan de sus gránulos citoplasmáticos. Esas sustancias matan
a los propios neutrófilos, cuyos restos se mezclan con el material digerido y
forman el pus.
11. Leucocitos
Eosinófilos:
Posee un tamaño similar al del neutrófilo, mide entre 10 y 16 μm de diámetro.
Su núcleo es bilobulado (como un par de anteojos), pero a veces posee mas de
dos lóbulos.
Sus gránulos citoplasmáticos son más grandes que los del neutrófilo. También
posee gránulos azurófilos y específicos (que contienen proteína básica mayor,
proteína catiónica y neurotoxina derivada del eosinófilo).
Permanecen en la sangre unas pocas horas y cuando pasan al tejido conectivo
viven entre 7 y 12 días. Por esta razón, la fórmula leucocitaria revela escasa
cantidad de eosinófilos y en el tejido conectivo se les observa con cierta
facilidad.
Intervienen en las alergias y en las reacciones inmunológicas contra los
parásitos, durante las cuales su número aumenta considerablemente en la
sangre.
Cooperan con los mastocitos del tejido conectivo, que atraen a los eosinófilos
mediante sustancias que liberan en el tejido afectado. Cuando llegan, los
eosinófilos secretan sustancias de sus gránulos, que actúan contra el organismo
invasor.
*La capacidad de fagocitosis del eosinófilo es limitada, pues solo endocita una
reducida cantidad de antígenos ligados a anticuerpos.
13. Leucocitos
Basófilos:
Miden entre 10 y 12 μm, de modo que es el granulocito más pequeño.
Su núcleo tiene forma de U con dos o más lóbulos grandes unidos por puentes
de cromatina.
Sus gránulos específicos se colorean intensamente; suelen ocultar el núcleo y
contienen histamina y heparina.
Intervienen en las reacciones alérgicas. Cuando en el organismo ingresa una
sustancia alergénica, un clon especial de linfocitos B produce una
inmunoglobulina E específica, mientras que los basófilos elaboran receptores
capaces de unirse a ella. La IgE se une tanto a los receptores del basófilo como
a la sustancia alergénica, lo cual hace que el basófilo descargue el contenido de
sus gránulos sobre ella. Las reacciones alérgicas derivan de las sustancias que se
liberan de los gránulos.
EI basófilo no fagocita.
*En las reacciones alérgicas el mastocito del tejido conectivo actúa de la misma
manera que el basófilo de la sangre. Además, el basófilo y el mastocito son muy
parecidos; aunque el primero es más pequeño, contiene menos gránulos
citoplasmáticos y vive menos tiempo. Es posible que ambas células deriven de
una célula antecesora común.
15. Leucocitos
Linfocitos:
Representan del 20% al 30% de la población total de los leucocitos y suelen aumentar
cuando el organismo es infectado por ciertos microorganismos. En la niñez el porcentaje
es mayor debido al constante contacto con antígenos nuevos que tiene lugar en esa etapa.
La mayoría de los linfocitos pueden ser pequeños (7 a 8 μm de diámetro), medianos (9 a
12 μm de diámetro) y grandes (13 a 18 μm de diámetro). Su citoplasma es pequeño,
basófilo y contiene escasos gránulos azurófilos, mientras que el núcleo es esférico y posee
una pequeña escotadura en uno de sus lados.
Existen 3 tipos de linfocitos, denominados linfocitos T (citotóxicos y cooperadores),
linfocitos B y linfocitos nulos. La sangre posee 80% de linfocitos T,15% de linfocitos B y 5%
de linfocitos nulos.
El linfocito T citotóxico participa en las respuestas inmunológicas mediadas por células
(virus y tejidos trasplantados). En cambio, el linfocito T cooperador colabora con el
linfocito B en las respuestas inmunológicas mediadas por anticuerpos. Los linfocitos T
cooperadores son tres a cuatro veces más numerosos que los citotóxicos.
Los linfocitos nulos son más grandes que los linfocitos T y B y se llaman linfocitos NK
(Natural Killer) y son responsables de la inmunidad antitumoral, pues pueden matar
células tumorales mediante sustancias que afectan a las membranas plasmáticas.
*Los linfocitos nulos se forman en la medula ósea, no pasan por el timo y se hallan en sangre, linfa y tejidos
conectivos.
17. Leucocitos
Monocitos:
Son las células más grandes de la sangre, miden de 11 a 18 μm de diámetro.
Sus núcleos excéntricos son ovalados y poseen una escotadura más
pronunciada que la de los linfocitos, orientada hacia el centro de la célula. EI
citoplasma está parcialmente poblado de gránulos azurófilos pequeños que
contienen enzimas.
Nacen en la médula ósea y circulan por la sangre con el objeto de llegar a
diversos tejidos del organismo, donde se establecen y se diferencian en
macrófagos. Salen de la sangre pasando entre las células endoteliales de los
capilares.
Al igual que el neutrófilo, el macrófago fagocita bacterias y partículas
inanimadas. Además, fagocita células muertas (o que están por morir) del
propio organismo. A diferencia del neutrófi1o, el macrófago continúa vivo
después de la fagocitosis.
Interviene también en respuestas inmunológicas mediadas por anticuerpos,
durante las cuales fagocita al antígeno, lo procesa y se lo presenta al linfocito T
cooperador, para que éste lo reconozca.
19. Plaquetas
Llamadas también trombocitos.
Son los elementos figurados mas pequeños de la sangre, ya que miden entre 2
y 4 μm de diámetro.
Son fragmentos del citoplasma de unas células muy grandes que residen en la
medula ósea (megacariocitos).
Tienen forma discoidal biconvexa, carecen de material nuclear y están
envueltas por una membrana plasmática rica en proteoglicanos y otras
glicoproteínas (que favorecen la adherencia de plaquetas entre sí).
Cada ml de sangre contiene entre 250.000 y 400.000 plaquetas, cuyo promedio
de vida es de unos 10 días.
Presentan una región central oscura y una región periférica clara, denominadas
granulómero y hialómero, respectivamente.
El granulómero posee inclusiones de glucógeno, mitocondrias, peroxisomas,
gránulos lambda (enzimas hidrolíticas), gránulos alfa (fibrinógeno,
trombopluslina, factor de crecimiento plaquetario y trombospandina) y
gránulos delta (ATP, Ca2+, histamina y serotonina).
E1 hialómero esta rodeado por un haz circunferencial de microtúbulos
paralelos entre sí y filamentos de actina asociadas con moléculas de miosina.
Además, en el hialómero hay un sistema de vesículas y de túbulos abiertos al
exterior, generados par invaginaciones de la membrana plasmática.
22. Sistema circulatorio
EI sistema vascular sanguíneo consta de un órgano motor (corazón), cuyas
contracciones bombean la sangre hacia las arterias. Estas se ramifican y afinan
hasta que se convierten en vasos muy delgados llamados capilares, los cuales
desembocan en las venas, que son los vasos que retornan la sangre al corazón.
El corazón posee cuatro cavidades: las aurículas derecha e izquierda y los
ventrículos derecho e izquierdo. La aurícula derecha recibe la sangre venosa que
proviene de los tejidos (traída por las venas cavas superior e inferior) y la
traspasa al ventrículo derecho. Desde este, la sangre es conducida mediante la
arteria pulmonar y sus ramas hacia los pulmones, donde se oxigena. La sangre
oxigenada retorna al corazón (aurícula izquierda) por las venas pulmonares y de
inmediato pasa al ventrículo izquierdo, cuyas contracciones la impulsan hacia la
arteria aorta. Finalmente, a través de la arteria aorta y sus ramas se distribuye
por todos los tejidos vascularizados del cuerpo.
En el corazón, el flujo sanguíneo depende de las válvulas presentes entre las
aurículas y los ventrículos y entre estos y las arterias aorta y pulmonar. Las
válvulas auriculoventriculares derecha e izquierda (tricúspide y mitral,
respectivamente) evitan que la sangre retorne a las aurículas durante la
contracción ventricular (sístole). Las válvulas que separan el ventrículo izquierdo
de la arteria aorta y el ventrículo derecho de la arteria pulmonar (válvulas
semilunares) impiden que la sangre que ingresa en esos vasos retorne a los
ventrículos durante la dilatación ventricular (diástole).
24. Corazón
Órgano contráctil hueco, cuya pared consta de tres capas, la interna a endocardio, la media o
miocardio y la externa o epicardio.
En medio de algunas zonas del miocardio existe un sistema de láminas de tejido conectivo
denso que actúa como un esqueleto semirrígido en el que se insertan los componentes
funcionales del corazón.
Endocardio
Posee tres capas: Endotelial (en contacto con Ia sangre), 1a subendotelial y la subendocárdica.
Lu capa endotelial consta de un epitelio plano simple (endotelio) y de una franja delgada de
tejido conectivo laxo; entre el endotelio y el tejido conectivo hay una lámina basal continua. Las
células endoteliales se conectan entre sí mediante uniones oclusivas.
La capa subendotelial es la más gruesa del endocardio y está formada por tejido conectivo
denso rico en fibras elásticas y algunas zonas con haces de fibras musculares lisas.
La capa subendocárdica está compuesta por tejido conectivo laxo, que suele contener células
adiposas y aloja vasos y nervios procedentes del epicardio. En algunas zonas posee células o
fibras de Purkinje (parte del sistema de conducción de los impulsos contráctiles del corazón).
Miocardio
Es la capa más gruesa de la pared del corazón. Está compuesto por tejido muscular estriado
cardiaco, cuyas células forman haces que se anclan en el esqueleto del corazón.
Posee un sistema de células especiales que desencadenan las contracciones cardíacas con
punto de partida en las aurículas y las conducen hacia los ventrículos.
Algunos lugares de las aurículas poseen células miocárdicas que poseen gránulos de secreción
(células mioendocrinas).
26. Corazón
Epicardio
Es la capa externa del corazón y a la vez 1a hoja visceral del pericardio. Consta de una capa
subepicárdica de tejido conectivo laxo y de un epitelio de revestimiento (mesotelio). El tejido
conectivo contiene células adiposas, mientras que el mesotelio es un epitelio plano simple.
Por el epicardio transitan los vasos coronarios y los nervios del corazón.
Esqueleto del corazón
Llamado Red de Chiari.
Es una estructura fibrosa de tejido conectivo denso, constituye el soporte del corazón y es el
lugar donde se insertan los haces musculares del miocardio y las válvulas cardíacas.
Está integrado por cuatro anillos fibrosos (orificios auriculoventriculares, nacimiento de Ia
aorta y nacimiento de la vena pulmonar), por los trígonos fibrosos derecho e izquierdo (desde
los anillos fibrosos auriculoventriculares derecho e izquierdo hasta el anillo fibroso de la aorta)
y por el tabique membranoso (prolongación del trígono fibroso derecho que incursiona en la
parte superior del tabique interventricular).
Durante la vejez, algunas zonas del tejido conectivo denso del esqueleto cardíaco se calcifican.
Válvulas cardíacas
Las válvulas cardíacas (semilunares. tricúspide y mitral) son pliegues del endocardio.
Están compuestas por una lámina de tejido conectivo denso cubierta en ambas caras por
endotelio.
28. Arterias
La arteria aorta y la arteria pulmonar dan origen a numerosos vasos arteriales, cuyo calibre
disminuye a medida que se ramifican y se alejan del corazón.
Según los diámetros y las características de sus paredes, las arterias se dividen en tres grupos:
Grandes o elásticas, medianas o musculares y pequeñas o arteriolas.
La pared de las arterias está constituida por tres capas concéntricas. De la luz del vaso a la
periferia, se denominan túnica íntima, túnica media y túnica adventicia.
Arterias elásticas
Están representadas por la aorta, el tronco de la arteria pulmonar y sus dos ramas, las ilíacas
primitivas, las arterias braquiocefálicas, las subclavias y la parte inicial de las carótidas primitivas.
En comparación con su diámetro, estas arterias poseen una pared relativamente delgada.
Además de conducir la sangre hacia las arterias musculares, las arterias elásticas absorben las
ondas pulsátiles de las sístoles cardíacas, de modo que el flujo sanguíneo intermitente del
corazón se convierte en un flujo casi continuo.
Arterias musculares
Sus paredes son gruesas en relación al calibre de los vasos.
Se adaptan a las necesidades sanguíneas de los tejidos, para lo cual se dilatan o se contraen
inducidas por estímulos nerviosos o por factores humorales.
Arteriolas
Poseen un diámetro inferior a los 100 μm.
Disminuyen la presión de la sangre antes de que ingresen a los capilares para que no se dañen
sus paredes.
30. Capilares
Son vasos que comunican las arterias con las venas.
Suelen medir de 7 a 10 μm de diámetro, pero algunos alcanzan los 70 μm.
Debido a que de cada arteriola parten varios capilares que se ramifican, se
intercomunican y convergen en una vena de drenaje, forman redes
tridimensionales que reciben el nombre de lechos capilares.
Los capilares de cada lecho poseen diámetros similares; sin embargo, entre la
arteriola y la vena de drenaje suele existir un capilar de mayor calibre,
denominado conducto preferencial que se comunica con la arteriola a través
de un vaso transicional llamado metarteriola, del que nacen capilares comunes
que se comunican con los restantes de la red.
La metarteriola no solo comunica la arteriola con el conducto preferencial,
sino que actúa como un esfínter que al dilatarse y contraerse regula el flujo
sanguíneo que llega al lecho capilar.
De acuerdo con las necesidades sanguíneas de los tejidos, estos esfínteres se
abren o se cierran. Cuando se abren, la sangre circula por todo el lecho capilar;
cuando se cierran, solo lo hace por la metarteriola y el conducto preferencial.
Cuando los esfínteres se abren de manera parcial permiten grados intermedios
de circulación.
Existen tres tipos de capilares sanguíneos: los continuos, los fenestrados y los
sinusoidales.
32. Venas
Se c1asifican en tres grupos: las muy pequeñas llamadas vénulas, las de pequeño
y mediano calibre y las de gran calibre.
Sus paredes están compuestas por tres túnicas (íntima, media y adventicia),
aunque sus límites suelen ser imprecisos y en algunas venas de gran calibre la
túnica media no se alcanza a distinguir. Además, debido a que soportan
presiones sanguíneas menos intensas, las venas poseen paredes más delgadas
que las arterias.
Vénulas
Reciben la sangre que proviene de los lechos capilares.
En las inflamaciones, las vénulas se dilatan al ser inducidas por sustancias
vasodilatadoras secretadas por algunas células del tejido conectivo.
Venas de pequeño y mediano calibre
Miden ente 0,1 y 10 mm de diámetro.
Venas de gran calibre
Miden más de 10 mm de diámetro y no poseen válvulas. Entre las mayores se
encuentran las venas cavas superior e inferior y la vena porta.
34. Sistema linfático
También llamado sistema inmunitario o inmune.
Consta de varias tipos de células y órganos diseñados para generar reacciones
de defensa frente al ingreso de moléculas extrañas en el cuerpo. Las moléculas
capaces de inducir respuestas inmunológicas se llaman antígenos. EI sistema
inmunitario no reconoce como extraña a toda la molécula, sino a algunas
partes expuestas en su superficie, denominadas epítopos o determinantes
antigénicos.
Los antígenos suelen ser proteínas, glicoproteínas o glicolípidos, ya que los
glúcidos, los lípidos y los ácidos nucleicos son poco antigénicos. Los antígenos
ingresan en el organismo formando parte de microorganismos, de compuestos
químicos, de tejidos trasplantados, de partículas inanimadas, etcétera.
Normalmente, el sistema inmunitario no reacciona contra las moléculas del
propio organismo. No obstante, en ciertas circunstancias las confunde como si
fueran ajenas y genera cuadros llamados enfermedades autoinmunitarias.
Además, ataca a las células propias cuando padecen ciertas alteraciones (células
tumorales).
De acuerdo con los componentes del sistema inmunitario que intervienen, se
dice que las respuestas inmunológicas son mediadas por células o por
anticuerpos. Las respuestas mediadas por células ocurren cuando el organismo
es atacado por virus, desarrolla células tumorales o recibe un trasplante; en
cambio, las respuestas mediadas por anticuerpos se producen cuando el
organismo es invadido par bacterias, parásitos u otros agentes. No obstante, en
la mayoría de las respuestas inmunológicas suelen operar ambos mecanismos
simultáneamente.
36. Sistema linfático
Células del sistema inmune:
Linfocitos: En sangre, linfa, tejido conectivo laxo, tejido linfático y epitelio
intestinal.
Plasmocitos: En tejido linfático y tejido conectivo laxo.
Macrófagos: En tejidos conectivos. Los de sangre se llaman monocitos; los del
tejido conectivo laxo, histiocitos; los del hígado, células de Kupffer; los del
pulmón, macrófagos alveolares; los del hueso, osteoclastos y los del tejido
nervioso, microcitos.
Células presentadoras de antígenos: Células dendríticas del tejido linfático y
Células de Langerhans de la piel, boca, esófago y mucosa vaginal. Aquí se
consideran también a los linfocitos B y los macrófagos.
Neutrófilos, Eosinófilos y Basófilos: En sangre y tejido conectivo laxo.
Mastocitos: En tejido conectivo laxo.
*Las células del hígado sintetizan un conjunto de proteínas plasmáticas llamado
Complemento, cuya función es crucial en las respuestas mediadas por
anticuerpos.
37. Tejido linfático
Es un tejido conectivo especial que se encuentra: en los órganos linfáticos
(timo, ganglios y bazo) y en la mucosa de algunos órganos de los sistemas
digestivo, respiratorio, urinario y reproductor; donde se lo identifica con la sigla
MALT (Mucosa-Associated LymphoidTissue).
Contiene una red tridimensional de fibras reticulares (prolongaciones
citoplasmáticas nacidas de células reticulares). Los espacios libres de la red
están ocupados por células del sistema inmunitario, con predominio de
linfocitos.
Funciona como un filtro diseñado para atrapar a los antígenos que circulan por
la sangre y la linfa, y en el que tienen lugar distintas fases de las respuestas
inmunológicas.
Según la cantidad de linfocitos que contiene en un área dada, el tejido linfático
puede ser laxo o denso; siendo el tejido linfático laxo el que se ve más claro.
Tejido linfático laxo
Entre sus fibras reticulares se encuentran linfocitos, linfoblastos, plasmocitos y
macrófagos, los cuales forman estructuras de límites difusos, localizadas en la
mucosa de los órganos huecos de los sistemas digestivo y respiratorio (que
integran el MALT).
Debido a que sus células no muestran ningún tipo de ordenamiento espacial y
se hallan separadas entre sí por distancias relativamente amplias, el tejido
linfático laxo suele confundirse con el tejido conectivo en el que se aloja.
38. Tejido linfático
Tejido linfático denso:
Se compone de agrupaciones celulares de forma irregular y de estructuras esféricas u ovoideas
denominadas nódulos linfáticos. A pesar de que carecen de cápsula, ambas formaciones
linfáticas se distinguen del tejido que las rodea porque sus límites son bien definidos
La mayoría de los nódulos linfáticos mide entre 0,5 y 1 mm, pero los hay mucho más pequeños
y mas grandes. En algunas localizaciones se hallan aislados (nódulos linfáticos solitarios) y en
otras forman conglomerados de varias unidades nodulares.
El tejido linfático denso se localiza en los órganos linfáticos, principalmente en los ganglios
linfáticos y el bazo, y compone la mayor parte del MALT.
◦ El sistema digestivo contiene tejido linfático denso irregular y nódulos linfáticos solitarios en diversas
localizaciones, además de conglomerados de nódulos linfáticos en la amígdala lingual y las amígdalas
palatinas; el íleon (formando las Placas de Peyer); el ciego y el apéndice cecal.
◦ El sistema respiratorio contiene conglomerados de nódulos linfáticos en la amígdala faríngea y distintas
formas de tejido linfático denso a lo largo del árbol bronquial.
◦ Los sistemas urinario y reproductor contienen tejido linfático denso en la pared de sus órganos huecos.
Al igual que el tejido linfático laxo, de acuerdo con las necesidades locales, las formaciones de
tejido linfático denso pueden involucionar en algunos sitios y hallarse en desarrollo en otros.
Cuando un nódulo linfático presenta densidad homogénea (linfocitos pequeños distribuidos
regularmente) se llama nódulo linfático primario. En cambio, cuando posee una zona central
clara rodeada por una corteza oscura, se denomina, nódulo linfático secundario. El nódulo
primario es un nódulo secundario en reposo que se activa por la presencia de un estímulo
antigénico.
39. Timo
Se localiza en la parte superior del mediastino, por detrás del esternón. Es un
órgano linfático integrado por dos lóbulos independientes, aunque conectados
entre sí.
Cada lóbulo está rodeado por una cápsula delgada de tejido conectivo que
contiene granulocitos, macrófagos, mastocitos, plasmocitos y células adiposas.
De la cápsula nacen tabiques incompletos, los cuales dividen el interior del
órgano en lobulillos de 0,5 a 2 mm de diámetro.
Cada lobulillo contiene una zona central pálida (médula) que se halla en medio
de una zona más oscura (corteza), que se encuentra rodeada por el tejido
conectivo de los tabiques.
El tejido linfático del timo es distinto, pues su red tridimensional no posee
fibras reticulares y está compuesta solo por prolongaciones citoplasmáticas.
Estas nacen de células de forma estrellada, que debido a que son epiteliales y
generan un retículo (citorretículo) reciben el nombre de células
reticuloepiteliales.
El tejido conectivo de la cápsula y los tabiques se halla cubierto por una capa
continua de células reticuloepiteliales, cuyas prolongaciones se conectan con
las del citorretículo.
Las células inmunitarias situadas entre las mallas del citorretículo están
constituidas por Iinfocitos T y por un reducido número de macrófagos. Los
Iinfocitos T del timo se llaman timocitos. Los timocitos de la corteza son
pequeños y están densamente apiñados; debido a ello le confieren a la corteza
su coloración oscura. EI tejido linfático de la médula es menos denso y casi no
contiene macrófagos.
41. Ganglios linfáticos
A diferencia del MALT (que se localiza donde se genera el componente líquido de la linfa), los
ganglios linfáticos se encuentran en el trayecto de los vasos linfáticos, los cuales conducen la
linfa hacia la circulación sanguínea. Debe añadirse que la linfa contiene linfocitos aportados por
el MALT y por los ganglios linfáticos.
Los ganglios linfáticos tienen forma ovoidea aplanada y en uno de sus bordes poseen una
depresión llamada hilio, por donde ingresan las arterias y salen las venas y los vasos linfáticos
eferentes. Estos conducen la linfa hacia la circulación sanguínea. En cambio, los vasos linfáticos
aferentes –que traen la linfa desde los tejidos- ingresan en el ganglio a través de aberturas
situadas en toda su superficie. Los vasos linfáticos aferentes y eferentes poseen válvulas que
hacen que la linfa circule solo en la dirección mencionada.
Los ganglios linfáticos miden desde unos pocos milímetros hasta dos a mas centímetros de
longitud. Los ganglios linfáticos están rodeados por una cápsula de la que nacen varios tabiques,
la mayoría de los cuales se dirigen al hilio. Tanto la cápsula como los tabiques son de tejido
conectivo denso y estos, debido a que son incompletos, dividen el interior del órgano en
compartimientos intercomunicados.
Cada compartimiento contiene una red tridimensional de fibras reticulares que nacen de la
cápsula y de los tabiques y que se relacionan con las prolongaciones citoplasmáticas de las
células reticulares que les dan origen. Las mallas de la red sostienen a las células y a los vasos
del tejido linfático ganglionar.
El ganglio linfático presenta una zona central clara llamada médula, que se prolonga hacia el
hilio. Excepto en el hilio, entre la médula y la cápsula se encuentra la corteza (más oscura que la
médula). Según se localice en la corteza o en la médula, el tejido linfático de los
compartimientos del ganglio se organiza de manera diferente. En la corteza, está representado
por nódulos linfáticos separados por tejido linfático denso irregular, que también se halla en la
transición entre la corteza y la medula. En la médula, el tejido linfático es menos denso que en
la corteza y sus células componen cordones que se continúan con los cordones de los
compartimientos vecinos.
43. Ganglios linfáticos
En cada compartimiento, entre el tejido linfático y el tejido conectivo de la cápsula y los
tabiques, se hallan los senos linfáticos, que son espacios claros en los que solamente existen la
red de fibras reticulares y unas pocas células libres.
EI seno linfático situado por debajo de la cápsula se llama seno subcapsular y los que lindan con
los tabiques, senos corticales y senos medulares los senos se hallan en torno de los nódulos y
de los cordones linfáticos. Además, la dirección errática que tienen los tabiques conectivos en
ciertas partes de la médula hace que los cordones y los senos medulares se anastomosen y se
separen repetidamente.
EI seno subcapsular se continúa con los senos corticales, y estos con los medulares. Así, la linfa
traída por los vasos linfáticos aferentes se vuelca en el seno subcapsular, transita por los senos
corticales, pasa a las senos medulares y sale del ganglio por los vasos linfáticos eferentes.
Mientras circula por los senos linfáticos, la linfa es filtrada por la red de fibras reticulares, de
modo que los antígenos provenientes de los tejidos son retenidos en su interior.
Entre los senos linfáticos y el tejido conectivo de la cápsula y de los tabiques, hay una capa de
células endoteliales; debido a que esta capa no está presente en el lado de los senos que da al
tejido linfático, los linfocitos pueden pasar de los senos al tejido linfático y en dirección
contraria con total libertad.
Además, los senos alojan a numerosos macrófagos, que en general se apoyan sobre el endotelio
que cubre la cápsula y los tabiques. Tienen por función fagocitar los antígenos que quedan
retenidos en los senos durante la filtración de la linfa
En los cordones linfáticos de la médula, las células que predominan son linfocitos B, pero es
común observar plasmocitos produciendo anticuerpos, lo que indicaría que los plasmocitos
comienzan a diferenciarse en la corteza y terminan de hacerlo en la médula.
En los ganglios linfáticos hay también linfocitos T, se localizan en la zona profunda de corteza
(cerca de la médula).
44.
45. Bazo
Es un órgano relativamente voluminoso y de forma irregular.
A diferencia de los ganglios linfáticos, el bazo se localiza en medio de la
circulación sanguínea; su sangre ingresa por la arteria esplénica y sale por una
vena tributaria de la vena porta.
Está envuelto por una cápsula de tejido conectivo denso que posee dispersas
algunas células musculares lisas. Desde 1a cápsula se proyectan varios tabiques
ramificados incompletos, que dividen al órgano en numerosos compartimientos
conectados entre sí. Como en los ganglios linfáticos, estos compartimientos
contienen redes tridimensionales de fibras y células reticulares que nacen de la
cápsula y los tabiques; estas redes sostienen a las células y a las estructuras
vasculares del tejido linfático del bazo, que se conoce con el nombre de pulpa.
La superficie del bazo posee una depresión Ilamada hilio, a través de la cual
ingresan los vasos sanguíneos, los vasos Iinfáticos y los nervios. En la región del
hiJio la cápsula es gruesa y da origen a los tabiques más anchos del órgano, por
las que transcurren los vasos sanguíneos destinados a la pulpa.
Existen dos tipos de pulpa, Ilamadas roja y blanca. La pulpa roja debe su nombre
a que en los cortes de bazos frescos pasee un color rojo oscuro, dada la gran
cantidad de sangre que contiene. En cambio, la pulpa blanca esta formada por
cordones y nódulos linfáticos esparcidos en medio de Ia pulpa roja, llamados
corpúsculos de Malpighi. La pulpa roja ocupa la mayor parte del bazo y muchos
consideran que es un tejido linfático inundado de sangre.