El documento describe los cuatro temperamentos principales - colérico, sanguíneo, melancólico y flemático - y sus características esenciales. El temperamento colérico se caracteriza por su excitabilidad rápida y fuerte de larga duración, mientras que el sanguíneo es rápido y fuerte pero de corta duración. El melancólico es lento y débil al principio pero se vuelve fuerte con las repetidas impresiones, mientras que el flemático es difícil y débil tanto al principio como después. A continu