Dios se revela al hombre de diversas maneras, especialmente a través de Jesucristo, quien es la plenitud y culminación de toda la revelación divina. La revelación tiene lugar en la historia de salvación y a través de signos, y tiene como objetivo que los hombres conozcan y amen a Dios. La revelación se transmite a través de la Escritura y la Tradición para beneficio de toda la humanidad.
PARÁBOLA DEL SEMBRADOR: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pptx
Teología ud 4 1era parte 26 5-15
1. Dios se Revela Al Hombre
La revelación de Dios
La revelación es un dialogo entra amigos
La revelación acontece en la historia
La revelación se realiza mediante signos
Cristo Jesús “ Mediador y plenitud de toda la revelación”
Equipo# 4
2. La revelación de Dios
La palabra revelación significa quitar el velo, desvelar. Hablar de revelación
divina es lo mismo que decir Dios se despoja del velo que le cubre mostrando
su rostro.
Dios se revela a si mismo y revela su misterio, para que los hombres por la fe,
puedan conocerlo responderle y amarlo mas allá de lo que podrían hacerlo
con sus propias fuerzas.
¿Que Revela Dios?
Verdades naturales: son las
que el hombre puede
alcanzar con su razón.
Verdades sobrenaturales: son las
que el hombre no podria
alcanzar con su inteligencia.
3. Dios se revela mediante acciones y palabras:
-Dios se manifestó a nuestros primeros padres
-Dios hizo una alianza con Noé.
-Dios eligió a Abraham.
-Dios formo a su pueblo Israel.
-En Jesucristo Dios se revelo plenamente “después de hablar antiguamente a
nuestros padres por medio de los profetas, en muchas ocasiones y de maneras
diversas ahora en este tiempo Dios nos hablo por medio de su Hijo.(Hebreos 1,1-2)
Profundización
La profundización de la divina revelación constituye un don y enseñanza
autorizada que ilumina la marcha del pueblo de Dios. (Dei verbum)
Es una de las 4 constituciones apostólicas del concilio vaticano II, es una
constitución dogmatica.
4. La Transmisión de la Revelación
Dios quiere que todos los hombres se salven y lleguen al conocimiento de la
verdad.(1 Timoteo 2,4).
-Dios quiere que la revelación se conserve integra y se transmita a todos los
hombres.
-Cristo envió a los apóstoles a predicar el evangelio.(Dei verbum).
La Predicación
Apostólica
Oralmente Tradición
Por escrito Escritura
5. Escritura: es la palabra de Dios escrita e inspirada bajo la acción del
Espíritu Santo.
Tradición: es la palabra de Dios, encomendada a los apóstoles y
transmitida a sus sucesores.
Escritura + tradición: deposito de la fe
-Este deposito de la fe ha sido confiado a toda la iglesia.
-Los apóstoles nombraron como sucesores a los obispos, encargados de la
transmisión de la fe.
-El oficio de interpretar la palabra de dios oral o escrita ha sido confiada al
magisterio de la iglesia.
6. En consecuencia,
por esta revelación,
Dios invisible habla
a los hombres como
amigos, movido por
su gran amor y
mora con ellos, para
invitarlos a la
comunicación
consigo y recibirlos
en su compañía.
52 Dios, que "habita una
luz inaccesible" (1
Tm 6,16) quiere comunicar
su propia vida divina a los
hombres libremente
creados por él, para hacer
de ellos, en su Hijo único,
hijos adoptivos (cf. Ef 1,4-
5). Al revelarse a sí mismo,
Dios quiere hacer a los
hombres capaces de
responderle, de conocerle
y de amarle más allá de lo
que ellos serían capaces
por sus propias fuerzas
7. Las palabras
Relación de Amistad y de Amor
Dios comunica al hombre
La intimidad de su ser y su vida
8. «Nadie conoce quien
es el hijo, sino el
Padre; y quien es el
Padre, sino el Hijo y
aquel a quien el Hijo
se lo quiera revelar»
(Lucas: 10, 22).
En su persona, el Padre manifiesta su
Amor y cercanía a los hombres.
9. La palabra posibilita
la comunión con
quien es la fuente de
vida. Ignorada o
rechazada, aguarda
pacientemente ser
escuchada.
( Romanos: 10).
10. La Revelación
Acontece en la Historia
Historia de salvación: En ella se
descubre la acción de Dios.
La revelación cuestiona la palabra
unida a las intervenciones de Dios en la
historia de la salvación.
La Palabra:
Interpreta, esclarece y
profundiza el sentido de los
acontecimientos.
La palabra procede a
los hechos, toma
forma de:
• Profecía
• Mandato
• Exhortación
Los acontecimientos
proceden a la palabra:
• Proclama el hecho
• Narra el
acontecimiento
• Explica lo ocurrido
La palabra de Dios es la palabra humana:
Dios es el autentico autor.
Los escritos sagrados
también verdaderos
autores.
Palabra
encarnada es
proceso que
afronta lo real
humano.
La revelación se realiza mediantes
signos, la historia de salvación es la
historia de los signos de Dios
11. Cristo Jesús Mediador y Plenitud de toda la revelación:
“…Últimamente, en estos
días, nos habló por su
Hijo…”
Dios nos habló a través de sus profetas en el
Antiguo Testamento, ahora nos habla a través
de su hijo hecho hombre.
La Revelación de Dios alcanza su cumbre, su
plenitud en Jesús de Nazaret, Dios visita
realmente a su pueblo, visita a la humanidad de
un modo que va más allá de toda espera: envía a
su Hijo Unigénito; Dios mismo se hace hombre.
«A Dios nadie lo ha visto jamás:
Dios unigénito, que está en el
seno del Padre, es quien lo ha
revelado» (Jn 1, 18).
12. «Señor, muéstranos al Padre y
nos basta» (Jn 14, 8).
En esta expresión se encierra
sintéticamente la novedad del Nuevo
Testamento, la novedad que apareció en la
gruta de Belén: Dios se puede ver, Dios
manifestó su rostro, es visible en Jesucristo.
Jesucristo fue el
propio Dios que vino
al mundo Él es la
última palabra de
Dios, así que, después
de esto no habrá otra
revelación.
13. “La economía cristiana, por ser, alianza nueva y definitiva,
nunca cesará, y no hay que esperar ya ninguna revelación
pública antes de la gloriosa manifestación de nuestro Señor
Jesucristo” DV 4
Sin embargo, a lo largo de los siglos ha
habido manifestaciones llamadas
«Privadas» algunas de las cuales han
sido reconocidas por la iglesia, a través
de estas manifestaciones han surgido
grandes lugares de peregrinación
Estas manifestaciones privadas no
pueden mejorar o completar la
revelación definitiva de Cristo, solo
cumple la función de ayudar a vivirla
más plenamente en cierta época de la
historia.
Dios envió a su Hijo, es decir, al Verbo eterno, que ilumina a todos los
hombres, para que viviera entre ellos y les manifestara los secretos de Él
mismo; Jesucristo, pues, el Verbo hecho carne y así, la fe cristiana no puede
aceptar “Revelaciones” que pretenden superar o corregir la revelación de la
que Cristo es la plenitud.