La Web ha evolucionado de la Web 1.0, donde los usuarios solo accedían a información, a la Web 2.0, donde los usuarios pueden contribuir e interactuar, hasta llegar a la Web social actual. Internet ofrece herramientas para mantener contactos y ampliar la red social, pero también conlleva riesgos como la exposición de datos personales que deben gestionarse de forma responsable. Las instituciones educativas deben enseñar el uso seguro y crítico de las tecnologías.