Venezuela se ha convertido en un estado fallido, que no logra proveer servicios esenciales como seguridad y estabilidad a sus ciudadanos. Un estado fallido es ineficaz y no cumple sus funciones básicas de garantizar la calidad de vida y proteger el territorio. Venezuela ha tenido grandes recursos financieros pero el régimen actual ha llevado al país a una situación crítica donde amplias zonas fronterizas no cuentan con protección y se tolera la presencia de grupos armados ilegales. Varios elementos como el deterioro