1. Educación para la paz.

2. • La violencia contempla los actos que se
ejercen con la intención de lograr una cosa a
través del uso de la fuerza. La conducta
violenta, por lo tanto, busca dañar física o
mentalmente a otra persona para someterla.

3. • Un maestro amoroso contribuye a la formación del ser del niño(a) en la
democracia, en el respeto y la ternura; un profesor tirano, dominador , violento,
abusivo de niños, que mal interpreta la disciplina e infiere castigos, es incorrecto y
peligroso
• Los educadores responsables e informados, saben que el maltrato físico y
emocional ocasionado a los niños es una conducta antiprofesional que puede
destruir dimensiones sagradas en la infancia su autoestima, su confianza,
inocencia y el entusiasmo de los niños por aprender.

4. ¿Como un educador puede impartir educación para la paz
al niño, si el mismo es violentado en la escuela por su
maestro?

5. Formas de violencia
escolar que se pueden
inferir al niño.

6. • Agarrar al niño bruscamente.
• Estremecer bruscamente (sacudir).
• Pellizcar.
• Empujar los dedos en la cara o en las costillas del niño.
• Aplastar o apretarle las mejillas del niño.
• Levantar a un niño por su ropa o por su cuello.
• Golpear el pupitre del niño con objetos como libros o reglas para llamar su atención.
• Forzar al niño a permanecer sentado, parado, o sin moverse por largos periodos de tiempo.
• Negar al niño permiso para ir al baño.
• Permitir a otros niños que atormenten a un niño.
• Negar el tiempo libre suficiente para su almuerzo.
• Confiscar o dañar la propiedad privada del niño.
• Deliberadamente ignorar a un niño que necesita ayuda.
• Negarse a reconocer o a premiar los avances logrados por el niño.
• Causar a un niño humillación frente al resto de sus compañeros.
• Hacer que un niño espíe y acuse a otro niño.
• Prohibir a un niño que está en mal estado anímico o se siente físicamente enfermo que llame a su casa.
• Halar al niño por las orejas.

7. • Establecer un ambiente de intimidad amorosa en el que se
respete la singularidad de docente y alumno; en el que
cada día sea una experiencia nueva para alimentar el
espíritu; en el que se establezca la superación y la lealtad,
estimulando permanentemente el respeto por el otro y el
respeto por si mismo, en el que se respete la libertad de
cada uno; en el que se trabaje en la adquisición de una
sana conciencia individual y colectiva; en el que se dé valor
a trabajar en grupo, a cooperar; en el que se logre un
semillero de seres autónomos; en el que se establezcan
mecanismos para incluir la familia en el fortalecimiento de
la ternura, del respeto, de la equidad; en el que se entienda
que la paz no es ausencia de conflictos, sino la capacidad
de resolveros sin destruir al otro, sin negar al otro.
Propuestas para educar en la paz