LA EMPRESA ÉTICA
A partir de GARCÍA MARZÁ, Domingo, Ética empresarial: Del diálogo a la confianza, Madrid, Trotta, 2004
Con el propósito de difundir a través de la web una propuesta de diseño de empresa ética y de facilitar una herramienta que permita evaluar los beneficios y ventajas de la empresa así concebida.
Presentación elaborada por Asunción Velilla
asuncionvelilla.blogspot.com
ÉTICA EMPRESARIAL 2. Un marco ético para la responsabilidad social corporativa
1. LA EMPRESA ÉTICA
2. Un marco ético para la responsabilidad social
corporativa
2. LA EMPRESA ÉTICA
A partir de
GARCÍA MARZÁ, Domingo, Ética empresarial: Del
diálogo a la confianza, Madrid, Trotta, 2004
Con el propósito de difundir a través de la web una propuesta de
diseño de empresa ética y de facilitar una herramienta que permita
evaluar los beneficios y ventajas de la empresa así concebida
Resumen crítico de la obra:
http://es.scribd.com/doc/117392925/Etica-empresarial-Del-dialogo-a-la-confianza
Presentación elaborada por Asunción Velilla
asuncionvelilla.blogspot.com
3. La responsabilidad es un recurso moral a disposición de
la empresa
Hasta hace poco un tabú, es hoy un recurso moral en el
desarrollo de las condiciones óptimas para la
generación, mantenimiento y desarrolllo del capital
confianza
Por tanto, el propósito es presentar un concepto de
responsabilidad empresarial que vaya más allá de la
reacción superficial a la presión social del momento y
que no se limite al mero cálculo utilitarista o estratégico
de las consecuencias.
4. La forma más directa de acercarnos al concepto de
responsabilidad social de la empresa está en la relación
de los conceptos de libertad y poder
La responsabilidad social deriva del poder social: del
espacio de libertad que posee la empresa para llevar a
cabo sus proyectos.
Si a mayor poder, mayor responsabilidad, es
imprescindible la ética empresarial.
Por tanto, la responsabilidad social es el concepto que
evalúa los efectos sociales y ecológicos de la toma de
decisiones empresariales.
5. La empresa como corporación y no como suma de
grupos descubre la figura del Contrato Moral.
El cual permite comprender que la responsabilidad
pública no es lo mismo que la responsabilidad estatal y
que aquella es más amplia que ésta.
Las clausulas del Contrato Moral desarrollaran el
contenido de la Responsabilidad Social Empresarial.
La Responsabilidad Social Empresarial es un activo
empresarial porque desarrolla un concepto positivo y
facultativo, ligado a obrar bien, a adelantar buenas
prácticas y a contribuir al establecimiento y estabilización
de relaciones empresariales.
6. ¿De qué es responsable la empresa?
La empresa es responsable como corporación, no basta
decir, por su carácter falaz, que solo los individuos son
responsables. Aunque esta idea hiciera historia y fuera
remachada por Friedman en su archipopular “The Social
Responsability of Bussines is to Increase Its Profits”.
La empresa tiene una:
Responsabilidad económica
Responsabilidad legal
Responsabilidad ética
Responsabilidad voluntaria o filantrópica
Todos ellos expresan una división analítica, es decir, se
encuentran en interresponsabilidad e interelación en la
realidad.
7. Qué es responsabilidad ética y cuál es su campo de acción
1. No es el cálculo de las consecuencias por parte de la dirección
frente al resto de grupos implicados. Así sería un pasivo.
2. Considerarla como un activo implica pasar de entenderla como
la suma de resultados a entenderla como un proceso.
3. Es un proceso a través del cual se producen acciones y en el
que están comprometidos diferentes grupos de intereses. No una
entidad específica que actúa según las decisiones de un grupo de
interés.
4. Es un proceso dialógico donde todos los interlocutores deben
tener voz.
5. Es un continuo que abarca tres niveles analíticamente
diferenciables, pero interrelacionados en la realidad empresarial:
económico, legal, moral. Al igual que en la legitimidad empresarial.
8. Proceso dialógico
Se fundamenta en la autonomía individual y la reciprocidad.
Así, el interés pasa del cálculo de las consecuencias de la
acción, a las condiciones en que tienen lugar la participación
de las distintas partes implicadas.
Fundamenta el acuerdo o compromiso a partir del diálogo
sobre qué intereses satisfacer y por qué.
Implica una cultura de la justificación, en que la confianza se
apoya en los procesos comunicativos o dialógicos y en la
transparencia de la información.
Así se hace explícita la exigencia de reciprocidad, que
caracteriza el punto de vista moral y que es principio básico
del diálogo.
9. El qué y el quién de la responsabilidad
El objetivo de la empresa plural, corporativa y moral no puede ser
otro que el acuerdo de todos los actores implicados en su
actividad.
No existe un interés empresarial identificable con uno de los
grupos, por más poder que tenga.
Ni existe un interés corporativo más allá de los grupos que
componen la empresa.
Desde el punto de vista ético la empresa no tiene un interés en sí
misma más allá de la satisfacción de los intereses legítimos en
juego.
Por lo tanto, el qué y el quién de la responsabilidad se confunden,
o interrelacionan, en la propuesta del modelo de empresa ética.
10. La propuesta permite diferenciar entre responsabilidad moral
y responsabilidad social y ecológica, y aclarar una posible
confusión terminológica.
La perspectiva ética o responsabilidad moral se sitúa en el
nivel procedimental, es decir, establece las condiciones
desde las que es posible plantear un diálogo justo o moral
entre los diferentes implicados.
La responsabilidad social se refiere al contenido y posible
acuerdo de este diálogo.
Por tanto, se trata de las relaciones entre el horizonte moral
de la legitimación y las acciones que en cada caso puede
realizar la empresa.
11. Nos hallamos ante un nivel ético postconvencional, es
decir, ante un horizonte de actuación desde el que definir
y delimitar la legitimidad empresarial.
Por su parte, la responsabilidad social corporativa define
el conjunto de acciones, decisiones y políticas que
conforman la respuesta que ofrece la empresa ante las
demandas de sus grupos de interés.
Esto es, concreta el grado de aproximación y
compromiso con el horizonte ético del diálogo y el
acuerdo posible, aspectos que constituyen las bases
éticas de la confianza.
12. La posibilidad de crear confianza que supone el diálogo tiene
que ver no solo con los resultados, sino también con el
respeto a la autonomía y a la posibilidad de participación
La ética es rentable, son evidentes las ventajas que derivan
de la concepción de la responsabilidad como un recurso
moral: mejor aceptación de los productos y servicios,
motivación laboral, buenas relaciones con la comunidad y la
administración, etc.
Ahora bien, ¿Resolver problemas sociales es un deber
porque aumentan los beneficios o porque es una
responsabilidad moral hacerlo?
13. Para la perspectiva ética, la respuesta llega desde la
consideración de los demás, no como medios para mi propio
interés, sino como fines en sí mismos.
El marco deontológico escogido lo define así: el respecto a
los derechos e intereses legítimos de los demás, que
constituyen la perspectiva ética, son parte de mis propios
intereses.
Evidentemente, descartar la perspectiva oportunista no
significa que una buena conducta desde el punto de vista
moral, implique una mala conducta desde el punto de vista
económico.
De ahí la importancia de la transparencia o publicidad.
14. Presentación elaborada a partir del texto de GARCÍA
MARZÁ, Domingo, Ética empresarial: Del diálogo a la
confianza, Madrid, Trotta, 2004, pp 165-189
Resumen crítico de la obra:
http://es.scribd.com/doc/117392925/Etica-empresarial-Del-dialogo-a-la-confianza
Presentación elaborada por Asunción Velilla
asuncionvelilla.blogspot.com