2. La hemorragia es la salida de la sangre
desde el aparato circulatorio, provocada
por la ruptura de vasos sanguíneos como
venas, arterias y capilares.
3. EL SISTEMA CIRCULATORIO
El sistema circulatorio tiene la función de transportar los
nutrientes y el oxígeno, a las células del organismo.
También es el responsable de mantener la temperatura
interna del cuerpo humano. Está compuesto por el
corazón, los vasos sanguíneos y la sangre.
Los vasos sanguíneos son los conductos por donde
circula la sangre. Existen tres tipos de vasos:
Arterias: son los vasos que salen del corazón.
Venas: son los vasos que van hacia el corazón.
Capilares: son los vasos más pequeños responsables del
intercambio gaseoso en tejidos y órganos.
4. CLASIFICACIÓN DE LAS
HEMORRAGIAS
Según el origen de la hemorragia:
Hemorragia interna: Es la ruptura de algún vaso
sanguíneo en el interior del cuerpo.
Hemorragia externa: Es la hemorragia producida por
ruptura de vasos sanguíneos a través de la piel.
Hemorragia a través de orificios naturales del cuerpo,
como la boca, el ano, la nariz, el oído... son muy graves.
5. CLASIFICACIÓN DE LAS
HEMORRAGIAS
Según el tipo de vaso sanguíneo roto:
Hemorragia capilar: Es la más frecuente y la menos
grave, pues los capilares sanguíneos son los vasos más
abundantes y que menos presión de sangre tienen. La
sangre fluye en poca cantidad.
Hemorragia venosa: El sangrado se produce por alguna
vena lesionada. La sangre perdida es de color rojo oscuro
y fluye lentamente de forma continua.
Hemorragia arterial: El sangrado se produce por una
arteria rota. Es menos frecuente que la hemorragia
venosa, pero más grave. La sangre es de color rojo
brillante y suele salir a presión, en saltos rítmicos que
coinciden con el pulso cardíaco. Si no se ejerce presión o
cohíbe la hemorragia, la muerte puede sobrevenir en
pocos minutos.
6. CONSECUENCIAS DE LAS
HEMORRAGIAS
Cuando el sangrado es importante e implica una pérdida
de volumen de sangre que se aproxima al 50%, puede
producirse un shock.
La cantidad de sangre de una persona está en relación con
su edad, peso, sexo y altura, una persona adulta se puede
considerar que tiene entre 4,5 y 6 litros de sangre.
La gravedad de una hemorragia depende de:
La velocidad con que se pierde la sangre.
El volumen de sangre perdido.
Edad de la persona.
Enfermedades que padezca el individuo.
7. TRATAMIENTO DE
HEMORRAGIAS
Hemorragia capilar:
1º Limpiar con una solución antiséptica.
2º Aplicar mercromina o betadine.
3º Recubrir la herida con una gasa estéril.
Hemorragia venosa:
1º Descubrir la herida.
2º Apretar con una compresa para evitar la salida de sangre.
3º Mantener elevado el miembro herido.
8. TRATAMIENTO DE
HEMORRAGIAS
Hemorragia arterial:
1º Actuar rápida y enérgicamente para salvar la vida del
accidentado.
2º Con el miembro algo levantado se deja al descubierto la
herida.
3º Comprimir el lugar de la herida con toallas, paños o
incluso con los dedos.
Hemorragia interna:
1º Avisar inmediatamente al médico.
2º El paciente deberá permanecer inmóvil, tendido con la
cabeza baja y sin hablar.
3º Colocar una bolsa de hielo o paños de agua fría sobre el
lugar de la lesión.
9. TRATAMIENTO DE
HEMORRAGIAS: EL
TORNIQUETE Definición:
El torniquete es una maniobra encaminada a paliar una hemorragia
aguda, que no puede ser contenida por el sistema convencional,
mediante la compresión de todos los vasos sanguíneos en una
zona circular próxima.
Tratamiento:
El torniquete ha de aplicarse entre la herida y el corazón. No debe
emplearse, a ser posible, cuerda, alambre u otros objetos finos que
puedan "cortar" al comprimir; lo usual es utilizar un pañuelo
triangular plegado o algo similar con suficiente anchura (5 cm
aproximadamente).
Colocar el torniquete a unos centímetros de la herida. Anudar la tela
con un lazo y colocar un palo en su interior. Girar el palo hasta que
deje de sangrar. Marcar la hora a la que se instaló el torniquete y
aflojarlo cada15 o 25 minutos. Al ir cesando la hemorragia, aflojar
poco a poco. Nunca quitarlo, salvo en presencia de un médico.