Las infecciones intrahospitalarias dependen principalmente del sitio clínico, tipo y tamaño del hospital, y edad y estado del paciente. La prevención requiere interrumpir la transmisión a través de precauciones como la higiene de manos, uso de equipo de protección personal, limpieza y desinfección del ambiente hospitalario, y vigilancia de procedimientos como la esterilización. Los factores de riesgo incluyen el estado del paciente, técnica quirúrgica, y cuidado postoperatorio.