En busca del libro de apeos y repartimiento de alhama

EN BUSCA DEL LIBRO DE APEOS Y REPARTIMIENTO DE ALAHAMA
Salvador Raya Retamero
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EN BUSCA DEL LIBRO DE APEOS Y REPARTIMIENTO DE ALHAMA
Y OTROS IMPORTANTES DOCUMENTOS DE SU ARCHIVO
MUNICIPAL
La existencia de documentación ausente del archivo parece clara, pues se han
sacado a la luz planos del padrón estadístico de fincas urbanas de Alhama del siglo
XIX, o referencias a actas capitulares anteriores a 1568 –las más antiguas que se
conservan-, como hemos denunciado en diversas ocasiones, sin que conste
referencia alguna de su procedencia, ni se encuentren en el archivo municipal,
circunstancia que debiera ser -repetimos- oportunamente clarificada para esclarecer
el origen concreto y localización de una documentación importante, que incluso se
difundió en los mismos programas de fiestas municipales en los últimos años y que
pertenece al patrimonio histórico y documental de Alhama.
Es olvidado por conocido el lamentable estado de conservación en el que la
mayoría de los archivos históricos locales se encuentran en nuestro país. La
investigación histórica no sólo estuvo y está ausente de la conciencia social, sino
también por parte de la administración local, responsable, en gran parte, de la
documentación administrativa de nuestros pueblos y ciudades.
El caso que voy a tratar de reseñar brevemente en las líneas siguientes gira en
torno al libro de apeos y repartimientos de Alhama de Granada. Para el profano,
diremos que este libro no es otra cosa que la relación oficial de bienes y haciendas
repartidos en Alhama después de su conquista por los RR. CC. La importancia
material o económica del documento en sí mismo es escasa al tratarse de un objeto
que ni se va a comprar ni se va a vender; no se trata de una escultura en un mercado
de antigüedades; nadie va a pujar por él. Su valor no es otro que la información
histórica que contiene sobre el pasado del pueblo información que seguramente no
interesará siquiera ni a su poseedor. Este libro sólo es apreciado por aquellos que, de
una forma u otra, se han interesado por la historia de esta ciudad para ponerla al
servicio de la sociedad, para aportar nuevos datos sobre su pasado y contribuir así,
desinteresadamente, al enriquecimiento de tan denostado conocimiento.

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Su existencia material la hemos constatado en momentos diversos:
1º) 1885. Cuando el catalán Ventalló Vintró que tuvo ocasión de consultarlo
en 1885 nos dice que el origen de Játar fue una modesta alquería de los propios de
Alhama, que se concedió por los Reyes Católicos a diez familias de Alhama con
obligación de que fuesen a poblar su término y desmontasen aquel terreno inculto. Y
concluía: Ello da idea de la tendencia colonizadora de aquellos ínclitos monarcas
que tantos días de gloria dieron a la española tierra… Éste autor citaba la carta real
de concesión, custodiada entonces en el archivo municipal de Alhama en 1885
(Puede verse el texto en Raya Retamero, S.: Formación de una región andaluza en
el Reino de Granada…, pp. 269-318) .
2º) 1909-1914. Cuando un visitante del Balneario, José Gómez, (que alguna
relación debió de tener con la investigación histórica, pues lo encontramos
haciendo pesquisas en el Archivo General de Indias), y que en la temporada de
1909 indagó en el archivo municipal de Alhama y advirtió del valor del
documento. Por ello, el 28 de diciembre de 1914 escribía al Presidente de la Real
Academia de la Historia, a fin de realizar una copia del libro, en un intento de
salvar de su pérdida la documentación, cosa que no consiguió.
3º) El paréntesis de la guerra. Es evidente que durante la guerra, ni se conocía
la existencia del libro ni era lo más importante en esos momentos. Si el holocausto
cultural anterior no malogró el archivo municipal sí estuvo a punto de conseguirse
tras la guerra, cuando a instancias del primer secretario se comenzó a vender para
papel viejo la documentación dispar que se encuentra en el Ayuntamiento. Y
aunque, si bien los funcionarios municipales de entonces nos confirmaron que no se
trató de documentación antigua sino administrativa, reciente, tal vez la generada
durante el domino marxista, sí se detuvo la venta del papel del archivo, cuando se
denunció al alcalde. Tal vez, por ello se realizaba el 1 de septiembre de 1939 un
inventario del archivo, en el que ya faltan los libros de actas anteriores a 1568, pero
que serán manejados por García Carrillo con posterioridad, como se verá.
4º) La denominación de Archivo Histórico (1939-1945). Desde 1939 el
Ayuntamiento muestra su interés por la documentación histórica conservada y
facilita el acceso y el estudio al archivo del administrador de Correos de Alhama

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de Granada, Inocente García Carrillo, llegando a 1945 en que lo faculta y acredita
para la catalogación de la documentación conservada y se denomina al archivo
como Archivo Histórico, poniendo la alcaldía a su cargo los funcionarios
municipales que estimase oportunos para la consecución de la catalogación del
Archivo –ya- Histórico.
A pesar de tan encomiable interés, no parece quedar rastro alguno del
presunto trabajo realizado, pero sí de la existencia de documentos hoy
desaparecidos, como demuestran las frecuentes notas que nos legó García Carrillo,
que hacen referencia –entre otras- al libro de repartimientos, momento desde el
cual se desconoce su paradero, AA. CC., etc. Por este motivo, sabemos que: 1º,
durante la guerra civil el Archivo Municipal de Alhama no sufrió daño alguno, al
contrario que los eclesiásticos que desaparecieron en toda su integridad en el fuego
inicuo que acabó con una parte ingente del patrimonio nacional, actuación que pude
ser denominada como el holocausto cultural realizado en España, parafraseando el
título de Paul Preston-. Holocausto cultural que corre paralelo al holocausto español
al que se refiere este autor, que para vergüenza de este país se dio –sin duda- en las
dos Españas, que resulta inadmisible –dicho sea de paso- apuntar sólo a una. Y 2º,
que después de 1939, aun se conservaba documentación de suma importancia
desparecida con posterioridad.
Y tal vez, conscientes de la importancia de los documentos del Archivo para
la historia de Alhama se encargaba de la custodia y organización de la
documentación conservada a Inocente García Carrillo, encargado de catalogar en
abril de 1945 el archivo municipal. Tras un lustro del encargo de catalogación y
custodia del Histórico Archivo no parece habernos llegado el menor vestigio de la
hipotética catalogación realizada por García Carrillo y su equipo, salvo en las notas
documentales de su opúsculo, cuando al referencias los documentos afirma: Archivo
Histórico Administrativo Municipal de Alhama; legajo XIX, tº. 4º u otras citas
documentales por el estilo. Ni un solo rastro o vestigio de tales citas se ha
conservado visible en los legajos conservados.
Pero su obra, Alhama vista por un extranjero, sí es testimonio parlante de la
importante documentación desaparecida tras el intento municipal de protección y
catalogación del Archivo y tras la edición de Alhama vista por un extranjero: las
repetidas notas documentales contenidas en el opúsculo.

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La generalidad de documentos citados en Alhama vista por un extranjero no
se localizan, como ilocalizable ha sido para nosotros la cédula real de Fernando el
Católico de 12 de septiembre de 1515, que al parecer se conservaba en el legajo XVI,
t. 2. Y que se reproduce en el opúsculo.
Que la documentación ha desaparecido lo evidencian estas interesantes notas
que nos legó García Carrillo:
En la nota 18 de su obra se cita el libro de Población de 1492, al referirse a
Jerónimo de Vallarta: en el reparto de bienes que hicieron los Reyes Católicos. Y
seguidamente, se refiere a los libros de actas capitulares del siglo XVI desaparecidos
también, lo que confirma su existencia en esos momentos inmediatos a la guerra, al
referirse al jurado Juan de Vallarta, que firmaba las actas capitulares desde el 23 de
mayo de 1526 al 14 del mismo mes de 1561, y documenta la referencia en el legajo
XVI, tomos 3º, 4º, 5º, 6º y 7º.
Tampoco hemos hallado la documentación a la que se refiere en la nota 19
(ruidosos pelitos con la Mesta por los años 1615 y 1616), porque las actas
comprendidas entre 1612 y 1619 tampoco se encuentran el archivo municipal. Y
tampoco hemos localizado las actas capitulares de 1842 ni las actas de 1835 a las que
se refiere la nota 15, ni las actas de 1831 a 1837 de la nota 24.
No se encuentra el archivo municipal el Padrón estadístico de fincas urbanas
de la ciudad de Alhama de 1847, al que se refiere la nota 29 y 33. Ni la nota 32, de
23 de julio de 1811; pero cuyos planos fueron editados hace escasos años por su hijo
Andrés García Maldonado. En la nota 34 se refiere a las actas de 1 de noviembre de
1757, que no se conservan desde 1743 a 1794 y sí figuran en el inventario de 1939
(catalogadas como leg. 18, tomo 6º).
En la nota 37 se refiere a las actas capitulares de 25 de abril de 1561. Estas
actas no se conservan –como se dijo- y tampoco figuran en el inventario de 1939.
Idem, nota 39. En la nota 35 se refiere a l borrador del repartimiento de bienes
inmuebles de 1849, que no se conserva. En la nota 40, de nuevo, se refiere a las
actas capitulares de 1526, también perdidas del archivo municipal, a las actas de
1561 y al libro de población del repartimiento de bienes y haciendas hecho por los
jueces repartidores don Pedro de Barrionuevo y don Gutierre Gómez de
Fuensalida, comendador de Haro. En esta nota se vuelve a hacer alusión a la firma

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de las actas capitulares de don Rodrigo de Bazán desde 1561-1583 (sólo se
encuentran allí desde 1568. En la nota 50 las repetidas referencias al libro de
repartimientos son evidentes. En la nota 52, se refiere al padrón estadístico de fincas
urbanas de la ciudad y al boceto topográfica que contiene, ilocalizable en el
archivo municipal, pero que será publicado en los programas de fiesta por su hijo
Andrés García Maldonado en las últimas décadas –como manifestamos-. En la nota
53 se alude al legajo XVIII, tomo 1, correspondencia, ilocalizable en el Archivo.
También en esta nota se alude a la sesión del 21 de diciembre de 1780, ilocalizada. Y
en la nota 57 se vuelva a citar el libro de Repartimiento, como las actas de cabildo
de 1562, también desaparecidas.
Éste autor fue consciente de la importancia de la documentación cuando
afirma: ...Sólo nos resta para conocer la grandeza de tan ilustre Ciudad, la
documentación de su Archivo Municipal, que aún en caótico estado, sus múltiples
materiales son palpitante espejo de la vida local en todos sus aspectos y relaciones,
y a cuya fuente hemos de referirnos en el curso de este modesto ensayo...
Y por ello consideraba en preparación títulos tan sugerentes como: La riqueza
ganadera de Alhama en el siglo XVIII; Las comunicaciones en Granada hace cien
años; Alhama señorío y belleza de Andalucía; Alhama y su vida gremial en el siglo
XVI; Relaciones de Alhama con Málaga y su costa; Alhama y la Marina española;
don Eduardo Hinojosa y Naveros; Juan Palarea, médico y guerrillero o la novela
histórica Clarita Bazán.
El encargo de catalogación a García Carrillo se realizaba el 18 de abril de
1945, catalogación que sería dirigida por el entonces secretario Salvador Cañas
Gómez y que, como hemos dicho, o no se realizó jamás o, si se realizó, no quedó
rastro alguno.
Tras el nombramiento se realiza un informe-inventario sobre la
documentación contenida que llama la atención por lo parco del mimos, 12 de julio
de 1945:

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INFORME RESPECTO AL ARCHIVO MUNICIPAL
1º Solamente existe en este archivo como documento escrito en pergamino el
libro de la confirmación de 1768 de la carta de privilegio concedida a la ciudad
por los Reyes Católicos
2º No existe ningún libro de papel escrito en tipos antiguos.
3º Existen doce legajos de documentos antiguos.
4º Dichos documentos corresponden a los siglos XVI-XIX, Se refieren
especialmente a los bienes propios de la ciudad: amillaramientos, terremotos de
1884.
5ºExacción de impuestos y padrones inmobiliarios.
Alhama de Granada, 12 de julio de 1945
Contenido de uno de los inventarios del Archivo municipal, donde no se cita el
libro de repartimiento y se omite la generalidad de documentación detallada en el
de 1939

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Documento que acredita el encargo de la organización del archivo municipal por parte del
alcalde don Miguel Morales Palazón y el secretario municipal don Salvador Cañas Gómez a
Inocente García Carrillo el 18-4-1945

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Es pues bien claro que el libro de apeos y repartimiento de Alhama por los
Reyes Católicos, la generalidad de actas capitulares del siglo XVI y el Padrón
estadístico de fincas urbanas de Alhama en el siglo XIX, entre otros documentos, no
sufrió la quema del 36, ni fue vendido para papel viejo en la postguerra. La ausencia
de fenómenos extraordinarios nos lleva a pensar en fenómenos "ordinarios". Estos
pueden ser múltiples: desde la extracción del archivo para su estudio voluntario con
ánimo de devolución hasta la sustracción consciente por parte de alguna persona
interesada en su posesión arbitraria. Parece necesario que la búsqueda de la
documentación desaparecida debe comenzar por preguntar oficialmente a los
herederos de García Carrillo si entre la documentación de su padre se pudiese
encontrar algún documento que con toda la legitimidad del mundo, para su estudio,
en su momento, hubiese pasado a su domicilio. Hecho que con mucha frecuencia ha
sido habitual en numerosas poblaciones y en modo alguno puede ser reprochable,
atendiendo a los momentos en que se produce. Sí sería reprochable que no se
realizara la menor pesquisa al respecto.
En 1954 se crea la Biblioteca municipal y se encarga de ella su primer
bibliotecario don Manuel Melguizo Santander, encargado también del archivo
municipal, el cual nos confirmó siempre que jamás vio en el archivo el libro de
repartimientos, ni las actas capitulares del siglo XVI, ni el Padrón estadístico de
fincas urbanas del siglo XIX, como la Archivera Bibliotecaria actual doña Mari Paz
García Prados.
Lo cierto es que, hoy por hoy, el libro de repartimientos y la documentación
acudida se encuentran desaparecidos y no existe ningún dato para pensar que están
destruidos.
Años atrás observé que en la parroquia de Alhama en uno de los altares
colaterales se encontraba una inscripción que dice así: AQUI YACE DON GARCIA
MALDONADO CABALLERO DE CALATRAVA CONQUISTADOR Y PRIMER ALCAIDE DE ALHAMA POR
LOS REYES CATOLICOS FINO AÑO 1492 (información que pudo ser extraída en parte
perfectamente de este libro o similar). En un primer momento la acepté sin más, mas
meditando sobre el tema observé que el estado impecable de aquella piedra era
novísimo, pregunté al entonces párroco, don Francisco Carmona, si conocía su
origen, el cual me informó que había sido instalada allí por parte de un hijo de la
ciudad y costeada por el mismo. Este hecho me lleva a pensar que existe
documentación que genera información que dimana, no precisamente del mismo

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archivo, sino de fuera de él, como demuestran numerosos folletos editados por el
Ayuntamiento en años anteriores y por otras instituciones.
Sea como fuere, el hecho certero es que cuando en la década de los cincuenta
García Carrillo ordena el archivo el libro de repartimiento y la documentación citada
se encuentran en la ciudad. Desde 1954 el archivero-bibliotecario no lo conoce; en la
década siguiente el historiador Ladero Quesada acusa ya oficialmente su
desaparición y el hueco que deja su pérdida para la historia. Es en este tiempo
cuando el libro de repartimiento de Alhama había tomado un destino desconocido.
En distintos momentos tratamos de denunciar tan lamentable ausencia y
especialmente, al menos, en las cuatro ocasiones siguientes.
1º) En 1992. En Historia de Alhama y sus monumentos, en el capítulo
dedicado al repartimiento de Alhama:
Como vemos, es tarea importantísima el asentamiento de pobladores en
Alhama en un primer momento para su defensa y con posterioridad para propiciar el
desarrollo económico de la misma una vez incorporada definitivamente a la Corona
de Castilla. La afluencia de vecinos y moradores se debió de producir en los años
inmediatos a la conquista, en los que se realizaría el repartimiento, cuyo libro se
encuentra desaparecido.
Han sido varios los investigadores que han acusado la desaparición del libro
de los repartimientos de Alhama. Así lo señaló Ladero Quesada en su artículo "La
repoblación del reino de Granada anterior a 1.500". Rev. Hispania, n.º 10. Madrid,
1968. Pág. 539. Recientemente el profesor Barrios Aguilera en su obra "Libro de los
repartimientos de Loja, I". Universidad de Granada. Excmo. Ayuntamiento de Loja,
1988. Págs. 13-14.
2º) En nuestro libro Alhama la huella de una ciudad en sus documentos…
(pp. 68-73, en 2009), tratábamos de destacar la importancia de la documentación
municipal y llamara la atención sobre el libro de repartimientos, con las siguientes
palabras:
La existencia de archivo para guardar la documentación principal
(provisiones, sentencias, privilegios, pleitos, etc.), viene ya recogida en el fuero de

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los Reyes Católicos; como se ha indicado, debió ocupar una dependencia aneja a la
sala de sesiones, en la primera planta del edificio, pues la lluvia produjo deterioros
en la documentación, por las goteras de la cubierta en algunos momentos.
La documentación existente en enero de 1572 la conocemos por la sesión del
día 28, pues en ella se manda abrir el arca de tres llaves. Los documentos contenidos
en el archivo son los siguientes:
-El privilegio, escrito en pergamino, con las armas reales y el sello de plomo.
-El fuero antiguo.
-Las ordenanzas confirmadas sobre juzgados.
-Las sentencias y ejecutorias contra Granada y otras ciudades.
-La provisión de Nueva Planta.
-Pleito y ejecutoria contra el fiscal real sobre el privilegio y realengo.
-Provisión para que la justicia se conforme con los votos de la mayoría.
-Provisión sobre el abastecimiento de la alhóndiga.
-Provisión sobre los diputados.
-Provisión sobre la cárcel.
-Provisión de la confirmación del fuero.
-Provisión para arrendar algunos términos.
Para abrir el archivo tenían que estar presentes tres regidores. Tras la perti-
nente consulta realizada, todo debía volver a quedar en el estado anterior a la
apertura. También se ordena abrir el arca del archivo cuando fuese necesaria la
consulta de la documentación que guardaba por el Concejo, tanto para dar traslados
del privilegio, como para la resolución de los problemas concejiles: confirmación
del privilegio en Corte, amojonamientos del término, etc.
Debió de existir un libro específicamente dedicado a recoger las provisiones
reales que llegasen al Concejo, pues en la sesión del 18 de agosto de 1578 se manda
comprarlo, a pesar de ello, éstas, aparecen insertas en todo momento en los libro de
actas capitulares, y ausente la recopilación.
Desde 1945 tenemos constancia de la existencia de la denominación de
Archivo Histórico. Por lo que el carácter administrativo prevaleció desde su creación
hasta la citada fecha. Es en 1945 cuando el Ayuntamiento parece querer resaltar el
carácter de Histórico y a tal fin lo denomina como Archivo Histórico Municipal,
dotándolo de sello propio, en el que figuran las armas de Alhama con la leyenda:
TESTIS FIDELIS NON MENTITUR.

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Fruto del interés habido en la Corporación Municipal, en la sesión celebrada
el día 18 de abril de 1945, se aceptaba el desinteresado ofrecimiento de ordenar y
catalogar el Archivo municipal de Inocente García Carrillo, funcionario público de
Correos en la población, e interesado por su historia, labor que efectuaría bajo la
dirección del secretario municipal y del personal auxiliar que estimase conveniente
Inocente García Carrillo. Fue éste uno de los intentos de ordenación de la
documentación allí guardada, que no cuajó en modo alguno, pues no nos ha llegado
el menor rastro de clasificación o catalogación, salvo la que señala el mismo
encargado de la ordenación en su obra, que no en el archivo, cuando años más tarde
publicara Alhama vista por un extranjero; una interesante obra, prueba fehaciente de
la consulta de los fondos documentales municipales, la mayoría de la cual
desaparecida o ilocalizable en la actualidad, entre la que destacamos el libro de
repartimientos, utilizado por el autor y citado numerosas veces en su libro, al igual
que el Padrón Estadístico de Fincas Urbanas... del siglo XIX, del cual han visto la
luz algunos planos últimamente en programas de fiesta municipales, pero
ilocalizables en el Archivo, de los cuales se deberían hacer las pesquisas oportunas.
Aparte de algunos someros inventarios realizados con anterioridad, que
señalamos en otro momento, hay que destacar el que corrió a cargo de la Diputación
Provincial de Granada, en los albores de los ochenta, único y primer inventario
detallado groso modo, que nos ha llegado; aun así es absolutamente insuficiente, al
igual que lo referido a catalogación documental, inexistente. Tras esta clasificación,
el archivo fue trasladado a un nuevo edificio, el Hospital Real. Desde hace años ha
habido intentos de microfilmación, de parte de sus fondos, pero desconocemos por
qué no llegaron a buen término.
Un contingente importante de la documentación fundamental ha
desaparecido; tal es el caso de los libros de actas capitulares, hasta 1568, o el libro de
Apeo y Repartimiento de los Reyes Católicos, en este caso incluso después de que la
Corporación Municipal mostrara su interés por la ordenación del mismo. El 1 de
septiembre de 1939 se realiza un inventario del archivo, del que resulta que el libro
más antiguo es el de actas capitulares de 1569 (AMA, Patrimonio, caja 12.1); pero el
12 de julio de 1945 no se cita en el Inventario de los documentos existentes en el
archivo municipal que entrega en este día el secretario que cesa don Pedro Medina
al reciente nombrado don Luis Reche Soriano.

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Importantes hubiesen sido los primeros libros de actas capitulares, cuya
desaparición sí comprobamos bastante antigua, pues ya no figuran en los inventarios
que se realizan con anterioridad a la guerra civil. Constituyen una documentación
muy importante para conocer el ayer de la población. Diremos también que la
generalidad de actas municipales hasta el siglo XIX se encuentra en el mismo
archivo municipal, al igual que otra documentación dispar, sin catalogar, sin
clasificar y sin inventariar. Otros documentos se hallan fuera del archivo, como es el
caso del libro de privilegios y el legajo de visitas a las alquerías, en la caja de
caudales del municipio.

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INVENTARIO DE LOS DOCUMENTOS EXISTENTES EN EL ARCHIVO MUNICIPAL QUE
ENTREGA EN ESTE DÍA EL SECRETARIO QUE CESA DON PEDRO MEDINA AL
RECIENTEMENTE NOMBRADO DON LUIS RECHE SORIANO
1569-1600-1601-1606-1619-1620, 21, 22, 23, 24, 25. 1632, 33, 34, 35, 36, 37.
1659. 1682, 83, 84, 85, 86, 87, 89. 1691, 92, 94, 95, 96. 1700, 1, 2, 3, ,4 ,5 ,6 ,7
,8, 9 , 10 11, 12, 13, 14, 15, 16, 17, 18, 19, 20, 21, 22, 23, 24, 25, 26, 27, 28, 29.
1731, 32, 33, 34, 35, 36, 37, 38, 39, 40, 41, 42, 43, 45, 46, 47, 48, 49, 50, 51, 52,
53, 54, 55, 56, 57, 58, 59, 60, 61, 62, 63, 64, 65, 66, 67, 68, 69, 70, 71, 72, 73, 74,
75, 76, 77, 78, 79, 80 (borrado), 81, 82, 83, 84, 85, 86, 87, 89, 90, 91, 92, 93, 94,
95, 96, 98. 18o1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8, 9, 10, 12,13, 14, 15, 16, 17, 18, 19, 20, 21, 22,
23, 24, 25, 26, 27, 28, 29, 30, 31, 32, 33, 35, 36, 37, 38, 39, 41, 42, 43, 44, 45, 46,
47, 48, 49, 51, 52, 53, 54, 55, 56, 57, 58, 59, 60, 61, 62, 63, 64, 65, 66, 67, 68, 69,
70,71, 72, 73, 74, 75, 76, 77, 78, 79, 80, 81, 82, 83, 84, 85, 86, 87, 88, 89, 90, 91,
92, 93, 94, 95, 96 97....
(Termina con la fecha de 1 de septiembre de 1939, año de la Victoria).
(En una hoja suelta incluida en el legajo se encuentra la nota siguiente)
INFORME RESPECTO AL ARCHIVO MUNICIPAL
1º Solamente existe en este archivo como documento escrito en pergamino el
libro de la confirmación de 1768 de la carta de privilegio concedida a la ciudad
por los Reyes Católicos
2º No existe ningún libro de papel escrito en tipos antiguos.
3º Existen doce legajos de documentos antiguos.
4º Dichos documentos corresponden a los siglos XVI-XIX, Se refieren
especialmente a los bienes propios de la ciudad: amillaramientos, terremotos de
1884.
5ºExacción de impuestos y padrones inmobiliarios.
Alhama de Granada, 12 de julio de 1945
Contenido de uno de los inventarios del Archivo municipal, donde ya no se cita el libro de
repartimiento, a pesar de haber sido nombrado encargado de la organización del archivo en
abril de ese año

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3º) En el libro La formación de una región andaluza…., 2008.
La pérdida del libro de repartimiento de Alhama (al que nos hemos referido
en numerosas ocasiones, no descartando su existencia material) constituye un
despropósito lamentable para el conocimiento de la historia de esta importante
porción de suelo andaluz. El catalán Ventalló Vintró que tuvo ocasión de
consultarlo en 1885 nos dice que el origen de Játar fue una modesta alquería de los
propios de Alhama, que se concedió por los Reyes Católicos a diez familias de
Alhama con obligación de que fuesen a poblar su término y desmontasen aquel
terreno inculto. Y concluía: Ello da idea de la tendencia colonizadora de aquellos
ínclitos monarcas que tantos días de gloria dieron a la española tierra… Éste autor
citaba la carta real de concesión, custodiada entonces en el archivo municipal de
Alhama en 1885. Desaparecido el autor y la documentación aludida, poco más nos
resta que sus escuetas palabras para desentrañar el origen de la alquería.
NOTA
AL AYUNTAMIENTO DE ALHAMA Y A LA CONSEJERÍA DE CULTURA DE LA JUNTA DE
ANDALUCÍA
El libro de apeos y repartimientos, las actas capitulares del siglo XV-XVI o
el padrón estadístico de fincas urbanas de Alhama en el siglo XIX son Bienes de
Interés Cultural. En Alhama, se encuentran desparecidos del Archivo Histórico
Municipal desde hace varias décadas. El Ayuntamiento de Alhama y La
Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía han de velar por su protección. Las
instituciones públicas están obligadas a ello. Son bienes pertenecientes a la
comunidad y bajo ningún concepto pueden permanecer en manos particulares.

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4º) En nuestro libro Historia de los Baños Termales de Alhama de Granada
(De Roma a la actualidad), 2009.
Un visitante del Balneario tras el libro de repartimiento de Alhama en
1909
1 de agosto de 1915. Carpetilla de expediente sobre la existencia en el Ayuntamiento de
Alhama de Granada de numerosos documentos antiguos del momento de la conquista y
repartimiento de dicha localidad. Real Academia de la Historia, CAGR/9/7955/59(1).

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Son numerosas las referencias a la existencia del libro de repartimiento de
Alhama realizado por los Reyes Católicos, manejado por última vez por Inocente
García Carrillo en los años cincuenta del siglo XX. Desde entonces, ilocalizable.
En este documento comprobamos el interés por el mismo, por parte de un
visitante del Balneario, José Gómez, (que alguna relación debió de tener con la
investigación histórica, pues lo encontramos haciendo pesquisas en el Archivo
General de Indias), y que en la temporada de 1909 indagó en el archivo municipal
de Alhama y advirtió el valor del documento. Por ello, el 28 de diciembre de 1914
escribía al Presidente de la Real Academia de la Historia, en un intento de salvar
de su pérdida la documentación, en estos términos:
“Muy Señor Mío, de toda mi consideración. Durante largos años he
observado la poca afición que hay en los pueblos a los estudios históricos,
aunque en sus archivos existan documentos de interés para la historia general de
España y la particular de esos mismos pueblos, como he podido comprobar en
diversas ocasiones a los fines de esta carta citaré sólo un caso.
En septiembre de 1909, encontrándome en el Balneario de Alhama de
Granada, se me ocurrió la idea de ir a la población a averiguar cuánto hubiera
referente a la conquista. Ya en el Ayuntamiento, y debido a la exquisita
amabilidad y cortesía del Secretario, examiné algunos documentos
relativamente modernos, e insistiendo en ver los antiguos me exhibieron un rollo
o legajo grueso, aunque según manifestó aquel funcionario, sería cosa inútil que
nadie sabía su contenido. El legajo se componía de los poderes extendidos a
personas, cuyo nombre no recuerdo, para hacer el repartimiento y el mismo
repartimiento hecho a conquistadores y repobladores pocos años después.
En aquella época estaba yo muy ocupado en una investigación en este
archivo General de Indias y nada podía hacer, pero hoy, que dispongo de tiempo,
pensé dirigirme al alcalde de Alhama, proponiéndole que el municipio costeara
una copia de este interesante documento, ya por la utilidad que pudiese reportar,
ya para enriquecer el Archivo Histórico Nacional, pero estoy casi seguro que por
mi sola iniciativa no ha de ser atendida mi proposición, y por el contrario, si
fuera apoyada por esta Real Academia y, a mayor abundamiento, por el Señor
Ministro de Instrucción, obtendría, desde luego, el mayor éxito… José Gómez
(Amor de Dios)”.
A pesar de tan inestimables y desinteresados esfuerzos no parece que se
consiguiese nada entonces, pues el libro de repartimiento de Alhama de Granada,

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estaba abocado a su desaparición. Por nuestra parte, continuamos las pesquisas, en
la esperanza de que en algún momento pueda llegar a manos de la correspondiente
institución pública, de donde nunca debió salir y único espacio legítimo para su
conservación. Mantenemos la esperanza.
Llama poderosamente nuestra atención cómo siendo evidente la
publicación de material perteneciente al Archivo municipal de Alhama, incluso
en programas de fiestas financiados hace años por el mismo Ayuntamiento,
nadie realiza la más mínima pesquisa o investigación al respecto. Si tal proceder
se siguiese, por ejemplo, con el hurto de una hipotética obra de arte en cualquier
lugar del mundo: desde luego, no aparecería ninguna.

En busca del libro de apeos y repartimiento de alhama

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