4. DIETA MEDITERRANEA
La salud del corazón es la principal cualidad que tiene la dieta mediterránea como
programa alimenticio, en el que se mezclan componentes de la gastronomía del
sur de Europa o del mediterráneo. En la dieta mediterránea no pueden faltar las
verduras, las frutas, el arroz y la pasta.
La dieta mediterránea se relaciona con los bajos niveles de colesterol.
La dieta mediterránea se caracteriza por su especial énfasis en contener
estos ingredientes:
Se prepara a base de plantas como las frutas y las verduras, las legumbres,
las nueces y los cereales.
No se utiliza la sal. Esta es remplazada con especias y con hierbas para
brindarle sabor a las comidas, como por ejemplo, la ensalada mediterránea.
Consumir el pescado y el pollo, al menos dos veces durante la semana.
Todo este tipo de carnes blancas es parte de la lista extensa de comidas
para la dieta mediterránea para perder peso, con lo cual puedes crear tu
propio menú diario.
Tomar una bebida como el vino tinto, pero con mucha moderación, esto es
opcional.
Disminuir notablemente el consumo de carnes rojas, a por lo menos, sólo
dos veces por mes.
Hacer un remplazo de la mantequilla, con grasas saludables, como lo son el
aceite de canola y el aceite de oliva.
Realizar un complemento de entrenamientos para quemar grasa, pueden
ser ejercicios para piernas, para glúteos o abdominales.
5. COMER POCO CONSUMO
MODERADO
CONSUMO
HABITUAL
DULCES: pasteles y
bollería (azúcar)
LACTEOS: (sobre todo
queso y yogurt), huevos,
cranes de aves (proteínas
y calcio)
VERDUERAS Y
HORTALIZAS:
(micronutrientes e hidratos
de carbono)
GRASAS: aceite y
mantequilla (grasas)
FRUTAS: (micronutrientes
e hidratos de carbono)
CARNE: (cerdo, cordero,
vacuno), pescado y
huevos (proteínas)
LEGUMBRES Y FRUTOS
SECOS: (proteínas e
hidratos de carbono)
PAN: pastas y cereales
(hidratos de carbono)