1. 3 4 (.,0.<; OtÍGliNliS Dli l,A ADMINISTRACIÓN ^„,„.„^^ ANTECEDENTES HISTÓRICOS DE LA ADMINISTRACIÓN
naciente tecnología. Obviamente, en muchos casos, esos errores eran compensados por
el salario de los trabeijadores, que era bajísimo. Aunque la larga jornada de trabajo origir
naba bajo nivel de vida, promiscuidad en las fábricas y rieigos de accidentes graves, también
permitía una interacción más estrecha entre los obreros y una creciente toma de
conciencia de la precariedad de suscondiciones de vida y de trabajo y de lá intensa explotación
por parte defina clase social: económicamente más favorecida. Las primeras ten-p;;'-
sjones entre los trabajadores y los propietarios de las industrias no tardaren en aparecer;!;
los Estados debieron derogar ciertas leyes laborales para ayudar a las relaciones entre|':ji'
obreros y patronos. En 1802 el gobierno.inglés sancionó una ley que buscaba proteger lap;.
salud d é l o s trabajadores en las industrias textiles. Los pastores protestanfes y los juecesr':
locales vigilaban de irranera voluntaria el cumplimiento de esa ley. A medida que.los pro-:*
blemas iban agravándose, se expedían nuevas leyes.
Debido a la nueva tecnología de los procesos de producción y de la construcción y"-
funcionamiento de las máquinas, así como a la naciente legislación que buscaba defender!• :
la sal ud y la integridad física del trabajador y, en consecuencia, de la colectividad, la admi-{5
nistrdción y la gerencia de ¡as empresas .industriales pasaron a ser preocupación perma-V '
nente de sus propietarios. La práctica fue ayudando a seleccionar ideas y métodos empíri-:--
cos En vez de los ¡jequeños grupos de. aprendices y artesanos dirigidos por maestros;;-,
hábiles, ahora el problema era dirigir batallones de: obreros de la nueva clase proletaria;;.'
en vez de los instrumentos rudimentarios de trabajo manual, el prob¡e;na era operarí;;-'.';
máciuinas cuya complejidad aumentaba.
Los productos |;)asarori a ser elaborados poi' etapas en operaciones parciales, asignada
cada una de e'stas a un grupo de obreros especializados en tareas;e.^pecíficas, que^
desconocían casi siempre las demás operaciones e ignoraban hasta la finalidad de la pieza;
o de la tarea que ejecutaban. Esa. nueva Situación contribuyó a desterrar de la mente del.
trabíijador el vínculo social inás intenso; es decir, el sentimiento de estar produciendo y;
contribuyendo para el bien de la sociedad. E l capitalista se distanció de sus obreros .y-comenzó
a considerarlos una enorme masa anónirna, al mismo tiempo que los grupos;
sociales, más concentrados en las empresas, geiperaban problemas de tipo social y;
reivindicativos, y problemas relacionados con el rendimiento en el trabajo y con los equi^i;
pos, los cuales necesitaban solución rájiiday adecuada. La principal preocupación de lós;;
empresarios radicaba, lógicamente, en e^l mejoramiento de los aspectos mecánicos y teci;
nológicos de la producción, con el objeto de producir m.ayores cantidades de mejoresí:
productos, y al menor costo. La gestión de persoqal y la coordinación de la actividadf,'
productiva eran aspectos de poca c ninguna impoi;tancia. De este modo, aunque ¡a Re-jv.
volución Industrial haya provocado una profunda modificación en la estructura empre-j •
sarial y económica de la época, nunca llegó a inifluir directamente en ios principiosll
de la administración utilizados por las eínpresas. Los dirigentes de las emp; esas trataroiii?
simplemente de atender como podíaii, o como ¡sabían, las demandas de una eGÓ-fj;
nomía en rápida expansión y carente de especializición. Algtmos 'empresarios tomabani|:
L'süs decisiones basados en las organizaciones militares o eclesiásticas que tuvieron éxito
en los siglos anteriores'".
, La utilización capitalista de las máquinas en las fábricas intensifica el carácter social ;
'.•íyM trabajo, traducido en ritmos de producción rígidos, normas estrictas de comporta- i
l'jmiento y mayor interdependencia. ; ' I
La máquina impone como absolutamente necesario el carácter cooperativo del trabajo ?
• y la necesidad de una regulación social. Sin embargo, el uso capitalista de las máquinas .
lleva a una dirección autoritaria, a la reglamentación administrativa sobre el obrero, sin '
perder de vista la exacción de la piusyalía ejecutada por los miembros del cuadro administrativo:
ejecutivos, directores, supervisores y capataces. Los patrones consiguen
hacer pasar por simple reglamentación social lo que en realidad es su código autoríía-
/ • riO- La dirección autoritaria es el objetivo capita'ista que, mediante la llamada'
"racionalización del trabajo" y el control del comportamiento del obreix), define las
gai'antías de la cooperación". ' .
Para obtener la cooperación en la empresa, las funciones directivas se transforman •
de normas de controi en normas de represión. ' í
Para laTGA, la principal consecuencia de este procesóles el nacimiento de la organi--
_zación y la empresa miodernas con la Revolución Industrial, gracias a una multitud de.'
'..factores, entre los cuales,pueden destacarse la ruptura de las estructuras corporativas de
;já Edad Media; el avance tecnológico, gracias a las aplicaciones de los progresos científi-
• cos'a la producción, así como el descubrimiento de nuevas formas de energía y la posibi-
¡¡dad de una enorme ampliación de ¡os mercados; la sustitución de la producción artesanal;
por la industrial.. ' [ '
.iNrLUENCIA DE LOS ECONOMISTAS LIBERALES) '
.Pai'alelaa las diversas corrientes filosóficas, a partir del siglo XVII se desarrolló en Europa;
una gran cantidad de teorías económicas centradas en la explicación de los fenóinenos^^
empresariales (microeconómicos), basadas, .al comienzo', en datos empíricos, es deci,r, en
la experiencia corriente y las tradiciones del comercio,de la época' finales del siglo XVIÍI
las teorías de los economistas clásicos liberales obtienen gran aceptación y llegan al punto
máximo con el advenimiento de la Revolución Francesa. Las ideas liberales surgen del
,11
James D. .Mooney, Op. aV., p. 131. '
Mauricio Tragtehberg, AdministrafSo] Poder efdeoiogia, trabajo mimeográíico bajo el No, ,SOC:L-222 (S'384)¿,
,Escuela de Administración de ííiTipresas de Sao Paulo,'de ia.Fundadó'n Gelúlio Vargas, p. 14. " • ' • . . {{,