La figura humana ha sido representada de diferentes maneras a lo largo de la historia del arte, reflejando roles de género, creencias y paradigmas de cada época. En la prehistoria, las primeras esculturas eran figuras femeninas asociadas con la fertilidad. En Egipto, el cuerpo humano se representaba de perfil mientras que la cabeza y extremidades estaban de frente. Grecia se caracterizó por su idealismo estético y expresividad en la figura humana. La Edad Media dividió su arte en periodos como paleocristiano