Este documento discute la importancia de la educación ambiental para promover el desarrollo sostenible. Explica que la crisis ambiental actual requiere un cambio en la mentalidad y las prácticas humanas, y que la educación ambiental puede jugar un papel clave en lograr estas transformaciones. También describe un ejemplo de una iniciativa de educación ambiental en Ibagué, Colombia, que involucra la siembra de árboles para generar sombra y motivar a la gente a caminar más en lugar de usar vehículos.
1. Facultad de Ciencias Contables, Económicas y Administrativas
Maestría en Desarrollo Sostenible y Medio Ambiente
Electiva: Educación Ambiental
Actividad Colaborativa:
Síntesis
Presentado por:
Julián Upegui Ureña
Noel Javier Gómez Mejía
My ® Julio Cesar Parga Rivas
Gustavo Adolfo Herrera Arango
Bogotá, Colombia. Octubre 27 de 2016
2. I Introducción
La humanidad se enfrenta hoy a uno de los retos más trascendentales de toda su historia,
pues el equilibrio eco-sistémico que ha sostenido las condiciones esenciales para que
haya vida en el planeta, se está resquebrajando hasta el punto de encontrarse en una
crisis ambiental de tales magnitudes, que exige que tengamos que actuar de inmediato,
si por lo menos se pretende comenzar a frenar las fuerzas globales que están causando
este acelerado deterioro, que nos está conduciendo a limites más allá de los cuales, las
formas de vida que conocemos se hallan en inminente peligro de desaparecer.
Lo preocupante de este proceso de profunda degradación de la naturaleza, es que
representa el reflejo de lo que unas formas culturales con una concepción del mundo,
centrada más, en la seducción por el goce que brinda tener un poder egocéntrico
enfocado hacia un hedonismo basado en la plena devoción hacia las posesiones
materiales, que expresa el inmenso desconocimiento del funcionamiento sistémico y
cíclico de la naturaleza.
Es aquí en donde la Educación Ambiental juega un papel esencial, porque se ha erigido
como la manifestación de conocimientos científicos comprometidos con la sustentabilidad
de los procesos naturales, convirtiéndose de esta manera en el mecanismo cultural más
expedito para alcanzar las transformaciones necesarias en la mentalidad modernizante,
que nos ha obnubilado el pensamiento y la sensatez que se requieren para proteger y
preservar la vida en todas sus manifestaciones.
Una de las definiciones más completas, holísticas, integradoras y que abrió espacio para
comenzar a trazar políticas públicas en Educación Ambiental en los países, tuvo que ver
con la desarrollada por la UNESCO en 1970:
La educación ambiental es el proceso que consiste en reconocer valores y aclarar
conceptos con objeto de fomentar las aptitudes y actitudes necesarias para comprender y
apreciar las interrelaciones entre el hombre, su cultura y su medio biofísico; la educación
ambiental entraña también la práctica en la toma de decisiones y en la propia elaboración
de un código de comportamiento con respecto a la cuestiones relacionadas con la calidad
del medio ambiente (Cit. por Porras Arévalo, 2011: 23)
3. La Educación Ambiental se afianza en unos principios y valores que hemos adoptado a
través de un largo proceso de evolución cultural, en el que hemos reconocido la gran
fragilidad de las condiciones naturales para la vida de los seres humanos, que ha
permitido el surgimiento histórico de relaciones éticas entre los mismos seres humanos
y con la naturaleza. Ahora bien, para ir más allá de los conceptos es necesario establecer
un desarrollo de prácticas humanas sostenibles.
Por eso la intención de este trabajo es aportar en la medida de nuestros conocimientos,
experiencias y prácticas de vida, a la fundamentación conceptual de la Educación
Ambiental, y de esta forma contribuir a una visión socio-ambiental del país y del mundo,
esperanzadora que muestre avances considerables en la orientación y el
restablecimiento de una sociedad sostenible, que promueva la cooperación y concientice
a los actores sociales, institucionales y comunitarios a que asuman el compromiso de la
conservación de los recursos naturales y garantizar así el futuro para las próximas
generaciones.
II. Objetivo
Aportar a la reflexión de la construcción conceptual de la Educación Ambiental, desde la
perspectiva local describiendo una experiencia concreta en el ámbito de nuestro país.
III. Desarrollo
1- Generalidades.
Es necesario emprender estrategias del cuidado del medio ambiente para poder revertir
los hábitos, costumbres y rutinas que han causado daños a nuestro planeta. El incorporar
alternativas de desarrollo trae consigo comportamientos de beneficios hacia el ambiente
que hemos ido perdiendo con el transcurrir de los años, esta crisis ambiental ha sido una
oportunidad en busca de tener una mejor calidad de vida.
“La educación ambiental es un proceso permanente en el cual los individuos y las
comunidades toman conciencia de su medio y adquieren conocimientos, valores,
destrezas, experiencia y, también, la voluntad que los hace capaces de actuar, individual
y colectivamente, en la resolución de los problemas ambientales presentes y futuros” (Cit.
Por Martínez Castillo, 2010: 100).
4. La admisión y acogimiento de una actitud consciente ante el medio que nos rodea, y del
cual formamos parte indisoluble, depende en gran medidade la enseñanza y la educación
desde temprana edad, desde la niñez pasando a lo largo de nuestra evolución de ser
humano sobre la tierra. Por esta razón, corresponde a la sociedad, dinamizar una
enseñanza responsable y consciente con el desarrollo sustentable. Ahora bien la escuela
desempeña un papel preponderante y fundamental en el fortalecimiento de los principios
y valores en este proceso.
Desde nuestra posición como estudiantes de la Maestría en Desarrollo Sostenible y
Medio Ambiente de una institución educativa inmersa en un mundo globalizado, como lo
es la Universidad de Manizales, intentamos comprender desde las construcciones
simbólicas de los discursos científicos, las posibilidades de la educación Ambiental, para
que las personas de todos las culturas y niveles sociales sin discriminación alguna,
asuman la importancia que debe tener para todos como habitantes del planeta Tierra el
vislumbrar la magnitud de una problemática, que afecta nuestras condiciones de vida
actuales y futuras, hasta el punto que debería ponernos a reflexionar sobre nuestro orden
cultural y sus grandes contradicciones para garantizarnos un desarrollo humano
sostenible.
En este contexto, esperamos haber alcanzado un acercamiento lo suficientemente
comprensivo del tema como para que a esta altura del escrito, podamos decir que a pesar
de existir una abundante información sobre la relevancia de la Educación Ambiental en
la construcción de una cultura ambientalista, que ha sido difundida por la preocupación
política de instancias tan importantes como la Organización de Las Naciones Unidas
(ONU); los centros de poder que controlan muchos medios masivos de comunicación tan
popularizados como la televisión, la radio, la prensa e internet, de cierta forma invisibilizan
y contribuyen a la construcción de un imaginario colectivo que da la espalda a las
verdaderas causas de la inconsciencia y las prácticas antiecológicas de gran parte de la
población mundial, intensificando los desequilibrios en los ecosistemas de la Tierra.
La crisis ambiental es un hecho comprobado por el mundo de la ciencia. Y aunque por
la complejidad de la misma son muchas las incertidumbres que dificultan las posibilidades
de predicción sobre sus verdaderos impactos, los propios expertos y hasta sus
5. contradictores reconocen que los riesgos que la humanidad enfrenta por las dimensiones
de lo que se trata, son inmensas y potencialmente catastróficas para las condiciones de
vida de la humanidad.
Si uno de los mayores argumentos que sustentan la explicación de los problemas medio
ambientales del mundo, son precisamente las influencias del mundo industrializado
contemporáneo, se debe reconocer que estas son determinadas por el modo de
pensamiento predominante en la humanidad, desde el siglo XVII como lo es la
modernidad occidental, con su correspondiente cultura capitalista y antropocéntrica.
Es por ello que las instancias culturales que se han preocupado seria y rigurosamente
por darle la trascendencia al papel que desempeña la Educación Ambiental, como una
de las estructuras sociales claves en el abordaje de asumir el reto de intentar cambiar
radicalmente ese modo de pensamiento occidental moderno, que nos ha generado
graves secuelas medio ambientales. Es precisamente esta situación la que nos ha
permitido plantear lo importante que es la apropiación y concientización generalizada de
estos conceptos científicos, que aunque complejos, deberían llevarse a un lenguaje
cotidiano que tanto los privilegiados como los marginados del mundo comprendan.
Es por esto que pensamos que aunque los procesos educativos sobre las problemáticas
medio ambientales son de carácter global, los esfuerzos sociales para asumir el reto que
enfrenta la humanidad deben provenir de todas las disciplinas académicas incluida por
supuesto, y de manera especial, la que nos atañe. Queremos destacar como la
Educación Ambiental cobra una importancia inusitada, cuando comprendemos desde el
conocimiento de las estructuras del lenguaje, así el aporte parezca insignificante, que
este representa precisamente el sustrato de nuestras formas de pensar, y en ese sentido,
es fundamental difundir el lenguaje ecológico y de desarrollo sustentable, en todas las
esferas sociales, para potenciar las transformaciones que urgen en el mundo globalizado.
Por lo que la apropiación de un nuevo lenguaje que conduzca a una ética diferente sobre
el medio ambiente es imprescindible:
Un lenguaje que desde la ecología nos dice que todo se relaciona con todo lo
demás y que el planeta Tierra solo dispone de recursos limitados.
6. Un lenguaje que nos mantenga en alerta sobre el hecho de que así la tecnología
nos permita hacer muchas cosas, no todas las podemos hacer. como es el
lenguaje de la tecnología apropiada y sustentable.
Un lenguaje cultural que nos inste a pensar que es imprescindible simplificar los
estilos de vida para así tener menos necesidades falsas y por lo tanto consumir
menos materia y energía del planeta.
Y por último, un lenguaje político que permita asumir que la sociedad moderna
globalizada somos los principales agentes responsables del futuro del planeta
Tierra.
“El desarrollo sustentable requiere la promoción de valores que estimule patrones de
consumo dentro de los límites de lo ecológicamente posible, a los cuales todos puedan
aspirar razonablemente” (Muñoz, 2003: 35), indicando con ello la prioridad de la
educación para fortalecer este nuevo paradigma.
2- Ejemplo de localidad (Experiencia de educación ambiental). Municipio de Ibagué
Fuente: Secretaría de Planeación de Ibagué. http://monumentosdeibague.es.tl/Limites.htm
Es así como en la ciudad de Ibagué, en iniciativa de ciudadanos preocupados por la
Calidad de ambiente y contaminación generada por la emisión de gases contaminantes
de vehículos, cocinas y fábricas, y los efectos que trae consigo la emisión de CO2, y el
calor excesivo en la ciudad, se ha generado la propuesta de implementación y
7. sensibilización, que involucra la siembra de árboles pequeños en los andenes de las
casas, con el fin de generar sombrío, frescura y de esta manera motivar a las personas
a caminar, y evitar el uso de vehículos de manera permanente. Generando así un
ambiente más sano a la ciudad, que involucre a la ciudadanía a contribuir al cambio,
mediante iniciativas de educación ambiental municipales, con la meta de llegar a todos
los espacios de la ciudad.
lV Conclusiones
- La Educación Ambiental debe trascender su significado convencional, porque no se
trata solamente de mantener, proteger y conservar la naturaleza para el desarrollo
sostenible, sino de construir unas nuevas condiciones culturales, un nuevo modo de vida
alternativo que permita vivenciar la expresión de lo sistémico y holístico de la relación
cultura-naturaleza, y de esta manera potenciar la calidad de vida individual y colectiva.
- En todos los niveles de formación de los diversos sistemas educativos, la Educación
Ambiental, debe ser una estructura dinamizadora transversal que se concreta en
currículos en pro de una formación integral y profundamente responsable y ética con la
naturaleza, situación que se viene desarrollando de forma heterogénea, es decir, en
algunos países se ha avanzado más y en otros menos, pero poco a poco esto se ha
venido generalizando y facilitado la acción de innovación e investigación de contenidos
ambientales que establezcan posibles soluciones a los innumerables problemas que
padece el planeta.
V Bibliografía:
Arte y Educación Ambiental. Revista Deciso. Centro de Cooperación Regional
para La Educación de Adultos en América Latina y El Caribe (CREFAL). México.
No.3. Enero- Abril de 2013. Link: http://tumbi.crefal.edu.mx/decisio/
Martínez Castillo, Róger (2010). La importancia de la educación ambiental ante la
problemática actual. En: Revista Electrónica Educare Vol. XIV. N° 1 Enero-junio
2010. Disponible en: http://www.redalyc.org/html/1941/194114419010/
Muñoz, Marta Rosa (2003). Educación Popular Ambiental para un Desarrollo
Sostenible. Tesis para optar el Grado Académico de Doctor en Ciencias. La
Habana: Universidad de la Habana, p. 35
8. Porras Arévalo, Julia (2011). Cuidar el planeta desde el ámbito educativo. Madrid:
Visión Libros.
Ríos Duque, J.G. (2015). Módulo Electiva de Educación Ambiental. Unidad 1.
Contexto internacional y nacional de la educación ambiental. Manizales: Facultad
de Ciencias Contables, Económicas y Administrativas. Universidad de Manizales,
CEDUM.
Ríos Duque, J.G. (2015). Módulo Electiva de Educación Ambiental. Unidad 2.
Lineamientos conceptuales básicos de educación ambiental. Manizales: Facultad
de Ciencias Contables, Económicas y Administrativas. Universidad de Manizales,
CEDUM.