SlideShare una empresa de Scribd logo
1 de 7
Prólogo
Motivado pornuestros respectivos ciclos vitales, nunca practiqué
con mi amigo Manuel Verdier Martín la espera nocturna a los jabalíes
-recechos y jabatos decimos en la alta serranía de Huelva. Nuestros
lazos de amistad se trabaron en la primera década de los años 2000
cuando yo daba por terminada mi convulsa etapa como cazador.
Ahora me invita a que le prologue sus relatos cinegéticos aunque
nunca le acompañara en aguardo alguno. Quizás sea consecuencia de
que un día no lejano le animé a que publicara sus vivencias de las
esperas del jabalí y me ofrecí a escribir el prólogo. La verdad es que
nuestra reciente amistad se ha cimentadosobre la sinceridad, la ayuda
mutua, el respeto a nuestras creencias, en aceptar que hay diferentes
maneras de interpretar el mundo y por tanto nuestras vidas, además
de compartir el jamón y el tomate rosado que son partes de las
esencias naturales que nos ofrece la Sierra.
Ambos nos hemos lamentado de no habernos conocido antes,
no sólo para hablar entonces de lo mundano o divino sino para
disfrutar juntos de esos trances tan maravillosos y mágicos que, a
veces, nos regala la diosa Diana o el arte de la Cinegética. Siempre le
digo a Manolo que ¡otro gallo le hubiera cantado si llega a frecuentar
conmigo las quebradas sierras de Aroche y Cortegana! Y él, que ha
leído mi libro autobiográfico Arochones, se ríe con esa ternura de niño
que tiene y se ve envuelto en mis correrías por los montes de La
Bájena y Maribarba u observa detenidamente la rara cabeza de un
arochón disecada por mi abuelo en 1880 mientras me habla de
muchos de los misterios que encierra la espera a los jabalíes, de sus
éxitos y batacazos.., así los dos nos vemos inmersos en diversos
relatos que van entremezclando los escenarios y a sus narradores para
parecernos que siempre fuimos compañeros en las noches alunadas,
porque sin conocernos los dos pateábamos algunas madrugadas los
mismos encinares e incluso recibíamos idéntica ayuda de gentes del
lugar, como fue el caso de Francisco Frías en tierras linderas de
Picureña y la Contienda.
Ahora ManuelVerdier le ha dado forma a esas vivencias suyas en
su libro Esperas para el recuerdo que nos ofrece y en el que le afloran
espontáneamente los sentimientos soterrados hacia los amigos
desaparecidos a quienes él nombra directamente sin necesidad de
presentación alguna pero mostrándose como un cazador intenso en
los numerosos parajes que frecuentó. Nos adelanta que el fin de su
obra es distraer al lector. ¡Y bien que lo consigue con sus veinte
relatos reales que participan de lo singular e inusual! Manuel Verdier
es cazador que ha bebido de las aguas de la Ética venatoria y nos
recuerda que la grandeza de la caza reside en que las piezas -en este
caso los jabalíes- deben tener la oportunidad de la supervivencia y el
cazadormostrarse siempre como un ser en continuos esfuerzos para
no caer en lo que llanamente él llama "tirador". Coincido con él en
que el primer esfuerzo de cualquier buen cazador tiene que ser la
memorización de los escenarios: conocer las encinas con las bellotas
más dulces, dónde escurren las primeras gotitas de miel, cuáles son
los refugios oportunos para que los jabalíes saquen viento al encinar
por donde después corretearán, dominar la noche para intentar -con
astucia y sabiduría- vencer a los vientos variables y caprichosos. Y el
escenario también conlleva inherente la belleza en tardes otoñales,
sentirse distante él de la playa para llamar amigo al campo La
Alameda que hace suyo y nombra como si fuese sus entrañables
Vicente o Lorenzo,o guiarse por las agujas de los rayos solares sobre
el poniente,o sorprenderse ante una cañada propia de los magos a la
que él guiña tal como propina la propia Naturaleza ante la que se
esfuerza por no aparecer como un intruso sino conformar con ella
una simbiosis perfecta para que cuando llegue el momento en que a
sus oídos lleguen las primeras jaras partidas no se le rompa también
su corazón aunque su cuerpo se haga una piedra. Sí, hacerse todo
oído para percatarse de la presencia cercana de la pieza cuando
raramente llegue ese silencio casi eterno que sigue al primer roce de
las pezuñas contra la hojarasca y que marca los pasos de un cochino
viejo y cuando,consumadoeltiro, dialogue consigo mismo para darse
respuesta a las terribles preguntas surgidas de pronto sobre la certeza,
la duda, la esperanza o el desánimo. Preguntas con respuestas muy
rápidas que sólo pararán, si llega el caso, tras el relajamiento final que
sigue con la cobra del animal tirado.
Manuel Verdier nos mete de lleno en sierras casi vírgenes para
que participemos de noches con pesadillas que son consecuencias de
no haber tenido la oportunidad de memorizar previamente el
escenario de caza y haberse sumergido en un mundo idealpara vencer
incluso el desánimo y el frío que le abate,o nos hace subir (sube) por
empinadas cuestas impulsado por un presagio de éxito que le hace
sentirse a gusto. Montes del Andévalo o la Sierra en donde Manolo
descarga sus emociones que le hacen jadear (que le provocan
constantes jadeos e inquietudes, noches enteras repletas de fatales
excesos de confianza, de la fuerza complementaria del amigo que
soporta su peso al atravesar la rivera, de un ritual constante al que él
califica como bendito. Y los estados emocionales que le provocan los
sufrimientos de la angustia y la desesperación están descritos
magníficamente. Con dos palabras resume el autor todos los hechos
narrativos y descriptivos que encierran sus relatos. Con esa capacidad
suya de la síntesis consigue estimular al lector y ayudarle a configurar
el carácter o el rostro de las personas con quienes comparte las
noches de aventuras. Abundan las descripciones paisajísticas que
evidencian su afán por la observación de la flora que le circunda en
unos montes embrujados y encantados en donde llegan a ocurrir
escenas casi surrealistas.
En el relato titulado Un aguardo agitado, Manuel Verdier se sitúa en
un medio muy distinto al de la Sierra; en este caso,excepcionalmente,
vive la noche a orillas del río Odiel en tierras más marinas que
serranas. A uno que nunca recechó en ningún paraje de la Costa -no
olvidemos que sólo fui recechero serrano-, le ha fascinado la inclusión
de tal correría nocturna plagada de sobresaltos; pero sobre todo la
acomodación del autor al medio en que ocurren los sucesos. Me
refiero a cómo la historia está contada con un extenso y preciso
vocabulario referido al campo semántico de lo marino: a la acción de
alcanzar el lugar idóneo la llama desembarcar; al lugar de la espera,
playita; además de referencias a la proa de un bote. Descripciones en
contrapunto con las que hace del monte San Cristóbal desde las
lejanas tierras de Zalamea, al que califica como azul estandarte.
Incluso el amigo que le acompaña con un faro en una recóndita y
minúscula playita, allá en tierras de Gibraleón adonde los pizarrales
del Andévalo van a morir, es retratado perfectamente: no con
adjetivos sino con verbos plenos de precisión que expresan la
inexperiencia y los miedos del acompañante.
Otras veces, como sucede en el relato Un gurumelo de ocho arrobas y
diez libras, Manuel Verdier refleja su atracción por esos hombres
singulares que dominan una sierra concreta, su maestría al buscar los
rastros de los cochinos, saber dónde están encamados, cuáles son sus
preferencias alimentarias o adivinar qué recorrido nocturno
acometerán o cuáles serán sus pasos de recogida en las altas horas de
la madrugadao en los primeros rayos del amanecer. Especial empatía
muestra hacia Domingo,el Mierro, que le puso en bandeja el cochino
de su vida.
Una singularidad propia de Esperas para el recuerdo reside en que el
autor intercala con destreza algunos avatares personales que no
pertenecen propiamente al hecho narrativo principal y que encajan
perfectamente con las escenas narradas, anécdotas que le sirven para
cortar de golpe la acción y que llegan a provocar en el lector un
interesante desconcierto ante dichas pausas que suelen contener
bastante belleza, como consigue en una de sus múltiples bajadas por
la extensa ribera del Chanza en busca de emociones que le llegarán
enseguida cuando busque el modo de contrarrestar las sombras de la
luna o cuando escuche los alcahuetes sonidos de los mirlos, el ulular
del cárabo o lleguen esos segundos eternos que preceden al lance
final. Pero para que éste resulte exitoso, Manuel Verdier antes ha
estudiado muy bien el comportamiento animal y como resultado
diseña estrategias basadas en las preferencias de los jabalíes para
restregarse si él está apostado cerca de una baña,¡verdaderas lecciones
de botánica y de un hombre reflexivo!, o intenta soluciones a esos
vientos desconcertantes que soplan a media tarde o busca de
antemano puntos referenciales para situar en el lugar exacto al
cochino oculto entre las sombras.
A un cazador se le debe calificar como tal no según se comporte
ante la noche triunfante sino ante los errores cometidos. Es verdad
que el aprendizaje viene dado con el error tras el error, pero hay que
ser consciente de que "muchas veces las circunstancias se conjuran en
contra" del cazador y que sólo la pasión por paladear los pocos
instantes que lleguen nos animarán en el proceso del aprendizaje.Esta
idea anteriorestá muy presente en sus relatos: vendrán las noches en
que se falla la pieza disparada o no se cobre de inmediato. Entonces,
la madrugadaserá agitada y nuestro cerebro adormecido será incapaz
de ensartarla escenas vividas, y en ese caos mental se atropellarán los
elementos que han formado parte del fatal instante. Mientras no
ocurre esa desesperación, Manuel Verdier se describe en posición de
agazapado y convertido en parte del rocho que acaba de subir,
mirando los matorrales que cobran esa vida especial que otorga la
oscuridad de la noche y teniendo a la persistencia como escudo ante
sus flaquezas.
Interesante nos resulta la especial espera a los jabalíes que realiza
en tierras valencianas, sobre todo la fijación que hace del habla
referida al medio geográfico en que se efectúa la espera que resultará
muy excitante. También nos pone en contacto con gentes de las
tierras portuguesa del Algarve y Alentejo de las que el autor resalta su
espíritu afable y comedido. Noches de lua cheia en tierras lusitanas
para saborear un cobro de artesanía por un humano con viento de
can. Escenas que a quien haya practicado las esperas le recordarán
momentos parecidos cuando una res herida en la barriga tome la
cuesta arriba y a varias decenas de metros deje enganchadas partes de
sus tripas para morir con fijeza en el lugar donde haya iniciado la
bajada.
Algunos de sus relatos parecen pintados con una paleta de
múltiples colores: rojo, malva, turquesa, blanco, marrón oscuro..., que
hablan de los tenues cirros, el sangrante sol o ponen el color
adecuado a cuanto pisa o ve a su alrededor por tierras de Lepe y
Villablanca; pero esa sensibilidad no la pierde el autorcuando el vuelo
repentino de una perdiz le presagia que vivirá un momento dulce o
cuando es consciente de la atmósfera olorosa que nos envuelve y
pone en aviso al jabalí adulto y nos parece que se esconde cuando su
bulto desaparece en un tric-trac de secuencias rapidísimas. Otros
relatos encierran enseñanzas que, aunque sí se corresponden con el
primitivo hombre cazador-recolector, nada tienen que ver con el
hecho de las esperas a los jabalíes; sin embargo encajan perfectamente
con la narración y consiguen que nos sintamos sensibles ante los
prehistóricos dibujos de la cueva de La Araña en tierras de Bicorp.
Esa intercalación de una escena de la recolección de la miel dignifica
la historia de unos jabalíes que se comportan como sifuesen de granja
porque nunca antes habían sido fogueados. También nos llama la
atención la historia vivida en El Jarrama: lo de menos son sus tres
reses cobradas en una noche, lo sorpresivo es la intuición mostrada
por Manuel Verdierpreviendo el comportamiento poco amistoso de
otro cazador contiguo a él quien, por su poca destreza, falló cuatro
reses y no supo rumiar su derrota. Sus reflexiones evidencian que la
caza lleva implícita los distintos comportamientos del ser humano y
que es mucho más que el simple triángulo cazador-pieza-disparo.
Referencias mítica a las sierras de Aroche, encaramado en encinas
soltizas sabiendo que el comportamiento de los jabalíes es
imprevisible y que no existen para él las conductas invariables, en
momentos en que el habla interior manifiesta la grandeza de las
esperas, solo o acompañado de su amigo Manolo González
saboreandoel momentodulce de unas escenas a la vieja usanza en El
Tintillo. Entrañable resulta la noche vivida con su hija Clara en
Montecillo: ¡Todo es mío, soy dueño del tiempo y el lugar!, exclama
Manolo, porque esa debe ser una de las pretensiones del buen
cazador, abarcar todo lo que sus sentidos perciben, acercar las cosas
atractivas hacia él y pausar el tiempo.
Añade unos apuntes finales, como epílogo a estas semblanzas
suyas de cuarenta y cinco años de esperas a los jabalíes, con historias
casi increíbles sucedidas a amigos íntimos. La más atractiva de todas
se refiere a Canito, un hombre al que nos lo presenta con su dejo de
habla valverdeña y que sufrió en su cuerpo las graves consecuencias
de un mal llamado cazador que osó adentrarse en los secretos de la
espera a los jabalíes sin haber alcanzado ser siquiera un mediocre
tirador.
No se olvida el autor de aclararnos muchos de los términos
lingüísticos que utiliza a lo largo de los capítulos narrados, que
resultan enriquecedores sobre todo a aquellos serranos que
únicamente hemos practicado las esperas a los jabalíes en parte de la
Sierra de Huelva, especialmente en los montes de Aroche, Cortegana,
Rosal de la Frontera, Almonaster, La Nava, Cumbres Mayores y
Cumbre de San Bartolomé.Poca diversidad podemos aportar a estas
referencias del habla pues, salvo algunas excepciones, es muy parecida
en aquellos términos municipales. En cambio, Manuel Verdier se
muestra muy observador y con mucho acierto anota características
propias de cómo se expresan los hombres del Andévalo, la Costa, los
cazadores valencianos y, sobre todo, se siente atraído por el lenguaje
cinegético que usan los portugueses del Alentejo, y él con mucho
esmero nos acerca las palabras y expresiones foráneas que constituyen
parte importante de la forma de expresión de sus relatos.
Esperas para el recuerdo es un libro de vivencias de caza que tienen
mucha fuerza expresiva y que es rico en la diversidad de contenidos y
escenarios en los que Manuel Verdier ha pasado muchas horas,
porque para él la espera a los jabalíes ha sido parte sustancial de su
vida, que las ha necesitado para vivir múltiples emociones, serenarse,
sensibilizarse, hacerse reflexiones vitales y al mismo tiempo fortificar
sus actitudes ante el mundo o desarrollar sus propias aptitudes. La
lectura de este libro llevará a muchos cazadores a que ellos mismos
reescriban muchas de las historias narradas, que las hagan suyas y
alcancen ese deleite que provoca lo atractivo y a cuyo punto
culminante de placer llamamos clímax, orgasmo o éxtasis tal como
nombraban los místicos. Si los lectores de este libro se sienten felices
mientras leen los veinte relatos, entonces esos instantes que a Manuel
Verdier le parecieron eternos se hará realidad y será entonces cuando
de verdad habrá conseguido pausar el imparable caminar del tiempo.
José Luis Lobo Moriche
Cortegana,otoñode 2016

Más contenido relacionado

La actualidad más candente

La actualidad más candente (20)

Todos2
Todos2Todos2
Todos2
 
Todos
TodosTodos
Todos
 
Rojas, manuel lanchas en la bahía
Rojas, manuel   lanchas en la bahíaRojas, manuel   lanchas en la bahía
Rojas, manuel lanchas en la bahía
 
Análisis literario, "El principito"
Análisis literario, "El principito"Análisis literario, "El principito"
Análisis literario, "El principito"
 
Manuel rojas
Manuel rojasManuel rojas
Manuel rojas
 
Biografia de Manuel Rojas
Biografia de Manuel RojasBiografia de Manuel Rojas
Biografia de Manuel Rojas
 
En tinta julio agosto
En tinta julio agostoEn tinta julio agosto
En tinta julio agosto
 
Metáfora ahijados 2011
Metáfora ahijados 2011Metáfora ahijados 2011
Metáfora ahijados 2011
 
RSA5 - Sabor Artístico - La Revista - Nº 5 - Diciembre 2008
RSA5 - Sabor Artístico - La Revista - Nº 5 - Diciembre 2008RSA5 - Sabor Artístico - La Revista - Nº 5 - Diciembre 2008
RSA5 - Sabor Artístico - La Revista - Nº 5 - Diciembre 2008
 
Con quién cabalgas don quijote
Con quién cabalgas don quijoteCon quién cabalgas don quijote
Con quién cabalgas don quijote
 
Primeras paginas de "Peligro oscuro"
Primeras paginas de "Peligro oscuro"Primeras paginas de "Peligro oscuro"
Primeras paginas de "Peligro oscuro"
 
El norte
El norteEl norte
El norte
 
Guia fantasmas de dia 2
Guia fantasmas de dia 2Guia fantasmas de dia 2
Guia fantasmas de dia 2
 
Guia fantasmas de día 3
Guia fantasmas de día 3Guia fantasmas de día 3
Guia fantasmas de día 3
 
Guia fantasmas de dia 1
Guia fantasmas de dia 1Guia fantasmas de dia 1
Guia fantasmas de dia 1
 
Géneros literarios
Géneros literariosGéneros literarios
Géneros literarios
 
Dossier teatro-el-sueno-de-una-noche-de-verano-de-w-shakespeare
Dossier teatro-el-sueno-de-una-noche-de-verano-de-w-shakespeareDossier teatro-el-sueno-de-una-noche-de-verano-de-w-shakespeare
Dossier teatro-el-sueno-de-una-noche-de-verano-de-w-shakespeare
 
Revista-Homenaje a Mario Benedetti - Sabor Artistico
Revista-Homenaje a Mario Benedetti - Sabor ArtisticoRevista-Homenaje a Mario Benedetti - Sabor Artistico
Revista-Homenaje a Mario Benedetti - Sabor Artistico
 
Compilación
CompilaciónCompilación
Compilación
 
Lanchas en la bahia
Lanchas en la bahiaLanchas en la bahia
Lanchas en la bahia
 

Similar a Prólogo (20)

Arochones
ArochonesArochones
Arochones
 
Arochones
ArochonesArochones
Arochones
 
El género narrativo
El género narrativoEl género narrativo
El género narrativo
 
Viento a Favor
Viento a FavorViento a Favor
Viento a Favor
 
Lecturas para segundo de eso
Lecturas para segundo de esoLecturas para segundo de eso
Lecturas para segundo de eso
 
Amparo Dávila. Cuentos
Amparo Dávila. CuentosAmparo Dávila. Cuentos
Amparo Dávila. Cuentos
 
La Rosa por Defecto nº3 (octubre 2015)
La Rosa por Defecto nº3 (octubre 2015)La Rosa por Defecto nº3 (octubre 2015)
La Rosa por Defecto nº3 (octubre 2015)
 
Textos recreativos
Textos recreativosTextos recreativos
Textos recreativos
 
La secreta geometría de una hoja que cae
La secreta geometría de una hoja que caeLa secreta geometría de una hoja que cae
La secreta geometría de una hoja que cae
 
Copia de romanticismo
Copia de romanticismoCopia de romanticismo
Copia de romanticismo
 
Textos Recreativos
Textos RecreativosTextos Recreativos
Textos Recreativos
 
Clase español (pedagogia, trabajo final)
Clase español (pedagogia, trabajo final)Clase español (pedagogia, trabajo final)
Clase español (pedagogia, trabajo final)
 
La carta
La cartaLa carta
La carta
 
Textos recreativos.
Textos recreativos.Textos recreativos.
Textos recreativos.
 
Textos recreativos.
Textos recreativos.Textos recreativos.
Textos recreativos.
 
Palabras
PalabrasPalabras
Palabras
 
Palabras
PalabrasPalabras
Palabras
 
Palabras, blog
Palabras, blogPalabras, blog
Palabras, blog
 
Palabras, blog
Palabras, blogPalabras, blog
Palabras, blog
 
Palabras, blog
Palabras, blogPalabras, blog
Palabras, blog
 

Más de José Luis Lobo Moriche (20)

Por las márgenes de la rivera Alcalaboza.docx
Por las márgenes de la rivera Alcalaboza.docxPor las márgenes de la rivera Alcalaboza.docx
Por las márgenes de la rivera Alcalaboza.docx
 
La vida es un cuento.pdf
La vida es un cuento.pdfLa vida es un cuento.pdf
La vida es un cuento.pdf
 
La fiebre del grafito.pdf
La fiebre del grafito.pdfLa fiebre del grafito.pdf
La fiebre del grafito.pdf
 
La fiebre del grafito.pdf
La fiebre del grafito.pdfLa fiebre del grafito.pdf
La fiebre del grafito.pdf
 
La fiebre del grafito.pdf
La fiebre del grafito.pdfLa fiebre del grafito.pdf
La fiebre del grafito.pdf
 
Palabras, blog
Palabras, blogPalabras, blog
Palabras, blog
 
Palabras, blog
Palabras, blogPalabras, blog
Palabras, blog
 
Palabras, blog
Palabras, blogPalabras, blog
Palabras, blog
 
Simplezas
SimplezasSimplezas
Simplezas
 
Orquesta de casino
Orquesta de casinoOrquesta de casino
Orquesta de casino
 
Orquesta de casino
Orquesta de casinoOrquesta de casino
Orquesta de casino
 
Orquesta de casino
Orquesta de casinoOrquesta de casino
Orquesta de casino
 
Orquesta de casino
Orquesta de casinoOrquesta de casino
Orquesta de casino
 
Quejigos de Valconejo
Quejigos de ValconejoQuejigos de Valconejo
Quejigos de Valconejo
 
La higuera del castañar
La higuera del castañarLa higuera del castañar
La higuera del castañar
 
Impresiones
ImpresionesImpresiones
Impresiones
 
De contrabando en la Sierra
De contrabando en la SierraDe contrabando en la Sierra
De contrabando en la Sierra
 
Chiquitin y sus cinco amigos
Chiquitin y sus cinco amigosChiquitin y sus cinco amigos
Chiquitin y sus cinco amigos
 
Chiquitin lectura
Chiquitin lecturaChiquitin lectura
Chiquitin lectura
 
Hilvanando suenos
Hilvanando suenosHilvanando suenos
Hilvanando suenos
 

Último

Historia y técnica del collage en el arte
Historia y técnica del collage en el arteHistoria y técnica del collage en el arte
Historia y técnica del collage en el arteRaquel Martín Contreras
 
2024 - Expo Visibles - Visibilidad Lesbica.pdf
2024 - Expo Visibles - Visibilidad Lesbica.pdf2024 - Expo Visibles - Visibilidad Lesbica.pdf
2024 - Expo Visibles - Visibilidad Lesbica.pdfBaker Publishing Company
 
La triple Naturaleza del Hombre estudio.
La triple Naturaleza del Hombre estudio.La triple Naturaleza del Hombre estudio.
La triple Naturaleza del Hombre estudio.amayarogel
 
SEXTO SEGUNDO PERIODO EMPRENDIMIENTO.pptx
SEXTO SEGUNDO PERIODO EMPRENDIMIENTO.pptxSEXTO SEGUNDO PERIODO EMPRENDIMIENTO.pptx
SEXTO SEGUNDO PERIODO EMPRENDIMIENTO.pptxYadi Campos
 
proyecto de mayo inicial 5 añitos aprender es bueno para tu niño
proyecto de mayo inicial 5 añitos aprender es bueno para tu niñoproyecto de mayo inicial 5 añitos aprender es bueno para tu niño
proyecto de mayo inicial 5 añitos aprender es bueno para tu niñotapirjackluis
 
LABERINTOS DE DISCIPLINAS DEL PENTATLÓN OLÍMPICO MODERNO. Por JAVIER SOLIS NO...
LABERINTOS DE DISCIPLINAS DEL PENTATLÓN OLÍMPICO MODERNO. Por JAVIER SOLIS NO...LABERINTOS DE DISCIPLINAS DEL PENTATLÓN OLÍMPICO MODERNO. Por JAVIER SOLIS NO...
LABERINTOS DE DISCIPLINAS DEL PENTATLÓN OLÍMPICO MODERNO. Por JAVIER SOLIS NO...JAVIER SOLIS NOYOLA
 
Caja de herramientas de inteligencia artificial para la academia y la investi...
Caja de herramientas de inteligencia artificial para la academia y la investi...Caja de herramientas de inteligencia artificial para la academia y la investi...
Caja de herramientas de inteligencia artificial para la academia y la investi...Lourdes Feria
 
Ley 21.545 - Circular Nº 586.pdf circular
Ley 21.545 - Circular Nº 586.pdf circularLey 21.545 - Circular Nº 586.pdf circular
Ley 21.545 - Circular Nº 586.pdf circularMooPandrea
 
ACUERDO MINISTERIAL 078-ORGANISMOS ESCOLARES..pptx
ACUERDO MINISTERIAL 078-ORGANISMOS ESCOLARES..pptxACUERDO MINISTERIAL 078-ORGANISMOS ESCOLARES..pptx
ACUERDO MINISTERIAL 078-ORGANISMOS ESCOLARES..pptxzulyvero07
 
Curso = Metodos Tecnicas y Modelos de Enseñanza.pdf
Curso = Metodos Tecnicas y Modelos de Enseñanza.pdfCurso = Metodos Tecnicas y Modelos de Enseñanza.pdf
Curso = Metodos Tecnicas y Modelos de Enseñanza.pdfFrancisco158360
 
TEMA 13 ESPAÑA EN DEMOCRACIA:DISTINTOS GOBIERNOS
TEMA 13 ESPAÑA EN DEMOCRACIA:DISTINTOS GOBIERNOSTEMA 13 ESPAÑA EN DEMOCRACIA:DISTINTOS GOBIERNOS
TEMA 13 ESPAÑA EN DEMOCRACIA:DISTINTOS GOBIERNOSjlorentemartos
 
CALENDARIZACION DE MAYO / RESPONSABILIDAD
CALENDARIZACION DE MAYO / RESPONSABILIDADCALENDARIZACION DE MAYO / RESPONSABILIDAD
CALENDARIZACION DE MAYO / RESPONSABILIDADauxsoporte
 
PLAN DE REFUERZO ESCOLAR primaria (1).docx
PLAN DE REFUERZO ESCOLAR primaria (1).docxPLAN DE REFUERZO ESCOLAR primaria (1).docx
PLAN DE REFUERZO ESCOLAR primaria (1).docxlupitavic
 
MAYO 1 PROYECTO día de la madre el amor más grande
MAYO 1 PROYECTO día de la madre el amor más grandeMAYO 1 PROYECTO día de la madre el amor más grande
MAYO 1 PROYECTO día de la madre el amor más grandeMarjorie Burga
 
Planificacion Anual 2do Grado Educacion Primaria 2024 Ccesa007.pdf
Planificacion Anual 2do Grado Educacion Primaria   2024   Ccesa007.pdfPlanificacion Anual 2do Grado Educacion Primaria   2024   Ccesa007.pdf
Planificacion Anual 2do Grado Educacion Primaria 2024 Ccesa007.pdfDemetrio Ccesa Rayme
 
Registro Auxiliar - Primaria 2024 (1).pptx
Registro Auxiliar - Primaria  2024 (1).pptxRegistro Auxiliar - Primaria  2024 (1).pptx
Registro Auxiliar - Primaria 2024 (1).pptxFelicitasAsuncionDia
 
Qué es la Inteligencia artificial generativa
Qué es la Inteligencia artificial generativaQué es la Inteligencia artificial generativa
Qué es la Inteligencia artificial generativaDecaunlz
 
ACERTIJO DE POSICIÓN DE CORREDORES EN LA OLIMPIADA. Por JAVIER SOLIS NOYOLA
ACERTIJO DE POSICIÓN DE CORREDORES EN LA OLIMPIADA. Por JAVIER SOLIS NOYOLAACERTIJO DE POSICIÓN DE CORREDORES EN LA OLIMPIADA. Por JAVIER SOLIS NOYOLA
ACERTIJO DE POSICIÓN DE CORREDORES EN LA OLIMPIADA. Por JAVIER SOLIS NOYOLAJAVIER SOLIS NOYOLA
 

Último (20)

Historia y técnica del collage en el arte
Historia y técnica del collage en el arteHistoria y técnica del collage en el arte
Historia y técnica del collage en el arte
 
2024 - Expo Visibles - Visibilidad Lesbica.pdf
2024 - Expo Visibles - Visibilidad Lesbica.pdf2024 - Expo Visibles - Visibilidad Lesbica.pdf
2024 - Expo Visibles - Visibilidad Lesbica.pdf
 
La triple Naturaleza del Hombre estudio.
La triple Naturaleza del Hombre estudio.La triple Naturaleza del Hombre estudio.
La triple Naturaleza del Hombre estudio.
 
SEXTO SEGUNDO PERIODO EMPRENDIMIENTO.pptx
SEXTO SEGUNDO PERIODO EMPRENDIMIENTO.pptxSEXTO SEGUNDO PERIODO EMPRENDIMIENTO.pptx
SEXTO SEGUNDO PERIODO EMPRENDIMIENTO.pptx
 
proyecto de mayo inicial 5 añitos aprender es bueno para tu niño
proyecto de mayo inicial 5 añitos aprender es bueno para tu niñoproyecto de mayo inicial 5 añitos aprender es bueno para tu niño
proyecto de mayo inicial 5 añitos aprender es bueno para tu niño
 
LABERINTOS DE DISCIPLINAS DEL PENTATLÓN OLÍMPICO MODERNO. Por JAVIER SOLIS NO...
LABERINTOS DE DISCIPLINAS DEL PENTATLÓN OLÍMPICO MODERNO. Por JAVIER SOLIS NO...LABERINTOS DE DISCIPLINAS DEL PENTATLÓN OLÍMPICO MODERNO. Por JAVIER SOLIS NO...
LABERINTOS DE DISCIPLINAS DEL PENTATLÓN OLÍMPICO MODERNO. Por JAVIER SOLIS NO...
 
Caja de herramientas de inteligencia artificial para la academia y la investi...
Caja de herramientas de inteligencia artificial para la academia y la investi...Caja de herramientas de inteligencia artificial para la academia y la investi...
Caja de herramientas de inteligencia artificial para la academia y la investi...
 
Ley 21.545 - Circular Nº 586.pdf circular
Ley 21.545 - Circular Nº 586.pdf circularLey 21.545 - Circular Nº 586.pdf circular
Ley 21.545 - Circular Nº 586.pdf circular
 
ACUERDO MINISTERIAL 078-ORGANISMOS ESCOLARES..pptx
ACUERDO MINISTERIAL 078-ORGANISMOS ESCOLARES..pptxACUERDO MINISTERIAL 078-ORGANISMOS ESCOLARES..pptx
ACUERDO MINISTERIAL 078-ORGANISMOS ESCOLARES..pptx
 
Curso = Metodos Tecnicas y Modelos de Enseñanza.pdf
Curso = Metodos Tecnicas y Modelos de Enseñanza.pdfCurso = Metodos Tecnicas y Modelos de Enseñanza.pdf
Curso = Metodos Tecnicas y Modelos de Enseñanza.pdf
 
TEMA 13 ESPAÑA EN DEMOCRACIA:DISTINTOS GOBIERNOS
TEMA 13 ESPAÑA EN DEMOCRACIA:DISTINTOS GOBIERNOSTEMA 13 ESPAÑA EN DEMOCRACIA:DISTINTOS GOBIERNOS
TEMA 13 ESPAÑA EN DEMOCRACIA:DISTINTOS GOBIERNOS
 
CALENDARIZACION DE MAYO / RESPONSABILIDAD
CALENDARIZACION DE MAYO / RESPONSABILIDADCALENDARIZACION DE MAYO / RESPONSABILIDAD
CALENDARIZACION DE MAYO / RESPONSABILIDAD
 
Sesión de clase: Fe contra todo pronóstico
Sesión de clase: Fe contra todo pronósticoSesión de clase: Fe contra todo pronóstico
Sesión de clase: Fe contra todo pronóstico
 
PLAN DE REFUERZO ESCOLAR primaria (1).docx
PLAN DE REFUERZO ESCOLAR primaria (1).docxPLAN DE REFUERZO ESCOLAR primaria (1).docx
PLAN DE REFUERZO ESCOLAR primaria (1).docx
 
Presentacion Metodología de Enseñanza Multigrado
Presentacion Metodología de Enseñanza MultigradoPresentacion Metodología de Enseñanza Multigrado
Presentacion Metodología de Enseñanza Multigrado
 
MAYO 1 PROYECTO día de la madre el amor más grande
MAYO 1 PROYECTO día de la madre el amor más grandeMAYO 1 PROYECTO día de la madre el amor más grande
MAYO 1 PROYECTO día de la madre el amor más grande
 
Planificacion Anual 2do Grado Educacion Primaria 2024 Ccesa007.pdf
Planificacion Anual 2do Grado Educacion Primaria   2024   Ccesa007.pdfPlanificacion Anual 2do Grado Educacion Primaria   2024   Ccesa007.pdf
Planificacion Anual 2do Grado Educacion Primaria 2024 Ccesa007.pdf
 
Registro Auxiliar - Primaria 2024 (1).pptx
Registro Auxiliar - Primaria  2024 (1).pptxRegistro Auxiliar - Primaria  2024 (1).pptx
Registro Auxiliar - Primaria 2024 (1).pptx
 
Qué es la Inteligencia artificial generativa
Qué es la Inteligencia artificial generativaQué es la Inteligencia artificial generativa
Qué es la Inteligencia artificial generativa
 
ACERTIJO DE POSICIÓN DE CORREDORES EN LA OLIMPIADA. Por JAVIER SOLIS NOYOLA
ACERTIJO DE POSICIÓN DE CORREDORES EN LA OLIMPIADA. Por JAVIER SOLIS NOYOLAACERTIJO DE POSICIÓN DE CORREDORES EN LA OLIMPIADA. Por JAVIER SOLIS NOYOLA
ACERTIJO DE POSICIÓN DE CORREDORES EN LA OLIMPIADA. Por JAVIER SOLIS NOYOLA
 

Prólogo

  • 1. Prólogo Motivado pornuestros respectivos ciclos vitales, nunca practiqué con mi amigo Manuel Verdier Martín la espera nocturna a los jabalíes -recechos y jabatos decimos en la alta serranía de Huelva. Nuestros lazos de amistad se trabaron en la primera década de los años 2000 cuando yo daba por terminada mi convulsa etapa como cazador. Ahora me invita a que le prologue sus relatos cinegéticos aunque nunca le acompañara en aguardo alguno. Quizás sea consecuencia de que un día no lejano le animé a que publicara sus vivencias de las esperas del jabalí y me ofrecí a escribir el prólogo. La verdad es que nuestra reciente amistad se ha cimentadosobre la sinceridad, la ayuda mutua, el respeto a nuestras creencias, en aceptar que hay diferentes maneras de interpretar el mundo y por tanto nuestras vidas, además de compartir el jamón y el tomate rosado que son partes de las esencias naturales que nos ofrece la Sierra. Ambos nos hemos lamentado de no habernos conocido antes, no sólo para hablar entonces de lo mundano o divino sino para disfrutar juntos de esos trances tan maravillosos y mágicos que, a veces, nos regala la diosa Diana o el arte de la Cinegética. Siempre le digo a Manolo que ¡otro gallo le hubiera cantado si llega a frecuentar conmigo las quebradas sierras de Aroche y Cortegana! Y él, que ha leído mi libro autobiográfico Arochones, se ríe con esa ternura de niño que tiene y se ve envuelto en mis correrías por los montes de La Bájena y Maribarba u observa detenidamente la rara cabeza de un arochón disecada por mi abuelo en 1880 mientras me habla de muchos de los misterios que encierra la espera a los jabalíes, de sus éxitos y batacazos.., así los dos nos vemos inmersos en diversos relatos que van entremezclando los escenarios y a sus narradores para parecernos que siempre fuimos compañeros en las noches alunadas, porque sin conocernos los dos pateábamos algunas madrugadas los mismos encinares e incluso recibíamos idéntica ayuda de gentes del lugar, como fue el caso de Francisco Frías en tierras linderas de Picureña y la Contienda.
  • 2. Ahora ManuelVerdier le ha dado forma a esas vivencias suyas en su libro Esperas para el recuerdo que nos ofrece y en el que le afloran espontáneamente los sentimientos soterrados hacia los amigos desaparecidos a quienes él nombra directamente sin necesidad de presentación alguna pero mostrándose como un cazador intenso en los numerosos parajes que frecuentó. Nos adelanta que el fin de su obra es distraer al lector. ¡Y bien que lo consigue con sus veinte relatos reales que participan de lo singular e inusual! Manuel Verdier es cazador que ha bebido de las aguas de la Ética venatoria y nos recuerda que la grandeza de la caza reside en que las piezas -en este caso los jabalíes- deben tener la oportunidad de la supervivencia y el cazadormostrarse siempre como un ser en continuos esfuerzos para no caer en lo que llanamente él llama "tirador". Coincido con él en que el primer esfuerzo de cualquier buen cazador tiene que ser la memorización de los escenarios: conocer las encinas con las bellotas más dulces, dónde escurren las primeras gotitas de miel, cuáles son los refugios oportunos para que los jabalíes saquen viento al encinar por donde después corretearán, dominar la noche para intentar -con astucia y sabiduría- vencer a los vientos variables y caprichosos. Y el escenario también conlleva inherente la belleza en tardes otoñales, sentirse distante él de la playa para llamar amigo al campo La Alameda que hace suyo y nombra como si fuese sus entrañables Vicente o Lorenzo,o guiarse por las agujas de los rayos solares sobre el poniente,o sorprenderse ante una cañada propia de los magos a la que él guiña tal como propina la propia Naturaleza ante la que se esfuerza por no aparecer como un intruso sino conformar con ella una simbiosis perfecta para que cuando llegue el momento en que a sus oídos lleguen las primeras jaras partidas no se le rompa también su corazón aunque su cuerpo se haga una piedra. Sí, hacerse todo oído para percatarse de la presencia cercana de la pieza cuando raramente llegue ese silencio casi eterno que sigue al primer roce de las pezuñas contra la hojarasca y que marca los pasos de un cochino viejo y cuando,consumadoeltiro, dialogue consigo mismo para darse respuesta a las terribles preguntas surgidas de pronto sobre la certeza, la duda, la esperanza o el desánimo. Preguntas con respuestas muy rápidas que sólo pararán, si llega el caso, tras el relajamiento final que sigue con la cobra del animal tirado.
  • 3. Manuel Verdier nos mete de lleno en sierras casi vírgenes para que participemos de noches con pesadillas que son consecuencias de no haber tenido la oportunidad de memorizar previamente el escenario de caza y haberse sumergido en un mundo idealpara vencer incluso el desánimo y el frío que le abate,o nos hace subir (sube) por empinadas cuestas impulsado por un presagio de éxito que le hace sentirse a gusto. Montes del Andévalo o la Sierra en donde Manolo descarga sus emociones que le hacen jadear (que le provocan constantes jadeos e inquietudes, noches enteras repletas de fatales excesos de confianza, de la fuerza complementaria del amigo que soporta su peso al atravesar la rivera, de un ritual constante al que él califica como bendito. Y los estados emocionales que le provocan los sufrimientos de la angustia y la desesperación están descritos magníficamente. Con dos palabras resume el autor todos los hechos narrativos y descriptivos que encierran sus relatos. Con esa capacidad suya de la síntesis consigue estimular al lector y ayudarle a configurar el carácter o el rostro de las personas con quienes comparte las noches de aventuras. Abundan las descripciones paisajísticas que evidencian su afán por la observación de la flora que le circunda en unos montes embrujados y encantados en donde llegan a ocurrir escenas casi surrealistas. En el relato titulado Un aguardo agitado, Manuel Verdier se sitúa en un medio muy distinto al de la Sierra; en este caso,excepcionalmente, vive la noche a orillas del río Odiel en tierras más marinas que serranas. A uno que nunca recechó en ningún paraje de la Costa -no olvidemos que sólo fui recechero serrano-, le ha fascinado la inclusión de tal correría nocturna plagada de sobresaltos; pero sobre todo la acomodación del autor al medio en que ocurren los sucesos. Me refiero a cómo la historia está contada con un extenso y preciso vocabulario referido al campo semántico de lo marino: a la acción de alcanzar el lugar idóneo la llama desembarcar; al lugar de la espera, playita; además de referencias a la proa de un bote. Descripciones en contrapunto con las que hace del monte San Cristóbal desde las lejanas tierras de Zalamea, al que califica como azul estandarte. Incluso el amigo que le acompaña con un faro en una recóndita y minúscula playita, allá en tierras de Gibraleón adonde los pizarrales del Andévalo van a morir, es retratado perfectamente: no con
  • 4. adjetivos sino con verbos plenos de precisión que expresan la inexperiencia y los miedos del acompañante. Otras veces, como sucede en el relato Un gurumelo de ocho arrobas y diez libras, Manuel Verdier refleja su atracción por esos hombres singulares que dominan una sierra concreta, su maestría al buscar los rastros de los cochinos, saber dónde están encamados, cuáles son sus preferencias alimentarias o adivinar qué recorrido nocturno acometerán o cuáles serán sus pasos de recogida en las altas horas de la madrugadao en los primeros rayos del amanecer. Especial empatía muestra hacia Domingo,el Mierro, que le puso en bandeja el cochino de su vida. Una singularidad propia de Esperas para el recuerdo reside en que el autor intercala con destreza algunos avatares personales que no pertenecen propiamente al hecho narrativo principal y que encajan perfectamente con las escenas narradas, anécdotas que le sirven para cortar de golpe la acción y que llegan a provocar en el lector un interesante desconcierto ante dichas pausas que suelen contener bastante belleza, como consigue en una de sus múltiples bajadas por la extensa ribera del Chanza en busca de emociones que le llegarán enseguida cuando busque el modo de contrarrestar las sombras de la luna o cuando escuche los alcahuetes sonidos de los mirlos, el ulular del cárabo o lleguen esos segundos eternos que preceden al lance final. Pero para que éste resulte exitoso, Manuel Verdier antes ha estudiado muy bien el comportamiento animal y como resultado diseña estrategias basadas en las preferencias de los jabalíes para restregarse si él está apostado cerca de una baña,¡verdaderas lecciones de botánica y de un hombre reflexivo!, o intenta soluciones a esos vientos desconcertantes que soplan a media tarde o busca de antemano puntos referenciales para situar en el lugar exacto al cochino oculto entre las sombras. A un cazador se le debe calificar como tal no según se comporte ante la noche triunfante sino ante los errores cometidos. Es verdad que el aprendizaje viene dado con el error tras el error, pero hay que ser consciente de que "muchas veces las circunstancias se conjuran en contra" del cazador y que sólo la pasión por paladear los pocos instantes que lleguen nos animarán en el proceso del aprendizaje.Esta
  • 5. idea anteriorestá muy presente en sus relatos: vendrán las noches en que se falla la pieza disparada o no se cobre de inmediato. Entonces, la madrugadaserá agitada y nuestro cerebro adormecido será incapaz de ensartarla escenas vividas, y en ese caos mental se atropellarán los elementos que han formado parte del fatal instante. Mientras no ocurre esa desesperación, Manuel Verdier se describe en posición de agazapado y convertido en parte del rocho que acaba de subir, mirando los matorrales que cobran esa vida especial que otorga la oscuridad de la noche y teniendo a la persistencia como escudo ante sus flaquezas. Interesante nos resulta la especial espera a los jabalíes que realiza en tierras valencianas, sobre todo la fijación que hace del habla referida al medio geográfico en que se efectúa la espera que resultará muy excitante. También nos pone en contacto con gentes de las tierras portuguesa del Algarve y Alentejo de las que el autor resalta su espíritu afable y comedido. Noches de lua cheia en tierras lusitanas para saborear un cobro de artesanía por un humano con viento de can. Escenas que a quien haya practicado las esperas le recordarán momentos parecidos cuando una res herida en la barriga tome la cuesta arriba y a varias decenas de metros deje enganchadas partes de sus tripas para morir con fijeza en el lugar donde haya iniciado la bajada. Algunos de sus relatos parecen pintados con una paleta de múltiples colores: rojo, malva, turquesa, blanco, marrón oscuro..., que hablan de los tenues cirros, el sangrante sol o ponen el color adecuado a cuanto pisa o ve a su alrededor por tierras de Lepe y Villablanca; pero esa sensibilidad no la pierde el autorcuando el vuelo repentino de una perdiz le presagia que vivirá un momento dulce o cuando es consciente de la atmósfera olorosa que nos envuelve y pone en aviso al jabalí adulto y nos parece que se esconde cuando su bulto desaparece en un tric-trac de secuencias rapidísimas. Otros relatos encierran enseñanzas que, aunque sí se corresponden con el primitivo hombre cazador-recolector, nada tienen que ver con el hecho de las esperas a los jabalíes; sin embargo encajan perfectamente con la narración y consiguen que nos sintamos sensibles ante los prehistóricos dibujos de la cueva de La Araña en tierras de Bicorp. Esa intercalación de una escena de la recolección de la miel dignifica
  • 6. la historia de unos jabalíes que se comportan como sifuesen de granja porque nunca antes habían sido fogueados. También nos llama la atención la historia vivida en El Jarrama: lo de menos son sus tres reses cobradas en una noche, lo sorpresivo es la intuición mostrada por Manuel Verdierpreviendo el comportamiento poco amistoso de otro cazador contiguo a él quien, por su poca destreza, falló cuatro reses y no supo rumiar su derrota. Sus reflexiones evidencian que la caza lleva implícita los distintos comportamientos del ser humano y que es mucho más que el simple triángulo cazador-pieza-disparo. Referencias mítica a las sierras de Aroche, encaramado en encinas soltizas sabiendo que el comportamiento de los jabalíes es imprevisible y que no existen para él las conductas invariables, en momentos en que el habla interior manifiesta la grandeza de las esperas, solo o acompañado de su amigo Manolo González saboreandoel momentodulce de unas escenas a la vieja usanza en El Tintillo. Entrañable resulta la noche vivida con su hija Clara en Montecillo: ¡Todo es mío, soy dueño del tiempo y el lugar!, exclama Manolo, porque esa debe ser una de las pretensiones del buen cazador, abarcar todo lo que sus sentidos perciben, acercar las cosas atractivas hacia él y pausar el tiempo. Añade unos apuntes finales, como epílogo a estas semblanzas suyas de cuarenta y cinco años de esperas a los jabalíes, con historias casi increíbles sucedidas a amigos íntimos. La más atractiva de todas se refiere a Canito, un hombre al que nos lo presenta con su dejo de habla valverdeña y que sufrió en su cuerpo las graves consecuencias de un mal llamado cazador que osó adentrarse en los secretos de la espera a los jabalíes sin haber alcanzado ser siquiera un mediocre tirador. No se olvida el autor de aclararnos muchos de los términos lingüísticos que utiliza a lo largo de los capítulos narrados, que resultan enriquecedores sobre todo a aquellos serranos que únicamente hemos practicado las esperas a los jabalíes en parte de la Sierra de Huelva, especialmente en los montes de Aroche, Cortegana, Rosal de la Frontera, Almonaster, La Nava, Cumbres Mayores y Cumbre de San Bartolomé.Poca diversidad podemos aportar a estas referencias del habla pues, salvo algunas excepciones, es muy parecida en aquellos términos municipales. En cambio, Manuel Verdier se
  • 7. muestra muy observador y con mucho acierto anota características propias de cómo se expresan los hombres del Andévalo, la Costa, los cazadores valencianos y, sobre todo, se siente atraído por el lenguaje cinegético que usan los portugueses del Alentejo, y él con mucho esmero nos acerca las palabras y expresiones foráneas que constituyen parte importante de la forma de expresión de sus relatos. Esperas para el recuerdo es un libro de vivencias de caza que tienen mucha fuerza expresiva y que es rico en la diversidad de contenidos y escenarios en los que Manuel Verdier ha pasado muchas horas, porque para él la espera a los jabalíes ha sido parte sustancial de su vida, que las ha necesitado para vivir múltiples emociones, serenarse, sensibilizarse, hacerse reflexiones vitales y al mismo tiempo fortificar sus actitudes ante el mundo o desarrollar sus propias aptitudes. La lectura de este libro llevará a muchos cazadores a que ellos mismos reescriban muchas de las historias narradas, que las hagan suyas y alcancen ese deleite que provoca lo atractivo y a cuyo punto culminante de placer llamamos clímax, orgasmo o éxtasis tal como nombraban los místicos. Si los lectores de este libro se sienten felices mientras leen los veinte relatos, entonces esos instantes que a Manuel Verdier le parecieron eternos se hará realidad y será entonces cuando de verdad habrá conseguido pausar el imparable caminar del tiempo. José Luis Lobo Moriche Cortegana,otoñode 2016