1. La publicidad
1- Concepto generalidades
La publicidad es una poderosa herramienta de la promoción cuya función principal es dar a
conocer un determinado mensaje relacionado con los productos, servicios, ideas u otros, de una
empresa, organizaciones no lucrativas, instituciones del estado o personas individuales, que
utiliza este medio. La publicidad está dirigida a un determinado público objetivo, ya que esta
técnica destinada a difundir o informar al público sobre un bien o servicio a través de los medios
de comunicación y mover al público a su consumo.
En un sentido amplio, la publicidad podría ser un componente de la mercadotecnia, debido a
que es uno de los elementos que conforma el mix de promoción. Los otros elementos que la
conforman son: la venta personal, la promoción de ventas, las relaciones públicas y el tele-
mercadeo.
En la actualidad la publicidad abarca distintos medios tanto impresos, como electrónicos
principalmente, sin dejar de lado la publicidad hablada que aún se utiliza en plazas y mercados
alrededor del mundo.
En conclusión, la publicidad es una forma de comunicación impersonal de largo alcance porque
utiliza medios masivos de comunicación, como la televisión, la radio, los medios impresos, el
internet, etc.,
2- Antecedentes históricos
La publicidad ha ido evolucionando a través de los años, a medida que pasaban las épocas, esta
se ha ido haciendo con muchas más plataformas y formatos en donde cumplir su función.
Además, logro propagarse este método de comunicación masiva a todo el globo terrestre.
Donde realmente aparece la publicidad por primera vez, al menos todos los indicios hacen
pensar así, es en la Grecia Clásica, donde los primeros comerciantes tienen una vida nómada. En
su deambular constante llegan a una ciudad con posibilidad de desarrollar la venta de sus
mercancías y la pregonan, la vocean, de alguna forma la anuncian.
Posteriormente, esta costumbre se extiende al Imperio Romano, donde aparece la "Enseña" que
sirve para localizar un centro de trabajo, ocio o venta. Roma incorpora a la Enseña y a la voz del
pregonero la materialidad del texto escrito: El "álbúm" y el "libellus". El Albúm es una superficie
blanqueada sobre la que se escribe. Unas veces son pergaminos, otras papiros, otras las propias
paredes blanqueadas y en definitiva, todo aquellos liso y blanco que sirviera para enumerar y
clasificar las mercancías, anunciar espectáculos circenses, venta de esclavos y decisiones
políticas de las autoridades.
2. El Libellus, antecesor del cartel, es de menor tamaño que el Albúm. Una vez que se había escrito
en él el mensaje o comunicado, se pegaba a la pared. Normalmente era usado para incitar a la
sedición o a la lucha.
En la Edad Media aparece el "pregonero", que era anunciado con el sonar de trompetas,
posiblemente para llamar la atención del pueblo sobre el pregonero, que transmitía las órdenes
y deseos de los nobles. Por el contrario, en esta época el Cartel entra en decadencia, siendo
sustituido por la "Enseña", que diferenciaba los comercios entre sí. Es una semejanza con lo que
en la actualidad conocemos por "logotipos" de una empresa.
Con el Renacimiento y la aparición de la imprenta, la publicidad va tomando forma y es
definitivamente en el Siglo XVI, con la aparición de los periódicos donde de una manera
definitiva la publicidad toma asiento. Se cree que fue el "The Times Handlist", periódico inglés,
fundado en 1622, donde el primer anuncio de prensa, propiamente dicho, apareció.
Es en el Siglo XVIII, cuando en la lucha por independizarse la prensa acepta el apoyo de la
publicidad, que constituía una forma de financiación para los editores de periódicos. Con el
transcurso de los años este negocio mueve demasiado dinero y cobra gran importancia como
para estar en manos de aficionados, apareciendo a principios del Siglo XIX las agencias de
publicidad, que se dedican a diseñar, estudiar y difundir campañas para sus clientes.
Con el Siglo XX la publicidad llega a su máximo apogeo. Se ve potenciado con nuevos medios de
comunicación: Cine, Radio, Televisión... Aparece la publicidad ofensiva y en una sociedad
industrializada de grandes competencias es terreno abonado para ella, donde se intenta por
todos los medios posibles captar la atención de los clientes, lo que obliga a plantearse una "ética
profesional de la publicidad", con el fin de que no se convierta en un campo de batalla comercial.
Ha sido gracias a todo este proceso de evolución que ha tenido la publicidad que ha permitido
que se mucho más que solo un papel con una breve noticia como se hacía en el antiguo Egipto
y en Grecia y Roma, a pasar a la implementación de nuevas técnicas como la xilografía en la edad
media, o la producción en masa que se logró en el siglo XV gracias a Gutenberg, para luego darse
un periodo de estudio de la publicidad y los efectos que esta causaría en el cliente, en el siglo XX
, y finalmente, poder volverse un medio de comunicación masivo que hoy se usa mucho en esta
época digital como lo vemos actualmente. Todo esto gracias a muchos años de evolución y
dedicación.
3- Naturaleza de la publicidad
Si bien la publicidad es un medio muy útil para comunicación de un mensaje o producto, es muy
necesario aclarar que esta tiene una forma compleja y en cierta forma, una forma muy
inteligente de actuar en la mente del espectador, esta forma de actuar puede ser interpretada
de una manera positiva como una negativa. Sin embargo, para poder conocer mejor como es la
naturaleza de la publicidad es necesaria verle desde el enfoque negativo ya que así podemos
observar el truco que utiliza esta para transmitir el mensaje. Finalmente, luego de ver el enfoque
negativo, pasaríamos a ver la naturaleza de la publicidad en un enfoque positivo, en donde se
verá lo que en verdad es y lo que se suele exagerar en un enfoque negativo.
3. La publicidad es un medio en la cual las empresas y corporaciones privadas intentan influir sobre
la conciencia del comprador. Una de las condiciones necesarias para el éxito de esta es la
intrusión masiva, tanto directa como subliminal, sobre el pensamiento consciente e
inconsciente de la población. Y la repetición sostenida e hipnótica del mensaje publicitario.
Este concepto de repetición se vería en una frase que nos dice: “Una mentira repetida
adecuadamente mil veces se convierte en una verdad”, la cual sostenía Joseph Goebbels*,
haciendo referencia a la efectividad de la propaganda.
Los oligopolios internacionales y los grandes capitales conocen muy bien esta característica, por
lo que se hicieron rápidamente con el monopolio global, también, de la comunicación pública
por intermedio de la publicidad y los medios de comunicación masiva. De este modo, llevan a
cabo la más gigantesca campaña de propaganda y adoctrinamiento ideológico a escala global
jamás concebida en la historia.
Esta permanente provocación mediático-publicitaria ejercida directamente sobre la conciencia
del consumidor, hay que entenderla en este contexto no como un conjunto de anuncios
independientes o aislados (de tal o cual marca, por ejemplo), que puede causar poca impresión,
sino que debe ser entendida en términos del "impacto acumulado" que causa la repetición
permanente de un discurso infinito y monotemático como es el discurso de la publicidad, de día
y de noche, filtrado en cada espacio vital de nuestras vidas, y más aún, instalado en la conciencia
del consumidor.
La fuerza colectiva de la maquinaria mediático-publicitaria lanzada en las poblaciones integra
todo un modelo y paradigma de creencias y comportamientos que van destinados a crear un
tipo ideal de sujeto: un consumidor, dócil, sumiso y obediente. Y no sólo para orientar nuestro
pensamiento e influir en nuestra conducta, sino, sobre todo, para ocupar nuestro contenido de
conciencia con cierta información y no otra, determinando la percepción del consumidor sobre
las cosas del mundo.
Los monopolizadores de la comunicación publicitaria mundial bien saben que "en la
propaganda, como en el amor, todo está permitido para lograr un fin."
La verdadera naturaleza del mensaje publicitario nos es algo desconocido. Los anuncios
publicitarios muestran una imagen de juventud, alegría, liviandad, cierta frivolidad, frescura,
muchas veces rebeldía, inconformismo social; que en ciertas ocasiones son creativos e
innovadores, incluso algunos llegan a poseer un espíritu seudo-revolucionario. Estos anuncios
publicitarios son de igual manera producciones institucionales elaboradas hasta al más mínimo
detalle.
El efecto que los anuncios publicitarios tendrían en la mente del consumidor, se vería reflejado
de una manera una fría en una frase de Joseph Goebbels, Ministro de Propaganda Nazi, el cual
decía que para dirigir a las poblaciones "No hay necesidad de dialogar con las masas, los slogans
son mucho más efectivos. Éstos actúan en las personas como lo hace el alcohol. La
muchedumbre no reacciona como lo haría un hombre, sino como una mujer, sentimental en vez
de inteligente...". De sus preceptos han tomado buena nota los grandes explotadores.
4. A través del discurso monolítico de la publicidad se instala en la sociedad un pensamiento único,
lo que llamamos "cultura de masas". Que no es otra cosa que el adoctrinamiento de la
muchedumbre por parte de los grupos de poder, por intermedio de la propaganda masiva.
Cuando Goebbels decía que la muchedumbre reacciona de forma "sentimental" en lugar de
"inteligente", se refería a que la masa responde de manera irracional en lugar de
intelectualmente, y suponía que estimular la reactividad emotiva en la masa era lo ideal para
poder convencerla, tal como si se tratara de niños (o lo que para él era lo mismo: mujeres).
Aplicando el mismo criterio que el Ministro de Propaganda Nazi, las corporaciones y oligopolios
privados han transformado la industria de la publicidad en una maquinaria informacional
preparada para infantilizar a la muchedumbre, de modo tal que resulte dócil y fácilmente
gobernable.
Por eso, a través de la publicidad se estimula en las audiencias un modo de funcionamiento
mental infantil, omnipotente ("¡Todo es posible comprando tal o cual producto!") e incapaz de
tolerar la frustración ("¡No te quedes fuera! ¡Llame ahora!"). El consumidor ideal es estimulado
en sus sensaciones, en sus emociones, y está encomendado, como un niño, a regirse
preponderantemente por los caprichos de sus deseos, los cuales deben ser inmediatamente
satisfechos. El colorinche, el griterío, la ocurrencia y el chiste fácil, las situaciones fútiles y
fantásticas mezcladas con un alto contenido erótico en las producciones publicitarias, están
destinadas a perpetuar la adolescencia en los más jóvenes e infantilizar la vida adulta., en ciertos
casos.
Finalmente, viendo desde un enfoque positivo, muy aparte del negativo, vemos que la
publicidad si bien es cierto que utiliza el recurso sentimental para llegar al consumidor, no solo
se vale de esta. La publicidad tiene la naturaleza de comunicar y dar a conocer algo, ya sea un
mensaje, un producto, etc., esto lo logra gracias a la buena utilización de los colores, la imagen
y el manejo del mensaje, que ayudaran a transmitir mejor este mensaje. El resultado en su
mayoría viene a ser anuncios entretenidos o interesantes que logran ser entendidos por el
consumidor.
4- Relación en Marketing y la publicidad
Existe una gran relación entre marketing y publicidad, los anteriores son conceptos que no se
deben confundir, aunque para muchas personas resulten siendo interpretados como una misma
cosa.
Primeramente es necesario aclarar estos dos conceptos, primeramente el marketing es el
proceso de planificación de una estrategia para la venta de un producto y el conjunto de todos
los pasos que se requieren para este fin; en cambio, la publicidad tiene que ver con los medios
mediante el cual se difunde dicho producto.
Entonces, la publicidad es una herramienta del marketing. En la cual, informar y persuadir son
sus grandes objetivos. Esto incluye desde comunicar el lanzamiento de una nueva marca, dar
5. cuenta de un nuevo uso de un producto, de un complemento de uno que ya está en el mercado
o posicionar positivamente a determinada firma.
También tiene que ver con los sectores y poblaciones donde ese producto se da a conocer. Estos
dos términos tienen una relación muy estrecha, porque sin el marketing previo, la publicidad
sería un fracaso ya que no sabría hacia donde orientarse ni en qué recursos apoyarse.
De la misma manera, el marketing no está solamente enfocado hacia las campañas publicitarias,
también se centra en otro tipo de actividades más pequeñas, con un público menor, y estas
estrategias no van directamente a los medios. Más que de publicidad en este caso, se podría
hablar de promoción.
El marketing también contiene dentro de sus componentes, las relaciones públicas, que
permiten que el producto se establezca de una forma más sólida y coja una mayor fuerza.
Publicidad y promoción pueden parecer dos conceptos muy similares pero es necesario aclarar
que no son lo mismo.
Debido a que existe una confusión entre la definición de las palabras que rodean el ámbito
publicitario, la relación entre marketing y publicidad y, más que esto, sus diferencias, se hacen
tan poco evidentes para la mayoría de la gente.
Es por eso que cuando se habla sobre publicidad, se habla de un elemento más dentro del
marketing, no como un sinónimo. La publicidad podría ser el paso final de una buena estrategia
de marketing, pero ella no funciona por sí sola y trabaja en conjunto con otros conceptos allí
incluidos y que son, igualmente, importantes en el proceso de difusión de un producto.
Para poder diseñar una campaña publicitaria exitosa, se necesitan ciertos elementos como la
investigación de mercados, definir el sitio a dónde irán orientados los esfuerzos en cuanto a las
ventas para realizar la captación de clientes, de lo contrario esos esfuerzos será infructuosos.
Si se tiene clara la relación entre marketing y publicidad, se hace más fácil proponer ideas
novedosas que lleven al anunciante a los puntos claves y esto conllevará a tener éxito.
En conclusión, tanto la publicidad se llevan la par de la mano, ya que ambas trabajan en conjunto
para dar un exitoso trabajo publicitario, gracias a la ayuda que una brinda a la otra.