El documento habla sobre la educación como mecanismo indispensable para la inclusión social, ya que permite que los jóvenes se formen y tengan la posibilidad de insertarse en la sociedad a través de un empleo o profesión. También menciona el Proyecto Canaima Educativo desarrollado por el gobierno venezolano con el objetivo de garantizar el acceso a las tecnologías de la información, que incluyó la adquisición de 350.000 computadoras portátiles para niños venezolanos.