Concepto y definición de tipos de Datos Abstractos en c++.pptx
El encuadre didáctico
1. Elkin Yovanni Montoya Gil – Profesor 1
FACULTAD DE EDUCACIÓN
DEPARTAMENTO DE ENSEÑANZA
DE CIENCIAS Y ARTES
LICENCIATURA EN EDUCACIÓN
BÁSICA CON ÉNFASIS EN
CIENCIAS SOCIALES
(2015 - 01)
CURSO:
ENSEÑANZA DE LAS CIENCIAS
SOCIALES EN LA ESCUELA
Profesor: Elkin Yovanni Montoya G.
EL ENCUADRE DIDÁCTICO
"Si pudiéramos saber primero dónde estamos (diagnóstico) y hacia dónde vamos (visión, dirección de
desarrollo), podríamos juzgar mejor qué hacer y cómo hacerlo (plan operativo). Abraham Lincoln
no de los asuntos clave que todo maestro en formación o maestro en ejercicio que comienza una
labor docente debe tener presente es realizar el encuadre. Se denomina encuadre a determinar los
límites en los cuales se desarrollará el área, de ahí la importancia de hacerlo durante la primera semana
de clases, es aquí en donde se tratan aspectos de fondo y forma de la manera en que se va a trabajar
todo el ejercicio que se pretende en esta práctica, en nuestro caso, la propuesta didáctica. Por tanto,
podríamos decir que el encuadre didáctico es un acuerdo formal entre los participantes de las
actividades que se desarrollarán, dentro y fuera del aula.
Con el encuadre los estudiantes tendrán claro: qué se va a hacer, para qué se va a hacer y cómo se va a
hacer, además se espera que acepten y se comprometan conscientemente con esos lineamientos.
El encuadre, como estrategia didáctica constitutiva de la primera parte de la propuesta didáctica a
desarrollar en el presente semestre, está integrado por los siguientes procedimientos:
1. Presentación de los participantes: es importante mencionar que todo maestro que no se presente
ante los estudiantes, comete un error de comunicación, porque es necesario que el estudiante
identifique quién es su maestro y qué área le va a orientar, y también es muy importante que
conozca a los compañeros con los cuales trabajará, se puede decir que la presentación es el “rostro
humano” o el “rostro…” con el cual todos en conjunto tratarán de hacer un grupo escolar, en
principio, y tal vez después, un equipo de trabajo.
2. Presentación de la Propuesta Didáctica: en este procedimiento es clave que los estudiantes
cuenten con un conocimiento general de dicha propuesta donde se resaltará lo que se espera que
éstos sepan y sepan hacer y la forma como van a adquirir y desarrollar las competencias
pretendidas. Es decir, es vital que los maestros en formación en este momento tengan a la mano el
bosquejo o la síntesis de la secuencia didáctica o la unidad didáctica y la den a conocer. Se trata
aquí de dejar muy claro cuáles son los propósitos, los contenidos a abordar, la metodología
propuesta y las formas de evaluación pretendidas. Se sugiere presentar una red conceptual que
englobe la propuesta didáctica a trabajar; con esto los estudiantes tendrán una idea general de lo que
tratan los procesos de enseñanza y de aprendizaje a los cuales Usted los está convocando. Es
importante señalar la conveniencia de establecer no sólo fechas para trabajar los contenidos o hacer
las actividades que la propuesta didáctica requiere, sino también establecer fechas para exámenes,
tareas, entrega de informes y en general, todas las estrategias que se están contemplando.
U
2. Enseñanza de las Ciencias Sociales en la Escuela (2015 - 01)
Elkin Yovanni Montoya Gil – Profesor 2
3. Análisis de expectativas. Una vez presentada la síntesis del trabajo a realizar, se procede con este
punto, aquí se trata de que los estudiantes expresen de manera clara y precisa, qué esperan de su
trabajo y qué ideas o mapas mentales les han surgido como resultado de la presentación de la
propuesta. Por otro lado, el maestro adquiere información de mucha ayuda, pues con este
intercambio de ideas, se dará cuenta de qué tanto saben o conocen los estudiantes de los contenidos
a orientar. Esto también ayuda al maestro a conocer al grupo de manera general, dependiendo del
manejo que le da a esta estrategia, es importante hacer notar algunos aspectos que benefician la
forma de entablar este análisis de expectativas, por ejemplo, el maestro se dará cuenta de qué tan
motivados están los estudiantes frente al área y la propuesta didáctica que se les está realizando, si
ya han trabajado algunas de las cosas que se le presentan, entre otros factores. Son muchos los
elementos a descubrir en el análisis de las expectativas, por lo que se sugiere, se haga en grupos
pequeños y dejen todo asentado por escrito para que el maestro en formación tenga, con la
información recabada, la posibilidad de hacer un análisis más profundo. Al respecto sugiero diseñar
instrumentos claros, puntuales, ágiles y no ambiguos.
4. Plenaria de acuerdos y de organización operativa: se trata de definir, de común acuerdo,
maestro(a) en formación, estudiantes, cooperador(a), normatividad institucional (ya tienen claro el
Manual de Convivencia de sus I. E. y el Sistema Institucional de Evaluación?) y orientación del
área, los aspectos que regirán el área en cuestión, con esto los estudiantes están creando un
compromiso a cumplir, al igual que el maestro en formación. Los estudiantes trabajarán de manera
favorable a sus intereses, se sentirán tomados en cuenta y esto al contrario de repercutir
negativamente en el aula, favorece los procesos de enseñanza y de aprendizaje. Es importante que
ellos tengan una participación clara en este proceso y acuerden la manera de evaluarlo; se sugiere
poner en el tablero todas las anotaciones pertinentes y tener un control de los acuerdos. De esta
forma el maestro o la maestra en formación contará con una herramienta para regular el grupo y
sostener la disciplina siguiendo los acuerdos logrados.
5. Evaluación Diagnóstica Inicial: el objetivo es establecer el nivel de conocimientos previos con
que los estudiantes se encuentran al momento de comenzar el desarrollo de la propuesta didáctica.
Para el maestro en formación, la evaluación diagnóstica es de gran ayuda, porque gracias a esta
evaluación, puede sentar las bases del conocimiento que tienen los estudiantes de la materia, esto
es, que el maestro establecerá las condiciones para que los estudiantes comprendan los contenidos
involucrados en la propuesta didáctica, al certificar que cuentan con los elementos teóricos previos
necesarios para ello. O en su caso, tener los elementos necesarios para modificar lo estipulado en la
propuesta didáctica ajustándola de acuerdo con el nivel de los estudiantes y si es necesaria la
recuperación de conocimientos, el curso de acción puede modificarse en función de tareas y estudio
extra clase. Los estudiantes se responsabilizan de esto, siempre y cuando estén involucrados en el
proceso y en la dinámica del grupo. Esta evaluación diagnóstica debe hacerse siguiendo lo
estipulado por Jaume Jorba y Neus Sanmartí en su texto: La Evaluación Diagnóstica Inicial (texto
en digital que se adjunta a este documento).