Este documento describe la anatomía, fisiología y farmacología del sistema respiratorio. Explica las funciones del aparato respiratorio como la conducción de aire, filtración de partículas, producción de voz y tos, intercambio gaseoso y equilibrio ácido-básico. También describe varios grupos de medicamentos como broncodilatadores, expectorantes, mucolíticos, surfactantes, antihistamínicos y más que se usan para tratar diferentes afecciones respiratorias.
4. Fisiología del aparato respiratorio
Funciones del aparato respiratorio:
1. Conducción del aire hasta los alveolos.
2. Filtración de partículas (fosas nasales) hasta los alveolos.
3. Producción de la voz en la laringe.
4. Producción de la tos para eliminar particulas desde el interior de
los pulmones.
5. Intercambio gaseoso, O2 y CO2.
6. Equilibrio ácido básico: trabaja junto con los riñones.
7. Reflejo del estornudo: similar al reflejo de la tos, para eliminar
sustancias nocivas al aparato respiratorio superior.
82. broncodilatadores
Tres grandes grupos de medicamentos con diferentes mecanismos de
acción se utilizan como broncodilatadores:
1. Estimulantes β2 adrenérgico:
• Salbutamol.
• Terbutalina.
• Fenoterol.
• clenbuterol.
• Tulobuterol.
• Salmeterol.
• Formoterol.
2. anticolinergicos: bromuro de ipratropio.
tiotropio.
3. Teofilina y sus derivados: aminofilina, oxitrifilina, enprofilina,
ambroxol y doxofilina.
83.
84. Antialérgicos respiratorios
1. Cromoglicato de sodio, ketotifeno: se usan en profilaxis del Asma,
la rinitis, la conjuntivitis y otros estados alérgicos; estabiliza la
membrana del mastocito, impidiendo la liberación de histamina y
sustancias biológicamente activas.
2. Beclometasona, budesonida, fluticasona, mometasona y
triamcinolona: se usan en la profilaxis de rinitis y asma.
3. Ipratropio nasal: es un anticolinergico, que se usa en rinorrea
acuosa.
4. Levocabastina y azelastina: únicos antihistamínicos aprobados para
uso tópico en estados alérgicos de mucosa nasal.
5. Montelukast, zafirlukast: son antagonistas de los leucotrienos
usados para la profilaxis y el tratamiento del asma y de la rinitis
alérgica.
85. LOS GLUCOCORTICOIDES: el reconocimiento de que el asma es un
proceso inflamatorio crónico de las vías aéreas, llevó a considerar el
control de la inflamación como el paso fundamental del tratamiento,
pues los broncodilatadores solos no son suficientes.
los corticoides inhiben muchas células relacionadas con la inflamación
en el asma: macrófagos, linfocitos T, eosinófilos y células epiteliales
aéreas, reducen el número de células cebadas e inhiben la exudación
plasmática y la secreción mucosa en la vía aérea inflamada.
LOS ANTILEUCOTRIENOS: El ácido araquidonico se convierte en
prostaglandinas y tromboxanos por la ciclooxigenasa y en
leucotrienos por la 5-lipooxigenasa, ellos son potentes
broncoconstrictores, inducen hipersecreción de moco, aumentan la
permeabilidad vascular y promueven la formación de edemas,
están por lo tanto involucrados en el proceso broncoespastico e
inflamatorio del asma y de otras enfermedades alérgicas.
El grupo del montelukast, zafirlukast y pranlukast, bloquean los
receptores de los leucotrienos.
86. Antitusivos
Al formular un antitusígeno el médico debe tener en cuenta varios
hechos:
1. La tos: es un mecanismo de defensa de las vías respiratorias ó un
indicador de enfermedades subyacentes, por lo tanto su tratamiento
depende del papel que esté desempeñando; una tos productiva, no
dolorosa, no debe tratarse con antitusígenos.
2. Debe indagarse siempre al paciente acerca del consumo de
medicamentos causantes de tos como los inhibidores de la ECA ó los
beta-bloqueadores y tomar las medidas mas aconsejables.
3. La mejor indicación de los antitusivos es la tos seca, improductiva,
que presente un peligro cardiopulmonar ó que esté afectando la
vida normal del paciente, como conciliar el sueño, concentrarse en
su trabajo habitual, etc.
4. En los niños menores de 2 años se contraindican los antitusígenos:
una excepción puede ser la tosferina, sopesando el balance riesgo
contra beneficio.
87. Clasificación de los antitusivos
Los antitusigenos pueden tener su sitio de acción en el S.N.C ó
en la periferia:
1. De acción central: Narcóticos: codeína y dihidrocodeina.
No Narcóticos: dextrometorfano –
noscapina, clofedianol, clobutinol y zipeprol.
2. De acción periferica: son los antihistamínicos tipo
difenhidramina y prometazina que tienen poca utilidad a
causa de su sedación; los demulcentes como el azúcar y la
miel de abejas, que producen alivio sintomático.
Los broncodilatadores, que alivian la tos cuando esta es
producida por broncoespasmo.
88. expectorantes
Es insuficiente la evidencia acerca de la utilidad clínica de este grupo de
medicamentos y en realidad no se ha podido probar que en dosis
terapéuticas faciliten la expectoración, se usan en muchas afecciones
triviales, solos ó mezclados con antihistamínicos, broncodilatadores,
antitusigenos, a los cuales no parecen agregar ninguna ventaja
terapéutica. Su eficacia es dudosa, mas no sus reacciones adversas.
El agua al fluidificar el material mucoide, facilita su eliminación,
permitiendo que la tos, a veces originada en secreciones densas, se
haga mas fácil y controlable; las nebulizaciones con solución salina
normal resultan útiles, siempre y cuando se controlen su asepsia y
temperatura.
1. El guayacolato ó guaifenesina.
2. Cloruro de amonio.
3. Yoduro de potasio: ocasionalmente se usan en soluciones
magistrales para adultos.
89. Mucoliticos
Estos fármacos disminuyen la viscosidad de las secreciones y facilitan su
eliminación. Causan ruptura de las glicoproteínas del moco, lo que
determina la disminución de su densidad. Al igual que con los
expectorantes, se ha abusado de las propiedades de estos
medicamentos, utilizándolos en una variedad de patologías del tracto
respiratorio superior e inferior sin suficiente evidencia de su eficacia.
Pueden facilitar la tos productiva, por su acción solubilizante que
hace que las secreciones se vuelvan mas fáciles de eliminar (acciones
protusivas).
La acetil cisteina y el ambroxol se les describen propiedades
antioxidante, aunque los estudios experimentales requieren todavía
una amplia evaluación clínica, para poder juzgar su verdadero lugar
en terapéutica: la investigación en humanos se ha enfocado en
pacientes con enfisema y bronquitis crónica.
Otros: bromhexina - carboximetilcisteina – erdosteina.
90. Los surfactantes
Durante mucho tiempo la enfermedad de la membrana hialina y otros
trastornos del síndrome de dificultad respiratoria en recién nacidos
prematuros se trataron con soporte respiratorio, corrección de la
acidosis, respiración asistida y demás medidas sintomáticas.
La dexametasona, la betametasona ó la beclometasona, 24 horas antes
del parto, pueden prevenir este síndrome en niños nacidos entre 26 –
34 semana de gestación.
Sin embargo la mejor opción son los surfactantes, se administran por
tubo endotraqueal en los pulmones del recién nacido, mejoran la
oxigenación, la incidencia de pneumotorax y disminuye la mortalidad
la administración de corticoides sigue siendo útil y potencia los
beneficios del surfactante.
1. Palivizumab: profilaxis de infecciones respiratorias del virus sinsitial.
2. Omalizumab: indicado en el asma alérgica severa.
3. Dornasa alfa: se usa en pacientes con fibrosis quistica.
91. Antihistaminicos H1
Luego de la exposición al alérgeno, de una persona alérgica, se produce
la degranulación de los mastocitos ó los basófilos, liberando
mediadores químicos (histamina, prostaglandinas, leucotrienos,
etc.), que producen vasodilatación, atracción de neutrófilos,
eosinófilos, monocitos y basófilos, daño tisular, contracción del
musculo bronquial y gastrointestinal y la estimulación de las
terminales nerviosas sensitivas.
La histamina, es uno de los más potentes mediadores liberados y
produce la mayor parte de los síntomas que acompañan a cuadros
alérgicos, como la rinitis, la conjuntivitis, urticaria, edema
angioneurótico y shock anafiláctico entre otros.
Los antihistamínicos, constituyen uno de los grupos de medicamentos
mas ampliamente utilizados en todo el mundo, y su importancia
radica en la eficacia que tienen en el control de algunas afecciones de
origen alérgico.
92. Clasificación de los antihistamínicos
1. Antihistaminicos de primera generación: (sedantes):
Azatadina, buclizina, cinarizina, ciproheptadina, clemastina,
clorfeniramina, dexclorfeniramina, dimenhidrinato, dimetindeno,
hidroxicina, ketotifeno, meclizina, pimetixeno, prometazina.
2. Antihistaminicos de segunda generación (no sedantes,
mas potentes y con mayor vida media):
Azelastina, cetirizina, desloratadina, ebastina, epinastina, fexofenadina,
levocabastina, levocetirizina, loratadina, mizolastina. Este grupo se
diferencia del primero porque no pasa la barrera hemato-encefálica
y produce muy pocos efectos sobre el S.N.C, tiene mínima actividad
anticolinérgica y no posee efectos sobre el T.G.I. ni eficacia
antiemética.