Plan Refuerzo Escolar 2024 para estudiantes con necesidades de Aprendizaje en...
Ser mujer no es fácil
1.
Semana
del
7
al
13
de
marzo
de
2016
SER
MUJER
NO
ES
FÁCIL
Marcos
Pérez
Esquer
Desde
hace
105
años,
se
reserva
el
día
8
de
marzo
para
celebrar
la
aportación
indispensable
de
la
mujer
en
la
sociedad,
y
conmemorar
su
lucha
por
una
situación
de
igualdad
frente
al
hombre
en
materia
de
derechos
y
participación
social.
Es
indudable
el
avance
que
la
mujer
ha
conseguido
a
efecto
de
gozar
–como
debió
ser
desde
siempre-‐
de
los
mismos
derechos
y
oportunidades
que
tiene
el
varón
en
la
sociedad.
Hasta
hace
poco,
era
impensable
que
una
mujer
fuese
jefa
de
familia
y
sostén
económico
de
la
misma,
o
que
pretendiera
adquirir
educación
superior
–o
educación
alguna
siquiera-‐;
era
impensable
también,
que
una
mujer
decidiera
por
sí
misma
sobre
su
patrimonio
o
sobre
quién
sería
la
persona
con
la
que
habría
de
casarse;
mucho
menos
podría
pensarse
en
la
posibilidad
de
que
la
mujer
votara
o
fuese
votada
en
las
elecciones.
En
este
sentido,
no
puede
negarse
que
la
lucha
por
la
equidad
de
género
ha
dado
frutos
que
son
dignos
de
celebrarse;
se
trata
de
frutos
que
debieron
estar
siempre
ahí
pero
que
por
alguna
razón
le
fueron
regateados
a
la
mujer
por
siglos
e
incluso
por
milenios.
El
movimiento
feminista,
tiene
el
enorme
mérito
de
haber
iniciado
esta
transformación
social
que
hoy
nos
parece
tan
normal
pero
que
costó
mucho
trabajo
alcanzar.
Tampoco
cabe
duda
sin
embargo,
que
todavía
hay
mucho
por
hacer.
En
nuestro
país,
sigue
siendo
una
realidad
la
diferenciación
salarial
entre
hombres
y
mujeres
basada
no
en
la
cantidad
o
calidad
del
trabajo
sino
precisamente
en
el
género,
o
la
exigencia
de
certificados
de
ingravidez
para
la
contratación
laboral;
la
violencia
contra
la
mujer
en
diversos
ámbitos
como
el
hostigamiento
sexual
en
el
trabajo,
la
escuela
o
la
vía
pública,
o
la
violencia
física,
sexual,
psicológica
o
económica
por
parte
de
sus
parejas
sentimentales,
es
moneda
corriente;
es
una
realidad
también
la
explotación
de
mujeres
en
situación
de
trata,
así
como
la
violencia
institucional
y
los
feminicidios.
La
carga
de
trabajo
doméstico
es
sustancialmente
superior
en
las
mujeres
que
en
los
hombres,
en
tanto
que
el
trabajo
doméstico
pagado
se
ha
convertido
prácticamente
en
una
nueva
forma
de
esclavitud
que
afecta
fundamentalmente
a
las
mujeres.
Una
gran
proporción
de
los
mexicanos
vive
hoy
en
la
pobreza,
pero
es
indiscutible
que
la
pobreza
se
ensaña
mas
en
la
mujer,
y
particularmente
en
las
de
menor
edad:
la
pobreza
tiene
rostro
de
mujer…
¡y
es
una
niña!
En
el
resto
del
mundo,
a
los
problemas
anteriores
hay
que
agregar
otros
verdaderamente
dramáticos:
la
mutilación
genital
–también
llamada
ablación
del
clítoris-‐,
la
esclavitud
sexual,
o
la
toma
de
la
mujer
como
botón
de
guerra,
son
fenómenos
habituales.
No
obstante
los
avances,
la
equidad
de
género
no
es
aun
una
realidad
ni
en
México
ni
en
el
mundo.
La
lucha
por
los
derechos
de
la
mujer
continúa
y
nos
convoca
a
todos.
En
esa
lucha,
por
el
bien
de
nuestra
sociedad
los
varones
debemos
ser
los
mas
entusiastas.
Ser
mujer
debe
ser
maravilloso…
pero
nada
fácil.