El documento discute la obsolescencia programada en dispositivos electrónicos y la explotación en la extracción de coltán en el Congo para su producción. Explica cómo las empresas programan la falla de los productos para fomentar las ventas continuas. También describe las peligrosas condiciones en las minas del Congo, donde los trabajadores, incluidos niños, son explotados en la extracción del coltán que se usa en muchos dispositivos. El documento concluye reflexionando sobre la necesidad de un sistema de consumo más sostenible.

1. Javier Romo y Pilar García

2. OBSOLESCENCIA PROGRAMADA Y COLTÁN
JavierRomoyPilar
García
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FORO:
Parte 1
Actualmente, en nuestra sociedad es muy habitual escuchar hablar de términos como
'tecnología' o 'Tics', de usar con frecuencia objetos como, 'ordenadores' o 'móviles'. Sin
embargo, nos limitamos a obtener estos conceptos y productos sin una reflexión previa, sin
un previo síntesis de algo tan cotidiano en los países desarrollados. ¿Qué los hace
imprescindibles en nuestro día a día? ¿Cómo se producen? ¿Cómo se comercializan?
¿Son sostenibles?...
Por suerte gracias a la información que hemos podido obtener de ambos documentales
(Obsolescencia programada y El coltán en el Congo), además del artículo "La formación
docente en la sociedad digital: propiciando la reflexión sobre el impacto medioambiental y
social del consumo de la tecnología", hemos conseguido obtener una visión más amplia
acerca del tema.
Decimos que vivimos en la era de las nuevas tecnologías, donde se alza una nueva
generación que ha cambiado el tradicional chupete por una tableta. Por lo cual, cada día
podemos comprobar una mayor dependencia a estas nuevas herramientas, que hacen de
nuestra vida un poco más cómoda.
Sin embargo esto deriva otro problema, cada vez con más frecuencia cambiamos nuestros
‘obsoletos’ aparatos electrónicos por otros de ‘última generación’. Que plantea otro
inconveniente, en este caso, aplicado a nuestra profesión, es que no se dispone del
suficiente dinero público como para dotar de un buen sistema electrónico y eficiente que
esté al alcance de nuestros niños, encontrándonos de este modo aulas althia sin ningún
uso, debido a unos viejos recursos, que pronto acabarán convirtiéndose en chatarra.
Parece algo extraño que objetos con tan sólo un par de años, dejen de funcionar y que así
de este modo tengamos la tendencia a comprar más compulsivamente. Aquí aparece la
llamada obsolescencia programada, que normalmente suele aparecer en nuestros
aparatos electrónicos en forma de ‘chips’ programados, en nuestras bombillas con un uso
máximo de 1.000 horas de vida útil o en nuestras medias con un nylon de mala calidad. La
cuestión evidente es, si sabemos todo esto, ¿por qué no cambiamos nada? y la respuesta
es sencilla, las grandes empresas son los que mueven el mundo, mientras que ellas estén
en consenso nada podrá pararlas, ya que nosotros sólo podemos consumir lo que nos
ofrece nuestros sistema economista de libre mercado. Tras grandes avances de ciencia en
muchos aspectos de nuestra vida, se tuvo que dar un paso atrás, comenzando de cero, ya
que estas empresas se dieron cuenta de que creando algo ‘indestructible’ no se
generarían los mismos beneficios que si cada cierto tiempo algo se estropeara y se tuviera
que volver a comprar. Así llegamos a nuestra actual economía de consumismo.
Por el contrario, nos encontramos un tercer mundo, en el que aparece el término ‘brecha
digital’, “hace referencia a la desigualdad entre las personas que pueden tener acceso o
conocimiento en relación a las nuevas tecnologías y las que no.” El problema aparece
principalmente entre los países desarrollados y los que por el lado adverso no lo están.
Estos países tercermundistas sirven como ‘vertedero’ de nuestros residuos electrónicos,
donde bajo la excusa de combatir la brecha digital, envían buques de carga, llenos de
desechos, donde bosques acaban convertidos en chatarrerías.
El mismo lugar en el cual, mueren los restos tecnológicos de los países desarrollados, es
donde comienza su producción, ya que para su fabricación necesitan de materias primas
que no pueden obtener de sus propias tierras.
Por lo cual países como El Congo, reflejan una triste y dura realidad. Aquí se encuentra el
80% de los suministros totales de coltán en la tierra. Este material está compuesto por los
minerales columbita y tantalita, siendo la base fundamental de las placas bases de todos
los productos tecnológicos con los que contamos a día de hoy.

3. OBSOLESCENCIA PROGRAMADA Y COLTÁN
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Este país, actualmente se encuentra en una situación muy conflictiva, ya que se mezclan
los intereses del Estado y de los países fronterizos, de las guerrillas que operan en la
región, de las multinacionales de los países desarrollados y de los contrabandistas. Esta
coyuntura provoca la explotación ilegal de sus tierras para la extracción de este mineral, la
explotación de niños en minas, la corrupción, salarios no dignos, violaciones a mujeres…
en general, unas condiciones infrahumanas y terroríficas que ni la presencia de la ONU
puede arreglar, siendo quebrantados un gran número de derechos humanos. De esta
condición de ilegalidad aparece la llamada ‘tecnología manchada de sangre’, puesto que
muchas son las personas que mueren en el proceso de extracción del coltán, hasta que
pueden llegar a los países desarrollados móviles, integrado en ordenadores,
electrodomésticos…
Tal vez deberíamos pararnos a pensar por un momento a donde estamos llegando, con un
sistema de consumo, que crece por el simple hecho de crecer, sin concienciarnos del daño
medioambiental que estamos haciendo a nuestra tierra, la misma que nos aporta vida.
Somos simples títeres manejados por grandes multinacionales que manejan el mundo con
sus delicados hilos, a su placer y beneficencia.
Finalizo con esta cita, que aparece en el documental de la 'Obsolescencia programada':
"El mundo es suficientemente grande para satisfacer las necesidades de todos, pero
siempre será demasiado pequeño para la avaricia de algunos" Mahatma Ghandi.
Parte 2
La aparición de las TIC ha sido una de las revoluciones más novedosas en todas las
sociedades. Su uso tiene aspectos positivos y aspectos negativos, presenta beneficios
para nuestras vidas pero también tiene sus riesgos e inconvenientes.
Las nuevas tecnologías aumentan a un ritmo agigantado y las empresas crean una
necesidad por esas tecnologías ya que, ahora hacen productos con un tiempo de duración
limitado por lo que siempre estamos comprando nuevas tecnologías. Los niños de nuestra
sociedad actual crecen de la mano de móviles o aparatos tecnológicos de última
generación y ese debemos evitarlo. Estos aparatos tecnológicos se producen mediante un
material llamado coltán, material que se obtiene mezclando dos metales, y que se
encuentra en el Congo. Para la extracción de este mineral, el trabajo es muy duro y los
trabajadores son explotados. Antiguamente, la producción era más escasa por la dificultad
de elaborarlos pero ahora todo el mundo los tiene al alcance.
En mi opinión, las TIC han significado un importante cambio en nuestras vidas,
haciéndolas más cómodas pero deberíamos aprender a desprendernos de ellas un poco y
no tener tanta necesidad. También debemos enseñar a los alumnos que las TIC son
buenas pero en su justa medida, sin abusar de su uso.