1. 3000 años de
Gastronomía Griega
Un recorrido por su historia y sus costumbres
Creado y montado por Matilde de Cal Cortina y Alba Sánchez Varela
2. La cocina mediterránea tal y como la conocemos hoy
nace en Grecia. En el siglo VIII a.C. los griegos
establecen colonias en la cuenca mediterránea, donde
plantan sus viñedos y olivos y dan inicio a la
elaboración de aceite de oliva y vino. Estas colonias no
tardan en transformarse en poderosos centros
comerciales y culturales, y el aceite, los cereales y la vid
en la base de la dieta del hombre civilizado.
La dieta griega tradicional basada en el consumo de
aceite de oliva, frutas, verduras, cereales, queso natural
y frutos secos y la primacía de las aves de corral y el
pescado frente a la carne roja cuenta con el
beneplácito de los nutricionistas.
4. Los griegos hacen dos comidas al día: ariston, un
almuerzo ligero, y deipnon, la cena.
Los pobres subsisten a base de pan, sopa, gachas,
pescado en salazón, huevos, hortalizas y verduras de
hoja verde.
Los ciudadanos más acomodados pueden
permitirse alimentos más refinados.
En tiempos de hambruna los comerciantes de maíz
(sitonai) distribuyen gratis su mercancía.
G e n e r a l i d a d e s
5. La cena estaba revestida de especial importancia.
En la Ilíada, Aquiles rechaza comer y beber como
muestra de su pena por la muerte de Patroclo, y en
la obra todos los días terminan con una escena en la
que los guerreros cenan.
Los hoplitas llevaban a las campañas militares sus
propias provisiones y a los remeros se los
alimentaba con cebollas, ajo y queso.
En casa probablemente toda la familia cenaba junta.
6. Muchos alimentos se toman crudos, pero las formas de
cocción más habituales son el hervido y el asado.
Entre los utensilios de cocina, normalmente de arcilla, se
encuentran calderos, cacerolas, ollas, parrillas y sartenes
poco profundas.
Se empleaban el cuchillo y posiblemente también la
cuchara, pero no se conocía el tenedor.
Los griegos pudientes comen reclinados en divanes,
apoyados sobre un codo y utilizando la mano libre para
tomar los alimentos de una mesa pequeña colocada
frente al propio diván.
7. La base alimentaria de los
antiguos griegos son los
cereales, con cuya harina
se hacen dos tipos
fundamentales de pan:
maza –de centeno y el
más común – y artos –de
trigo y habitual en las
mesas de los ricos o
repartido en los festivales.
Mujer amasando pan, 500-475 a.C.
Museo Arqueológico Nacional de
Atenas
Principales alimentos de los griegos
8. Los griegos de a pie no se pueden permitir la carne,
pero cuando la toman ésta es de cerdo, oveja, cabra
o pollo, pues el ganado mayor (vaca o buey) es
escaso y se reserva para sacrificios y banquetes
rituales.
El pescado se toma fresco o en salazón, y se
consideran auténticas exquisiteces piezas como el
atún, la caballa, el mújol, el esturión, el besugo y las
anguilas del lago Copais, en la región de Beocia.
9. Los griegos no debían consumir muchas legumbres,
pero sí verduras, entre las que destacan repollo,
espárragos, zanahoria, pepino, calabaza, rábano,
alcachofa, achicoria y puerro. Cebollas, ajo y
aceitunas se tomaban en gran cantidad y servían
como alimento a los soldados.
Se ingerían también frutas como higos, uvas,
dátiles, manzanas y peras, y entre los frutos secos
abundan las almendras, avellanas, nueces y castañas.
10. La principal fuente de grasas es el aceite de oliva, muy
popular y de excelente calidad, dado que el uso de la
mantequillas se consideraba propio de bárbaros.
Con la leche, normalmente de oveja o de cabra, se hacen
quesos y se emplea también para cocinar, pero no suele
tomarse como bebida. En la Odisea de Homero, Ulises
considera que el cíclope Polifemo es un salvaje porque
bebe leche de cabra y jamás ha probado el vino.
11. Los alimentos pueden endulzarse con higos secos o bien con
miel (es especialmente popular la del monte Himeto).
Salero de cerámica con
barniz negro, siglo V a.C.
Museo del Louvre
La sal es el condimento
más utilizado –además de
emplearse en la
conservación de los
alimentos –, pero también
se usan hierbas aromáticas
como la salvia, el romero o
el silfio, una planta ya
extinta.
12. La bebida favorita de los griegos es el vino, que siempre se
consume diluido con agua y normalmente se endulza de
forma artificial.
Se transporta en ánforas con un sello de arcilla con el nombre
del mercader que las ha comprado y el de la ciudad en la que
el vino ha sido producido.
La cerveza no es una bebida habitual entre los griegos
porque la asocian a los bárbaros.
El vino se consume sobre todo en las celebraciones conocidas
como simposios, banquetes rituales con significación
religiosa y cultual que cuentan con sus propias normas.
13. El simposio se realiza después de la cena y suele contar con
nueve invitados. Los ciudadanos acomodados tenían una
habitación especial para celebrarlo, el andron, con divanes y
mesas y donde no se permitía la entrada de mujeres.
El consumo de vino es un acto religioso, por lo que va
acompañado de himnos en honor a los dioses y una serie de
actos rituales.
Se considera de mala educación interrumpir dichos himnos
con risas y comentarios, así como tamborilear con los dedos o
silbar al ritmo de las flautistas.
E l S i m p o s i o
14. Para mezclar el
vino y beber se
emplean una
serie de
recipientes que
eran
normalmente de
cerámica pintada
entre las clases
menos pudientes
y podían llegar a
ser de plata u oro
entre los
miembros más
privilegiados de
la sociedad.
15. Los invitados se entretenían con juegos variados. Por ejemplo, uno
recitaba un verso de una obra famosa y otro debía recitar el
siguiente sin equivocarse o bien uno recita un pasaje y otro recita
otro pasaje de diferente autor pero mismo tema.
Simposiastas jugando al cótabo mientras una
flautista actúa para ellos, crátera del Pintor de Nicias,
Museo Arqueológico Nacional de España
El más popular era el
cótabo: el jugador lanzaba
los posos de vino de su
copa hacia un platillo de
bronce sostenido en
equilibrio sobre un
pedestal y, movido por el
vino, caía golpeando otro
plato situado más abajo
produciendo ruido. El
ganador era quien hubiese
hecho más ruido
derramando menos vino.
17. La evolución de la cocina griega se ha visto influenciada por factores
como la geografía o la topografía del país, y no podemos olvidar los
siglos de dominación bizantina, veneciana y otomana.
Como en la antigüedad, los cocineros griegos actuales confían en las
cualidades y el sabor de las frutas y las verduras frescas, el aceite de
oliva virgen extra, los quesos de oveja y cabra, el pescado y el marisco
del Egeo y la carne de los animales criados al aire libre. Emplean las
hierbas aromáticas y las especias con sensatez y sin excesos, y en
función de su lugar de residencia usan guindillas o comino.
Las diferencias regionales abundan, de ahí que los nombres de las
recetas indiquen la región de la que proceden. Muchos platos se
preparan en fechas concretas para celebrar ocasiones especiales o
festividades religiosas y constituyen parte esencial de la cultura griega.
19. Los mezedes son entrantes que sirven para abrir el
apetito o mantenerlo a raya, pero a veces pueden
hacer las veces de comida completa.
Se sirven en una bandeja rodeada de trozos de pan
y se toman con los dedos, palillos o pequeños
tenedores. No son necesarios platos individuales.
Se acompañan de ouzo o retsina.
Las degustaciones de mezedes incluyen
conversaciones y debates, así como un disfrute casi
obligado del entorno.
E n t r a n t e s (m e z e d e s)
23. Las salsas griegas son simples pero
acompañan a multitud de platos.
Los platos lemonata se desglasan con zumo
de limón, los krasata con vino, los kokinista
se preparan con salsa de tomate, los
skordata con salsa de ajo y los kaftera con
una salsa muy picante.
S a l s a s
27. Las sopas griegas, muy nutritivas, se sirven
con los ingredientes sólidos troceados en el
caldo y se acompañan de pan tostado con
ajo.
El plato nacional de los griegos es una sopa
de alubias conocida como fasolada.
S o p a s
31. La ensalada forma parte indispensable de la
comida y en sencilla y preparada con
ingredientes de temporada.
Durante la expansión del cristianismo ortodoxo
surgieron muchos platos a base de verduras
llamados ladera en alusión al uso en ellos del
aceite de oliva.
Las verduras se suelen tomar los miércoles, los
viernes y los días de ayuno.
Ensaladas y Verduras
35. La pasta se sirve como plato principal y se suele
cocer en la salsa del guiso.
El arroz resultaba caro, por lo que los cocineros
lo sustituyeron por rollitos de masa de formas
variadas.
En Quíos todavía se hacen a mano algunos tipos
de macarrones, enrollando su masa alrededor de
ramitas para darles forma tubular.
P a s t a s
39. Muchas tavernas griegas limpian y asan el
pescado que llevan los propios clientes.
En las recetas de pescado fresco la cabeza suele
conservarse intacta.
Los platos griegos de marisco suelen formar
parte de los mezedes.
Los cefalópodos son típicos y se preparan con
salsa y pasta, arroz,, verduras o aceitunas.
P e s c a d o s y M a r i s c o s
43. Las aves de corral suelen guisarse con pasta,
arroz o verduras.
El pollo a la cazuela con limón, tomillo orégano
y patatas es un clásico.
El cordero es la carne preferida de los griegos y
suele hacerse frito o bien asado entero con
patatas al orégano o cocinado al espetón.
La caza, que abunda en el norte, se considera un
manjar guisada o estofada.
C a r n e s
47. Las piezas de pan típicas son el horiatiko, o pan
rústico, las paximadias, tostadas gruesas de pan de
cebada, y los simitia, anillos de pan de sésamo.
Después de comer, los griegos gustan de hacer una
parada en una zaharoplastio para disfrutar de un
café con un helado o un dulce. Los dulces más
típicos son los siropiasta, o pastelitos almibarados
con miel y especias.
Los postres de cuchara, normalmente frutas en
conserva, se sirven en pequeñas porciones sobre
una cuchara dispuesta en un plato de cristal para
dar la bienvenida a las visitas en casa.
P a n y p o s t r e s
54. La capital de Macedonia, antigua
patria de Alejandro Magno, es
Salónica.
El plato más famoso son las
dolmadakia, hojas de parra rellenas
con arroz.
68. Sobresale la isla de Cefalonia, de
donde es originaria la bebida
conocida como metaxá, una
potente mezcla de brandy y vino, y
los risottos con tinta de calamar.
74. Las aceitunas cretenses suponen
el 30% de la producción total de
aceite de toda Grecia.
Rusks: panes tradicionales duros y
secos, doblemente horneados.
87. p r o c t ó l o g o
especialista en enfermedades del recto
recto
προκτός + λόγος
recto especialista
88.
89. Hipócrates y Galeno presentan:
El Ambulatorio Griego
Enfermedades relacionadas con la alimentación o Remedios
delirantes para problemas del día a día
90. La malnutrición fue una de las
principales causas de mortalidad en la
Grecia antigua.
91. La más conocida de las enfermedades por falta de
vitaminas eran los cálculos o piedras en el riñón o la
vejiga, que Hipócrates atribuía al consumo de mala
agua o mala leche. Plinio el Viejo los describe como
“la enfermedad que causa la más aguda agonía” y
ofrece para ella un remedio que consiste en frotar
heces de ratón en el abdomen o bien ingerir cenizas
de plumas de palomo silvestre mezcladas con
ojimiel.
92. Hay afecciones oculares relacionadas con deficiencias
alimentarias, como la ceguera nocturna, la xeroftalmia
(sequedad conjuntiva y opacidad en la córnea), la
queratomalacia (córnea reblandecida y perforada) y otras
formas de ceguera.
La causa es una deficiencia de vitamina A, consecuencia del
poco consumo de alimentos cárnicos pero también de
zanahorias y verduras de hoja verde, que proveen al
organismo del caroteno que luego se transforma en vitamina
en la pared intestinal.
Los médicos recomendaban la ingestión de hígado, pero
también proponían otras soluciones disparatadas como la de
Aecio Emiliano, que sugiere que para curar la ceguera
nocturna debe uno frotarse los ojos dos veces al día con un
ungüento de resina, abono de cocodrilo, cobre vitriólico y la
bilis de una hiena suavizada con miel, y debe también darse al
paciente hígado de cabra para que coma con el estómago
vacío.
93. El raquitismo o deformación de las extremidades es una
enfermedad derivada de la deficiencia de vitamina D.
Esta vitamina se la proporciona a nuestra piel la luz del
sol, pero su deficiencia puede estar también relacionada
con una mala alimentación.
El médico romano Galeno se queja en sus escritos de
que los bebés y las mujeres permanecen demasiado
tiempo en el interior de sus casas sin exponerse al sol,
pero era muy común que el raquitismo se contrajese por
carencias dietéticas, así como la anemia, la geofagia, el
hipogonadismo o la hepatoesplenomegalia, todas ellas
dolencias comunes en personas que comían poca cosa
aparte de cereales ricos en ácido fítico, que inhibe la
absorción de minerales clave.
94. Los textos oraculares y mágicos de la Grecia antigua
ofrecen una serie de remedios y pociones que,
ingeridos, dan solución a diversos problemas.
PRÁCTICA PARA VOLVERSE INVISIBLE
Toma un papiro hierático y escribe los nombres prescritos con
tinta de Hermes y, después de escribirlos como se ha ordenado,
sumérgelo en agua corriente que proceda de siete fuentes, y
bebe esa agua en ayunas a lo largo de siete días desde que
aparezca la luna. Bebe lo suficiente.
96. No lea con atención ninguno de
estos remedios. Por Zeus, no lo haga.
Si aun así es tan sumamente tonto
como para probar estas pócimas
prácticamente venenosas
acuda con urgencia al Hipócrates más
cercano a su domicilio.