1. CÓMO MANEJAR EL DUELO.
Qué es el duelo:
Es la respuesta personal y subjetiva para afrontar una pérdida, se busca una vía de
sobrevivencia emocional y se retoma un sentido de vida. Involucra un trabajo consciente y si
no se elabora puede producir estancamiento.
Tipos de pérdidas:
1. Relacional: muerte, separación o abandono. Consecuencia: ansiedad por contactar a los
seres queridos.
2. Ambiental: incendios, desalojos, catástrofes. Tristeza, sensación de miedo.
3. Expectativas: Negocios, familia, trabajo. Consecuencia: Sensación de no ser aceptado o
querido.
4. Objetos: robos, pérdidas, desapariciones. Consecuencias: ansiedad, angustia.
5. Habilidades: vejez, amputaciones, capacidad física. Tristeza, baja autoestima. (Ejecutivos,
militares, deportistas).
6. Cuerpo: accidentes, amputaciones.
Consideraciones:
. Se entiende como “muerte”, la paralización de las funciones orgánicas.
. Los avances tecnológicos alejan la idea de la muerte, sin embargo, en otros casos puede
convertirse en perturbador: vidas dependiendo de un aparato.
. No nos preparan para las rupturas y la muerte y es lo único seguro que tenemos en la vida.
. La vida se fracciona “en cuadritos” y hay que reconstruirla. Reconstruir paradigmas.
. Un duelo normalmente dura de 1 a 3 años.
. En la actualidad hay demasiadas personas viviendo duelos en soledad.
. Todos los tipos de pérdida deben ser elaborados. Es fundamental vivir el proceso en
compañía.
. Cada persona lleva su propio proceso.
. Un niño antes de los 9 anos no entiende que el ser muerto no come ni bebe, etc.
. Las sociedades construyen su propia cultura sobre la muerte: creencias en el mas allá.
. Las personas arraigadas a lo material sufren más.
. Las familias repiten sus historias de duelos anteriores repitiendo patrones.
. Las muertes naturales son más fáciles de elaborar, dependerá del apego.
. Elaborar el duelo no es olvidar, es aprender. Los que se van solo cambian de estado.
. Se excluye a los niños de las situaciones de duelo.
Tipos de duelo:
1. Duelo anticipado. Enfermedades crónicas.
2. Duelo crónico. Depresión permanente.
3. Duelo suprimido. No aceptado.
4. Duelo ambiguo. Desapariciones.
5. Duelo no validado. Suicidio, sida, niños recién nacidos.
Síntomas presentes en el duelo:
Tristeza, aturdimiento, perplejidad, afecciones corporales, alteración del sueño, poca
concentración, negación, depresión, alucinaciones, rabia, culpa, apego, miedo, perdida del
sentido de la vida, se resquebraja el sistema de creencias.
Fases del duelo:
1. Negación: rebeldía. Anestesia.
2. Depresión: agobio, tristeza, abatimiento, soledad. Búsqueda de lo perdido,
desorganización.
2. 3. Resignación: no hay nada que hacer, aceptación consciente, dolor. Reorganización, nueva
visión del mundo.
Cómo educar para entender el duelo:
1. Hacer juegos de separación en la infancia. (Cuentos, mascotas, viajes)
2. Revisar la actitud de la familia frente al duelo. Modelaje.
3. Incorporar la temática en escuelas. Trabajo triangulado.
Consideraciones:
0 a 2 años:
Separación percibida como abandono. La vida es movimiento, ahora hay inamovilidad.
Presencia de regresiones: descontrol de esfínteres, juegos repetitivos)
Recomendación: Mantener las rutinas, buscar cuidador sustituto. Reducir sonidos estridentes
que producen miedo.
3 a 5 años:
El niño no entiende que el cuerpo ya no funciona, presencia de variaciones de ánimo y
miedos nocturnos, síndrome de niño bueno/malo (culpa) Recomendaciones: recordar en
positivo luego de la fase de shock, reconocer el sentimiento del niño y ponerle nombre,
ejemplo: tienes rabia, acompañar en la noche, dar afecto físico constante, mantener la rutina.
6 a 8 años:
Entiende la irreversibilidad de los hechos, se muestra inquieto por el funeral, se muestra
inestable emocionalmente. Recomendaciones: validar el sentimiento del niño: te sientes
triste, compartir el duelo con el niño, mantener la rutina. Rituales de despedida.
9 a 11 años:
Entiende la irreversibilidad de la muerte, pero la percibe como mala. Emociones
exacerbadas. Sensación de abandono, resentimiento, no sabe que hacer con tanto dolor.
Recomendaciones: mantener rutinas, anticipar momentos para retomar seguridad,
incorporación mayor en rituales familiares, escucha activa, mantener rutina y límites.
Estrategias para el manejo del duelo:
1. Darse tiempo y permiso para normalizar la vida, evaluando lo que es valioso o no y
aceptando un nuevo estilo de vida y obteniendo crecimiento, conciencia y visión personal.
2. Reconocer la pérdida a nivel mental y emocional. Acercarse a la perdida, contarlo,
recordar lo sucedido.
3. Liberar todos los sentimientos. Entender el llanto como una herramienta de sobre
viviencia.
4. Desarrollar adaptabilidad, nuevas aptitudes.
5. Establecer nuevas relaciones y motivaciones.
6. Establecer metas diarias para activar motivación.
7. Reconocer y disfrutar los momentos alegres.
Como ayudar a superar el duelo:
Empatía con el doliente. Acompañar en el silencio.
1. Invitar a recordar,no a olvidar. Escuchar a la persona afectada. Preguntar:Qué sientes, qué
pasó, cómo pasó.
2. Buscar enlaces con personas significativas de la persona afectada para hacer puentes
emocionales. Hacerla sentir necesaria para ayudarla a reencontrar un nuevo sentido de vida.
3. Capacitar a la persona afectada en las nuevas ocupaciones que tendrá que hacer.
4. Acompañarla en rituales y ejercicios de visualización para desprenderse de los aspectos
inconclusos.
5. Fortalecer los lazos familiares y de amistades. Involucrar al doliente en rituales familiares.
6. Atender a la alimentación y el descanso del afectado.
7. Re vincular positivamente. Acercarlo a compañías en espacio de paz.
8. Ayudarlo a reconocer los pequeños momentos de alegría.
9. Ayudar a otros que han pasado por la misma circunstancia.
10. Estar DISPONIBLE para la persona afectada.
3. 11. Abrazar. Se consideran 4 abrazos diarios para sobrevivir, 8 abrazos para sentirse bien y
12 para realizare como persona.
Interferencias para el manejo del duelo:
No caer en la tentación de consolar.
1. Preguntar al doliente POR QUÉ.
2. Expresar: No debió ser, debes ser fuerte, Dios lo quiso así, suerte que tienes otros hijos,
ahora él está feliz, trata de olvidar.
3. Tomar decisiones importantes sin haber elaborado el duelo. Nuevo embarazo, mudanza,
cambio de trabajo, matrimonio, etc.
Rituales:
Los rituales ayudan a aceptar y elaborar la pérdida.
Algunos rituales de despedida:
1. Escribir carta, quemarla.
2. Globo de helio.
3. Encuentros sociales en donde se habla de la persona fallecida, lo aprendido, su legado, etc.
4. Expresión artística. Dibujar, cantar, escribir:
5. Hacer caja de recuerdos.
Decálogo:
1. Darse tiempo y permiso para elaborar el duelo.
2. Sea usted mismo, no lo que los demás quieren que usted sea.
3. Reconozca que es vulnerable.
4. Ayúdese médicamente si es necesario con apoyo médico.
5. Ayúdese de familiares que han pasado por esto.
6. Valore lo esencial en su vida.
7. Celebrar lo bueno por encima del dolor vivido.
8. Fortalezca los vínculos.
9. Elabore tareas.
10. Ayude a otros a superar las perdidas.
NO LE HAGAN CASO A LOS LOCOS
Morir es recibir un título universitario que permite
seguir un post grado más cerca del Jefe si se hace
correctamente y si es así, ¿quién no lo desea cuando
se aspira a seguir subiendo en la profesión del alma?
Hijos, deben aprender a ver con el corazón, con la
emoción, esa es la manera de no dejarme de ver
jamás aunque físicamente me tenga que marchar
algún día. Si conservan esas facultades, pocas veces
sentirán desespero por mi ausencia.
Se que si yo no estuviera, Dios se ocuparía de enviar
cada día, mis actos y mi amor a través de las
personas que los traten de ayudar. La protección,
amor y compañía de toda la familia estarán
inspirados por mí, seré yo quien les estaré hablando.
4. Estas no son palabras de resignación,
crean en mí, ¡No le hagan caso a los
locos!
María Antonieta Angarita
QUE BELLO ES MORIR CUANDO BIEN SE HA SABIDO VIVIR.
INVENTEMOS UN CIELO JUNTOS
Bibliografía
Rojas Santiago. (2009). Manejo del Duelo. Resumen audio libro.
Keller Luisa Elena, (2010). Manejo del Duelo. UNIMET