Genes, hormonas y diferencias de género: claves para entender el dilema del sexo
1. “EL GRAN DILEMA DEL SEXO” (La vida de a dos)
Juan Carlos Kusnetzoff
Genes: un enigma apasionante
La comprensión del ADN (el descubrimiento de su estructura de doble hélice, el
conocimiento su composición química) ha revolucionado las ciencias. El proyecto del
genoma humano trata de comprender la capacidad de la materia para tomar una
estructura determinada, poco a poco, combinando cada fase cristalina (Adenina,
citosina, guanina, timina)
La capacidad de descifrar el código significa que los biólogos pueden buscar maneras
para corregir fallas genéticas y trabajar sobre los detalles de la conexión entre genes y
comportamiento. Esta parte del conocimiento, por supuesto, es sumamente inestable. Lo
que sabemos sobre tema cambiara, sin duda mañana. Pero sabemos que estamos ahora
en un hermoso punto de equilibrio en la concepción científica: no somos tan ingenuos
para abrazar completamente el determinismo genético ni para hacer lo contrario. Los
biólogos nos demuestran que los genes tienen una influencia increíble, que ellos están
ahí y no se los puede desconocer o negar. nosotros estamos también diseñados para ser
altamente sensibles y responder a la vida social que a cada uno le ha tocado en suerte,
para que las circunstancias sociales cada vez pueden influir sobre cualquier tapiz
genético que creamos el mundo.
Genes y genoma. Abecedario lenguaje, los genes son el punto de partida. Esos son el
manual, las instrucciones químicas para armar aminoácidos. Empleando una metáfora,
una proteína es un edificio de aminoácidos. Estas proteínas a la vez, forman hormonas o
membranas, o músculos, o lo que se necesite. Para seguir con las analogías, pensemos
en los genes como las frases y cromosomas como las páginas, en genoma su libro
entero, muy cabalmente escrito y sin perdonar errores. El ser humano tiene 46
cromosomas (23 pares enfrentados, y una mitad igual proveniente de cada padre) con un
número de quienes entre 70.000 y 150.000 (no se conoce la cifra aún). Los pares de
cromosomas enumeran según el tamaño: el par uno es el más grande y el 22 es
minúsculo. El par final tienen los llamados cromosomas X e Y, que determinan el sexo.
Los genes dan comienzo nuestra vida; Pero no se trata de una predeterminación total.
Algunas instrucciones genéticas, como color de ojos, escriben con tinta. Pero otras que
alguna vez también se creyeron fijas han probado ser menos rígidas, como si se
escribieran con lápiz. (La altura por ejemplo).
Parece que los genes se programan para reaccionar y obrar recíprocamente con el
ambiente; la alimentación y el tiempo, la química interna y la externa, todo puede
afectar nuestros genes. Nuestros cuerpos se sintonizan sutilmente con el mundo.
El papel de las hormonas.
Hay algunas sugerencias muy preliminares de que los genes pueden actuar de manera
diferente sobre un cromosoma de macho y sobre un cromosoma hembra; parecería que
los cromosomas de una hembra pueden ser un poco más activos. Los investigadores se
han inclinado particularmente hacia las hormonas para decir quién o qué, entre
numerosos factores, tiene mayor influencia sobre la actividad los genes. Las hormonas
son los mensajeros químicos; apuntan indican cambios en las células. A veces una sola
hormona parece influir en un comportamiento; a veces parece ser una cadena
extensísima.
2. Segregadas por glándulas, las hormonas impregnan el cerebro. Ellos efectúan una
cantidad increíble de trabajo, regulando la presión sanguínea, induciéndonos al sueño,
ayudándonos a construir la estructura muscular, fortaleciéndolo hueso, conduciendo al
el deseo sexual.
En el comportamiento, son muy importantes, por lo menos dentro del contexto de las
diferencias, las hormonas sexuales, que son las hormonas esteroides, derivadas del
colesterol. Las hormonas sexuales se denominan andrógenos y estrógenos. Los
andrógenos circulan a niveles más altos en los machos y son producidos
predominantemente los testículos el más conocido la testosterona. Los estrógenos
circulan a niveles más altos en las hembras se producen sobre todo los ovarios. Es más
conocido es el estradiol predomina hasta la menopausia, excepto durante el embarazo,
cuando existe una verdadera revolución hormonal. Ninguna de las hormonas son
privativas de un género. El cerebro también puede convertir la testosterona. La
diferencia está en la cantidad de hormonas que circula por la corriente sanguínea. Los
hombres tienen un promedio de testosterona mayor que el de la mujer.
La pregunta es ¿las hormonas organizan el cerebro humano como parecen hacer en las
otras especies?
La respuesta es no siempre. Los genes particulares que una hereda, los fluctuantes
niveles de hormona, el ambiente individual, las siempre cambiante vida, todos trabajan
al unísono... separadamente. Para complicar más el tema, los genes pueden también
simplemente cometer errores, y accidentalmente mutar.
La testosterona es extraordinariamente sensible al ambiente, sube en un momento de
desafío y decae cuando se pierde el motivo, o por acción del estrés, ascendiendo
nuevamente con el deseo sexual. Hay evidencia de que la testosterona también fluctúa
en las mujeres según cuán estresante sean sus vidas. Por otra parte, la testosterona
desempeña un directo y nada misterioso trabajo: existe un consenso sólido entre los
científicos de que, en los seres humanos, esta es la hormona, en la vida intrauterina,
separa los muchachos de las niñas.
Hipotálamo y diferencias de género.
Cuando vamos a buscar diferencias y género, en ninguna parte del cerebro han recibido
mayor atención que un grupo de células nerviosas: el hipotálamo.
El cerebro tiene dos grandes avenidas de salida. Por una parte, la salida estrictamente
nerviosa, escalona a través del tronco cerebral que va a lo largo del bulbo raquídeo, la
protuberancia y la médula espinal hasta la región sacra. En este recorrido se van
desprendiendo calles de nervios dirigidos hacia los distintos órganos ya sea los
músculos voluntarios.
La otra gran avenida parte de una especie de pequeño embudo estrecho que se encuentra
en la parte inferior del cerebro: el hipotálamo. Así el cerebro según una auténtica
glándula endocrina en directa conexión con las arterias y las venas donde volcará los
productos hormonales la hipófisis, también llamada pituitaria, centro y el sistema.
El hipotálamo puede considerarse un cerebro en sí mismo; conecta el sistema endocrino,
que comprende glándulas hormonales, y el sistema nervioso central. Controla un grupo
esencial de fusiones vitales diversas extrañamente conectadas con el hambre y la sed, la
temperatura corporal, la ovulación y el control de la libido en ambos sexos. Por todo
esto resulta lógico que cuando los científicos centraron su atención en las diferencias
estructurales en los cerebros de las hembras y los machos hayan comenzado por esta
porción llamada hipotálamo.
3. Se concentraron en un pequeño nudo de células frontales, llamado área preóptica.
Observaron dos tipos diferentes de sinapsis dentro del área preóptica: aquellas que
conectaban neuronas de aquella que pasaba mensajes entre ramales de células nerviosas,
axones y dendritas. Los científicos encontraron una diferencia de género: dentro del
área preóptica había más sinapsis del tipo que lleva los impulsos de célula en las
hembras.
La diferencia sexual es influida en forma decisiva, aunque no únicamente, por el factor
hormonal. Así lo ponen de manifiesto una serie de trabajos científicos actuales. En el
desarrollo tardío, los andrógenos desempeñan un papel importante en la diferenciación.
Al referirnos a los andrógenos es importante señalar, por otra parte, que influye
notablemente el desarrollo, incluso del punto de vista cognitivo. Se aplican con éxito en
el cuadro clínico llamado climaterio masculino o andropausia.
Diferencias sexuales y emocionales
Existe una teoría que relaciona el corazón con las emociones en una forma muy lógica.
Observemos por un instante al feto en desarrollo, que flota en el líquido amniótico
donde el ruido más fuerte y constante es el corazón de la madre. Sabemos que entre
quinto y el sexto mes de gestación, el feto comienza a oír. Aquel mundo de oscuridad y
tibieza no es silencioso: alrededor de 50 a 160 veces por minuto se repite el latido
cardíaco tan constante como el tiempo. Y luego de nacer en un mundo ruidoso y
luminoso y en medio del aire, lejos del medio acuoso que lo rodeaba. El bebe puede oír
retumbante como un eco lejano el corazón de su madre mientras ella lo sostiene. El
sonido que tan recientemente significaba seguridad aún está así. En esa relación madre-
hijo, el corazón es realmente algo más que un músculo, es una señal. Le da al bebe su
primera idea de seguridad en el mundo fuera del útero al recordarle los tiempos de la
seguridad intrauterina.
Mujer-madre: seguridad afectiva
De todas las diferencias entre el hombre la mujer, la que más llama la atención es el
caso del contacto emocional. Se ha convertido en una materia de estereotipos clásicos:
las mujeres le gusta el compromiso y los hombres escapa. Las bases biológicas de la
maternidad se conocen desde hace tiempo. (La oxitocina)
Las mujeres, que por tanto tiempo el estado en primer lugar prodigando cuidados son la
primera defensa que tiene un infante contra el mundo, están orientadas hacia las
necesidades los demás. No extraña, de que las mujeres tengan tan exquisito sentidos: el
sentido del olfato es más agudo en la mujer, (especialmente en la ovulación) y lo mismo
ocurre con el tacto. La habilidad para comunicarse a través del tacto es decisiva para la
saludable supervivencia del niño. La diferente actitud que ambos sexos muestran frente
al contacto físico es fundamental. El contacto parece ser uno de los factores con que los
genes cuentan para activar el desarrollo, si la madre no está junto a él para cuidarlo, el
bebe simplemente no desarrolla la química hormonal necesaria para su crecimiento. Se
encontró que el hecho de que la madre sostenga el bebe contra su pecho estimula
directamente la producción endorfinas.
Definiendo la testosterona
La testosterona no es nada extraordinaria para la química vital. Es un derivado del
colesterol. Su estructura básica es un paquete de anillos de carbono, cuatro total con
algo de oxígeno e hidrógeno los bordes. Si a eso mismo cuatro ni se les agrega un poco
más de oxígeno e hidrógeno, se llega a una hormona femenina llamada progesterona.
4. Los científicos ganaron el premio Nobel por aislar la hormona y mostrar cómo recrear
la. El agregado de testosterona sintética a su de empujar a los jóvenes hacia una curva
normal de crecimiento, sumando peso y altura. También la testosterona sintética puede
contribuir a tratar el debilitamiento de los músculos que causa el sida. Actualmente se
ha experimentado con la idea de usar suplementos de testosterona para compensar
algunos efectos producidos como consecuencia de la. En la mayoría de los hombres, la
testosterona tiene a declinar después de los 40. Los esteroides anabólicos (testosterona
sintética) se han ganado una mala reputación como un medio de engaño y la preparación
de los atletas. Ellos, profesionales y amateurs, los usan para desarrollar sus núcleos,
popular y ganar a sus competidores. Los expertos dicen que hay alrededor de 1 millón
de personas que abusan de los esteroides en los Estados Unidos-físico culturistas,
corredores, jugadores de fútbol, deportistas en general-. De ahí proviene la idea de que
las sobredosis de testosterona provoca una personalidad violenta. La testosterona no es
una hormona expresión final; es producida por ambos sexos. Los hombres reproduce
mayormente los testículos; las mujeres, en la glándula adrenal y en los ovarios. Más
adelante el cerebro puede convertir la testosterona necesario, y así la llamada hormona
masculina fácilmente se convierte en la llamada hormona femenina. Es esa flexibilidad
lo que permite entender el nexo entre la testosterona y el comportamiento. En ese sesgo
los investigadores han encontrado receptores neuronales para los andrógenos, como la
testosterona, y también para estrógenos. El cerebro es casi preparado para escuchar lo
que la testosterona tiene para decir. Una vez que hormona se une a un receptor, puede
determinar cambios exigidos, de inducir a la división celular hasta inducir a la muerte
de las células. Muchos investigadores consideran esto como una evidencia de menos
indirectas de que la testosterona es capaz de alterar el cerebro es influir en el
comportamiento. A través de la evolución las hormonas venido adaptando a cada sexo
de la manera en que trabaja mejor. La conservación es un principio básico de la
evolución, la selección natural muestra que no le importan las etiquetas sobre la
masculino y lo femenino los científicos están aún tratando de entender cuando y por qué
el cerebro convierte la testosterona. Pero estamos seguros es de que aún en los adultos
la testosterona puede alterar la forma y la apariencia del cuerpo. Muchos investigadores
advierten a veces sin agrado una correlación entre testosterona y personalidad.
Pareciera ser que tanto los monos como los humanos, los niveles pero no también
influyen en la predisposición a la lucha los investigadores sugieren que la testosterona
responsable no sólo el cambio físico sino también mentales intelectuales. Hay un nexo
definitivo para los hombres entre la testosterona y la anticipó el conflicto. Pero lo que
no sabemos es si la testosterona agudiza el sentido de anticipación, cuya anticipación
misma la que eleva la testosterona. Sabemos, principalmente a partir del trabajo
realizado con otras especies, que niveles de testosterona considerables pueden ligarse
con impaciencia crónica y aún con la detención. Varios estudios hicieron sospechar que
la hormona podría estar ligada más con la actitud que con la conducta violenta. Los
hombres, saltos circulantes de testosterona simplemente tendrían a ser más nerviosos,
más pendencieros, más desaprensivos. Es una teoría solamente, pero esto investigador
piensa que podría sudar explicar la diferencia en las conductas violentas de los
criminales, y tal vez también algunas de las diferencias entre los géneros en cuanto a la
agresividad. En un contexto evolutivo, la hormona podría haber formado parte de la
respuesta competitiva, hasta un ingrediente de del éxito. Podría ser una verdadera
ventaja para un varón en busca de la posición alfa. Los científicos que estudian la
testosterona hacen hincapié en que si la hormona induce una respuesta agresiva, esto no
significa inevitablemente violencia. Hay muchas maneras de canalizar una personalidad
pujante y competitiva. También es necesario enfatizar que la testosterona es solamente
5. una parte de la cuestión biología y agresión: no es la única sino que interactúa con otras
hormonas en un complicado balance de poder y además hay ciertamente otras
influencias biológicas la respuesta agresiva, por ejemplo el uso que hace el cerebro de
los neurotransmisores noradrenalina y serotonina que regula la respuesta del "vuelo
hacia la lucha". Esta combinación no sólo es potente entre nosotros, hombres y mujeres;
también es extremadamente presente en el mundo que lo rodea. La noradrenalina y la
serotonina es esencialmente la suave voz de la razón: calma, incluso controlados, la
regulación contra la agresión. La noradrenalina, por contraste, es todo reacciones eran.
Los dos neurotransmisores crucen en el cerebro en ruda sincronía de un modo en el cual
una persona con alta serotonina tiende a tener más baja noradrenalina y viceversa. Las
mujeres en general tienen alrededor de un 30% más de serotonina que los hombres, lo
que reforzar que son menos belicosas.
El juego cíclico
Los estrógenos aparecen como grandes protectores de la salud mental y fortalecer el
cuerpo de los huesos aparecer. Muchas investigaciones recientes intentan ver si existe
un nexo entre los estrógenos y las conductas indeseables. Hay en la actualidad tres
estrógenos-estrona, estradiol,estriol-. Cada uno está concentrado en una parte diferente
el cuerpo y tienen su propio lugar en el ciclo de vida femenino. La única hormona
esteroide femenina también estudiada como la testosterona es el estadio. Así como el
caso de la testosterona, el estudio del estadio nos recuerda que ninguna conducta puede
ser explicada por una simple faceta de la biología. Un concepto del siglo XX es que las
mujeres sobreviven a los hombres. Una vez que la medicina moderna mejoró la
supervivencia de hacer las mujeres comenzaron a verse más fuertes. Parece que los
científicos del siglo XIX se equivocaron al considerar a la hormona esteroide como un
promotor de larga vida: la testosterona no parece ser una hormona con la cual es fácil
vivir. Puede mejorar el desarrollo muscular y el sexo; puede promover una actitud
enérgica y competitiva, pero todo esto parece extinguirse en el largo plazo, y de hecho
se sabe que puede deprimir activamente el sistema inmunológico. Los hombres son
notoriamente más vulnerables a las enfermedades infecciosas que las mujeres. El
estadio y, en cambio, cada el sistema inmune. En particular, aparece para estimular la
producción de dos de las más potentes componentes del sistema inmunológico que son
parte del sistema de anticuerpos. También puede señalizar selectivamente la respuesta
inmune según donde se la necesite. Por lo tanto parece que es una de las razones por las
cuales el estadio al desaparece durante el embarazo es para permitir al sistema inmune
relajarse disminuir la probabilidad de que el cuerpo de la madre ataque el embrión. Los
sistemas inmunes de las mujeres tienen una respuesta más lenta durante la preñez, que
se recupera gradualmente con el regreso paulatino del estadio después del nacimiento.
Esta hormona también influyen aspectos que innegablemente inciden en una buena
salud, como tener un corazón fuerte, el estadio en provoca un ligero descenso en la
actividad de las plaquetas de la sangre, lo que significa que tiene menos agruparse y a
coagular donde no deben hacerlo lo que facilita el trabajo del corazón tienen la menor
desgaste. También hay evidencia basada nuevamente sobre la terapia conectaría después
de la menopausia, de que la hormona aumenta escamado colesterol bueno en la sangre,
aunque no se sabe claramente cómo y porque. Existe una consistente evidencia de que
los niveles de estradiol puede ser un factor causante de la enfermedad de Alzheimer.
Puede ser que esta vulnerabilidad está relacionada, con el modo en que él estradiol se
eleva y disminuye durante la vida de una mujer. Parece que la última caída (en la
menopausia) es la más peligrosa, que algún efecto de protección se pierden ese punto
6. investigaciones con animales indican que el estradiol mejora la circulación de la sangre
al cerebro manteniendo la salud de las neuronas. Las hormonas también parecen
estimular el crecimiento de las células nerviosas ramificándose en las regiones exactas
del cerebro damnificadas por el Alzheimer.