1. SAGRADA ESCRITURA j1'
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I
Esdras y Nehemías
Cuenta San Juan en su Evangelio que Jesús, al ver el
atrio del Templo de Jerusalén convertido en un
mercadillo, volcó las mesas de los cambistas y
expulsó látigo en mano a los que vendían allí
palomas y animales, lleno de celo por el respeto
debido a la Casa de Dios. Cuando algunos criticaron
lo que había hecho les respondió: Destruid este
Templo y en tres días lo levantaré (Jn 2, 19).
Jesús no tolera la degradación de las instalaciones
del Santuario que suponían esos usos irreverentes, e
interviene con energía para defender la dignidad
exigida por la santidad del lugar. Pero, sobre todo,
toma ocasión de ese lance para señalar que más
importante que el Templo es su propia naturaleza
humana, donde reside verdaderamente la plenitud de
la divinidad, con capacidad para entregar y recuperar
la vida por propia virtud. Por eso precisa el
evangelista que se refería al Templo de su cuerpo (Jn
2,21).
A lo largo de la historia de Israel, el Señor se ha hecho
presente de distintos modos en medio de su pueblo.
En las etapas del desierto, la Tienda de Reunión en
medio del campamento era el lugar escogido para
señalar su presencia entre ellos. Una vez establecidos
en la tierra prometida, en los inicios de la monarquía,
Salomón construyó el Templo de Jerusalén. Siglos
después, el santuario fue profanado, sus sacerdotes
deportados y sus objetos de culto llevados como
botín a Babilonia.
Por Francisco Varo Pineda
Esdras, leyendo la Ley de Moisés. (G. Doré)
on el edicto de Ciro DOS LIBROS desde Adán en el primero en que Judá quedó integra-
C que autorizaba el re-
greso de los deporta-
dos y otorgaba su beneplá-
En la Biblia hay dos rela-
tos de la historia que co-
de las crónicas, y se detiene
poco después del Destierro
en el libro segundo de las
da como una provincia en
el imperio persa. En el con-
junto de esos dos libros se
cito para la reconstrucción Crónicas, que termina men-
mienzan con Adán y los orí- podrían distinguir las si-
del Templo, se abrió un cionando el Edicto de Ciro
tiempo de esperanza, que genes de la humanidad, guientes partes:
que permite el regreso de
tuvo un fuerte impacto en la hasta terminar con la depor- • Restauración del
los deportados.
recomposición, también in- tación a Babilonia. El prime- pueblo de Dios en Judd
A partir de ese momento
terior, de la religiosidad del ro de ellos, el más extenso, (Esd 1 - 6). Cuando Ciro au-
ya no hay una narración
pueblo. Las noticias de esta se inicia con el Pentateuco, continua de los aconteci- toriza el regreso, se forma
época que trasmiten los li- y sigue con la llamada «his- mientos que siguieron. Pero una caravana dirigida por
bros sagrados ofrecen tam- toria deuteronomista» (Jo- los libros de Esdras y Nehe- Sesbasar, que se dirige a Je-
bién un aliento de esperan- sué, jueces, 1 y 2 Samuel, 1 mías permiten conocer con rusalén. Reconstruyen el
za, a la vez que sugieren y 2 Reyes). El segundo, más cierto orden los aconteci- Templo. Una vez concluidas
ideas en todos los momen- breve en la primera parte, mientos más relevantes, las obras y realizada su de-
tos de recomienzo y recons- está constituido por los li- desde el punto de vista de dicación, celebran con gran
trucción de la vida de las bros primero y segundo de la historia de la salvación, gozo la solemnidad de la
personas y de la Iglesia. las Crónicas: parte de nuevo acaecidos durante la época Pascua.

2. • Misión de Esdras: para llevarla a cabo. Una bucodonosor sustrajo de Je- población indígena y la au-
instauración de la Ley vez en la ciudad santa, se rusalén. El primer retorno toridad imperial, debidas a
(Esd 7-10). La narración de cuentan las vicisitudes de de los exiliados tuvo lugar la centralización del culto al
la misión encomendada a las obras de restauración, y unos sesenta años después Señor y a la rígida imposi-
Esdras, el escriba, se inicia se habla de su repoblación. de su destierro. Al frente de ción de unas normas legales
con el documento de Arta- El núcleo central de esta ellos estaba Sesbasar. Con y económicas emanadas de
jerjes, mediante el cual se le parte lo constituye la procla- respecto a la reconstrucción la autoridad de la Jerusalén
entregaban todos los pode- mación de la Ley realizada del Templo, sólo pudieron restaurada.
res necesarios para llevarla por Esdras y el compromiso poner los cimientos (Esd 5, A partir del 520, los pro-
a cabo. A continuación se del pueblo en cumplirla. 16); no se sabe si por des- fetas Ageo y Zacarías fueron
describen los preparativos preocupación o por falta de testigos de una esperanza
para la marcha a Jerusalén y medios materiales, humanos de restauración de la mo-
el desarrollo de la comitiva LA RESTAURACIÓN y técnicos para llevar a cabo narquía davídica. Además,
hasta su llegada. Una vez DEL TEMPLO Y DE esa tarea. exhortaron a la población
allí, Esdras observó un LA SOCIEDAD En el reinado de Darío I, de Judá a mostrar un interés
incumplimiento bastante ge- se tendió a la centralización real por la reconstrucción
neralizado de algunos pre- Se comprende bien que de las estructuras económi- del Templo (Ag 1, 1-11). Se-
ceptos de la Ley, y pronun- los judíos exiliados consi- cas y legales del imperio, y gún Esd 6,15 la reconstruc-
ció una oración penitencial guieran que Ciro, en cuanto esto provocó una serie de ción del Templo se acabó
exponiendo ante Dios las accedió al poder en Babilo- conflictos entre el pueblo y el 3 de febrero-marzo del
culpas del pueblo. Por últi- nia, diera un decreto que les el gobierno. Para intentar año sexto del reinado de
mo, se tomaron severas me- permitía, a quienes de ellos congraciarse con la gente, Darío, esto es, en el año 515
didas para arreglar esa situa- lo desearan, volver a su pa- colocó como gobernadores a.C. Se tienen pocas noticias
ción. tria. El texto del edicto se en todas las provincias a sobre las características pe-
• Misión de Nehemí- conserva en Esd 1, 2-5. La personas naturales de cada culiares de ese Templo re-
as: reconstrucción de la autorización explícita se re- lugar concreto, pero que construido, pero parece que
ciudad (Neh 1-13)• Se ex- fiere a la construcción de gozaban de toda la confian- su disposición no era muy
ponen al principio los moti- un Templo al Dios de los za del gobierno imperial. El diferente de la que el libro
vos que movieron a Nehe- Cielos en Jerusalén, que está elegido para Judea fue Zo- primero de los Reyes descri-
mías a plantearse la tarea de en Judá. En Esd 6,3-5 se robabel, de familia davídi- be para el Templo de Salo-
reconstruir Jerusalén y có- menciona también el retor- ca. Sin embargo, no faltaron món; disposición que, a su
mo alcanzó del rey permiso no de los utensilios que Na- en Judea tensiones entre la vez, coincide sustancialmen-
DEL • AL EDICTO DE CiRO
■
La ciudaddIa Jerusalén fue tomada quintadas por Asiria, se habían producido, imperial. En el adoctrinamiento de las po-
por Nabucodonosor a comienzos del si- además, traslados masivos de pobla- blaciones sometidas, no se hablaba de
glo VI a.C. Con la conquista de Jerusalén ción: parte de la población autóctona fue conquista, sino de legitimación, derechos
y su sumisión al poder babilónico, ll e- trasladada a otros lugares, y hubo repo- de sucesión o restauración del poder
gaba al límite una notable transforma- blaciones realizadas con gentes desarrai- legítimo. Esta política fue perfeccionada
ción de la estructura social de Pales- gadas de otros sitios. A finales del siglo VI por los persas.
tina, que se venía gestando desde la a.C., Palestina era una región carente de En el cilindro de Ciro, por ejemplo,
caída de Samaría. casi toda unidad, ya sea social, económi- se afirma que el rey babilónico había
Esos cambios fuertes habían comen- ca, lingüística o cultural. destruido la religión tradicional; había
zado más de un siglo antes en las regio- Después de la muerte de Nabucodo- esclavizado a sus súbditos; los pueblos
nes central y septentrional, con la caída nosor, el poder de sus sucesores en el estaban en ruinas, e incluso los dioses
del reino del Norte bajo el poder asirio. trono de Babilonia se fue desmoronando habían tenido que abandonar su ciudad.
Las excavaciones arqueológicas ponen por momentos. Mientras tanto, en la veci- En esas circunstancias, fue el propio dios
de manifiesto que, después de la llegada na Persia, Ciro había subido al trono en Marduk quien llamó a Ciro para restable-
de los asirios, se había producido un el año 557 y, en menos de veinte años, cer la justicia en su pueblo, y quien dis-
colapso de la vida urbana en Galilea, que ll egaría a construir un imperio sumamen- puso los acontecimientos para que Ciro
no comenzaría a dar señales de re- te poderoso que extendería sus fronteras tomara Babilonia. Ciro no rehusó esa ll a-
cuperación hasta la época helenística. El hasta el mar Jónico. En el 539, sus tro- mada, y el pueblo lo recibió con los bra-
valle de Yezrael y los altos de la zona cen- pas entraban en Babilonia sin lucha, zos abiertos como a un liberador, con
tral, que eran tierras de gran prosperidad aclamadas por la multitud, debido al odio alegría y canciones. En vez de dedicarse
agrícola, quedaron muy deteriorados. Por que tenían a su rey Nabonid por motivos al pillaje de los templos, devolvió los dio-
su parte, también las regiones del Sur religiosos, puesto que había suspendido ses a sus casas. Esta inscripción del ci-
quedaron deprimidas desde la caída del durante años las fiestas de Año Nuevo li ndro de Ciro forma parte de la propa-
imperio asirio, y especialmente tras la en honor de Marduk. ganda oficial persa, pero es una muestra
ll egada de los babilonios, hasta bien Un elemento importante en la política entre otras de que la «restauración» de
avanzada la época persa. En todas esas de estos grandes imperios fue la crea- los cultos locales era una de las tareas
regiones, sobre todo en las partes con - ción de una ciudadanía fiel al gobierno prioritarias del imperio.

3. te con la posterior de multitud de asas de ja-
Herodes, ya que éste se rra y en las monedas
limitó a embellecerlo y que acuñó la provin-
agrandarlo, sin cambiar cia, lo que testimonia
su estructura original. la autonomía de la que
La época de este Se- gozaba en este tiempo.
gundo Templo supone
un cambio notable con
respecto a la anterior.
COMPOSICIÓN
En ese momento, el po-
der político estaba do- DE LAS
minado por los persas, «MEMORIAS»
que eran extranjeros,
pero la comunidad ju- La composición de
día necesitaba una au- los libros de Esdras y
toridad propia, y esa Nehemías se realizó a
autoridad sería desem- partir de fuentes pro-
peñada a partir de en- pias; algunas de ellas,
tonces por el sacerdo- particularmente exten-
cio. El rito de la unción, sas.
que hasta ese momento De una parte, en
era propio de la entro- esta obra se recoge
nización real, pasaría al una importante docu-
Sumo Sacerdote, título mentación escrita en
que aparece en esta arameo. Son vestigios
época (Ag 1, 1). de una corresponden-
cia diplomática con la
corte persa sobre la
ESDRAS Y oposición de los sama-
ritanos a la restaura-
NEHEMUS ción de las murallas
(Esd 4, 6-23) y a la re-
En ese contexto his- construcción del Tem-
tórico se sitúan las mi- plo (Esd 5, 1-6, 18).
siones de Esdras y Ne- También forman parte
hemías. No hay certeza de ella dos cartas de
acerca de la cronología, Construcción del segundo Templo. (G. Doré) cancillería de origen
ni siquiera sobre el or- persa.
den en que tuvieron lu- Asimismo son de
gar sus viajes. Actualmente Nehemías logró construir las del estado persa para los ju- gran relevancia las «memo-
la mayor parte de los histo- murallas y repoblar la ciu- díos, y recibió aportaciones rias de Esdras», citadas va-
riadores piensan que prime- dad. Además, reorganizó la del soberano para el mante- rias veces en la narración de
ro tuvo lugar la misión de vida social insistiendo en los nimiento del culto del Tem- algunos acontecimientos.
Nehemías, y después la de aspectos propios del carác- plo (Esd 7, 15). Esdras puso Reuniendo los datos que
Esdras. La reconstrucción ter nacional y en la organi- todo su empeño en cumplir aportan, se puede calcular
sumaria de los hechos, se- zación del culto del Templo esta misión. Reunió al pue- que Esdras permanecería en
gún la hipótesis más proba- (Neb 9). blo y le leyó «el libro de la Jerusalén alrededor de un
ble, sería como sigue. Esdras era un escriba de ley de Moisés. Después arre- año. La relación global de
Durante el reinado de familia sacerdotal. No se sa- gló muchos asuntos de la vi- su informe es probable que
Artajerjes I (464-424 a.C.) be con certeza cuándo desa- da social conforme a lo que se contenga en Esd 7-10 y
llegaron a la corte persa rrolló su misión. Pudo haber se dice en esa Ley, especial- Neb 8. En él habría dado
quejas de los samaritanos sido un poco antes que la mente los matrimonios mix- noticias de lo referente a su
porque se estaban recons- de Nehemías, o a la vez. Pa- tos. No se sabe con certeza llegada a Jerusalén, la pro-
truyendo las murallas y la rece probable que la desa- si la expresión «Ley de Moi- mulgación de la Ley y la se-
ciudad de Jerusalén (Esd 4, rrollara unos treinta años sés> designa en ese momen- paración de matrimonios
7), y el rey mandó paralizar después, hacia el año 398 to a todo el Pentateuco o a mixtos. No se sabe si esta
las obras. Nehemías era un a.C., durante el reinado de alguno de los códigos más relación estuvo dirigida a las
judío que ocupaba un pues- Artajerjes II. Recibió del rey antiguos, que después que- autoridades persas, para in-
to importante en esa corte. un decreto por el que se re- daron integrados en el mis- formar del trabajo realizado,
Logró que el rey lo enviara novaba el permiso para que mo. o tuvo como objeto quedar
allí hacia el año 430 a.C. y le volvieran quienes lo desea- La provincia de Yehud como memorial en los ar-
autorizara la continuación ran. También se le dieron creció en importancia du- chivos del Templo.
de los trabajos. A pesar de poderes para imponer la rante el siglo IV a.C. Su De notable importancia
la oposición de Samaría, «ley de su Dios» como ley nombre aparece inscrito en son también las « memorias

4. de Nehemias», que ocupan Sin embargo, la continui- vidad religiosa sufrió pro- eran los que Nabucodono-
fragmentos de considerable dad que se establece entre fundos cambios de formas: sor se había llevado a Babi-
extensión conservados en el pueblo de Dios que vivía durante mucho tiempo estu- lonia (Esd 1, 7-11). Tanto los
distintas partes del libro que en Judá, gobernado por la vieron en el exilio lejos de sacerdotes como el personal
lleva su nombre. monarquía davídica, y el es- Jerusalén, por lo que no pu- que servía en todo lo rela-
La estructuración de to- tablecido en aquel territorio dieron ofrecer en el Templo cionado con el culto eran
dos estos materiales lite- cuando formaba parte del los sacrificios acostumbra- los descendientes de los
rarios se realizó, como es imperio persa no ha de en- dos. En esas circunstancias que con anterioridad se ha-
habitual, en una etapa pos- tenderse en un sentido está- surgió la sinagoga como lu- bían ocupado de esas tareas
terior a las misiones de am- tico como si se tratara de gar de reunión y fue co- (Esd 2, 36-63; Nh 7,39-65).
bos. Muy probablemente la una simple pervivencia in- brando mayor protagonismo La continuidad que su-
composición de los libros mutable. Sucede algo análo- la Ley. brayan estos libros constitu-
de Esdras y de Nehemías tu- go al modo en que se man- Cuando las murallas de ye un elemento importante
vo lugar en Jerusalén. Si se tiene la vida en los seres la ciudad fueron reconstrui- de su enseñanza, ya que
tiene en cuenta que el sumo animados: así como el adul- das y el Templo se reedifi- ofrecen un testimonio acer-
sacerdote Yadúa, citado en to es la misma persona que, có, también se reorganizó la ca del modo en que Dios
Neh 12,22, vivió en la época años atrás, fue adolescente, vida nacional y religiosa del conduce la historia de la
de Alejando Magno –según de ese modo el Israel de la pueblo. En ese momento Salvación: avanzando y pro-
afirma Flavio Josefo (Ant. época persa es el mismo de era importante hacer notar gresando al paso de los
11, 322-324)–, la obra debió antes, aunque en él se ha- los lazos de continuidad tiempos, haciendo surgir
concluirse en los primeros bían realizado profundas entre los antiguos y nue- respuestas nuevas a las di-
años de la época helenísti- transformaciones debidas a vos lugares e institucio- versas situaciones que se
ca, en torno al 300 a.C. las concretas vicisitudes his- nes. El altar y el Santuario presentan, pero mantenien-
tóricas por las que pasó. Los fueron construidos en su lu- do siempre la identidad que
judíos habían perdido la so- gar (Esd 3, 3 y 6, 7 respecti- le es propia mediante fuer-
CONTINUIDAD Y beranía nacional sobre su vamente). Los utensilios que tes lazos de fidelidad a los
FIDELIDAD territorio, y ya no estaban los deportados transporta- orígenes.
gobernados por un monarca ron a su regreso hasta Jeru- En los libros de Esdras y
A LOS ORÍGENES davídico. También la acti - salén, para uso del Templo, Nehemías se destaca tam-
bién con fuerza la identi-
Los libros de Esdras y
dad del pueblo elegido, que
Nehemías tratan de la res-
ha de mantenerse mediante
tauración material y de la
la severa prohibición de ma-
reorganización de la vida
Los libros de Esdras y Nehemías han de ser vistos y leí- trimonios mixtos, y la segre-
social en Judá después del
dos como una etapa preparatoria y transitoria hacia la revela- gación respecto a los genti-
exilio de Babilonia. Los di-
ción del Nuevo Testamento. les. No siempre había sido
versos acontecimientos que
• Preparatoria, porque ambos libros dan razón en buena así en la historia del pueblo,
configuran esta etapa de la
parte –no del todo, pues había otras tendencias dentro del ju- como se puede apreciar en
restauración forman parte
daísmo– de la situación religiosa y de la forma de pensar, cen- los libros de Rut o de Jonás.
de un proyecto unitario de
trada en el cumplimiento de la Ley, que seguía manteniendo el Pero en esos momentos, en
Dios, aunque su realización
pueblo judío en la época en que Jesucristo vivió y la Iglesia los que la tentación de sin-
tuviera lugar en diversos
comenzó su andadura. cretismo se acentúa debido
momentos, durante los rei-
nados de varios monarcas • Transitoria, en cuanto que las enseñanzas de los libros a la nueva situación social y
persas sucesivos (cfr. Esd 6, de Esdras y Nehemías sobre la absolutización de la Ley como política, tales medidas fue-
14). medio de obtener la misericordia de Dios, y la segregación ron providenciales para
respecto a los gentiles como medio de mantener la identidad mantener la identidad reli-
Esos sucesos constituyen
del pueblo elegido, serían profundamente modificadas en el giosa del «pueblo de Israel,,
una nueva etapa en la histo-
Nuevo Testamento. Para éste, en efecto, aunque la Ley con- que en ese tiempo toma la
ria de la salvación, en con-
serva su valor, la misericordia de Dios llega al hombre –a to- configuración de ,pueblo ju-
tinuidad con las preceden-
dos los hombres, judíos o no– por Jesucristo, el Mesías. La dío». En efecto, a partir de
tes. Dicha continuidad viene
identidad de la Iglesia, nuevo Pueblo de Dios, no se mantiene las reformas de Nehemías y
subrayada por las genealo-
mediante la segregación frente a los gentiles, sino mediante la Esdras, tal como aparecen
gías, que sirven para atesti- fidelidad al Señor y la santidad de sus miembros en medio de
guar los lazos existentes en- en el libro, la pertenencia al
todas las naciones. pueblo no está unida a ha-
tre la población que lleva a
Estos libros se han interpretado en la tradición cristiana bitar en un territorio concre-
cabo la restauración y el
sobre todo en sentido espiritual, buscando en ellos leccio- to o proceder de él, sino a
pueblo que había vivido en nes acerca de la edificación de la Ciudad de Dios, es decir, de
ese territorio hasta el Destie- tener una ascendencia de-
la Iglesia. Además de esa perspectiva general, la figura de Es- terminada –de ahí la impor-
rro. Se trata de diversas ge- dras es contemplada como un anticipo de algo que Jesucristo
neraciones de personas, pe- tancia de las genealogías– y
realizaría en plenitud: así como Esdras instruyó en la Ley de
ro del mismo pueblo al que a someterse a una ley consi-
Moisés al pueblo de Dios, Jesús enseñó esa ley y la llevó a su
Dios había elegido desde derada como la Ley dada
perfección (cfr. MI: 5,17).
mucho tiempo atrás. por Dios a Moisés. ■