Colectivo Orienta 2015-16

Colectivo Orienta 2015-16
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colectivorienta@gmail.com
Editores de Colectivo Orienta 2015-16: Claudio Castilla, Alberto del Mazo y Mónica Diz.
Autores (por orden alfabético): Xohán Álvarez, Rosa Aparicio, José Pedro Barquero,
Begoña Cañete, Claudio Castilla, Mónica Diz, Mª Ángeles García, Belén G. Capilla, Lucía
Fernández Vivancos, Mónica Garrido, María José Gómez Corell, Mª José Guardiola, Isabel
Guillén, Jesús Hernández, Isabel Ibarrola, Raúl R. López, María José de Luis, Antonio A.
Márquez, Alberto del Mazo, Celia Molares, Montaña Navas, Lourdes Otero, María Eugenia
Pérez, Pilar Pérez Esteve, Enrique Piña, Juana Portugal, Mariola Rodríguez, Margarita Rúa,
Manuela Sánchez, Ana Torres Jack y Mábel Villaescusa.
© del texto: las autoras y autores
Todas las fotografías están referenciadas en cada entrada original en
https://colectivorienta.wordpress.com/

ÍNDICE
Pulsa en el título de cada entrada para encontrar el artículo en este
libro. Podrás volver a este índice en el pie de página de cada página.
COLECTIVO ORIENTA
Editorial.
Preguntas para la refleacción. Claudio Castilla
ORIENTAR Y EDUCAR
Ayer y hoy en el trabajo del orientador. Isabel Ibarrola
¿Cómo he llegado yo aquí? Ana T. Jack
El perfil del orientador y la orientadora en el siglo XXI. Mª Ángeles García
Blanco
La actitud en orientación. Begoña Cañete
Quisiera saber... Claudio Castilla
PTSC: en peligro de extinción. Mónica Garrido
Trabajando como psicóloga en un gabinete psicopedagógico municipal.
Montaña Navas
La intervención gratuita desde los servicios psicopedagógicos municipales.
José P. Barquero Ruiz-Olivares
Servicios Psicopedagógicos Municipales: ventajas e inconvenientes. María José
de Luis
Diario de un ATAL en Santa María del Águila, Almería. Enrique Piña Batista
Vamos al futuro. ¿Quién se sube? Lourdes Otero

COMUNIDAD EDUCATIVA
Orientando a la comunidad educativa. Primer eslabón: las familias. Mariola
Rodríguez
¿Estamos ante la generación burbuja? Belén G. Capilla
Generación en corto. Jesús Hernández
Un pacto por la orientación. Alberto del Mazo
El papel del orientador ante los expedientes disciplinarios. Mónica Diz Besada
Red secreta de apoyo. Quién habla no es chivato, es valiente. Pilar Pérez
Esteve
"Jornadas de Acogida", una experiencia para la mejora de la convivencia.
Isabel Guillén Romera
Coordinación de la atención a la diversidad. Celia Morales
HACIA LA INCLUSIÓN EN EDUCACIÓN
Pedagogía inclusiva. Antonio A. Márquez
El futuro de la educación y la pedagogía inclusiva. María Eugenia Pérez
El reto de construir una educación inclusiva para todos entre todos. Juana
Portugal
Caminando juntos hacia una escuela inclusiva. Margarita Rúa Fernández
Reflexiones sobre la evaluación psicopedagógica. Xohán Álvarez
Y llegamos a ellos... Mª José Guardiola
Sobre dictámenes de escolarización y prácticas obsoletas. María José Gómez
Corell
¿Las adaptaciones curriculares deberían ser un traje a medida? Lourdes Otero
Ocultar mostrando: el modelo de orientación sistémica para la inclusión
educativa. Raúl R. López Reyes

EDUCACIÓN Y ORIENTACIÓN MEDIADAS
CON TIC
La orientación mediada. Mábel Villaescusa
A cur(r)ar. Jesús Hernández
Que no hay tiempo para más... Alberto del Mazo
La muleta. Manuela Sánchez
¿Por qué usar TIC en mi trabajo con alumnado con necesidades de apoyo
educativo? Rosa Aparicio
Uso de las TIC en Audición y Lenguaje. Lucía Fernández Vivancos
A MÁS DE TRES VOCES...
Un proyecto común. Claudio Castilla
Porque ninguno de nosotros es tan bueno como todos nosotros juntos.
Alberto del Mazo
Colectivarse o dormir. Mónica Diz Besada

Editorial
COLECTIVO ORIENTA es una plataforma para la expresión conjunta y
aprendizaje mutuo a través de la reflexión de la práctica diaria, análisis
crítico de la realidad educativa, exposición de experiencias y programas
de interés, análisis de recursos, divulgación de investigaciones,… en torno
a los ámbitos de la orientación educativa.
Está dirigido a orientadores educativos que desarrollen su trabajo en
educación infantil, primaria y secundaria, aunque pueden participar y
beneficiarse otros agentes educativos.
La línea editorial es abierta, plural, disciplinar y científica, siempre bajo
el respeto a otras personas y entidades.
Los editores.

PREGUNTAS PARA LA
REFLEACCIÓN.
Claudio Castilla
Orientador del IES Ramón Arcas Meca (Lorca, Murcia).

¿Cuántas veces has
recomendado a los alumnos y
profesores trabajar en
equipo, mientras seguimos
sin colaborar con otros
orientadores?
¿Cuántas veces has pensado
que los profesores tienen que
abrir más las puertas de sus
aulas, mientras que las de
nuestros despachos siguen
cerradas?
¿Cuántas veces te han
preguntado en qué consiste
tu trabajo porque no suele
ser conocido?
¿Has tenido alguna vez la
inquietud de compartir tus
reflexiones personales o un
proyecto de centro y no has
tenido ningún lugar dónde
hacerlo?
¿Echas de menos el aprender
de tus compañeros?
¿Cuántas buenas prácticas
han caído en el olvido por no
ser conocidas y difundidas?
¿Cuándo ha sido la última
vez que dedicaste un tiempo
a reflexionar sobre tu
trabajo?
¿Cuántas veces has intentado
buscar recursos o ideas en la
red y no lo has encontrado?
¿Seremos capaces de, al
menos, compartir
pensamientos y experiencias
que nos puedan servir de
reflexión y, a muchos, de
ejemplo y aprendizaje?

ORIENTAR Y
EDUCAR

AYER Y HOY EN EL TRABAJO
ORIENTADOR.
Isabel Ibarrola
Orientadora educativa en Navarra

Los del norte (y no es serie televisiva)
hemos seguido trabajando porque
nuestras vacaciones de Semana Santa
comienzan el jueves 24 de marzo. Así se
me ocurre compartir estos días de
trabajo, como podría haber escogido
cualquier otra semana, en
representación del día a día en el trabajo
de Orientación Educativa en las etapas
Infantil y Primaria.
Sólo se trata de un pequeño tramo de
experiencias, reales, que no reflejan ni
mucho menos todo el trabajo que se lleva
a cabo en este ámbito, pero si es un
compartir una pequeña muestra.
Consulto la agenda (vital para mi, puesto
que me permite ordenar y organizar el
día a día) para no olvidarme nada y esto
es lo que me ocupa…
Ayer lunes llegué al colegio con la tarea a
primera hora de realizar una observación
en una clase de 1º de primaria,
atendiendo sobre todo a un niño que
preocupa a su tutora por el “despiste”
que presenta en clase. Ya tuvimos (en
plural porque actualmente una alumna
en prácticas comparte conmigo el
espacio/tiempo orientador) una primera
entrevista inicial con el chaval, que nos
dio pistas sobre su situación personal,
familiar, y otras dimensiones que le
atañen. Mañana nos reuniremos con su
familia para contrastar impresiones.
A segunda hora el seguimiento de tres
alumnos (dos chicas y un chico) de una
clase de 4º cuyo tutor quería en principio
derivar a Salud Mental, pero con el que
acordamos que sus situaciones no
requerían esta intervención, sino un
seguimiento por nuestra parte para
intentar, entre todos, diferentes mejoras
en el ámbito de los aprendizajes y la
conducta. Tras las entrevistas
individuales y compromisos pudimos
felicitarles por su mejora en la 2ª
evaluación respecto a la primera (gran
alegría por nuestra parte).
Llegamos al recreo con un encuentro no
programado con una mamá, que
asomándose a la puerta nos pide la
palabra. La atendemos escuchando sus
quejas y peticiones que trasladaremos al
tutor de su hijo, según acordamos.
A continuación nos entrevistamos con
una niña de 2º cuya tutora relata
altibajos en su rendimiento. Al
entrevistarnos con ella queda patente su
malestar personal al tener que dejar a la
mayor parte de su familia para regresar a
la rutina del colegio, lo cual se refleja en
su forma de estar en clase y su
rendimiento. En más de una ocasión nos
encontramos con situaciones parecidas.
Una conversación tranquila y privada
puede dar luz sobre la conducta
observada y nos permite escuchar,
acompañar, empalizar y proponer otras

miradas, tanto al profesorado como a los
niños y niñas y a sus familias. El día a día
“avasallador” no permite en ocasiones
esta práctica imprescindible.
El niño de 1º de primaria con el que nos
íbamos a entrevistar a continuación no
ha venido al colegio. A ver si mañana
acude, porque tenemos un hueco a las 10
para hablar con él.
A última hora acuden unos papás de
acogida de una chica de 6º con los que
aclaramos algunas cuestiones referidas a
la preinscripción a Secundaria, las
opciones, optativas y posibilidades de
apoyo educativo que podría necesitar el
próximo curso.
Terminamos la jornada apuntando en el
registro de intervenciones de orientación
los datos de lo trabajado. Se trata de un
recurso que permite llevar al día la
atención realizada y que llevo utilizando
hace varios años, según un modelo que
me facilitó una estupenda compañera en
orientación de formación profesional con
la que pude compartir un curso en dicha
etapa (ver modelo adjunto).
Actualizo archivos en Drive subiendo un
PDF sobre estimulación cognitiva.
Hoy ha comenzado el día, antes de la
entrada del alumnado, con el traslado de
la demanda de la mamá (según la
entrevista de ayer) al tutor. Se trata de
una labor mediadora que tendrá su
continuación a la vuelta de vacaciones
porque ha dejado recado para que se le
llame por teléfono, y al hacerlo han
surgido otras quejas y peticiones.
Cuando familia y tutor no van en la
misma dirección, quien pierde es el
alumno. Desde orientación podemos
llevar a cabo una labor mediadora que
acerque posturas.
El chaval de 6º que tenía que venir a
primera hora no aparece… en alguna
otra ocasión le hemos ido a buscar, pero
hoy esperamos, y en el recreo nos dice
que se le ha pasado la hora/día, porque
pensaba que era ayer. Acordamos que
puesto que su situación ha mejorado en
relación a las dificultades académicas y
personales que tuvo, nos reuniremos si
lo necesita según su demanda.
La que no falla es la niña de 3º con la
que venimos realizando un seguimiento
a requerimiento de su familia. Es muy
reservada, y nos alegra su espléndida
sonrisa al felicitarle por la mejora de sus
notas. Acordamos volver a vernos en un
mes y hablar con su tutora sobre cómo
estudiar sociales y naturales. La tutora,
muy receptiva, comparte la necesitad de
refuerzo positivo con ella y modelará
cómo estudiar con toda la clase.

En el recreo surge un nuevo tema
imprevisto: una solicitud de cambio de
modelo lingüístico por cambio de
centro. Es un tema a consultar con el
Servicio de Euskera del Departamento
de Educación y con el Inspector y la
Dirección del Centro. En Orientación
realizaremos el informe requerido si
finalmente se produce el cambio. Tras el
recreo cerramos con una entrevista el
seguimiento de un caso de una niña de
1º. Se encuentra genial en su nueva clase
(según nos relata) y su tutora también la
ve ajustada y contenta. Hablamos con la
mamá para comunicar nuestras
impresiones y contrastar la situación,
acordando no llevar a cabo nuevas
actuaciones, si no hay nuevas demandas.
Nos entrevistamos con una niña de 4º en
seguimiento de su situación en clase.Ha
tenido conflictos con una compañera, y
el equipo docente está al tanto de la
situación. De momento todo va bien,
pero nos seguiremos viendo para
comprobar que el trato entre ambas
sigue siendo respetuoso.
La semana pasada tuvimos una reunión
de la RED del barrio que trabajamos con
la infancia y adolescencia (salud,
servicios sociales, centros educativos y
asociaciones) y tengo que cumplimentar
el acta a partir de las notas recogidas en
dicha reunión. Estamos trabajando para
colaborar en la organización de unas
jornadas sobre la infancia que tendrán
lugar en noviembre.
En el correo electrónico tengo dos
respuestas de psicólogas que intervienen
con dos niños del
colegio. Intercambiamos información,
pautas y actuaciones que se trasladarán a
los equipos docentes respectivos.
Escribo un correo electrónico a mis
compañeras del grupo de trabajo de
orientación (con las que me reúno
mensualmente según el plan de trabajo
anual que promueve nuestro Negociado
de Orientación en el Departamento de
Educación) para realizar una consulta
sobre los planes acción tutorial de sus
respectivos centros puesto que pensamos
revisar el nuestro (la Directora nos pasa
documentación), y enseguida recibo
respuestas con ejemplos y actuaciones.
En reunión con la jefa de estudios
acordamos la ubicación de dos niños y
una niña que acaban de llegar de otro
país y de otro centro, según los datos de
que disponemos y las características de
los grupos.
Mañana a primera hora nos espera un
niño de 1º de primaria que ha faltado
mucho al colegio. A última hora de la
mañana nos reuniremos con su familia.
Desde tutoría se habló con ellos.
También se ha derivado el caso a

Servicios Sociales y al Departamento de
Educación por parte de la Dirección.
Intentaremos entre todos revertir esta
situación porque el derecho del niño a
venir al colegio es fundamental.
Veremos si acude el niño de 1º que ayer
no vino y con el que nos queremos
entrevistar, nos reuniremos con la mamá
del niño que estuvimos observando ayer
en clase y tendremos una reunión con
una tutora de 3º de primaria a la que le
preocupa un alumno de su clase que a
pesar del apoyo educativo no mejora en
sus aprendizajes (probablemente
tendremos que realizar una evaluación
psicopedagógica para ajustar la
respuesta educativa).
Y lo que venga en el día… porque esto es
un “no parar”.
Eso sí, esta es mi profesión, mi trabajo, y
me encanta.

¿CÓMO HE LLEGADO YO AQUÍ?
Una reflexión personal acerca de
la orientación profesional y la
intuición.
Ana T. Jack
anatorresjack.weebly.com

Saber cómo un orientador/a elige
su profesión suele ser un misterio
curioso pero interesante, más aún
cuando son estos los profesionales
que a veces más influyen, ayudan
o aconsejan en la decisión
vocacional de las personas. Ana
Torres Jack nos cuenta su
recorrido personal, desde que
alguien le aconsejó hasta que ella
misma descubrió la manera de
combinar sus dos pasiones, la
orientación educativa y el
periodismo.
"A ti te iría bien estudiar Psicología o
Periodismo", me dijo el psicólogo del
colegio con voz grave y cara muy seria.
¡Pero eso ya lo sabía yo! Efectivamente,
hacía tiempo que yo tenía claro que
quería estudiar Psicología o Periodismo.
Pero... ¿cuál de ellas?
Me había sacado de mi clase de Latín de
COU para informarme de los resultados
de unos larguísimos test de intereses
profesionales que me había llevado
cubrir toda una mañana. Yo esperaba
que aquella reunión con él pudiera
aportarme alguna clave de mi
personalidad para poder decidirme por
una u otra carrera. "Si me hubiese
preguntado directamente lo que quería
estudiar, me habría ahorrado cubrir
todos esos cuestionarios y él
corregirlos", pensé para mí mientras
volvía cabizbaja y algo enfada a
clase. "No me ha ayudado nada, y me ha
dejado como estaba", me
lamentaba. "En todo caso",
reflexioné, "lo que tengo claro es que
nunca trabajaré de psicóloga en un
centro escolar, ¡vaya bluff"!
Esa fue mi primera idea de en qué
consiste un psicólogo escolar. Y durante
mucho tiempo, la única. (Y es cierto que,
hoy en día, los orientadores educativos
no siempre cumplimos con las
expectativas de nuestros "clientes".
¡Normal! No somos magos ni tenemos
bolas de cristal... Aunque nos encantaría
).
La vida me llevó, finalmente, a estudiar
Psicología. Y digo la vida, porque al
principio tampoco es que fuera una
vocación clara y definida. Más bien fue
una intuición, un sentido de grandísima
utilidad que tenemos hoy en día muy
olvidado a la hora de tomar
decisiones. "Déjate de tantos
cuestionarios de orientación vocacional,
olvida esos análisis de salidas laborales
y no le hagas tanto caso a la
orientadora de tu instituto, que te dice
que con la Física y la Química lo vas a
pasar mal en esa carrera de ciencias.

¿Qué es lo que te pide el cuerpo?, ¿qué es
lo que te gustaría hacer si pudieras?,
¿qué es lo que te pasarías haciendo el
resto de tu vida? Pues hazlo o, al menos,
inténtalo. Siempre tienes tiempo de
maniobrar ", les suelo decir a los más
angustiados estudiantes ante una
encrucijada en la que se tienen que
decidir.
En fin. Allí estuve, en la Universidad
Pontificia de Salamanca, enamorándome
de la psicología y de la vida en general.
Cinco años de placer pasan rápido. Con
mi título de licenciada bajo el brazo, la
especialidad de Psicología Clínica
(continuaba sin tener el menor interés
en la psicología escolar) y un buen
expediente, me volví a Coruña con ganas
de comerme el mundo. Pero casi me
come él a mí...
Volver a la casa familiar, no encontrar
trabajo y estar de bajón en plena época
de los JASP (Jóvenes Aunque
Sobradamente Preparados) era todo uno.
Pero entonces me vi en la obligación de
dar un paso adelante (Como en el
chiste: "¿Tú que tomas para la
depresión? ¿Yo? Decisiones"). Y guiarme
otra vez por la intuición: me matriculé en
el Máster de Periodismo de La Voz de
Galicia y la Universidad de A Coruña. No
tenía claro que tuviera las cualidades
suficientes para estar a la altura de mis
compañeros (muchos de ellos
periodistas, filólogos...) pero me prometí
a mi misma aplicarme todo lo posible y
aprovechar la beca de la Fundación
Barrié que me permitió embarcarme en
estos nuevos estudios.
Le eché muchas horas, tuve muy buenos
maestros, y sentí que me enamoraba del
periodismo tanto como de la psicología.
Una vez acabada esta formación, me
llegaba otra vez esa inquietud de volver a
estar en la calle. Pero enseguida llegó
una oferta de trabajo para contratarme
en... ¡un periódico deportivo! ¿Pero qué
clase de broma pesada me tenía
preparada el destino? Yo no sabía ni qué
era un fuera de juego.
Pero lo aprendí.
Allí estuve un tiempo, escribiendo
crónicas deportivas y biografías de
futbolistas. Ese sí que fue un momento
de desorientación total, entre la
psicología (por entonces abandonada) y
el periodismo (en el que tampoco veía
fácil hacerme un hueco).
Hasta que me enteré de que había unas
oposiciones para orientador a las que me
podía presentar. No tenía mucho que
perder, y algo me decía que, si había sido
capaz de trabajar en un periódico
deportivo sin volverme loca, bien podría
encontrar mi hueco en un centro

educativo. ¡Y en el mismo papel que
aquel psicólogo de mi adolescencia!
Mucho más rápido de lo que esperaba,
me vi al frente de un Departamento de
Orientación, con una mezcla de ilusión,
miedo e incredulidad. "¿Voy a ser capaz
de orientar? Bueno, si fui capaz de
escribir crónicas futbolísticas...", me
animaba a mí misma.
Finalmente la orientación educativa me
encandiló.
Prácticamente al mismo tiempo, desde
La Voz de Galicia me pidieron una
colaboración semanal sobre temas
educativos que aún hoy continúa.
Recuerdo con emoción cómo a mi jefe de
sección, Fernando Garrido, le pedí
permiso para bautizar mi página y
encabezarla con el
nombre "Orientación educativa". Le
pareció muy buena idea, y así ha salido a
la calle puntualmente cada miércoles
desde hace 18 años. Ese sí que fue un
momento bonito, de alineación de los
astros, de encontrar mi sitio. Me sentí (y
me siento) muy privilegiada. Por fin
podía escribir sobre mi propia
experiencia desde el Departamento de
Orientación, y ofrecer a través del
periódico los recursos e informaciones
que yo veía que se demandaban desde
los centros educativos. Por fin conectaba
mis dos mundos: psicología y
periodismo, orientación y divulgación.
No, si al final aquel psicólogo no iba tan
desencaminado cuando se negaba a que
escogiera un solo camino y renunciara al
otro.
Los primeros temas sobre los que
empecé a escribir estaban pensados para
que fueran trabajados en las tutorías:
Técnicas de Estudio, Educación en
Valores, Orientación Vocacional,
Educación para la Salud... Aunque
parezca imposible, en esos primeros
años de expansión de los Departamentos
de Orientación no había internet. Y si lo
había, no contenía recursos de calidad.
Así que nos los teníamos que inventar.
Poco a poco empecé a sacar artículos
dirigidos a tutores para mejorar la
relación con las familias: cómo lograr
una comunicación fluida, como
informarles de las necesidades
educativas y programas de apoyo, como
pedirles su colaboración... Fruto de todo
ese trabajo se editó la Guía de
Orientación Educativa: 100 claves
para padres y profesores.
Ya en los últimos años, en concreto
desde hace cinco, pegué un giro que
consideré necesario. Ya no era tan
importante hablar de recursos para el
tutor (internet es como una inmensa
biblioteca al alcance de todos) como de
ofrecer orientaciones básicas para las
familias, más desorientadas que nunca y

con poco tiempo y quizá criterio para
buscar informaciones rigurosas pero
sencillas. Así creé una "Escuela de
Padres", en la que cada mes abordo un
tema de interés a través de mis artículos:
las nuevas tecnologías, la adaptación
escolar, la educación no sexista, las
claves del éxito académico...
Creo que hasta este punto, el de
convertirme en orientadora y
divulgadora de temas educativos en
prensa y en otros medios, he llegado por
intuición, por seguir aquello que me hace
disfrutar y sentirme útil. Al final, como
dice Ken Robinson, se trata de no perder
de vista un único objetivo: "¿No sabes lo
que quieres hacer en la vida? Averigua
qué te apasiona".

EL PERFIL DEL ORIENTADOR Y DE
LA ORIENTADORA EN EL SIGLO XXI
Mª Ángeles García Blanco
Orientadora en el IES Guadalpín
orientaguadalpin.blogspot.com

¿Qué perfil profesional
se requiere para ser
Orientadora u
Orientador?
Este artículo pretende reflexionar sobre
la construcción y el perfil profesional de
los orientadores y orientadoras de los
IES. Para realizar este breve relato, me
basaré en la experiencia, en las
intuiciones, en las observaciones y en las
lecturas realizadas. Mi propósito es
humilde, no pretendo hacer un estudio
exhaustivo, no está a mi alcance. Sólo
esbozaré algunas ideas y vivencias que
nos ayuden a reflexionar, o a soñar,
sobre el posible devenir de la
Orientación Psicopedagógica en
nuestro contexto socio-cultural.
Los primeros departamentos de
Orientación en los IES nacieron a partir
del año 1992 y 1993. El aterrizaje en los
centros fue muy complejo. No había un
modelo de referencia en Orientación
Educativa. Era escasa la historia de la
orientación. No existía una “cultura de
orientación”. Las piedras en el camino
fueron intensas. El conservadurismo en
los paradigmas didácticos despertaban
los prejuicios hacia la orientación. Su
nacimiento no fue un camino de rosas.
Había muchos obstáculos y miedos por
lo desconocido, por este nuevo
profesional “los pakistaníes” “¿ésta
pa que está aquí?", decían los
osados. De hecho, en algunos sectores
del profesorado, aún seguimos
demonizados e infravalorados. La falta
de comprensión al puesto de trabajo era
absoluta. Despertaba comparaciones,
enemistades, polémica e implicaba una
soledad en un puesto de trabajo, que
había sido creado para compartir y unir.
Ante estos frenos y desinterés por la
orientación, nos hemos preguntado:
“¿Para qué, Orientar?”
La Administración estaba un poco
perdida en relación a horarios, funciones
y actuaciones de los orientadores/as. A
pesar de las adversidades, crecimos y la
orientación fue calando en los centros
como el chirimiri en la tierra mojada.
Los grupos de trabajo adscritos al CEP
con profesorado del centro, nos permitió
la cercanía, el dinamismo, la sensibilidad
hacía la orientación y sumar algunos o
muchos apoyos en los claustros. En mi
experiencia, una máxima aparecía en la
tarea orientadora, como decía
Plutarco: “No conozco ningún
camino para el éxito, pero sí un
camino para el fracaso: querer
contentar a todo el mundo”. Esta
máxima generaba confianza, serenidad y
tranquilidad.
La formación permanente ha sido
nuestra compañera de viaje y palanca
para la construcción del perfil del
orientador u orientadora. La formación
continua es esencial en la ardua tarea de

la orientación. Permite crecer
profesionalmente y personalmente.
Aprendemos estrategias de intervención,
trabajo en equipo, compromiso… Aún
reconociendo que no contamos con
varitas mágicas, el contacto con otros
orientadores, la asistencia a cursos,
congresos, encuentros y jornadas, es
imprescindible para nuestra
actualización laboral.
Las relaciones con todos los estamentos
de la comunidad educativa iban en
aumento. Los alumnos tenían una
concepción errónea de lo que era una
orientadora. Era el sinónimo a la
“loquera” “pasadora de test”. Sin
embargo, el alumnado fue tomando
conciencia de su papel, creándose una
red de alumnos muy asiduos al
departamento de orientación en la
búsqueda de soluciones a sus
inquietudes y problemas. Los
estudiantes aportan energía, frescura y
renovación. Entusiasma trabajar con los
adolescentes, comprender su mundo.
Hay una gran labor con ellos y ellas.
Escucharles sin expectativas, ni
prejuicios es esencial en Orientación.
Además, como dicen que somos magos,
podemos convertir un gesto fruncido, un
llanto, en una gran sonrisa y la falta de
perspectativas en una toma de
decisiones. La mochila va colmada de
todo el aprendizaje adquirido.
¿Cuál es la situación
actual?
Hemos progresado profesionalmente,
hemos aprendido a ser “Orientadores” y
se han establecido los departamentos de
Orientación en los IES.
En el presente, la Orientación ha
cambiado. La integración, la aceptación
en un centro es favorecedora. Una
mayoría de profesorado acude al
Departamento de Orientación. La
coordinación tutorial está anclada en los
centros. Hay arraigo en los centros, en el
sistema educativo, en la
administración. Se ha creado cultura
de trabajo en Orientación. Como las
piezas de un puzzle, todo se ha acoplado
y normalizado a lo largo de estos años.
Aunque, el orientador u orientadora si
no encuentra respuesta en las directivas,
en el profesorado, en el alumnado, puede
desmotivarse y perder su ímpetu e
ilusión en el trabajo. Una se
cuestiona: “¿Quién motiva a la
Orientadora u Orientador?”
Si en la actualidad preguntáramos a los
interesados sobre el papel de una
Orientadora en un centro educativo y sus
aportaciones a éste, las respuestas serían
tan diversas como concepciones
diferentes hay de la orientación.
Tímidamente, se ha preguntado y todas
las personas han contestado con
reflexión y con verdadero interés,

conocedores de las aportaciones de este
profesional. Entre ellas, destaco:
 Aporta una visión
especializada a la atención a
la diversidad.
 Auxilia, apoyo y seguridad
al alumnado, familias y
profesorado.
 Contribuye a una escuela de
comunicación y diálogo.
 Es como el corazón del
organismo “recibe, da,
llegando hasta el final”.
 Permite cohesionar al
profesorado en las distintas
disciplinas y su diversidad,
favoreciendo no ser “islas”.
Se observa la concepción dinámica y
positiva del papel de una orientadora. El
tiempo hace historia y ante esta
panorámica, cabría preguntarse: ¿Qué
perfil profesional se requiere para
ser Orientadora u Orientador?
¿Podríamos hablar de una
persona con autocontrol
emocional, alegre, culta,
comprometida, humor, iniciativa,
mediadora,…? ¿Podríamos hablar
de nuevos modelos de orientación
y actuales a la encrucijada
sociocultural?
En esta sociedad red del bienestar
empiezan a surgir síntomas alarmantes
de apatía y pasividad en algunos jóvenes,
sumergidos en la cultura del ocio y no
esfuerzo, crisis de valores tradicionales y
corrupción, fugacidad, hedonismo, paro
juvenil, terrorismo...
¿Qué papel le
corresponderá a la
Orientación
Psicopedagógica en su
función preventiva en
este proceso?
Los interrogantes quedan abiertos, sólo
se puede añadir que su pretensión es
muy humilde, pues estas sencillas líneas
sólo han intentado activar nuestro
pasado para llegar al presente de la
orientación y motivarnos a reflexionar
sobre el futuro de la Orientación
Psicopedagógica en la sociedad de
nuestros días. Sin abandonar y unificar
criterios con el resto del
profesorado porque la Educación
para que sea una verdadera
herramienta de transformación,
ha de ser de calidad con un sistema
público de Educación fuerte, una
comunidad escolar participativa,
un profesorado y un personal
educativo suficiente, cualificado y
bien remunerado.
A los Departamentos de Orientación nos
corresponde mejorar día a día ofreciendo

esperanza e ilusión como motor de
nuestra profesión y aportando nuevas
ideas y proyectos educativos acorde con
el siglo XXI.
Quizás todavía para algunos docentes no
somos útiles ni accesibles y nos vean
utópicos… y decimos que Utopía no
existe. Pero, no es cierto. Está dentro de
nosotros mismos.
“Ser persona -dice Erns Bloch- significa tener una utopia”.

LA ACTITUD EN ORIENTACIÓN.
Begoña Cañete
Orientadora en un Equipo de Orientación Educativa y Psicopedagógica, Principado de
Asturias

Me siento en la obligación moral y en el
compromiso de escribir unas líneas
para Colectivo Orienta. Es tanto lo que
aprendo de otros orientadores y es tal la
generosidad al compartir experiencias,
materiales, reflexiones, vivencias,
opiniones que no puedo pasar de largo,
sin al menos contar como afronto mi día
a día en un Equipo de Orientación de
Asturias.
No voy a hacer especial hincapié en
teorías, modelos, autores que, aunque
son necesarios como referentes en
nuestra profesión, poco pueden aportar
al respecto.
Reflexionando sobre mi día a día,
aparece una variable que se repite en
múltiples ocasiones y que es
imprescindible para afrontar mi labor
orientadora. Tan imprescindible, que
considero la clave fundamental para que
al menos, pueda abordar las diferentes
situaciones con serenidad. Esa variable
que se repite la denomino empatía,
inteligencia emocional, habilidad social,
lenguaje emocional o regulación
personal; en definitiva: ACTITUD.
La buena actitud me ayuda a
comprender al profesorado, a escuchar al
Equipo Directivo, a asesorar a las
familias, a debatir con mis compañeros
del Equipo, a respetar las decisiones que
considero más o menos acertadas, a
coordinarme con los servicios sanitarios
o con los servicios sociales y, así, a
intentar llevar con dignidad mi labor
orientadora.
Actitud es comprender al
profesorado: hay que reconocer que
llevan dos cursos sometidos a una
presión intolerable. Llevan realizando
concreciones curriculares,
transposiciones didácticas, ACIs, PTis,
Programas de Refuerzo y luchando
contra reloj con arduas tareas puramente
burocráticas. Las aulas son complejas
con una diversidad de alumnado y
familias que “obligan” a cambiar
metodologías, y a pedir S.O.S. en muchas
ocasiones a “su” orientadora. La actitud,
la escucha, el diálogo, las palabras de
aliento son fundamentales para que su
motivación no decaiga. ¡Nada fácil!
Hace unos días una profesora con más
de 20 años de carrera me dijo,
completamente derrumbada: "No puedo
más. Creo que me equivoqué de
profesión”. Sentí impotencia, rubor,
tristeza, dolor. Le cogí por el brazo y le
dije: “Tú puedes. Lo vamos a conseguir.
Hoy ha sido un mal día, te entiendo”.
Sus ojos se humedecieron y otra frase
más (“Pero si tú eres una eminencia en
este colegio”) consiguió sacarle una
pequeña sonrisa. Entrar en el aula con
ella, diseñar un nuevo plan e ir de su
mano, alivió su dolor y al menos

conseguí que no tirara la toalla. Con eso
me quedo. Educar es complejo, pero es la
única forma de cambiar el mundo.
Actitud es escuchar al Equipo
Directivo: Cada centro presenta una
idiosincrasia y una forma de funcionar
que depende en gran medida de la
gestión del Equipo Directivo. Los centros
los conducen las personas y en función
de sus líderes y de la calidad humana, un
centro puede ser pionero, constante,
tranquilo, movido, tóxico o referente.
Nuestra actitud, nuestra implicación y,
en ocasiones, tener que ceder o no
compartir decisiones poco acertadas,
hace que asesoremos de una u otra
forma. Aún con dificultades, tener una
actitud serena, tranquila, sosegada y
bien argumentada hace que solo sea
“cuestión de tiempo” la credibilidad del
orientador@ ante un Equipo Directivo
poco cooperante. En otras ocasiones,
sentirse respaldado por la Dirección y
respetado hace que esa misma actitud se
convierta en motivación y realización
personal.
Actitud es asesorar a las
familias: Las familias constituyen un
factor clave en la educación de sus hijos.
En muchas ocasiones un buen
asesoramiento, una buena entrevista y
un buen seguimiento evita una
evaluación psicopedagógica y por
supuesto mejora el rendimiento del
alumnado. La formación de los padres, la
atención individualizada si lo precisa, el
acompasar, la escucha activa y el
seguimiento en las correctas pautas de
crianza depende en gran medida de
nuestro tiempo, de nuestra implicación,
pero sobre todo de nuestra Actitud.
Actitud es coordinarse con los
servicios externos (sanitarios,
sociales, entidades varias…): la
orientación educativa es sistémica y de
mi depende el abrir los brazos y
concretar coordinaciones externas que
ayuden al desarrollo íntegro del
alumnado. El mes pasado tuve que
realizar “la cuarta llamada telefónica”
para intentar que el Servicio de Salud
Mental me atendiera y lograramos una
coordinación de alumnado que
compartimos. Probablemente en otra
ocasión hubiese tirado la toalla. En este
caso, la Actitud, el orgullo personal y la
constancia tuvieron su fruto.
Actitud es orientar en la formación
académica y profesional: aunque
inicialmente se piensa que la orientación
académica es propia de la etapa de
secundaria y/o bachillerato, no es menos
importante la orientación para la carrera
en la etapa de infantil y primaria.
Aportar materiales y recursos para el
manejo del autoconcepto, la autoestima,
la resolución de conflictos, los hábitos de

estudio… y tener una implicación activa
es cuestión de ACTITUD.
Tengo la suerte de ser bastante tranquila
y reflexiva en mi tarea orientadora. El
tono de voz, la mirada cercana, el
despacho abierto, el sentido del humor,
el respeto y la admiración a mis
compañeros, facilita enormemente mi
labor. Cometo errores como todos;
aceptarlos y hacer autocrítica también
me ayuda. Un buen orientador@ debe de
tener todos los ingredientes (formación,
habilidades sociales y ACTITUD) para
poder realizar una buena cocción
(orientación).
Reconozco ser “huérfana” en mi
profesión. Me falta iniciar el tan ansiado
blog, que sin duda algún día llegará.
Observo que el blog es como un ser vivo;
necesita las principales funciones vitales.
Hay que alimentarlo (con buenas
aportaciones), nutrirlo adecuadamente y
darle un respiro de vez en cuando. Mi
prioridad está ahora mismo en la
finalización de mi tesis, por lo que hacer
las cosas bien llevará un tiempo y, como
se dice habitualmente, “las cosas de
palacio van despacio."
De momento, agradezco enormemente
alimentarme en redes
sociales. Reconozco “tener mono” y no
poder pasar ni un solo día sin
conectarme a las mismas. Aún así, con
mono y todo ¡no pienso desintoxicarme!
Me gustan, me aportan, me reconfortan,
…
Quiero finalizar al igual que empecé,
agradeciendo a Colectivo Orienta y a
todos los profesionales de la orientación
que me enseñan tanto a través de las
redes. Para mi las redes sociales
(Twitter, Facebook, Linkedln) han sido
un resurgir, un renacer y una
oportunidad de formación y
comunicación. Porque "de bien nacidos
es ser agradecidos”.

QUISIERA SABER …
Claudio Castilla.
Orientador IES Ramón Arcas Meca (Lorca, Murcia).

"Me llamo Diego Capdevilla y estudio
3º ESO. Quiero saber qué posibilidades
tengo de entrar en un Ciclo Formativo de
Grado Medio si estudio 4º ESO
Académico porque mi orientador me ha
dicho que tendría que presentarme a la
reválida de 4º ESO Aplicado pero que
me examinaría de otras materias que no
he hecho (no soy superman).
Posiblemente estudie Bachillerato, pero
no quiero eliminar por completo la
Formación Profesional y quiero saber
mis posibilidades para entrar en Grado
Medio si sólo apruebo la reválida de ESO
Académico".
"Hola. Soy alumno de 1º de Bachillerato,
me llamo Jorge Hidalgo. Quería saber
si al final tendré que hacer la selectividad
o la reválida. Algunos de mis profes
hablan todavía de selectividad y la
mayoría de la reválida, y en mi casa han
leído que se iba a aplazar (lo había dicho
el ministro y salió en El País y en otros
periódicos). En caso de que haya
reválida, cosa que dudo, tampoco tengo
claro de qué materias me examinaría (de
hecho, en mi centro todavía no han
decidido las materias de 2º de
Bachillerato). Mi orientador dice que
hasta que no pasen las elecciones no se
sabrá nada, y que es mejor que me
espere".
"Yo acabo este año 4º ESO y quiero
estudiar un Ciclo Superior de Educación
Infantil. El caso es que no quería hacer
Bachillerato y me han dicho que se podrá
pasar directamente del Grado Medio al
Grado Superior. ¿Es eso verdad? ¿Tengo
que hacer algún Ciclo Formativo
concreto o da igual el que haga? ¿Qué
posibilidades tendría para entrar en ese
Grado Superior porque todos los años se
quedan alumnos fuera? Mis padres dicen
que lo ven muy complicado, que eso no
es así, porque mi hermano tuvo que
hacer el Bachillerato. Gracias. Me
llamo Begoña".
"Estoy algo cabreado. Resulta que este
año no entré en la Formación
Profesional Básica porque mi orientador
me dijo que para conseguir el Título de
ESO tendría que aprobar el examen final
de la ESO (el mismo que el de 4º). Y
ahora me entero de que si da el Título,
pero yo ya estoy en 3º ESO repitiendo.
¿Por qué cambian las leyes
tanto?" Ángel
"Me llamo Adrián Bastida. Soy
alumno de 2º de Bachillerato pero por
ahora no me va muy bien. El caso es que
posiblemente repita. Mi duda es que si
repito, ¿tendré que hacer selectividad o
la prueba final de bachillerato? ¿Y si
tengo que hacer la prueba de bachillerato
con qué materias porque yo no di en 1º
de Bachillerato las mismas que este año?
Como es el primer año de reforma mis

compañeros y profesores no me pueden
aconsejar".
"Tengo 22 años me llamo Rocío y acabo
de empezar un Grado Superior. Si me va
bien mi intención es seguir estudiando
en la Universidad. ¿Cómo puedo entrar
en la Universidad? ¿Tendré que hacer la
evaluación final de Bachillerato? ¿Cuál
será mi nota? ¿Me convalidarán materias
en la Universidad porque estoy en un
plan nuevo? Y lo más importante: he
escuchado que las Universidades pueden
poner un examen propio, pero nadie
sabe nada. Alguien me puede ayudar. Mi
orientador, como dicen mis compañeros,
está algo "desenterado".
"Soy profesor de Tecnología e imparto
esta materia en 1º y 2º de Bachillerato.
Quisiera saber el tipo de evaluación final
de Bachillerato que se va a establecer,
puesto que no he visto indicaciones
sobre dicha prueba o "exámenes tipo"
con los que poder ayudar a mis alumnos.
Con el orientador de mi centro, hemos
llamado a la Universidad y todavía no
saben nada".
Soy Claudio Castilla, trabajo de
orientador educativo en un instituto. Yo
también quisiera saber... para poder
resolver las dudas de Diego, Jorge,
Begoña, Ángel, Adrián, Rocío y otros
1.000 alumnos más de mi centro.
Los nombres de los alumnos están modificados, pero las situaciones e inquietudes
posiblemente correspondan a muchos de los alumnos que tenemos en nuestros centros
educativos.

PTSC: EN PELIGRO DE EXTINCIÓN.
Mónica Garrido

“Queridos amigos (pausa) de la fauna
(pausa) ibérica. En nuestro programa
de hoy nos encontraremos con uno de
los más desconocidos representantes de
la fauna de nuestros bosques: el lirón
careto”.
Los lectores de cierta edad habrán leído
el comienzo de este artículo con el tono
que le imprimía el inconfundible
naturalista Félix Rodríguez de la Fuente
a sus documentales de naturaleza. Tras
estas primeras palabras, aparecían ante
nuestros ojos los secretos mejor
guardado de alguna especie propia de
nuestras tierras y que una vez desvelada
permanecía en nuestra memoria largo
tiempo, como el pequeño lirón
careto.
Igualmente inolvidables aspiramos a ser
los actualmente desconocidos “PTSC”,
miembros de una especie que
nunca fue demasiado numerosa
pero que en la actualidad queda
recogida dentro de “El libro rojo
de las especies amenazadas y en
peligro de extinción”. O ¿acaso sabes,
sabe usted, lo que es un PTSC?
¿Cuántas personas conoces que sean
capaces de definir qué es un PTSC? ¿Qué
labores desempeña? O, simplemente
¿qué significan las siglas de su nombre?
Aunque he visto referido el término
“paquistaní” asociado a los orientadores,
la primera vez que lo escuché fue en boca
de un antiguo compañero de fatigas
socioculturales “Ah ¿eres PTSC? ¿Ya
sabes cómo los llaman?” seguido de un
“Así que te has hecho poli de
instituto”.
Es cierto que las siglas tienen
tela: Profesor Técnico de Servicios
a la Comunidad. Lo de “Técnico” nos
viene de pertenecer al Cuerpo de
Profesores Técnicos de Formación
Profesional (los profesores de taller de
toda la vida) y lo de “Servicios a la
comunidad” resulta ser la familia
profesional de FP en la que nos
encuadramos: formando en los aspectos
prácticos a futuros integradores sociales,
educadores infantiles, animadores
socioculturales, técnicos de atención a la
dependencia, mediadores, técnicos de
igualdad (permítaseme el genérico
masculino a pesar de que el grueso de
nuestro alumnado tiende a ser
femenino). Cómo llegamos a formar
parte de la red de orientación
socioeducativa es una larga historia con
trasfondo político y administrativo que
dejaremos para otra ocasión.
Pero el caso es que llegamos.
Empezamos a formar parte de Equipos
de Orientación Educativa y
Psicopedagógica, de los Departamentos

de Orientación de los IES, de los Centros
de Educación Especial, de los Centros
Educativos Terapéuticos, de las Aulas de
compensación Educativa, de la Unidades
de Formación e Inserción Laboral, de
algunos Centros de Educación Infantil y
Primaria… Éramos maestros,
trabajadores sociales, educadores
sociales, psicólogos, psicopedagogos e
incluso algún que otro biólogo o geógrafo
despistado, muchos procedentes del
ámbito no formal, o de los servicios
sociales y todos con una gran ilusión e
interés por la intervención
socioeducativa, la inclusión y la
compensación de desigualdades.
Presentándonos o siendo presentados a
las familias (y a veces a los compañeros)
como “el trabajador social del instituto”
o “el educador social del instituto”.
Inexacto, pero breve.
Asumimos la parte más “social” de
la orientación educativa, aquella
relacionada con la situación
socioeconómica de las familias, con las
habilidades sociales, con la resolución de
conflictos, la prevención e intervención
en conductas de riesgo, el acoso escolar
y, cuando llegaron, las redes sociales. La
detección e intervención en situaciones
de riesgo psicosocial como el abandono,
la falta de habilidades parentales u otros
tipos de maltrato (incluido el abuso
sexual) o nuestro producto estrella, el
absentismo escolar, nos llevaron a
colaborar en red con organismos
externos a los centros educativos,
convirtiendo a los PTSC en buenos
conocedores de los Servicios Sociales y
otros recursos.
Aquellos fueron los buenos tiempos,
cuando un centro educativo podía contar
con hasta dos orientadores y un PTSC a
jornada completa (asociado al famoso
“Programa de Compensatoria” y por lo
tanto nunca en plantilla).
Y entonces comenzó el declive.
Como en tantos asuntos, la
administración pensó que al fin y al cabo
los PTSC no daban clase y no hacían
tanta falta. Que sus labores las podían
cubrir perfectamente entre los
orientadores, los jefes de estudios y los
tutores. Que menos es más. Llorando
mucho, los directores más intrépidos
podían conseguir medio (a profanos y
novatos eso de “medio profesor” les
suena como a cosa imposible ¿cómo va a
ser medio profesor?). Y quitandolo del
cupo. Hay que estar muy concienciado
para cambiar medio de matemáticas por
medio de orientación “total, para atender
a esos chavales que no tienen remedio”.
Y así nos encontramos que la última
oposición a PTSC en Madrid fue en el
año 2010. Que en la lista de interinos los
aprobados sin plaza son cientos (y no
precisamente aprobados raspados,

hablamos de ochos, nueves y dieces).
Que el pasado curso escolar 2014-2015
interinos con vacante (porque son
vacantes, aunque el papel diga
sustitución y te despidan a 30 de junio)
fueron menos de diez, la mayoría en
jornada parcial. Que los que trabajan
pasan de los diez años de experiencia. No
hay novatos entre los PTSC. Y todos
hemos pasado por todos los ámbitos.
Peor aún: que normalmente a fecha de
finales de septiembre todos los cursos
hay unos 80 funcionarios de carrera en
expectativa de destino (aquí ya nos
estamos poniendo muy técnicos, si me
sigues hasta aquí es que eres docente, o
familiar de docente) que siguen en su
casa a la espera de que la administración
les asigne destino. Mientras, muchos
centros siguen desatendidos, entre ellos
muchos de los antaño considerados “de
especial dificultad” (como si no hubiera
chavales en desventaja en todas partes).
Por no hablar de las dificultades que
genera, en un ámbito tan sensible como
el nuestro, que el profesional al cargo de
la intervención cambie cada año. Vuelta
a empezar a conocer a las familias, a
establecer relaciones de confianza, a
acercarse a profesores y tutores, a
conocer la realidad del barrio, a realizar
contactos con los recursos de la zona…
De este modo, muchos maestros y
profesores no han visto nunca en
su vida profesional un PTSC y
puede que ni siquiera hayan oído
hablar de ellos. Por no hablar de la
población en general (“Tu cuñado es
profesor ¿no?” “ Sí, es PTSC” cricri,
cricri). Para otros somos como el
pequeño lirón careto o la Amazonía: sólo
nos conocen por los documentales.
Puede que pronto no seamos más que un
breve texto en un antiguo libro de
educación. Un exótico miembro de la
fauna educativa, ahora extinto. Como el
dodo.

TRABAJANDO COMO PSICÓLOGA
EN UN GABINETE
PSICOPEDAGÓGICO MUNICIPAL.
Montaña Navas
Psicóloga en creativa evolución. Nadie dijo que seria fácil, ¡pero sí que merecería la
pena!

En el Ayuntamiento de Guadarrama en
la Sierra de Madrid, este servicio lleva
funcionando desde finales de los años
80. Cuando me incorporé y realmente
empecé este camino fue ya desde el curso
1999/2000, desde mi formación
educativa y clínica la evolución y los
cambios (personales y sociales) han
marcado mucho este trabajo con el que
me siento cada vez más identificada y
encantada y, a la vez donde he
encontrado fuertes muros de
desentendimiento y a veces,
incomprensión y recelo.
Nuestro Gabinete (esta palabra me gusta
poco tengo que reconocer, para mi
seríamos más un equipo municipal de
atención a la infancia y a la familia)
actualmente está formado por tres
profesionales: una pedagoga, una
logopeda y terapeuta ocupacional y una
psicóloga. Nuestro objetivo es orientar,
prevenir, asesorar e intervenir en
aquellos problemas y dificultades que
pueden surgir tanto en el ámbito escolar,
personal, social y familiar, trabajando
conjuntamente con los centros
educativos y las familias.
Trabajamos pues desde lo municipal en:
 Implantación de programas
encaminados a familias como
talleres en normas y límites,
adolescencia, inteligencias
múltiples, pautas actuales de
relajación…
 Mediación familiar o intervención
con familias.
 Atendemos a niños y jóvenes
desde los centros escolares,
públicos y concertados dentro del
horario escolar.
 Somos un servicio voluntario y
gratuito.
Obviamente me cuesta entender que no
más ayuntamientos tengan un servicio
como el nuestro o por lo menos parecido.
En nuestra sociedad actual, donde se
clama cada vez más por una enseñanza
para la vida, con valores, ¿dónde queda
en algunas escuelas la atención más
profesional de nuestros alumnos y sus
familias?
Parto de mi creencia de que la escuela es
el punto desde el cual mucho se observa,
mucho podría ser detectado… En estos
años donde la crisis ha llegado a nuestras
familias y nuestros municipios, nuestra
labor ha sido fundamental, pues son
servicios como el nuestro, cercanos en el
día a día donde se ha trabajado lo
emocional, donde se han derivado
tempranamente a otros profesionales,
donde se ha alertado a veces a servicios
sociales… y no solamente en momentos
de crisis… ¿Cuántos de nuestros niños,
jóvenes, familias recibirían un
tratamiento pedagógico o logopédico o

psicológico en su vida si no fuese desde
un servicio como el nuestro gratuito?
En nuestra atención a niños y jóvenes la
prevención es muy importante así como
el trabajar en un ambiente positivo y de
respeto con los equipos directivos, los
tutores, profesores, personal en general
de los centros educativos. Es de los
equipos directivos y sobre todo de
jefatura de estudios donde la
organización de nuestro trabajo se hace
importante para no duplicar
intervenciones sobre todo con EOEP que
creen problemas de “recelo” y se trabaje
sobre todo en el beneficio de los alumnos
que más lo necesiten.
Trabajar coordinados con servicios
externos se hace también muy
importante en nuestra labor:
coordinación con SEJUVE (servicio de
juventud), con EOEP, con Servicios
Sociales, Servicios Medicos de zona tanto
públicos como privados… Ellos son
nuestros aliados cuando nuestros
recursos no son ya suficientes y nosotros
somos sus ojos y oídos más cercanos. Se
intenta una comunicación fluida y a
veces se consigue.
Nuestra atención profesional cada vez
requiere más un estar al día en
intervenciones, en legislaciones, en uso
de nuevas tecnologías… todo ello sin
perder la motivación en una sociedad
cambiante donde un espacio como el
nuestro, poco valorado desde
simplemente nuestro contrato de
prestación por diez meses de curso, o las
dificultades que desde otros servicios te
plantean y tu falta de respuesta a no
tener una legislación detrás… hace que a
veces nades contra corriente.
Sin embargo no puedo terminar sin
valorar todo lo que desde este servicio he
aprendido: que cuando pones
profesionalidad con corazón y ganas, la
gratitud que recibes, los avances que
observas, la sensación de que tu trabajo
tendrá su fruto, el hacerte estar día a día
aprendiendo… valen más que lo
negativo.

LA INTERVENCIÓN GRATUITA
DESDE LOS SERVICIOS
PSICOPEDAGÓGICOS MUNICIPALES.
José Pedro Barquero Ruiz-Olivares
Psicopedagogo

La transformación socioeconómica que
se ha dado en la Comunidad de Madrid
desde principios del siglo XXI, un
programa de educación bilingüe, con
más sombras que luces, el cambio en la
población docente, mermada
cuantitativamente y limitada
cualitativamente con el bilingüismo, los
recortes o el mal uso de los recursos
económicos y la incertidumbre
legislativa a la que este país nos tiene
acostumbrados están siendo un caldo de
cultivo excelente para que se dispare el
alumnado con dificultades de
aprendizaje o de adaptación escolar.
En este contexto, que augura un mal
presagio para la educación pública, de
calidad y compensadora de dificultades,
que no quiero pensar en qué
desembocará, han surgido en diversos
distritos madrileños y en varios
municipios de la Comunidad de Madrid
los Servicios Psicopedagógicos
Municipales. Dichos recursos, tratan de
abordar la colección de necesidades
específicas e inespecíficas no atendidas
en los centros, principalmente por falta
de medios personales, a través de
equipos multidisciplinares,
generalmente jóvenes y muy motivados.
De la intervención gratuita llevada a
cabo desde los Servicios
Psicopedagógicos Municipales el
principal beneficiario es el alumnado sin
“etiqueta”. Alumnado que debería
afrontar con pocos problemas el reto del
aprendizaje, pero que manifiesta un
rendimiento académico bajo o una
adaptación preocupante. Estos alumnos
quedan fuera normalmente de los apoyos
ordinarios y extraordinarios del sistema,
lo que hace que la existencia de este
recurso sea un alivio para las familias,
que, independientemente de la
estructura que tengan, con uno o los dos
progenitores en paro y con sueldos bajos
no podrían permitirse la atención de
profesionales de un gabinete privado.
Esta población no es la única atendida.
Los Servicios Psicopedagógicos
Municipales también intervienen con
alumnos diagnosticados con algún
trastorno específico que no reciben la
atención adecuada en el centro o que
directamente no son atendidos, debido
principalmente a que los escasos
especialistas de pedagogía terapéutica y
de audición y lenguaje están saturados.
Esto hace que este servicio sea también
un balón de oxígeno para los centros.
Pero no es oro todo lo que reluce. A
pesar de lo dicho, estos servicios no
siempre se encuentran con el
aprovechamiento esperado por parte de
los beneficiarios y son vistos con recelo
por otros profesionales, que, quizá con
razón, ven en ellos una duplicidad de
servicio o una búsqueda de abaratar la

atención que se da en los centros,
precarizando la actividad laboral
desempeñada, con contratos poco
estables y salarios bajos, en relación
sobre todo con los especialistas interinos
y funcionarios y con los trabajadores de
gabinetes privados.
¿Son los Servicios Psicopedagógico
Municipales un parche coyuntural a la
falta de profesionales capaces de atender
las crecientes necesidades en los centros
educativos? ¿Tendrán la continuidad
para consolidarse, e incluso crecer, como
un recurso complementario de calidad?
¿Pueden los ayuntamientos darles esa
continuidad y contribuir a su
crecimiento? ¿En qué condiciones? Son
preguntas que sobrevuelan el futuro de
un recurso que cada año se confirma más
necesario.
Tomándose en serio que la educación
pública es la mejor medida de
prevención y promoción de la justicia
social y que todo recurso es poco para
lograr este fin. Concienciándose de que
la coordinación entre profesionales
facilita la complementariedad de
servicios. Parece obvio que la respuesta
es que un recurso como este debería
continuar prestando sus servicios,
creciendo y adaptándose a las
necesidades de los centros y las familias
a quiénes atienden. Pero resolver este
tipo de interrogantes es complicado.
Quizá en unos años se dibujará una
respuesta clarificadora. Mientras, los
profesionales de los Servicios
Psicopedagógicos Municipales seguirán
realizando su trabajo, facilitando la
adaptación de sus beneficiarios, a un
medio cada vez más hostil a la
diferencia, y favoreciendo que estos
superen sus dificultades de aprendizaje.

SERVICIOS PSICOPEDAGÓGICOS
MUNICIPALES: VENTAJAS E
INCONVENIENTES.
María José de Luis Flores
Maestra de AL y psicopedagoga en activo. Especialista en Atención temprana,
logopedia y psicomotricidad, con formación en neuropsicología

DIARIO DE UN ATAL EN SANTA
MARÍA DEL ÁGUILA, ALMERÍA.
Enrique Piña Batista
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Comparto con Colectivo Orienta
algunos fragmentos que he escrito a
modo de diario en mi trabajo en Aulas
Temporales de Adaptación Lingüística
(ATAL) en el curso 2015-16.
“DIARIO DE UN ATAL EN SANTA
MARÍA DEL AGUILA, El Ejido,
Almería", es lo que he ido escribiendo
desde que llegué a este proyecto
de interculturalidad, de la provincia
de Almería, en este año académico
2015/16. Son como pequeños “flash" de
mis latidos de docente: de lo que voy
viviendo, pensando, sintiendo, en lo que
es la experiencia que ha llegado a mi
vida: ser ATAL en un lugar tan
especial, que me robó el corazón nada
más llegar …. Este alumnado de Santa
María, el claustro, el equipo directivo, el
personal laboral y las familias, la AMPA
…
11 de septiembre de 2015
Estas son mis primeras palabras, en este
nuevo proyecto, en este instituto llamado
Santa María del Águila, en la localidad
que posee el mismo nombre. Son
momentos de ir tomando contacto con
una realidad, completamente nueva y
desconocida. Arrancan los claustros de
inicio de curso, las reuniones de los
programas y proyectos educativos, las
reuniones de los distintos
departamentos. Comienza un curso y
todos tratamos de poner lo mejor de
nosotros para que, la semana que viene,
cuando llegue el alumnado, esté todo en
orden para recibirlos. Son momentos
también de incertidumbre, cuando se
dan grandes cambios, como es mi caso,
que he pasado de la Sierra a la zona de
invernaderos. En mi caso, el primer
objetivo es conocer el centro, conocer el
claustro, conocer cómo funciona
internamente y cuáles son las claves del
Equipo Directivo del centro, ya que ellos
marcan una dinámica interna, a la que el
resto nos unimos. Agradezco la
oportunidad que me está dando la
Delegación de Almería de formar parte
de este proyecto de interculturalidad, tan
exclusivo de Almería, centrado en la
atención inclusiva al alumnado de
nacionalidad extranjera carente de
conocimientos suficientes de la lengua
españolapara seguir el currículum
ordinario, donde, mi primer objetivo es
aprender del gran recorrido que tiene
esta delegación en materia de acogida y
trabajo con alumnado de diferentes
nacionalidades. ¡Comenzamos la
aventura!
15 de septiembre de 2015
¡Comienza el curso 2015/16! Los
alumnos y alumnas van llegando, de
manera escalonada, a nuestros centros.
Los nervios del comienzo. La
organización de horarios, las aulas, los
materiales, las reuniones de tutores, las

de departamentos y un sinfín de cajones
abiertos, de cara a ir montándolos en
esta segunda quincena del mes de
septiembre. Arranca un curso nuevo y,
desde este aula temporal de adaptación
lingüística os deseo que sea un gran
curso. Venimos a nuestros centros
educativos por y para la educación de
nuestro alumnado. Esa es la razón y el
sentido de nuestras actuaciones. En mi
caso, los nervios de empezar este
proyecto, completamente nuevo para mí,
los voy notando. Duermo regular, me
despierto por la tensión que supone un
reto como este. Lo positivo: tengo un
compañero que se llama Juan, ATAL, y
que lleva mucho tiempo en este
proyecto. Sin duda, lo mejor que
tenemos en los centros, cuando nos
encontramos con estos regalos, son los
compañeros que están siempre
dispuestos a echarte una mano, a decirte,
“tú tranquilo, no te agobies”. ¡Esas
palabras ayudan tanto en esta profesión
de ser educadores! Un reto, una ilusión,
un sueño.
14 de octubre de 2015
Van pasando los días. Van pasando
semanas y ya, mañana, hará un mes
desde que empezamos este nuevo curso
2015/16. Un mes, en mi caso, en una
nueva provincia, ALMERÍA, un centro
nuevo, IES Santa María del Águila y un
proyecto nuevo: Aula Temporal de
Adaptación Lingüística (ATAL),
encuadrado dentro del marco general de
la Interculturalidad. Un mundo nuevo,
en esta sencilla localidad almeriense que
me acoge, rodeado de este inmenso mar
de invernaderos. Estoy aprendiendo y
descubriendo lo que supone y significa
ser ATAL en este instituto y en esta
provincia. Un proyecto de inclusión. Al
principio ha sido muy difícil: un cambio
inmenso, de la noche a la mañana
educativa de mi vida. Un gran volumen
de grupos y materias: alumnado,
profesorado, etc. Hoy puedo decir, a 14
de octubre, que voy ubicándome en el
mismo. Mi agradecimiento a los que
estáis ayudándome en este tránsito de
etapa y a los que forman parte del
instituto, María Jesús, en la
administración, Miguel en conserjería y
Carmen en la cafetería también os
agradezco vuestra ayuda. De este
alumnado almeriense, muchos de ellos
de Marruecos, de Rumanía y otros de
Santa María y alrededores, ¿qué os
puedo contar? Han tardado muy poco
tiempo en conquistar mi corazón de
docente. Cada día, un nuevo amanecer
educativo: una palabra, una frase, una
sonrisa, un saludo de cualquier alumno,
alumna, que se te cruza por el pasillo ….
Ellos son el alma de la educación:
nuestros alumnos. Por ellos venimos a
trabajar cada día. En esta nueva
aventura educativa, donde estoy
enfrascado al cien por cien, estoy
descubriendo el valor del modelo

educativo que se conoce con el nombre
de INCLUSIÓN. Nada mejor que vivirlo
en primera persona. Al trabajar, como
ATAL, con el alumnado DENTRO de las
aulas ordinarias, en el paradigma de la
doble docencia y el trabajo colaborativo,
estoy comprendiendo el porqué de la
inclusión. Estar dos profesores a la vez,
en el mismo aula implica, de base, una
actitud positiva ante este tipo de práctica
y una disponibilidad por ambas partes.
De primeras, veo cómo de arraigado está
esta frase de “cada maestrillo tiene su
librillo”. Sin embargo, ¿no es, acaso, la
inclusión, un reto para nuestros centros,
una realidad por descubrir? Todos o
muchos docentes tenemos metido hasta
los “tuétanos” ese modelo, de dónde
venimos: un grupo, un docente; una
clase, un profesor. Y yo era el primero.
Ahora, viviendo esta experiencia
educativa, estoy entendiendo mejor la
necesidad de trabajar, juntos, dentro del
aula, distintos profesionales, en mi caso,
con los profesores y profesoras de las
materias que me han asignado y como
profesor ATAL. Reconozco que, de
primeras, es más complejo y laborioso,
pero, a medio y largo plazo, la riqueza
del modelo inclusivo es muy alta. Estoy
contento. Estoy ilusionado y eso,
justamente eso, era lo que más
necesitaba y el ingrediente indispensable
para educar: LA ILUSIÓN.
21 de octubre de 2o15
Para poder trabajar en equipo, como
docentes, necesitamos "tiempo".
Justamente eso es lo que, con tantos
cambios en el Sistema Educativo, justo
eso, sumado a la carga burocrática (estar
delante del ordenador con el sistema
Séneca, y, en multitud de casos, dando
problemas de error, por la lentitud en el
sistema o por el número de usuarios
conectados), nos falta. El tema es que la
vida de los docentes ha sufrido, en estos
quince años, por decir una fecha
aproximada, una serie de cambios que
no han sido, en absoluto, para mejorar la
calidad profesional de lo que es “ser
docente”. En un proyecto ATAL, donde
estamos implicados un conjunto de
docentes, especialmente en lo que es la
INCLUSIÓN, y en todo proyecto
educativo actual, ¿acaso estos cambios
nos ayudan o más bien nos limitan para
poder trabajar más y mejor?
Necesitamos que las administraciones y
las instituciones que estructuran nuestro
sistema actual caigan en la cuenta que
estos cambios no facilitan la vida laboral
de los docentes, sino todo lo contrario.
Cambiar tanto de leyes educativas nos ha
llevado a un verdadero "caos conceptual"
y, a las alturas que estamos, organizando
las programaciones, hay dudas que
surgen y no porque no sepamos hacer
nuestro trabajo, sino por el elevadísimo
número de nuevos conceptos que llegan
a la vida de cualquier docente. La ética
profesional hace que muchos, muchos

docentes estén intentando dar una
respuesta a esas palabras nuevas con
seriedad y no pueden, ya que, desde mi
punto de vista, ni siquiera el que legisla
sabría definir con exactitud algunos de
estos conceptos. A ello le sumamos las
dificultades debido a la elevada ratio y la
falta de recursos, incluso ya de tipo
físico: faltan elementos ya de tipo
“básico” en muchos centros, es decir, una
mesa y una silla. ¿Qué está pasando con
la escuela pública? Y lo más crítico que
veo yo, en todos estos cambios, sin
rumbo y sin sentido, en muchos de los
casos, es que repercute en el deterioro
personal y profesional del docente.
Siempre he trabajado, codo a codo, con
docentes, en todos los institutos por los
que he ido pasando. Ahora me enfrento a
un reto personal y profesional, porque
estoy aprendiendo a ser ATAL y, sobre
todo, experimentar y aprender la
inclusión. Veo que necesitamos
"tiempo": tiempo para poder
coordinarnos y que nuestros horarios
carecen de esos espacios. Si los proyectos
salen adelante, en nuestros centros, es
por "la buena voluntad docente", no
porque exista, en este momento, una
estructura que lo facilite. No solo no lo
facilita, sino que, como he expresado,
nuestro sistema educativo se ha ido
deteriorando. Me pongo la "L" de novel,
como ATAL, y agradezco muchísimo al
instituto que me acoge porque,
especialmente, esta semana, y me refiero
a la vida con los compañeros y las
compañeras, con el Departamento de
Orientación, al que pertenezco y todos lo
que lo forman: Juan, mi compañero
ATAL, , las dos PT, la compañera de
compensatoria, capitaneados por Raquel
(orientadora), pasando por muchos
compañeros con los que hoy he hablado
y por los que forman el equipo directivo,
especialmente he hablado mucho estos
días con Sole, una de las jefas de
estudios, a todos ellos: gracias. Esta
semana he experimentado lo importante
que es el apoyo de los compañeros,
exactamente: ¡compañeros y
compañeras! ¡Cuánto ayuda tener
buenos compañeros! Ya me enseñó, muy
bien enseñado esto, la experiencia de
Algeciras, donde José Luis y Paco
(ambos fueron directores y jefes de
estudios, en su recorrido como docentes)
siempre me decían: "ante todo somos
compañeros, Enrique, compañeros".
¡Cuánto les tengo que agradecer! ¡Qué
importante es, en la vida del docente, un
contexto de equipo y coordinación con
los compañeros de trabajo, para poder
llevar hacia delante nuestras funciones,
con tranquilidad y calidad! En el papel,
de nuestra legislación, está escrito que
buscamos una educación de calidad. Sin
embargo, esta situación a la que se está
llevando a los docentes, no solo no logra
que el sistema tenga calidad, sino todo lo
contrario. Me gusta la educación pública:
lucho por ella todos los días y por eso me

duele que se esté haciendo lo que se está
haciendo, afectando tanto al cuerpo
docente. Y hay mucha juventud
esperando empezar a trabajar como
docente. ¿Desde cuándo no se convoca ni
una sola plaza para la orientación escolar
en Andalucía? ¡¡Desde hace CINCO
AÑOS!!! ¿Es esto invertir en educación y
en calidad?
5 de noviembre de 2015
Se llama Samir y tiene 14 años. Su
pueblo, de lo más profundo de
Marruecos, tan pequeño, tan pequeño,
con un nombre tan difícil que no logro
memorizarlo: BoumalneDades. Solo
lleva unos meses en España. Y no sabe
hablar nuestro idioma. Al principio,
estaba muy interesado en las clases, pero
últimamente no lo veo con tanto interés.
Hoy no ha hecho la actividad planteada
para el grupo y lo he dejado sin recreo.
Ha ido al aula de reflexión y, tras hacer
una sencilla tarea, ha vuelto a clase y
¡cual es mi asombro, mezclado con
sorpresa y con un sentimiento de
tristeza, cuando veo que se me pone a
llorar y yo, sin poder comunicarme con
él, para saber o para poder hablar con él
de qué era lo que le pasaba.! Wadie,
Ayoub y Jounes rápidamente me
ayudaron. Yo les decía que le
preguntaran que qué era lo que le
pasaba. "Maestro, se cree que le va a
poner un parte...", me decían los chicos,
todos súper apenados y echándose
literalmente encima de él, para intentar
consolarlo. Pero Samir no tenía
consuelo. Y yo les dije que le dijeran en
árabe que no, que ¡¡¡¡ no hombre, que no
se preocupara!!!!!!, que lo que quería era
que hiciera las actividades y que ese era
el motivo de haberlo llevado al aula de
reflexión. Sé que esa aula está marcada
por eso de que "allí van alumnos que se
portan mal". Samir no se ha portado
jamás mal. Nunca. Al contrario. Es un
chico muy educado. Solo que lo estoy
viendo que está trabajando menos y por
eso lo he querido presionar un poco,
para que siga esforzándose en lo que es
activarse, de cara al aprendizaje del
español. Yo, al verlo que se puso a llorar,
se me partió el corazón. Y, sin duda, es la
imagen que más grabada se me ha
quedado del día que acaba, porque ahora
pienso: ha vivido un brutal cambio. ¡A
saber si está aquí mejor o peor que en su
país, en su pequeño pueblo marroquí! ¡A
saber si echa de menos a sus amigos, o a
su colegio, su idioma, sus clases, sus
maestros…! Hoy, Samir, te dedico esta
publicación: porque bien sabe Dios que
no ha sido mi intención que te asustaras.
Todo lo contrario, pequeño Samir. Solo
deseo que sigas avanzando y creciendo y
quizás yo, hoy, con tus lágrimas tan
sinceras, he aprendido que he de
ayudarte o facilitarte más las tareas y
que quizás te he hecho hoy una
propuesta de trabajo más difícil de lo que
tú puedes comprender y quizás ese ha

sido, hoy, mi gran error, querido
alumno. Lo siento un montón, si así ha
sido. Yo también estoy aprendiendo esta
profesión y he de reconocer que cometo
los errores del novato. Espero reparar el
mal rato que hoy has pasado y que sepa
ser un buen ATAL para ti y para el resto
del alumnado.
Dedico esta entrada a nuestros alumnos
de ATAL Alizé y su hermano Cristian,
dos alumnos rumanos, que, junto a
Denís, forman el equipo de este país en
las clases. Hoy ha sido un día realmente
bello, hermoso. En la clase hemos estado
aprendiendo aspectos culturales del país
rumano y me he dado cuenta lo mucho
que me queda por aprender. Estos chicos
son una ventana a otros mundos
desconocidos, a otras culturas de las que
no sé tanto como yo me imaginaba.
Hemos entrado en la página web del
colegio de origen y lo más bonito ha sido
ver los videos que tienen puesto,
alumnos y profesores del colegio de
Rumanía y ha sido maravilloso. El resto
de los alumnos, en este caso marroquíes,
han seguido con entusiasmo los videos, y
todos hemos podido disfrutar, sobre
todo de ver la alegría tan grande de Alizé
y de Cristian, compartiendo algo tan
especial, tan íntimo, como son las
representaciones de su colegio: los trajes
regionales, las tonalidades de las
canciones, la guitarra, los profesores. Ha
sido un gran impacto ver cosas tan
bonitas, sobre todo porque son ellos los
que nos lo han mostrado. Esto sí que es
una gran aportación de las nuevas
tecnologías, donde los alumnos, nuestros
chicos, son unos verdaderos máquinas.
No saben español todavía, pero sí que
saben manejarse por la red y, en un
segundo, te ponen videos, saben cosas
que no sabemos nosotros o que, a
nosotros, los adultos, nos cuesta más. En
fin, quería compartir con todos vosotros
este momento. Educar es estar
receptivos todos los días a lo que
nuestros alumnos nos pueden enseñar.
Por ellos venimos a trabajar. Educar es
estar abiertos al conocimiento y ellos,
nuestros alumnos, en el momento en el
que estamos dispuestos a escucharlos,
tienen mucho que enseñarnos. Os regalo
el video que nuestros alumnos rumanos
nos han regalado a nosotros, para que lo
podáis disfrutar, como nosotros lo
hemos disfrutado.
Un regalo para todos, de un cantante que
me encanta, me fascina como canta:
MAHER ZAIN. Lo descubrí en mis años
de Algeciras, gracias al alumnado del IES
KURSAAL (¡cuánto me acuerdo de todos
vosotros, chicos!!!) Canta a su madre, a
todas las madres del mundo, de todos los
continentes, razas, credos, naciones,
religiones. Una madre es madre en todos
los rincones del mundo. Le quiero

dedicar esta canción a todos mis
compañeros, compañeras del IES Santa
María del Águila, a los alumnos y
alumnas, a los padres y madres que voy
conociendo, a Loli y a Juana, que ayer las
conocí, a Inma, la madre de Pablo, de
primero de la ESO, a Rossana, madre de
Marisol, de segundo de la ESO, a Dris,
padre de Zacarías y de Mohamed. ¡No
me puedo olvidar del Departamento de
Orientación y del equipo de producción
de RADIO ORIENTA, con la gran ayuda
de Xavier Martínez! A todos los que voy
conociendo en este proyecto ATAL que
estamos desarrollando en este instituto:
a todos, gracias. Gracias porque me
estáis ayudando mucho, más de lo que
podríais imaginar. Me queda mucho que
aprender en este proyecto y en este reto
de la inclusión y de la interculturalidad.
De eso se trata en un proyecto educativo:
de aprender, de trabajar en equipo,
superando subjetividades y tratando de
dar lo mejor de cada uno. A todos,
gracias. Va por todos, por todas las
profesoras que sois madres y las madres
del instituto, va por todos esta preciosa
canción.
9 de diciembre de 2015
Hoy sí podemos decir que arranca
RADIO ORIENTA. Dentro de 45
minutos sonará la sintonía de esta radio,
que, gracias a la acogida que ha tenido
entre los profesores y el alumnado, es
posible que suene, en cada recreo, de
cada miércoles. Os doy, profundamente,
las gracias a todos los que habéis hecho
posible que se ponga en marcha este
proyecto. Sin duda, un proyecto llevado a
cabo en equipo. Así me gusta trabajar.
Doy las gracias al Equipo Directivo del
instituto que nos da libertad y confianza
para poder trabajar tranquilos y dando lo
mejor que tenemos, desde ese respeto
mutuo que es tan importante, cuando
trabajamos en un instituto. Gracias. Hoy
estrenamos el programa con el grupo de
alumnado de ATAL. ¡qué os puedo decir
de estos alumnos tan especiales para mí!
Van a enfrentarse a un programa de
radio, en directo, con tan solo unos
meses y eso tiene un gran valor. Nos
acompaña Marisol Doucet, periodista de
Radio Ejido. Muchas gracias por venir. Y
nos acompaña Adolfina Montes,
coordinadora de Educación Intercultural
en la Delegación de Almería. Esperemos
que sea un programa entrañable. Os
regalo el video del profesor Miguel, que
hará un recital en directo de este poema.
Gracias a todos.
18 de enero de 2016
Hoy ha sido un bonito día, para este
proyecto de ATAL en el IES. Gracias a la
generosidad de la periodista que nos ha
visitado, Elisabet de la Cruz, hoy
domingo 17 de Enero de 2016, en el
diario IDEAL de Almería, el proyecto de
"Radio Orienta", ha tenido su espacio, su
eco. Siempre lucho por tener un espacio

en los medios de comunicación para dar
a conocer lo que nuestro alumnado hace
en nuestros centros, ya que, tristemente,
a veces, los centros educativos son
noticias cuando pasa algo negativo,
como que un alumno pega a un profesor,
cuando, en realidad, eso es la excepción.
Nuestros centros funcionan gracias a que
miles de proyectos salen adelante, con la
buena voluntad y el buen hacer de
muchos docentes, con alumnos detrás,
llevando a cabo dichos proyectos. Esa es
la verdadera realidad de la mayoría de
los centros. Por ellos y ellos son el
motivo de ir a trabajar. Eso lo aprendí
muy bien en Algeciras. Hoy nuestros
chicos y chicas del IES Santa María del
Águila ocupan su espacio en el periódico:
para mí, ellos son los verdaderos
PROTAGONISTAS. Me he emocionado
cuando me han mandado las fotos y, aun
a esta hora, no he visto el diario. Lo veré
mañana. Agradezco a este claustro, a
este equipo directivo y al departamento
de orientación, junto a los alumnos, al
Equipo de Producción de Radio Orienta,
por estar dándome la oportunidad de
enseñar, de educar, de dar lo que he
aprendido a lo largo de mi recorrido, en
este proyecto de ATAL y a través de una
radio educativa. Agradezco,
especialmente, a las personas que me
eligieron, entre muchos proyectos, para
trabajar en ATAL en esta Delegación de
Almería. Nunca olvidaré ese momento, el
22 de agosto, un señor llamado
Guillermo, que me llamó de Delegación,
exactamente a las diez y veinte de la
mañana. Jamás tendré cómo agradecer
el regalo de estar aquí y de poder
aprender, porque, si acaso yo, en
primera persona, soy el que más estoy
aprendiendo siendo ATAL. Gracias al
claustro del IES Santa María de Águila. Y
a nuestros alumnos que tan bien lo están
haciendo. Y que la radio siga siendo "La
ilusión de cada semana".
6 de febrero de 2016
¿Acaso no serán estos cambios que están
ocurriendo, una grandísima oportunidad
para el alumnado que tenemos, hoy, en
nuestros proyectos de ATAL? Desde que
aparece la gran noticia, en nota
informativa, del cambio que afecta al
alumnado de ciclos formativos de grado
medio, siento una gran felicidad y creo
que esto sí es un gesto que hace que
merezca la pena la inyección de ilusión
que los docentes y orientadores estamos
proyectando, en nuestras aulas y
proyectos educativos. Hacer posible que
los alumnos y alumnas continúen sus
proyectos de vida, facilitando los
mismos, apostando por los mismos. A
quien haya tomado esta decisión:
¡¡¡enhorabuena!!!!! Aún queda mucho
por lograr, en lo que respecta a la
Formación Profesional. Aún queda, en el
currículo oculto, esa brecha absurda que
existió tanto tiempo entre la FP y el BUP
de aquellos años, creando una falsa

mentalidad de los "buenos y los malos".
Hemos tenido varias leyes educativas
desde entonces, pero, haciendo uso de
un concepto de Jung, "en el inconsciente
colectivo", sigue habiendo mucho trabajo
que hacer, para que muchos chicos y
chicas descubran que los ciclos
formativos de grado medio y superior
son una gran oferta educativa y que
queda mucho, aun, por dar a conocer el
gran valor de estos caminos, en muchos
casos, desconocidas por padres,
profesorado y alumnado. ¿Acaso no se
nos ha metido "hasta la médula" ese
modelo de "titulitis", antes de ser
licenciados y ahora de tener que hacer
un grado, sin realmente dar a conocer la
riqueza de nuestro sistema educativo, en
lo que respecta a la formación
profesional? Un alumno de bachillerato,
¿cómo lo vive? Y lo que viven nuestros
alumnos viene de la visión que nosotros,
como adultos, les inculcamos, les
transmitimos, especialmente, y, sobre
todo, en el hogar natural. Recuerdo a un
alumno que el hecho de optar por
estudiar un ciclo formativo de grado
superior lo vivía como "ser universitario
de segunda categoría". Si lo vivía de ese
modo, es porque alguien le habría
inculcado esa visión. Otras veces he
escuchado: "como mi hijo no ha logrado
la nota en selectividad que necesita, pues
hará un grado superior, ¡qué le vamos a
hacer!". Es triste que siga pasando eso en
muchas de las mentalidades de padres,
madres o docentes actuales. Triste
porque refleja una visión errónea y pobre
de las opciones que existen en España y
en el resto de los países europeos. Es
más: muchos países de Europa educan,
desde el siglo pasado, en la gran riqueza
de lo que son los ciclos formativos. Pero
en este país, el nuestro, sigue muy
arraigado el pasado, ese pasado que
hacía grupos de buenos y malos. Hace
falta muchas dosis de "educación" en
este sentido. Aquí queda mi aportación
para esta tarea.
11 de febrero de 2016
Nuestros alumnos de ATAL han de estar
preparados para integrarse en nuestros
centros, tanto en el uso del lenguaje,
como en todas y cada una de las
competencias que se requieren para la
convivencia pacífica. ¿Por qué no
incluirlos también a ellos, en los
programas de mediación? Necesitamos
formar a nuestros alumnos para que
sean ellos, también, colaboradores en
crear un buen clima de convivencia en
nuestros centros. Gracias a los proyectos
como el del Alumno Ayudante, que
preparan al alumnado para que sean los
grandes observadores del normal
funcionamiento del aula, podemos ir
dando un paso hacia delante. Observar
todo este tipo de conductas que se dan
dentro de las aulas es fundamental.
Crear planes educativos preventivos es
incluso tan importante, como la

respuesta cuando ya se ha detectado un
caso de acoso escolar. Educar
emocionalmente desde la Educación
Primaria sigue siendo un reto: son ellos,
nuestros alumnos, y nosotros los
educadores y padres los que necesitamos
formarles en planes preventivos, para
que se expresen, para que sepan
manejarse en situaciones de conflictos
desde una actitud abierta. Todo esto se
puede aprender y enseñar. Para eso
necesitamos TRANSFORMAR nuestra
manera de entender la educación, tan
anclada aún en un exceso de tiempo en
lo que es directamente curricular, sin
darnos cuenta que el currículo del 2016
ha de integrar, en horas lectivas, otro
tipo de contenidos, tan importantes
como los que llevamos dando en los
colegios y en los institutos desde hace
muchísimos años. La escuela no puede
estar anclada, sin cambiar, cuando fuera
y "dentro" la vida ha cambiado.
Necesitamos, urgentemente, un cambio
de paradigma. ¡¡¡¡Porque otras formas de
aprender son posibles!!!!! En la medida
en que tratemos de enseñar a los
alumnos del siglo XXI, con las
herramientas y las técnicas de otros
siglos, algunas de ellas válidas y otras no
tanto, estaremos manteniendo esta
situación que estamos viviendo de
distancia educativa y de frustración del
docente y del alumnado. No podemos
estar, los colegios y los institutos,
dándole la espalda a la REALIDAD. Un
nuevo siglo requiere nuevas formas de
entender y vivir la educación, también
para nuestro alumnado de ATAL.
1 de marzo de 2016
Comenzamos marzo del 2016. Es un
buen momento para mirar atrás: ver lo
que hemos caminado juntos desde
septiembre. Nos toca afrontar un mes
que se presenta corto, con muchos
exámenes a la vuelta de la esquina.
Tenemos por delante tres programas de
radio y el mes de evaluación del
proyecto. La primera salida con ATAL al
mercado, esta semana, para trabajar
todo el vocabulario que hemos
aprendido estos días. Quiero que sepas,
alumno, alumna que estoy muy
agradecido al buen trato y al respeto
diario que experimento en el trabajo
contigo, con vosotros. Gracias por cada
sonrisa, cada saludo por los pasillos,
cada momento de charla y de compartir
educativo en el aula. Y quiero que sepas
que estar en el “Santa” es un regalo muy
especial para mí. Y por eso os he hecho
este video, que espero que os guste tanto
como me ha gustado a mí hacerlo para
vosotros. Mi agradecimiento también a
los compañeros y compañeras del
instituto, que me están acompañando en
esta vivencia, cada día; al equipo
directivo y al equipo del Departamento
de Orientación. Mi agradecimiento a
Adolfina por haber hecho posible, en
nombre del ETPOEP de la Delegación de

Almería, de estar este curso académico
en el IES Santa María del Águila.
11 de abril de 2016
Tras una semana de recuperación, de
esta amigdalitis aguda que me ha dejado
en cama, con gozo y con ganas, vuelvo a
retomar mañana mi trabajo, tras mi alta
médica de hoy. Es una reafirmación, en
el modelo de trabajo en equipo, en un
centro educativo, el hecho de que las
reuniones del Equipo de Producción de
Radio Orienta se hayan seguido dando,
con independencia de mi ausencia y que
se haya trabajado bien. Eso es
autonomía y en ese modelo educativo
creo. Educar es hacer personas
autónomas, en todos los sentidos. Así
mismo, espero que los chicos que
acompaño en la doble docencia hayan
sido capaces de continuar sus procesos
de enseñanza y aprendizaje, a pesar de
no estar yo con ellos, codo a codo. Eso
sería, nuevamente, expresión del trabajo
bien hecho. Me cuesta ponerme enfermo
y no ir a trabajar. Realmente lo paso mal
“doblemente”: por el malestar físico y
también por el hecho de que me cuesta
no ir a mi trabajo. Un trabajo que hay
que afrontar, cada día, como un reto.
Evaluando y haciendo también la
autoevaluación de uno mismo como
docente, ya que es ésta la que nos
permite hacer ajustes de cara a una
mejora educativa. Me gusta mi trabajo.
Me gusta ser docente. Y siento un
profundo agradecimiento a este
recorrido profesional que empezó en
Ceuta y que ahora desarrollo en este
lugar, Santa María del Águila, El Ejido,
Almería. Es mucho lo que he recibido de
tantas generaciones de alumnos y
alumnas, repartidos ahora por todo el
mundo, y digo “mundo” porque muchos
de nuestros alumnos han acabado
ejerciendo sus profesiones en diferentes
lugares de Europa y fuera de Europa. Ser
docente tiene algo de magia y mucho de
formación permanente. En esa mezcla-
fusión está la clave de ser un buen
profesional. No acomodarse, no relajarse
en una profesión que exige estar al cien
por cien. Estos días de recuperación
también da para pensar, para
reflexionar, para mirar atrás, para
recapitular, para hacer balance. Creo en
una actuación docente que venga dada
en equipo, no en solitario. Esa es la
educación del S. XXI. La intervención
docente-clase creo que ya tuvo su tiempo
y su espacio en lo que es la historia de la
educación. Las necesidades de estas
nuevas generaciones y el tipo de
sociedad en la que nos movemos
requiere otro modo de ejercer la
profesión docente. Y ese modo ha de
pasar de los modelos de intervención
docente individuales a modelos de
intervención docente en equipo. Esto va
a ser un proceso que no se va a dar ni en
un día, ni en dos, ni en tres... pues todos
los docentes tenemos muy arraigado eso

de “cada maestrillo tiene su librillo”. Lo
tenemos metido hasta el tuétano de
nuestro corte docente. Sin embargo, no
sirve para dar respuesta a la realidad de
nuestros alumnos de hoy. Lo que las
nuevas generaciones que llegan a
nuestros centros de Secundaria reclaman
es otro tipo de educación y somos los
docentes, con el apoyo de las
Administraciones Educativas, los que
debemos hacer cambios significativos, en
lo que es el modo de trabajar dentro de
las aulas de nuestros institutos. Aportaré
mi granito de arena en este proceso de
transición de modelos educativos,
siempre desde el respeto y el diálogo,
cediendo, escuchando opiniones,
negociando y sobre todo y por encima de
todo, aprendiendo. Este es el modelo
educativo en el que creo: un grupo de
docentes interviniendo juntos, en
equipo, con un programa educativo que
vaya más allá de las estrictas fronteras de
materias y departamentos. ¡Bueno!!!!!
se nota que llevo una semana sin
hablar.... Agradezco a Dios y a la vida
poder volver a mi trabajo.
28 de abril de 2016
Si hay algo que nos une, que nos hace
iguales en esta experiencia de
interculturalidad, donde acogemos
alumnado que vienen de muchos
lugares, adolescentes de edad de
instituto, es el que aquí y allí estamos
conectados a través del móvil, con la
aplicación que nos permite,
independientemente del país o
continente que estemos, estar
comunicándonos. En nuestros institutos
de secundaria, recorriéndonos
Andalucía, empezando por Algeciras y
llegando hasta donde nos encontramos,
una de las grandes luchas, ¿cuál es? ¡EL
MÓVIL! ¡Ay! cuántos malos ratos
pasamos en las clases, con nuestros
alumnos, por culpa del dichoso móvil.
También nosotros, como adultos,
estamos ya, al menos yo, enfrascados en
esta nueva era de la comunicación que
nos toca vivir. El uso del teléfono, como
de cualquier otro medio o instrumento,
requiere moderación. La lectura de los
"wasap" es un hábito que ya forma parte
de nuestra rutina, desde que
amanecemos hasta que llega el final del
día. Me ha gustado mucho este
cortometraje que hace reflexionar sobre
el uso de esta aplicación que ha traído
muchas cosas buenas, aunque siempre
hay que utilizarla con sentido común".
21 de mayo de 2016
Como ATAL, ámbito directo también de
la atención a la diversidad en los centros
educativos, me preocupa e inquieta a la
situación que hemos llegado. Una
sociedad plural, heterogénea, de grandes
cambios en los últimos cincuenta años,
requiere decisiones en común acuerdo,
dejando atrás los intereses partidistas y
abriéndonos a un diálogo verdadero, por

el bien de la educación. La política posee
una importancia capital con respecto a la
educación. Y el sistema educativo, en
estos cincuenta años, se ha visto
expuesto a leyes educativas diferentes,
según el gobierno de la nación que
estuviera gestionando el país. Esto nos
ha llevado a un “caos” legislativo y a un
interminable proceso de cambios
conceptuales, con respecto al currículo y
su fundamentación, que ha hecho que
los docentes estemos completamente
desencantados con la situación. La
participación de padres y alumnado, de
los años ochenta a la actualidad, han ido
perdiendo fuerza, espacio y lugar. Y esto
también es debido al exceso de
burocracia en la que el propio sistema
educativo ha entrado. Si los docentes no
llegamos a entender esta multiplicidad
de cambios, ¿cómo estarán los padres y
alumnos, expuestos a los mismos? El
modelo social técnico-tecnológico, donde
el esquema empresarial posee una fuerza
grande, potenciando los proyectos
autónomos y emprendedores, tanto en la
juventud como en el mundo adulto, se ha
llevado también al sistema educativo.
Esto se ve claramente en el actual
modelo LOMCE, que ya estaba prefijada
en la LOCE, que no llegó a implantarse.
Desde el punto de vista sociológico, hay
todo un sector de la sociedad que no se
identifica con este modelo educativo. Sin
embargo, al no existir, hasta ahora, en
este país, un pacto por la educación, la
realidad es que cada gobierno pone en
marcha una ley general de educación, ley
que no puede llegar a tener equilibrio, ya
que el siguiente gobierno la derogará y
empezará con una nueva reforma
educativa. Esta es la realidad social en la
que, en este momento, nos encontramos:
en la INCAPACIDAD como país, de
ponernos de acuerdo. Y, como
consecuencia, el deterioro del propio
sistema educativo, manifestado en las
aulas, en los centros, en la calidad del
cuerpo docente, etc. La pobreza de no
querer dejar los puntos de vistas de cada
modelo educativo de unos y otros
partidos políticos, la dificultad para
ceder y llegar a un acuerdo, está
generando una profunda crisis en
nuestro sistema educativo. Triste y
lamentable, en una sociedad que
llamamos de países desarrollados.
2 de junio de 2016
Hoy impartiré, en la Semana Cultural del
IES Santa María del Águila, por primera
vez, un TALLER DE RADIO. Estoy
nervioso, pues es la primera vez que voy
a tener esta posibilidad y el nivel del
alumnado apuntado es alto, ya que
muchos tienen una experiencia de
formación en radio que ni siquiera yo he
tenido. Espero poder compartir la
experiencia vivida en el IES KURSAAL, y
también en Santiago de la Espada.
Bueno, espero que salga bien.

Xavier Martinez me entrevista en Radio
Orienta. Tras el programa de ayer, sus
preguntas me llevan a recordar muchas
vivencias educativas, especialmente de
Algeciras. Está totalmente improvisado,
pero queremos compartirlo, pues ha sido
un momento precioso de la radio.
Gracias, Javier, por ese momento de
radio, que me ha permitido expresar
muchas cosas.
Todo esto se lo debo a Adolfina Montes,
la coordinadora de Educación
Intercultural del ETPOEP, pues fueron
ellos los que me llamaron para que me
viniera a trabajar aquí. La vida,
muchas veces, te da un giro de 180
grados: de repente, me encontré con
este reto de ser ATAL y de afrontar, en
primera línea, la INCLUSIÓN.
Al principio lo pasé mal. No era tan
sencillo como se ve cuando te sientas a
escribir un proyecto. Han pasado nueve
mese desde que llegué y os estoy
profundamente agradecido: a mi
alumnado de ATAL, a todos y cada uno
con los que trabajo en INCLUSIÓN, al
instituto, y a la delegación de Almería,
por el apoyo, el seguimiento que hacen
de los que trabajamos en
ATAL: ¡GRACIAS!
Espero que os guste poder leer lo que he
sentido a lo largo de estos nueve meses.
El diario no tiene otro objetivo que el de
compartir la experiencia educativa que
vivo aquí.
No se me puede olvidar agradecer a
todos los compañeros y alumnado que
han estado trabajando con el proyecto
de radio educativa que
presenté: RADIO ORIENTA. Gracias,
porque la radio me ha unido muchísimo
al alumnado de otros cursos donde no
trabajaba directamente: los chicos y
chicas de 4º de ESO, los chicos de
PMAR, alumnado de bachillerato, ... La
radio tiene una magia especial.
Empezó para nuestros alumnos de
ATAL y se abrió a todos los ámbitos del
Departamento de Orientación, gracias a
Raquel, la orientadora, que hizo
extensible el proyecto.
Ha sido un año realmente hermoso,
bonito, y no tengo palabras para poder
agradecer lo que ha significado para mí
y lo FELIZ que me habéis hecho. Por
eso dedico este diario al alumnado de mi
instituto y a todos los que trabajan en él.
Gracias de todo corazón.

VAMOS AL FUTURO.
¿QUIÉN SE SUBE?
Lourdes Otero
Orientadora en el IES Xosé Neira Vilas (Oleiros, A Coruña).
Blog “Convivencia e orientación en Perillo”

Vamos al futuro. ¿Quién
se sube?
Este sería el título que yo le daría al libro
blanco de José Antonio Marina cuando
habla del acceso a la función docente,
como profesión de alto nivel.
Aunque pone como ejemplo a varios
países como Singapur, Estados Unidos,
Finlandia... en cuanto a los criterios de
admisión, que se siguen en cada uno de
ellos, para el acceso a la formación
universitaria, no hay una propuesta clara
para nuestro país.
En mi humilde opinión, creo que la
selección de los mejores aspirantes a la
función docente, no deberían de estar
basados en sistemas de evaluación
cuantitativos, como es el caso de carreras
como medicina, en el que únicamente se
tiene en cuenta la mejor nota de corte,
determinada por las pruebas PAU y el
expediente académico de bachillerato.
Los mejores talentos ¿quienes serían?
Sobra decir que el éxito académico, en
nuestro sistema educativo, está
relacionado directamente con las
aptitudes lingüísticas y las numéricas.
Dicho de otra manera solamente se
potencian las inteligencias verbal-
lingüística y la lógico-matemática de
Howard Gardner. Y para más inri... sí, sí
nosotros, los orientadores utilizamos
pruebas psicométricas que miden
fundamentalmente los factores, antes
citados. Buena prueba de ello es el Badyg
de Carlos Yuste para todos sus niveles,
que estoy segura que muchos de
nosotros, la utilizamos como un
instrumento más para la evaluación
psicopedagógica.
¿No pensáis que las inteligencias
interpersonal e intrapersonal que supone
desarrollar habilidades, como capacidad
de escucha, empatía, resiliencia,... tan
importantes para el ejercicio de
cualquier profesión y por ende para el
desempeño de la función docente, serían
imprescindibles para esa selección de los
mejores aspirantes a nuestra profesión?
Si yo formase parte de esa comisión de
selección, mis candidatos serían algunos
de nuestros estupendos mediadores de
los equipos de convivencia y mediación
que hay en los centros. Son aquellos
alumnos, que con su inteligencia innata
para ponerse en los zapatos de los demás
y cristalizada por la formación que
reciben, son auténticos managers del
pilotaje emocional tan presente en las
aulas y que muchos de los actuales
docentes no saben gestionar.
Lo que pasa en las Vegas
se queda en las Vegas.
Así es como llamaría yo, a algunos de los
aspectos que no les concede el
tratamiento, que según mi consideración

Colectivo Orienta 2015-16

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