1. LA RELACIÓN ENTRE GENÉTICA Y COMPORTAMIENTO
DANIELA ALEJANDRA QUESADA ALAPE
ID:100073334
PH D. NICOLAS GUEVARA
PSICOLOGIA
CORPORACION UNIVERSITARIA IBEROAMERICANA
BOGOTÁ DC - MAYO 2020
2. GENETICA Y EVOLUCIÓN
• Todo intento por comprender una actualidad en transformación así como su consideración y
evaluación, exige la producción de perspectivas desde las cuales esas transformaciones
puedan ser interpretadas, examinadas y valoradas. Precisamente en esta actualidad es
posible reconocer que existen cuestiones cruciales que atraviesan el ethos contemporáneo
que conciernen especialmente al desarrollo científico-tecnológico en sus aspectos éticos,
antropológico-filosóficos y político-sociales.
• La investigación de la genética, que ha avanzado más en dos lustros que en el último medio
siglo, ha desatado una auténtica revolución de conocimiento. "El ADN, si lo sabemos
interpretar, es nuestro manual de instrucciones. En cada célula hay toda nuestra información
genética; si tenemos un elevado riesgo de sufrir enfermedad de Parkinson o Alzheimer, si
somos portadores de mutaciones causantes de fibrosis quística o de ceguera hereditaria, si
somos explosivos o resistentes en la práctica del deporte", destaca Gemma Marfany, profesora
de Genética de la Universitat de Barcelona (UB). Es lo que algunos expertos, como la propia
Marfany, han bautizado como "el horóscopo genético".
3. • Durante la primera mitad del siglo XX crece el
interés en los aspectos médicos y se realizan
descubrimientos morfológicos sobre la célula, el
núcleo y las partículas de colores de su interior,
a las que se llamó cromosomas (cromo-color y
soma-cuerpo). El descubrimiento del ácido
nucleico en los cromosomas dio paso al
conocimiento de que la información contenida
en el núcleo era la responsable de los
caracteres hereditarios.
• El modelo de la estructura de doble hélice del
ADN en 1953 por Francis Crick y James
Watson permitirá explicar cómo se reproducen
las células entre sí y de este modo los sistemas
genéticos de la reproducción humana. Se dio
paso entonces al desarrollo de los servicios
genéticos en diversos países entre los años 50
y los 60 con el objetivo primordial de descubrir
la base de las enfermedades genéticas.
4. • El conocimiento genético de las enfermedades En la actualidad se conoce la base
molecular de unas 5.000 enfermedades. Se espera que hacia 2020 se conozcan las
causas genéticas de la mayoría de las enfermedades raras. Con ello se podrán
diagnosticar de manera precoz dichas enfermedades y trabajar con las familias mediante
asesoramiento genético para minimizar los riesgos de heredabilidad en la descendencia.
• La reacción en cadena de polimerasa Entre 1985 y 1990 el genetista Kary Mullis y sus
colegas desarrollan la técnica de la reacción en cadena de polimerasa (PCR) para
ampliar y detectar una secuencia de ADN específica de manera muy rápida in
vitro.Utilización de herramientas genéticas
• En 1986 se identifica el primer gen causante de una enfermedad humana mediante
herramientas genéticas (clonación posicional), el de un trastorno inmunológico
denominado enfermedad granulomatosis crónica.
5. • El ‘ADN basura’ no es un desecho
Gracias a las investigaciones del proyecto ENCODE (la investigación de mayor
envergadura en el campo de la genómica en la que participan varios biomédicos
españoles) en 2012 se descubrió que el llamado ADN basura es mucho más útil de lo
que se pensaba. Y es que, en realidad, éste es esencial para que los genes humanos
funcionen ya que regula su actividad. El hallazgo se presentó de manera simultánea en
tres revistas científicas: la británica Nature, y las estadounidenses Genome
Research y Genome Biology. “Este es uno de esos grandes pasos que transforman
nuestra comprensión de la genética", afirmó en su día Ewan Birney, coordinador del
proyecto e investigador del Instituto Europeo de Bioinformáticos de Hinxton (Reino
Unido).
6. • Hallan agua en Marte
El 19 de junio de 2008, la NASA confirmaba un secreto a voces:
el planeta Marte albergaba agua . Hacía muchos años que los científicos estaban
convencidos de ello, y es que así lo determinaban multitud de estudios previos, pero
faltaba la prueba física. Y esta llegó gracias a la sonda Phoenix. Este vehículo explorador,
lanzado el 4 de agosto de 2007, cerraba el círculo encontrando hielo cerca del Polo Norte
marciano.
Análisis posteriores determinarían que el suelo marciano en el que aterrizó la Phoenix era
alcalino, con un pH (acidez) de entre 8 y 9, y muy similar al de la superficie cercana a los
valles de la Antártida.
Hallazgo de planetas similares a la Tierra
El 6 de marzo de 2009 fue lanzada al espacio la sonda espacial keppler , una sonda que
tenía, y tiene, como principal objetivo hallar planetas extrasolares, especialmente aquellos
que más se asemejen a la Tierra y que se encuentren en zonas habitables (con
temperaturas ni muy frías ni muy calientes y con agua en su superficie). Ya en el siglo XIX
los científicos sospechaban de la existencia de estos planetas, pero no sería hasta la
década de los 90 del siglo pasado cuando se empezarían a detectar los primeros.
7. A lo largo de los últimos 20 años, el gran avance del desarrollo tecnológico ha traído consigo un
importante y profundo conocimiento de las bases genéticas y moleculares del ser humano. Las
bases sobre las que asentaban los conocimientos en torno a la genética clínica y las relaciones
entre causa genética y el desarrollo de enfermedades hereditarias se han visto modificados de forma
trascendental. En este ámbito, los descubrimientos en el campo de la genética clínica se han visto
orientados hacia conceptos de heterogeneidad genética y fenotípica, de forma que una misma
patología hereditaria actualmente se sabe que podría estar ocasionada por alteraciones en
diferentes genes y simultáneamente, variantes en el mismo gen podrían desencadenar fenotipos de
gran diversidad.
En este nuevo panorama, las metodologías de análisis masivo de genes así como las
implementaciones bioinformáticas necesarias para la interpretación de las alteraciones identificadas,
resultan de elevada importancia para poder alcanzar el diagnóstico certero de una enfermedad
hereditaria.