El resumen es el siguiente:
1) La implementación de tecnologías en escuelas rurales requiere la voluntad y conciencia de los directivos sobre los costos involucrados.
2) Se necesita infraestructura adecuada como internet, hardware y software, financiada por organizaciones, y considerando la geografía.
3) Se requiere capacitar a los docentes continuamente para que enseñen con confianza y transmitan el conocimiento a los estudiantes.
2. Voluntad de los Directivos No es posible imponer las cosas a las personas, lo primero que se requiere es la curiosidad y decisión de los directivos en implementar las nuevas tecnologías en sus instituciones. Los directivos deben estar conscientes del costo humano y financiero que esto representa.
3. Infraestructura adecuada Existen diversos organizaciones internacionales (ONG), que financian proyectos de modernización tecnológica en instituciones educativas de bajos recursos, por ejemplo el “programa una computadora para cada niño” creada por catedráticos del Laboratorio de Multimedia del Instituto Tecnológico de Massachussets (MIT). Se requiere invertir en internet, hardware y software. Obviamente se debe tomar en cuenta la geografía de la zona para ello.
4. Capacitación Docente He constatado que muchos docentes de nuestro sistema educativo le temen a la tecnología, se siente sobrepasados por los estudiantes cuando se trata de este tema. Necesitamos un plan nacional de capacitación continua en medios tecnológicos. Las capacitaciones debe ser dirigidas a los que deberán luego transmitir ese conocimiento. Un docente seguro de sí mismo en esta área educacional, será un excelente maestro.
5. Implementación de las tecnologías con los estudiantes En este punto me parece que la cultura, costumbres, valores de la comunidad deben ser bien estudiados y medidos. En función de ello se puede identificar qué tipo de tecnologías son viables para esas personas. La socialización de las mismas se debe efectuar de manera paulatina y coordinada para llenar de confianza a esos estudiantes.
6. Se requiere un cambio en nuestro pensamiento sobre la organización de la educación; de la escuela, una institución donde el aprendizaje es organizado, definido y contenido; para dar lugar a un estudiante, un agente inteligente con el potencial de aprender de cualquier y todos sus encuentros con el mundo a su alrededor. Tom Bentley (1998)