El documento discute la situación de los adultos mayores en Venezuela. Señala que aunque se han hecho esfuerzos como pensiones no contributivas y dinero mensual para medicinas, los adultos mayores siguen sufriendo por la falta de atención médica adecuada, escasez de medicamentos e infraestructura insuficiente como residencias para ancianos. El artículo argumenta que el Estado no está cumpliendo con su deber constitucional de garantizar los derechos de los adultos mayores, quienes junto con los niños están siendo más afectados por

1. Artículos INCIDE
ENVEJECER, UN ORGULLO O UN DRAMA.
DÍA DEL ADULTO MAYOR.
En los últimos veinticinco años la población venezolana ha sufrido cambios importantes
en su composición. Sigue siendo un país de jóvenes en un alto porcentaje, pero también
se ha logrado extender las expectativas de vida de los adultos mayores. Basta con
observar a las personas que transitan por las calles, visitan los centros comerciales,
acuden a los bancos o esperan pacientemente ser atendidos en hospitales, clínicas o
centros de salud para darse cuenta de que una gran cantidad de ellas son adultos
mayores
Hoy se celebra a nivel internacional el día del adulto mayor, lo que cariñosamente
apodamos “día de los viejitos”.
Por ello, INCIDE, dedica unos momentos a la reflexión sobre los alcances de esta
efeméride con la pregunta: ¿Cómo viven los adultos mayores hoy en Venezuela? ¿Se le
respetan sus derechos?, ¿la sociedad venezolana ha madurado lo suficiente como para
considerar la vejez como un don que hay que proteger y cuidar, pues ella constituye una
riqueza de experiencias y un signo de bienestar de sus habitantes? ¿Cómo viven hoy los
“viejitos”, como cariñosamente se les llama, en la situación de precariedad económica
que vive el país?
Nadie duda que se hayan hecho esfuerzos por parte del Estado para mejorar su
situación con las pensiones no contributivas más una pequeña cantidad de dinero
mensual para medicinas. Pero sigue sin resolverse el tema de los hospitales
(desasistidos, sucios, sin dotación de equipos e insumos), centros de salud en general,
carentes de lo mínimo indispensable para atender debidamente y falta de medicamentos
en las farmacias (como los hipertensivos) y algo que hoy es común en muchos países
construcción de “RESIDENCIAS PARA ANCIANOS”, donde muchos de ellos,
carentes de familiares cercanos y que mal viven en casas o son una carga muy pesada
para familias humildes, puedan ser atendidos dignamente en las mencionadas casas para
adultos.
El artículo 80 de la Constitución es muy explicito al hablar de los derechos de los
ancianos y es un deber ineludible del Estado garantizar su cumplimiento. Hay
estadísticas y estudios recientes que hablan de una dolorosa realidad: los niños y adultos
mayores son quienes más están sufriendo la crisis económica por la que atraviesa
Venezuela. Se trata de una crisis humanitaria a la que el Estado no está atendiendo
debidamente.

2. Es un deber de toda la sociedad garantizar la atención necesaria a estos dos sectores tan
vulnerables de la sociedad, unos porque son el futuro de ella y otros porque ya
cumplieron con su trabajo, creación de riqueza y bienestar, que hoy se les está negando.