Este documento discute la evolución histórica de la enseñanza de la geografía, desde su función original de proveer conocimientos culturales y enciclopédicos a las élites gobernantes, hacia un enfoque más basado en el desarrollo de competencias geográficas y el análisis crítico de la realidad espacial. También resalta la necesidad de adecuar los contenidos geográficos a los nuevos contextos según organismos internacionales, y de potenciar la investigación geográfica.