1. CAPACITACIÓN DE DIRIGENTES 2011
LAS DIACONISAS
Las diaconisas estaban incluidas en el cuadro directivo de las
iglesias cristianas primitivas. “Os recomiendo además nuestra
hermana Febe, la cual es diaconisa de la iglesia en Cencrea; que
la recibáis en el Señor, como es digno de los santos, y que la
ayudéis en cualquier cosa en que necesite de vosotros; porque
ella ha ayudado a muchos, y a mí mismo” (Rom. 16:1, 2).
Deberes de las diaconisas.
1. Ayudar en las ceremonias bautismales. Las diaconisas deben
ayudar en las ceremonias bautismales atendiendo a las damas
que se van a bautizar, antes y después de la ceremonia. También
aconsejan y ayudan, según sea necesario, en cuanto a las ropas
adecuadas para el bautismo. La iglesia debe tener túnicas
bautismales confeccionadas con tejidos adecuados. Luego del
bautismo, las diaconisas deben lavarlas y guardarlas
cuidadosamente para su uso futuro.
2. Ayudar en el servicio de comunión. Las diaconisas ayudan en
la celebración del rito de humildad, prestando especial asistencia
a las mujeres visitantes y a las que se unieron recientemente a la
iglesia. Es deber de las diaconisas cuidar que todas las cosas
necesarias para este servicio, tales como el mantel de la mesa,
las toallas, etc., que se emplean en la celebración de los ritos,
sean lavadas y guardadas cuidadosamente.
Las diaconisas preparan todo lo que se necesita para la mesa de
la comunión, incluyendo: preparar el pan y el vino, arreglar la
mesa de la comunión, llenar las copitas con el vino, poner los
platos con el pan sin levadura, y cubrir la mesa con el mantel
preparado para este fin. Todo esto debe hacerse antes que
empiece el servicio. Normalmente, la mayor parte del pan que se
va a distribuir se parte antes del servicio, dejando un poco en
cada plato para que los ancianos y/o ministros lo partan.
Pr. Eduardo Bailón – Distrito Misionero de Ancón
2. CAPACITACIÓN DE DIRIGENTES 2011
Las diaconisas que apoyarán en la Cena del Señor quitando el
mantel de la mesa de Comunión, deben ser designadas con
anticipación y previamente deben ensayar.
Las diaconisas deben lavarse los pies antes que los demás
hermanos.
Debe proveerse un jabón para que el ministro o anciano se lave
las manos.
3. Cuidar de los enfermos y los pobres. Las diaconisas deben
hacer su parte en el cuidado de los enfermos, los necesitados y
los desafortunados, cooperando con los diáconos en esta obra
4. Mantener el orden dentro del templo y el arreglo del mismo.
Durante los cultos deben mantener la reverencia dentro del
templo en colaboración con los diáconos.
5. En algunas iglesias acompañan a los niños que salen a
recoger las ofrendas de menores y cubren los diezmos y ofrendas
con un mantel.
6. Limpieza de los manteles, cortinas y otros enseres. Se debe
delegar a cada diaconisa el mantenimiento de los enseres, como
manteles, cortinas, floreros y otros.
Nota: Para todo lo anteriormente mencionado la jefa de
diaconisas con su secretaria debe elaborar un rol, de acuerdo a la
necesidad de cada iglesia.
Recetas del Pan y el Vino
Ingredientes del Pan
1 taza de harina fina de trigo
¼ cucharadita de sal
2 cucharadas de agua fría
¼ de taza de aceite de oliva o vegetal.
Preparación: Tamice la harina junto con la sal. Derrame el agua
en el aceite pero no los bata. Añada estos a los ingredientes
secos y mézclelos con un tenedor hasta que la harina esté
humedecida. Tienda todo entre dos hojas de papel manteca,
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3. CAPACITACIÓN DE DIRIGENTES 2011
hasta un espesor de tortilla (también puede colocarse la masa
sobre una mesa limpia enharinada y pasarla con un rodillo hasta
que esté elástica, 5 a 6 minutos). Coloque en un molde
enharinado y márquela con un cuchillo bien afilado en cuadrados
de un centímetro y medio aproximadamente, y pinche cada
cuadradito con un tenedor para evitar que se hinche. Hornéela a
unos 230º C durante unos 10 a 15 minutos. Con mucho cuidado
que no se queme. Alcanza para 50 personas.
Vino sin fermentar
Consiga uvas buenas, sáquelas del racimo y póngalas a cocinar
en una olla hasta que lleguen al punto de ebullición. Cuélelas con
un paño grueso. Luego hágase hervir el jugo durante 15 minutos.
Justo antes de que hierva, saque toda la espuma que se levanta.
Cuando el jugo está en el punto de ebullición, vacíelo en botellas
resistentes que hayan sido esterilizadas y mantenidas calientes, a
fin de que puedan recibir el vino caliente sin quebrarse. Dejando
un centímetro de la tapa selle herméticamente.
Pr. Eduardo Bailón – Distrito Misionero de Ancón