El documento discute la importancia de la ética empresarial y el liderazgo ético para el éxito a largo plazo de una empresa. Señala que las empresas con ética empresarial y líderes con virtudes como la prudencia, la justicia y la templanza permanecen operando durante más tiempo, en comparación con empresas sin ética. También explica que el liderazgo ético debe basarse en valores y promover un ambiente positivo que gane la confianza de los empleados.
1. Actualmente existen empresas u organizaciones que tiene ética empresarial, es decir que
actúan en un entorno que no solo intenta tener el más alto respeto y dignidad de los
integrantes de la empresa, sino también intenta que tenga el bienestar social, existen otras
empresas que tienen personas sin ética ni liderazgo lo que dirige a fracasar. Entendemos
que la ética se basa en la aplicación de la verdad, podemos decir que un liderazgo ético
aplicado a una empresa trae ciertos beneficios, por ejemplo una empresa tiene ética
empresarial permanece en el largo plazo a diferencia de otras que no consideran a la ética
como algo esencial. La ética debe estar presente y formar parte de la personalidad de un
buen líder esto ayuda a que el líder gane la confianza, lealtad y credibilidad de todos los
miembros de la empresa. El liderazgo ético debe ser un desafío empresarial, ya que influye
en los líderes de los distintos niveles dentro de la organización y con ellos en todos sus
seguidores. Una organización o una empresa debe tener una dirección basada en valores, y
al mismo tiempo los directivos deben tener un liderazgo que se base en virtudes, esto trata
de incentivar a todos los que forman parte de la organización y así poder generar una
actitud positiva. Los directivos de las empresas, son los que están encargados en reconocer
que existe una necesidad ética en su empresa, es por esto que deben dirigirse por valores
los cuales tienen que llevarlos al resto de la empresa, estos valores deben de vivirse y
llevarlos a la práctica empresarial. En conclusión el liderazgo lo ejerce una persona que
tenga responsabilidad y virtudes entre las cuales tenemos a la prudencia, justicia, fortaleza
y templanza que son las virtudes esenciales encargadas de guiar el liderazgo ético.