SlideShare una empresa de Scribd logo
1 de 2
Despertando la compasión
Siendo la habilidad de oportunistas, el cencerro sin badajo lo come la roña. O como diría un
ferroviario brightonian de mediados del siglo XIX, acerbamente preocupado por los engranajes
encargados de la transmisión de fuerza a las ruedas: _ ‘The
squeaking wheel gets the grease’; es decir, ‘la rueda que
chirría recibe la grasa’.
Y así es, mártires del presente, recientes del
momento o abnegados vigentes. Existen prácticas sociales,
corporativas, cuya elaboración pérfida trata de despertar la
compasión entre aquellos que han pactado celebrar la
tramoya, en los máximos términos de disposición del
disimulo: efectos escénicos provistos de un ingenio superior, bien discurrido. Rueda que te rueda, a
todo vapor.
Si no formas parte de la estructura teatral, empiezas a comprender, una por una, la cantidad
de secuencias en las que no estás instalado, apostado para concretar la ganancia. Si hay que empezar
a revolverlo todo, la acción comienza a ser representada. Recomienza la escenificación. Se perpetra,
una por una, la cantidad de formas de expresión y actuación que componen las artes escénicas.
¿Hay que danzar?; ¿hay que cantar?; ¿hay que interpretar?; ¿hay que inflar la gestualidad?; o
¿hay que desencadenar, con diplomática habilidad, una silenciosa mímica que construya toda la
pantomima? Mima que te mima, ¡qué mimosos!, pues es a nosotros para quienes la luz de las
candilejas dirige su fulgor. Casi todo el plantel adquiere el oficio palatino del espabilado. ¡Uy!,
perdón, me refería al oficio del despabilador: aquel encomendado a quitar el cabo de la mecha a las
velas y los candiles.
Dichas secuencias habrán advertido que tu aparición está rescindida. Todo lo realizado para
evitar la manifestación de lo que se pretende que quede oculto, lo cual acaba perdiéndose,
encuentra su lugar de articulación. Tú desapareces de los palcos de platea, de los antepalcos y, cómo
no, de los palcos. En la parte balconada existen momentos en los que se despliega una admirable
representación escénica a la altura de los intérpretes faranduleros, cómicos y figurantes, situados un
poco antes del proscenio. Manteniendo las distancias con el público. Sensato alejamiento afectivo.
Donde el saludo no languidece. Donde el aplauso no extenúa. Donde el vitoreo no decae. ¿Por qué?,
porque al mismo tiempo que se produce la glorificación del palmoteo, existen zonas dentro del
auditorio, pero alrededor de la cávea, en las que se está terminando de definir los encajes. Antes,
durante y Dios mediante. En un refugio de la excelente isóptica y acústica donde queda la masa
despistada. Completamente ajena, para no ser intrusa. Huyendo de la tremolina. La concha acústica
deja de prestar sus servicios.
Las bambalinas ocultan los aparejos del telar: tejiendo todo lo decorado. El telón va
administrando durante la representación los cambios en la escenografía, aquello que no debe ser
contemplado. El camarín es el lugar en el que se pueden detallar todos los cambios de vestuario
precisos: tipos de vestimenta por el que rasgarse las vestiduras. ¿Cómo hacemos hoy?, vamos casual,
formal, de cóctel, de etiqueta, deportiva, cómoda, exprés, etc. ¡Un momento!, la elegiremos en
función de cómo sobrellevar mejor nuestra vida comunitaria, y protegernos de los diferentes estados
climáticos, es decir, según el símbolo de la clase social que estamos figurando. La conveniencia suele
ser la principal inspiración de la farándula. El guardarropa es el único enclave en el que todo puede
llegar a igualarse. Sin embargo, claro está, hay abrigos y abrigos.
Si llegas a ser un fraccionado segmento de la audiencia, entre otros demandados que
completan la concurrencia, queda para ti la oportunidad de promover una buena cencerrada con
motivo de la sorna. Empero no por piadosa. Es la única forma conocida, y concedida al fin y al cabo
con distante dominio, para convocar mediante esquilas la atención de aquellos distraídos. Ellos solo
han captado una trama capitulada. Porque como para gustos no hay disputas, y el que no pide, nada
recibe, despertar la compasión fija su objetivo entre quienes se conceden así mismos la victoria.
La compasión es la percepción y comprensión del sufrimiento del otro, y el deseo de aliviar,
reducir o eliminar por completo tal sufrimiento (https://es.wikipedia.org/wiki/Compasión). ¿Cuántos
sufrimientos esconden un descarado y desvergonzado interés personalista?, no tengo la menor idea. Lo
que sí sé es que muchos hemos tenido que mamar para poder llorar.
Domingo, 29 de enero de 2017
Félix Sánchez
Un ciudadano más

Más contenido relacionado

La actualidad más candente (8)

QUIJOTE
QUIJOTEQUIJOTE
QUIJOTE
 
Elquijot eros12
Elquijot eros12Elquijot eros12
Elquijot eros12
 
El Quijote 2
El Quijote 2El Quijote 2
El Quijote 2
 
Quijote
QuijoteQuijote
Quijote
 
Don Quijote
Don QuijoteDon Quijote
Don Quijote
 
D.quixote loucuradeamar
D.quixote loucuradeamarD.quixote loucuradeamar
D.quixote loucuradeamar
 
¿Qué es la ilustración
¿Qué es la ilustración¿Qué es la ilustración
¿Qué es la ilustración
 
El Gran "Don quijote de la Mancha"
El Gran "Don quijote de la Mancha"El Gran "Don quijote de la Mancha"
El Gran "Don quijote de la Mancha"
 

Similar a Despertando la compasión

El espectador emancipado. Rancière
El espectador emancipado. RancièreEl espectador emancipado. Rancière
El espectador emancipado. Rancière
amador1981
 
Tristan tzara siete manifiestos dada
Tristan tzara   siete manifiestos dadaTristan tzara   siete manifiestos dada
Tristan tzara siete manifiestos dada
N SinApellido
 

Similar a Despertando la compasión (20)

CO.INCIDIR 103 NOV 2022.pdf
CO.INCIDIR 103 NOV 2022.pdfCO.INCIDIR 103 NOV 2022.pdf
CO.INCIDIR 103 NOV 2022.pdf
 
Visión de Futuro - Una Leyenda que no Olvide la Historia
Visión de Futuro - Una Leyenda que no Olvide la HistoriaVisión de Futuro - Una Leyenda que no Olvide la Historia
Visión de Futuro - Una Leyenda que no Olvide la Historia
 
Una Leyenda que no Olvide la Historia - Carlos de la Rosa Vidal - Artículo In...
Una Leyenda que no Olvide la Historia - Carlos de la Rosa Vidal - Artículo In...Una Leyenda que no Olvide la Historia - Carlos de la Rosa Vidal - Artículo In...
Una Leyenda que no Olvide la Historia - Carlos de la Rosa Vidal - Artículo In...
 
Proyecto de Vida - Una Leyenda que no Olvide la Historia
Proyecto de Vida - Una Leyenda que no Olvide la HistoriaProyecto de Vida - Una Leyenda que no Olvide la Historia
Proyecto de Vida - Una Leyenda que no Olvide la Historia
 
El Poder de la Gratitud - Carlos de la Rosa Vidal
El Poder de la Gratitud - Carlos de la Rosa VidalEl Poder de la Gratitud - Carlos de la Rosa Vidal
El Poder de la Gratitud - Carlos de la Rosa Vidal
 
TEM 004 - Una Leyenda que No Olvide la Historia - Carlos de la Rosa Vidal
TEM 004 - Una Leyenda que No Olvide la Historia - Carlos de la Rosa VidalTEM 004 - Una Leyenda que No Olvide la Historia - Carlos de la Rosa Vidal
TEM 004 - Una Leyenda que No Olvide la Historia - Carlos de la Rosa Vidal
 
Poemario los cueros al sol
Poemario los cueros al sol Poemario los cueros al sol
Poemario los cueros al sol
 
Elogio de la pereza: El instante presente - Jacques Philippe
Elogio de la pereza: El instante presente - Jacques PhilippeElogio de la pereza: El instante presente - Jacques Philippe
Elogio de la pereza: El instante presente - Jacques Philippe
 
Artez202
Artez202Artez202
Artez202
 
El Sinsentido Contemporáneo - Carlos de la Rosa Vidal
El Sinsentido Contemporáneo - Carlos de la Rosa VidalEl Sinsentido Contemporáneo - Carlos de la Rosa Vidal
El Sinsentido Contemporáneo - Carlos de la Rosa Vidal
 
Ausencia
AusenciaAusencia
Ausencia
 
rionegro -01
rionegro -01rionegro -01
rionegro -01
 
Nudismos
NudismosNudismos
Nudismos
 
Dominio lunar
Dominio lunarDominio lunar
Dominio lunar
 
El espectador emancipado. Rancière
El espectador emancipado. RancièreEl espectador emancipado. Rancière
El espectador emancipado. Rancière
 
Diario re vivir
Diario re vivirDiario re vivir
Diario re vivir
 
CO.INCIDIR 101 SEPT 2022.pdf
CO.INCIDIR 101 SEPT 2022.pdfCO.INCIDIR 101 SEPT 2022.pdf
CO.INCIDIR 101 SEPT 2022.pdf
 
Tristan tzara siete manifiestos dada
Tristan tzara   siete manifiestos dadaTristan tzara   siete manifiestos dada
Tristan tzara siete manifiestos dada
 
Fausto hici
Fausto hiciFausto hici
Fausto hici
 
La pléyade exánime.
La pléyade exánime.La pléyade exánime.
La pléyade exánime.
 

Más de Félix Sánchez Paredes (20)

Hurto de hurtos
Hurto de hurtosHurto de hurtos
Hurto de hurtos
 
A bocado céfiro
A bocado céfiroA bocado céfiro
A bocado céfiro
 
Como con un churro en la mano.
Como con un churro en la mano.Como con un churro en la mano.
Como con un churro en la mano.
 
Vela a vela
Vela a velaVela a vela
Vela a vela
 
Nocturno de cerca
Nocturno de cercaNocturno de cerca
Nocturno de cerca
 
Trasluz de nieve
Trasluz de nieveTrasluz de nieve
Trasluz de nieve
 
Dime tú
Dime túDime tú
Dime tú
 
Lágrima perdida
Lágrima perdidaLágrima perdida
Lágrima perdida
 
Mi rosa
Mi rosaMi rosa
Mi rosa
 
Más allá del verano
Más allá del veranoMás allá del verano
Más allá del verano
 
Ilusión esencial
Ilusión esencialIlusión esencial
Ilusión esencial
 
Manchado de silencio
Manchado de silencioManchado de silencio
Manchado de silencio
 
Suplicantes
SuplicantesSuplicantes
Suplicantes
 
Verdad de invierno
Verdad de inviernoVerdad de invierno
Verdad de invierno
 
Adehesado
AdehesadoAdehesado
Adehesado
 
Clichés otoñales
Clichés otoñalesClichés otoñales
Clichés otoñales
 
Untuosidad desbocada
Untuosidad desbocadaUntuosidad desbocada
Untuosidad desbocada
 
Protagonista de papel
Protagonista de papelProtagonista de papel
Protagonista de papel
 
So pájaro
So pájaroSo pájaro
So pájaro
 
Tedio
TedioTedio
Tedio
 

Último

Recuperando el Rumbo Hasta la Transformación Parte Final.pptx
Recuperando el Rumbo Hasta la Transformación Parte Final.pptxRecuperando el Rumbo Hasta la Transformación Parte Final.pptx
Recuperando el Rumbo Hasta la Transformación Parte Final.pptx
jenune
 

Último (9)

Pentecostes y La Iglesia - Conferencia Domingo de Pentecostes
Pentecostes y La Iglesia - Conferencia Domingo de PentecostesPentecostes y La Iglesia - Conferencia Domingo de Pentecostes
Pentecostes y La Iglesia - Conferencia Domingo de Pentecostes
 
LA FAMILIA IDENTIFICANDOSE CON LA IGLESIA .pdf
LA FAMILIA IDENTIFICANDOSE CON LA IGLESIA .pdfLA FAMILIA IDENTIFICANDOSE CON LA IGLESIA .pdf
LA FAMILIA IDENTIFICANDOSE CON LA IGLESIA .pdf
 
IDENTIDAD segunDios.es la expresión del carácter distintivo de una persona pdf
IDENTIDAD segunDios.es la expresión del carácter distintivo de una persona pdfIDENTIDAD segunDios.es la expresión del carácter distintivo de una persona pdf
IDENTIDAD segunDios.es la expresión del carácter distintivo de una persona pdf
 
PRESERVACION DE LA FAMILIA SEGUN DIOS.pdf
PRESERVACION DE LA FAMILIA SEGUN DIOS.pdfPRESERVACION DE LA FAMILIA SEGUN DIOS.pdf
PRESERVACION DE LA FAMILIA SEGUN DIOS.pdf
 
Recuperando el Rumbo Hasta la Transformación Parte Final.pptx
Recuperando el Rumbo Hasta la Transformación Parte Final.pptxRecuperando el Rumbo Hasta la Transformación Parte Final.pptx
Recuperando el Rumbo Hasta la Transformación Parte Final.pptx
 
PARÁBOLA DEL SEMBRADOR: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pdf
PARÁBOLA DEL SEMBRADOR: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pdfPARÁBOLA DEL SEMBRADOR: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pdf
PARÁBOLA DEL SEMBRADOR: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pdf
 
Quince minutos con Jesus Sacram - P. Angel Pena.pdf
Quince minutos con Jesus Sacram - P. Angel Pena.pdfQuince minutos con Jesus Sacram - P. Angel Pena.pdf
Quince minutos con Jesus Sacram - P. Angel Pena.pdf
 
Sermon Conquistadores - Alegria -2020.pdf
Sermon Conquistadores - Alegria -2020.pdfSermon Conquistadores - Alegria -2020.pdf
Sermon Conquistadores - Alegria -2020.pdf
 
Uretritis infecciones urinarias mmmmmmmm
Uretritis infecciones urinarias mmmmmmmmUretritis infecciones urinarias mmmmmmmm
Uretritis infecciones urinarias mmmmmmmm
 

Despertando la compasión

  • 1. Despertando la compasión Siendo la habilidad de oportunistas, el cencerro sin badajo lo come la roña. O como diría un ferroviario brightonian de mediados del siglo XIX, acerbamente preocupado por los engranajes encargados de la transmisión de fuerza a las ruedas: _ ‘The squeaking wheel gets the grease’; es decir, ‘la rueda que chirría recibe la grasa’. Y así es, mártires del presente, recientes del momento o abnegados vigentes. Existen prácticas sociales, corporativas, cuya elaboración pérfida trata de despertar la compasión entre aquellos que han pactado celebrar la tramoya, en los máximos términos de disposición del disimulo: efectos escénicos provistos de un ingenio superior, bien discurrido. Rueda que te rueda, a todo vapor. Si no formas parte de la estructura teatral, empiezas a comprender, una por una, la cantidad de secuencias en las que no estás instalado, apostado para concretar la ganancia. Si hay que empezar a revolverlo todo, la acción comienza a ser representada. Recomienza la escenificación. Se perpetra, una por una, la cantidad de formas de expresión y actuación que componen las artes escénicas. ¿Hay que danzar?; ¿hay que cantar?; ¿hay que interpretar?; ¿hay que inflar la gestualidad?; o ¿hay que desencadenar, con diplomática habilidad, una silenciosa mímica que construya toda la pantomima? Mima que te mima, ¡qué mimosos!, pues es a nosotros para quienes la luz de las candilejas dirige su fulgor. Casi todo el plantel adquiere el oficio palatino del espabilado. ¡Uy!, perdón, me refería al oficio del despabilador: aquel encomendado a quitar el cabo de la mecha a las velas y los candiles. Dichas secuencias habrán advertido que tu aparición está rescindida. Todo lo realizado para evitar la manifestación de lo que se pretende que quede oculto, lo cual acaba perdiéndose, encuentra su lugar de articulación. Tú desapareces de los palcos de platea, de los antepalcos y, cómo no, de los palcos. En la parte balconada existen momentos en los que se despliega una admirable representación escénica a la altura de los intérpretes faranduleros, cómicos y figurantes, situados un poco antes del proscenio. Manteniendo las distancias con el público. Sensato alejamiento afectivo. Donde el saludo no languidece. Donde el aplauso no extenúa. Donde el vitoreo no decae. ¿Por qué?, porque al mismo tiempo que se produce la glorificación del palmoteo, existen zonas dentro del auditorio, pero alrededor de la cávea, en las que se está terminando de definir los encajes. Antes, durante y Dios mediante. En un refugio de la excelente isóptica y acústica donde queda la masa despistada. Completamente ajena, para no ser intrusa. Huyendo de la tremolina. La concha acústica deja de prestar sus servicios.
  • 2. Las bambalinas ocultan los aparejos del telar: tejiendo todo lo decorado. El telón va administrando durante la representación los cambios en la escenografía, aquello que no debe ser contemplado. El camarín es el lugar en el que se pueden detallar todos los cambios de vestuario precisos: tipos de vestimenta por el que rasgarse las vestiduras. ¿Cómo hacemos hoy?, vamos casual, formal, de cóctel, de etiqueta, deportiva, cómoda, exprés, etc. ¡Un momento!, la elegiremos en función de cómo sobrellevar mejor nuestra vida comunitaria, y protegernos de los diferentes estados climáticos, es decir, según el símbolo de la clase social que estamos figurando. La conveniencia suele ser la principal inspiración de la farándula. El guardarropa es el único enclave en el que todo puede llegar a igualarse. Sin embargo, claro está, hay abrigos y abrigos. Si llegas a ser un fraccionado segmento de la audiencia, entre otros demandados que completan la concurrencia, queda para ti la oportunidad de promover una buena cencerrada con motivo de la sorna. Empero no por piadosa. Es la única forma conocida, y concedida al fin y al cabo con distante dominio, para convocar mediante esquilas la atención de aquellos distraídos. Ellos solo han captado una trama capitulada. Porque como para gustos no hay disputas, y el que no pide, nada recibe, despertar la compasión fija su objetivo entre quienes se conceden así mismos la victoria. La compasión es la percepción y comprensión del sufrimiento del otro, y el deseo de aliviar, reducir o eliminar por completo tal sufrimiento (https://es.wikipedia.org/wiki/Compasión). ¿Cuántos sufrimientos esconden un descarado y desvergonzado interés personalista?, no tengo la menor idea. Lo que sí sé es que muchos hemos tenido que mamar para poder llorar. Domingo, 29 de enero de 2017 Félix Sánchez Un ciudadano más