El coaching es un proceso que ayuda a las personas a maximizar su desempeño y lograr sus objetivos mediante el cambio de comportamientos. Un coach guía al cliente pero no le enseña, sino que lo estimula a encontrar sus propias soluciones. Las herramientas clave del coaching incluyen hacer preguntas para generar ideas, calibrar continuamente al grupo, y crear sintonía a través de la igualación en el tono de voz y lenguaje.
1. El coaching y la Programación
Neurolingüística
El coaching en general, es un proceso para brindar apoyo a una persona o grupo de
personas y que ayuda a aprender como lograr maximizar su desempeño. Su esencia es
ayudar a cambiar en la forma que desea la persona o grupo y propiciar que se tomen las
decisiones pertinentes para obtener lo que se busca. Es una ayuda a producir resultados
completos y satisfactorios en la vida personal y profesional del cliente.
El coaching se puede aplicar en los negocios, en la familia, en el desarrollo personal y en
grupos en general que desean pasar de un estado presente a un determinado estado
deseado, con lo disponible. Éste se desarrolla en base a una relación de confianza y
confidencialidad que se da entre el coach y el coachee. Aquí el coachee (persona o grupo
de personas guiadas por un coach) no aprende de su coach, sino de sí mismo, estimulado
por éste.
Las intervenciones más habituales son hacia la solución de problemas, sesiones de
creatividad, resolución de conflictos, planeación, etc.
La labor de un coach se centra en:
• Ayudar a las personas y organizaciones a desarrollarse rápidamente y a obtener
resultados más satisfactorios,
• Se orienta en las metas u objetivos del cliente
• Motiva el surgimiento de las soluciones y las estrategias por parte del coachee
• El coach le ayuda al cliente a construir sobre sus propias capacidades y parte de la
idea de que el cliente es creativo y hábil
• El poder del coaching viene de la unión entre el coach y el cliente
El preámbulo para una sesión o varias sesiones de coaching son:
• Análisis de la situación actual.
• Descripción de la situación deseada.
• Selección de participantes activos en las sesiones. De 12 a 15 personas.
• Poner las condiciones para la reunión que básicamente serían:
1,- Estado de serenidad con relación a la comprensión de la situación y lograr un
consenso acerca de cómo manejar dicha situación
2.- Que haya un patrón de conocimiento de los participantes sobre la situación a tratar
3.- Compartir información e ideas que nutran y ayuden a resolver la situación, o a
mejorarla sin juicios, siempre que el coach les dé la palabra
2. 4.- Respeto absoluto ante las intervenciones de los presentes al estar hablando, no se
hacen comentarios acerca de lo que dicen los demás, estos son oportunos sólo cuando sea
el momento adecuado, no se permiten las interrupciones, ni los juicios ofensivos, ya que
se parte del hecho que todos son importantes, (ver artículo Trabajo en Equipo)
5.- Sólo hablar cuando se le da la palabra al participante o cuando se le cuestiona
6.- Siempre eliminar dudas para un completo acuerdo al proponer algo concreto
7.- Implementar un método de votación que tenga un margen del 1 al 5 y dejar que
siempre la mayoría marque la pauta cada vez que se vote, ya que no puede haber toma de
decisiones sin mayoría
El papel básicamente del coach es el arte de trabajar con los demás y lograr que obtengan
resultados. El coach diseña las “preguntas de partida” bien contextualizadas que es la
parte más importante, ya que a través de ellas se realizará el trabajo con su coachee sobre
el diseño de su futuro, de su objetivo como si ya lo hubiera logrado. Detecta dónde están
las dificultades y las maneja a través de preguntas. El coach es un experto en el arte de
preguntar, ya que las preguntas deben ser disparadores para la generación de ideas entre
los participantes. El coach presenta el “qué” para que los participantes generen el
“como”. El coach no emite opiniones, solo verifica información con preguntas tales como
¿dime si lo que yo entendí es correcto…?
A través de los ojos de Programación Neurolingüística, las herramientas básicas del
coach son:
- El modelo de precisión de Grinder, uno de los dos fundadores de PNL. Es el arte de
cuestionar con preguntas tales como: ¿qué te hace pensar…? ¿En qué te basas para
decir…? ¿Cuál es la razón por la que…? Siempre repitiendo las palabras de la persona a
la que el coach está cuestionando sobre lo que dice
- Manejo de los 2 hemisferios, a través de imágenes, a través de música suave de fondo
como la de Bach y el uso del lenguaje (ver artículo Hemisferios Cerebrales)
- Práctica intensa de rapport, o sea igualación en el tono de voz, la respiración, el
lenguaje o parafraseo, la gesticulación cuando se dirige a alguien
- Calibrar (darme cuenta de la fisiología de la persona) continuamente al grupo. Es uno de
los elementos de retroalimentación más importantes en el proceso
- Hacer ejercicios de codificación mental (submodalidades, ver artículo Educa tu Mente)
y de anclajes (ver Anclas Mentales) para propiciar recursos.
Resumiendo, las tres claves principales del coaching son:
- El arte de escuchar,
- El arte de preguntar,
- Crear sintonía (rapport).