2. Don del afecto
Te cuento este cuento, porque te quiero, es un
alimento a la permanente necesidad afectiva que
tenemos los seres humanos.
3. Don del Acercamiento a la
Realidad
A través del cuento, el niño comprende las tramas de la vida real,
ya que en los cuentos, fundamentalmente, se utiliza un lenguaje
ajustado a sus intereses, necesidades.
4. Don de la Fuga
Permiten a los niños liberarse de la tensión de la
realidad, proporcionamos alas a nuestros hijos, a través
del cuento, permitiéndoles viajar a mundos
desconocidos, y a la vez, escaparse de aquello que les
angustia.
5. Don del consuelo
Se cuentan los cuentos para dormir el miedo, para
calmarlo. El lenguaje de los cuentos es un masaje
aliviador.
6. Don del alivio
Los cuentos son un masaje aliviador y un espejo en el
cual los niños pueden entenderse a sí mismos, por eso
tienen que tener un final con una opción de esperanza.
7. Don de la Identificación
Niñas y niños se ven reflejados en los cuentos como si
estuvieran viéndose en un espejo. Ven como otros están
pasando las mismas situaciones y se identifican con ellos,
no escoge al personaje por su heroicismo, sino por la mayor
o menor identificación del mismo.
8. Don del Deseo de leer más
Si a los niños les ofrecemos cuentos que les fascinen,
desearán seguir leyendo cuando aprendan a leer,
porque han comprobado por ellos mismos que en los
libros hay todo tipo de historias apasionantes.
9. Don del Conocimiento y de la
Imaginación
Los cuentos no sólo dan respuestas a las necesidades
de los niños sino que también les suscitan todo tipo de
preguntas. Las preguntas son la base para incitar a los
niños a descubrir nuevos conocimientos, a construir su
inteligencia. Por otra parte, los cuentos también
desarrollan la imaginación.