El documento resume la caída del Imperio romano de Occidente debido al agotamiento de defender territorios tan lejanos, su división en dos partes y la invasión de los pueblos germanos. El Imperio occidental cayó mientras que el oriental sobrevivió como Imperio bizantino. Las invasiones germanas marcaron el fin de la unidad política y lingüística en Occidente y dieron origen a nuevos reinos como el franco.
2. La caída del Imperio romano de
Occidente
• En el siglo IV d.C. el Imperio romano abarcaba
inmensos territorios que se extendían desde
el río Rin hasta el desierto del Sahara, y desde
Hispania hasta Mesopotamia.
• La gigantesca empresa de defender y
administrar posesiones tan lejanas terminó
por desgastar el imperio y lo sumió en una
profunda crisis.
3.
4. • Para superarla, el Imperio romano fue dividido
en dos partes: la parte oriental y la occidental
y cada una de ellas tuvo un destino diferente:
el Imperio oriental sobrevivió mil años más
con el nombre de Imperio bizantino y el
occidental cayó a causa de las invasiones
germanas.
5.
6. Las invasiones germanas
• Desde los días de la República, Roma tuvo contacto con
los germanos. Ya en el siglo III d.C. el aumento
demográfico y la escasez de medios de subsistencia los
hizo desplazarse hacia las fronteras del imperio e
instalarse cerca de los límites de los ríos Rin y Danubio,
pero no fue hasta fines del siglo IV d.C. que estos se
instalaron masivamente en la frontera romana.
• Más que una invasión violenta (como fueron las de los
anglosajones y vándalos), se trató del asentamiento de
pueblos enteros, realizado muchas veces de acuerdo
con las autoridades romanas: los germanos recibían
tierras a cambio de defender las fronteras de Roma
como aliados federados.
7. • En el siglo V d.C., la relación pacífica se
deterioró debido a la ocupación efectiva del
territorio por los pueblos federados y a la
invasión de otros pueblos bárbaros, como los
hunos.
8. • Los germanos, lingüísticamente
homogéneos, habían logrado extenderse desde el
Rhin y el Danubio hasta todo el centro y este de
Europa. Socialmente, estaban organizados en
tribus basadas en el parentesco y se dedicaban a
la agricultura y ganadería, con formas
comunitarias de explotación.
• Su religiosidad se manifestaba en la adoración a
las fuerzas naturales y a los dioses de su estirpe:
Wotan (también conocido como Odín, dios de la
guerra, la sabiduría y la muerte) y Thor (dios del
trueno), por ejemplo. En materia de derecho, no
existía la norma escrita, sino la
consuetudinaria, de transmisión oral.
9. • Inicialmente, los suevos, vándalos y alanos se
instalaron en la península ibérica; los anglos y los
sajones cruzaron el mar del Norte y ocuparon la
Bretaña; los burgundios se establecieron en la
Provenza.
• Al sur del río Loira estaban los visigodos, que
extendieron su dominio por España, el sur de
Francia e Italia, hasta que los
ostrogodos, provenientes del norte del
Danubio, ocuparon su lugar.
• Paralelamente, Clodoveo (481 – 511 d.C.), rey de los
francos, se había establecido en la Galia
septentrional, con lo que nada quedaba del antiguo
Imperio romano de Occidente, sino un conjunto de
reinos autónomos y, muchas veces, hostiles entre sí.
10.
11. Consecuencias de las invasiones
germanas
1. Cuando desapareció el Imperio romano de
Occidente, desapareció la unidad política y
jurídica que durante tantos siglos había
existido alrededor del Mediterráneo.
12. 2. Desapareció también la unidad lingüística.
3. En las regiones fronterizas del Rin y en
Inglaterra, las lenguas de los germanos
reemplazaron al latín.
4. En las Galias (Francia), España e Italia, por el
contrario, continuó predominando la lengua
latina (los visigodos abandonaron su propia
lengua).
5. Paulatinamente el latín fue modificándose y
mezclándose con las lenguas de los germanos
hasta originar, siglos más tarde, las lenguas
romances.
13. 6. Se agravó la decadencia económica de
Occidente: se empobrecieron los campos, se
despoblaron las ciudades, se aceleró la ruina
de la industria y, sobre todo, del comercio
marítimo, ya que los germanos no tenían
ninguna experiencia en esta actividad.
14. 7. La sociedad se volvió completamente rural
porque casi todos los bárbaros se
establecieron en los campos. La gente
continuó emigrando de las desoladas
ciudades, ya que la agricultura se convirtió en
la actividad económica fundamental.
15. 8. Los ricos propietarios romanos perdieron gran
parte de sus tierras porque tuvieron que ceder
a los germanos un tercio de ellas, que era lo
que la ley romana exigía para el ejército.
16. El Islam
• La civilización islámica tuvo su origen en la
península arábiga en el siglo VII d.C.
• El Islam o “sumisión a Dios” es una religión
monoteísta (como el cristianismo y el
judaísmo) fundada por Mahoma, que se
extendió rápidamente desde Arabia hasta la
península ibérica por Occidente y el Indo, en
la India, por Oriente.
17. • La religión predicada por Mahoma unió al
pueblo árabe en una sola fe.
• El dogma principal de esta doctrina es la
profesión de fe en un solo dios todopoderoso
(Alá) del cual Mahoma es su profeta.
• Su libro sagrado es el Corán, que recoge las
revelaciones hechas por Alá a
Mahoma, constituyendo una recopilación de
los preceptos más importantes y las bases del
derecho musulmán.
18. Los preceptos coránicos fundamentales son:
• Profesión de fe, creencia en un dios único, Alá, y
su profeta, Mahoma.
• Oración cinco veces al día, arrodillados y mirando
hacia La Meca.
• Ayuno obligatorio durante el mes de Ramadán
(noviembre y diciembre -40 días- pudiendo
ingerir alimentos durante la noche).
• Dar limosna a los pobres.
• Peregrinación a la ciudad de La Meca, al menos
una vez en la vida.
19. • Mahoma comenzó su prédica en su ciudad
natal, La Meca, llamando a la sumisión a la
voluntad de Alá.
• Sus primeros seguidores fueron libertos y
gente humilde, lo que le dio al movimiento un
cierto carácter antiaristocrático que asustó a
los ricos comerciantes de La Meca, que lo
persiguieron hasta obligarlo a huir con sus
seguidores a la ciudad de Medina, en el año
622 d.C.
• Esta huida, que el mundo musulmán llama
Hégira, marca el inicio del calendario islámico.
20. Expansión religiosa y militar del Islam
• 632-661 d.C., bajo los cuatro califas ortodoxos,
que pertenecían a la familia de Mahoma, los
musulmanes conquistaron Arabia, Siria, Egipto
y Palestina quitándoselas a los bizantinos, y
Mesopotamia, que se la quitaron a los persas.
21. • 661-750 d.C., bajo el califato omeya, el Islam
alcanzó su máximo apogeo
territorial, extendiendo su imperio desde el
norte de la península Ibérica, hasta el valle del
Indo y el Turquestán chino a través de la ruta
de la seda.
• En la Galia fueron derrotados por los francos
en la batalla de Poitiers, el año 732 d.C.
22. • 750-945 d.C., bajo la nueva dinastía abásida se
trasladó la capital del Islam a Bagdad (actual
Irak), pero no pudo gobernar en todos los
territorios conquistados debido al
desmembramiento del imperio en territorios
independientes.
23.
24. El reino franco
• Hacia el siglo V d.C., el rey Clodoveo, con quien comenzó la
dinastía Merovingia, unió a los francos y estableció su
dominio sobre la Galia. Al convertirse al catolicismo
estableció estrechas relaciones entre el reino franco y el
papado en Roma.
• A su muerte, el reino se dividió entre sus descendientes y fue
disgregándose; los merovingios mantuvieron el poder, pero
su autoridad disminuyó debido a su ineficacia.
• Desde fines del siglo VII d.C. adquirieron mayor poder los
condes de Austrasia, que actuaban como mayordomos de
palacio. Uno de ellos, Carlos Martel, logró detener a los
musulmanes en la batalla de Poiters (732) y su hijo, Pipino el
Breve, depuso al último rey merovingio y se hizo coronar
como rey, inaugurando la dinastía Carolingia.
25. • Pipino el Breve fue consagrado rey por el Papa Esteban
II el año 751 d.C., ungido y proclamado “rey de los
francos por la gracia de Dios". Esto le dio a la nueva
dinastía el carácter de divina, al mismo tiempo que
dejó establecida la alianza de los carolingios con el
papado.
• El nuevo rey le entregó al Papa el territorio de los
lombardos, dando origen así, a los Estados Pontificios y
aumentando el poder y la riqueza de la Iglesia.
• Esta dinastía alcanzó su mayor esplendor con el hijo de
Pipino, Carlomagno, que fue coronado como
emperador del Imperio romano el año 800 d.C. por el
Papa León III. Con ello, la Iglesia obtuvo un poderoso
aliado militar y se consolidó la unidad entre el poder
espiritual (religioso) administrado por el Papa y el
temporal (político) administrado por el emperador, que
duró mucho tiempo.
26. El Imperio carolingio
• La grandeza del Imperio carolingio se centró
fundamentalmente en su administración.
Carlomagno organizó política
administrativamente su imperio al crear las
marcas, condados y ducados.
27. • Las marcas eran territorios fronterizos y eran los
marqueses quienes tenían a su cargo la defensa del
reino. Los ducados eran territorios que reunían a más
de un condado y eran gobernados por un duque así
como los condados por los condes.
• Tanto los marqueses como los duques y condes
gozaban de sus cargos en forma vitalicia y estaban
vinculados a Carlomagno mediante el vasallaje. Tenían
autoridad civil, militar y judicial sobre sus territorios.
• Con el fin de mantener el orden y la ley y para poder
fiscalizar a los condes y marqueses, Carlomagno creó la
institución de los missi dominici (enviados del señor)
cuya labor era inspeccionar anualmente los condados y
marcas, controlando los tribunales e informando al rey
del cumplimiento de sus instrucciones.
28. • Al morir Carlomagno, el Imperio carolingio
inició un proceso de desintegración que
culminó el año 843 d.C. con el tratado de
Verdún, que dividió el territorio en tres reinos:
Francia, Alemania y Lotaringia (franja
territorial entre Alemania y Francia, desde los
Países Bajos hasta Italia).
29. • El Imperio carolingio intentó restaurar el
antiguo Imperio romano de Occidente; pero
aunque esta iniciativa fracasó, sí sentó las
bases de una sociedad occidental que, a pesar
de su fraccionamiento político, mantuvo la
unidad religiosa, las instituciones de gobierno
y la misma mentalidad.
30.
31. Otón I: la segunda restauración del
Sacro Imperio romano germano
• El trono germano era electivo, pero los duques de
Sajonia se mantuvieron en el poder por casi un
siglo, siendo el más importante de ellos Otón I, el
Grande, que encabezó la defensa de los
territorios alemanes frente a las invasiones
húngaras, conquistó Italia y fue coronado
emperador el año 962 d.C., estableciendo el
Sacro Imperio romano germano. Su política fue
consolidar el poder real, conteniendo a los
grandes señores.
33. Influencia del cristianismo
• La Iglesia Católica se convirtió en el guardián de
la unidad cultural de Occidente pues, a través de
ella, se mezcló lo romano y lo germano.
• Contribuyó a la conservación de la herencia
cultural romana que estaba deteriorada y casi en
peligro de desaparición como consecuencia de la
ruina de las ciudades y de la desorganización
económica.
• Intentó conservar la unidad lingüística, pero no
pudo evitar que el latín se mezclara con las
lenguas locales e iniciara su evolución a las
lenguas romance.
34. • También ayudó a la integración racial y social
de romanos y germanos consiguiendo,
mediante la evangelización, la unidad
religiosa, humanizando las costumbres
germanas y cristianizando los ritos paganos.
• La conversión oficial de los reinos bárbaros a
la Iglesia de Roma hizo posible la intervención
política de esta, que colaboró con los reyes en
el gobierno y trató de adaptar el concepto de
estado germano a las ideas cristianas, para
reforzar el sistema monárquico.
35. El régimen feudal
• las invasiones de normandos del norte
(vikingos), musulmanes y húngaros (magiares)
que asolaron Europa en los siglos IX y X d.C. y
que, a diferencia de las invasiones del siglo V
d.C., se caracterizaron por el saqueo y la
depredación, sin la búsqueda de una
permanencia territorial.
• Estas nuevas invasiones provocaron la total
desaparición del comercio y el pánico de la
población, que buscó refugio en las fortalezas y
castillos construidos para los representantes de la
administración carolingia (condes y marqueses).
37. • Los reyes, imposibilitados de dar protección a
todos sus súbditos, extendieron su poder
militar y delegaron funciones públicas en los
duques, condes, marqueses y barones, con lo
que se creó una red de unidades autónomas
que dificultaban la fiscalización enviada por el
poder real.
• Debido a esto, el poder político centralizado
fue desapareciendo y su fragmentación dio
origen a un nuevo sistema de organización
política y socioeconómica: el feudalismo.
38. • El sistema feudal se desarrolló en Europa entre
los siglos X y XIII d.C. y sus características más
evidentes fueron:
1. El establecimiento de fuertes vínculos de
dependencia personal (persona a persona) que se
manifestó en la relación señor–vasallo.
2. El dominio que un pequeño número de
privilegiados ejerció sobre una mayoría
principalmente campesina.
3. Un grupo guerrero, jerarquizado, que ocupó los
peldaños superiores de la sociedad.
4. La descentralización del poder político y la
fragmentación de la propiedad.
39. La sociedad feudal
• La sociedad feudal estaba configurada por
estamentos o grupos sociales cerrados a los
que solo se accedía por nacimiento o, en el
caso particular del clero, por ingreso.
• Estos estamentos eran nobleza, clero y
campesinado.
• La pertenencia a cada uno de estos grupos
sociales estaba determinada por los
privilegios, derechos y deberes
correspondientes a cada estamento.
40.
41.
42. Señores y vasallos
• Las relaciones sociales, políticas y económicas se
establecían a través del vasallaje, que significaba
que un hombre libre (vasallo), entraba al servicio
de otro hombre libre más poderoso (señor).
• El vasallo juraba fidelidad a su señor y el señor
juraba protección a su vasallo en la ceremonia
llamada homenaje.
• Debido a la poca circulación de la moneda en esta
época, los reyes y señores más poderosos
pagaban con tierras los servicios que recibían, lo
que se llamó feudo. La posesión del feudo le
permitía al vasallo convertirse a su vez en señor.
43. • Por su parte, el que recibía un feudo se
convertía en vasallo del señor que se lo
otorgaba.
• Así se formó una cadena de dependencia
según la cual el noble de menor rango servía
al de rango superior y así sucesivamente hasta
llegar al rey, que era señor de todos los
señores (incluso de sus reyes vasallos).
44. • Los primeros vasallos eran los duques, condes
y marqueses, porque recibían sus feudos del
rey; pero como a su vez ellos daban feudos a
otros, tenían sus propios vasallos, y cada
subvasallo hacía lo mismo con otro menos
importante.
• Producto de esto se formó una jerarquía
feudal en la cual cada hombre libre y guerrero
era vasallo de un hombre más poderoso al
tiempo que era señor de otro de menor
categoría.
45. La economía feudal
• El origen de este sistema se remonta a los últimos
tiempos del Imperio romano y de las
invasiones, época de violencia que obligó a los
pequeños propietarios a entregar sus tierras a
otros más poderosos a cambio de
protección, convirtiéndose en siervos de aquel
que tenía más poder.
• La gran mayoría de la población era campesina y
se dividía en siervos de la gleba (que no tenían
libertad) y campesinos libres o villanos.
46. • Dentro del feudo, la unidad básica de explotación
era la villa, la que constituía una forma de
organización del trabajo agrícola y, al mismo
tiempo, un sistema de vida de los
campesinos, pues también establecía las
relaciones de estos con el señor de la villa.
• La villa trató de autoabastecerse
económicamente: en ella se hacía el pan, la
cerveza y el vino, también hilaban, tejían la lana y
confeccionaban sus muebles y utensilios.
• El trabajo era considerado un medio de sustento
para todos los integrantes de la villa, no un medio
de lucro.
47. • Un feudo podía tener una o muchas
villas, dependiendo de lo poderoso que fuera el
señor. Todas ellas se componían de elementos
más o menos similares:
1. La casa señorial, que muchas veces era un
castillo fortificado en donde estaban los
talleres, molino, horno, establos, almacenes y
otros.
2. La capilla o Iglesia, que casi siempre estaba cerca
del castillo y se encontraba rodeada por las casas
parroquiales.
3. La aldea, que era un conjunto de casas
modestas, a veces miserables, en donde vivían
los campesinos libres o villanos y los siervos de la
gleba.
49. • Por su parte, las tierras de la villa, a menudo muy
extensas, estaban divididas casi siempre en:
1. Tierras señoriales o reserva: el señor era el encargado de
explotarlas y dueño de todos los productos que ellas
podían producir. En estas tierras trabajaban los siervos de la
gleba, quienes no recibían salario y apenas recibían
alimentos para su subsistencia, y los villanos, que estaban
obligados a prestar servicios personales al señor.
2. Mansus o lotes: porciones de tierra dadas por el señor a los
villanos que las explotaban en beneficio propio, a cambio
de pagar un censo o renta y prestar servicios personales al
señor. El censo era pagado en
especies, aves, huevos, miel, tela, granos, etc.
3. Praderas y bosques comunes: en estos territorios los
señores se reservaban el derecho de la caza, pero los
villanos podían aprovecharlos sacando leña y llevando a sus
animales a pastar.
50. La fuerza del papado
• El pontificado de Inocencio III (1198-1216 d.c.)
constituyó a la Iglesia como una institución
centralizada y jerárquicamente organizada.
• Al mismo tiempo, la Iglesia se expandió
nuevamente en España (con la reconquista de
los territorios que estaban en manos de los
musulmanes), en Escandinavia, en los países
bálticos y entre los pueblos eslavos.
• Con su inmenso poder temporal, el Papa se
convirtió en dirigente de los destinos políticos
de la cristiandad.
51. El resurgimiento urbano
• El aumento de la producción agrícola, que se
desarrolló entre los siglos XI y XII d.C. gracias a las
nuevas técnicas y herramientas aplicadas a la
agricultura (como el arado sobre ruedas, los
molinos de viento y agua y el barbecho), produjo
un excedente en la producción, lo que permitió
alimentar a una población más grande y con
mayores necesidades.
• Esto impulsó el resurgimiento de las ciudades y
el desarrollo del comercio, ya desde el siglo XI,
pero con más fuerza desde el siglo XIII.
52. • Este resurgimiento urbano comenzó a
manifestarse cuando los artesanos y
mercaderes se instalaron en las cercanías de
un castillo o un monasterio, o bien cerca de
un río o del mar.
• Atraída por los productos o las posibilidades
de intercambio, la población fue aumentando.
• Las ciudades medievales eran aglomeraciones
pequeñas que muy pocas veces superaban los
10.000 habitantes.
53. • Estos primeros centros urbanos se llamaron
burgos, y sus habitantes, los burgueses,
basaban su poder en el dinero y no en la
posesión de tierras, como los nobles.
• Se dedicaron al comercio, aumentaron sus
capitales y poco a poco fueron adquiriendo el
control de la economía de las regiones que
habitaban.
54. Desarrollo y expansión del comercio
• El intercambio comercial entre regiones apartadas se
vio favorecido por el mejoramiento de las rutas
terrestres y el aprovechamiento de las vías fluviales.
• Por ejemplo, a consecuencia de las Cruzadas, se
consolidó la ruta entre Oriente y Occidente, a la cabeza
de la cual se situaron los mercaderes del norte italiano,
dando vida a ciudades como Venecia y Génova.
• Posteriormente, el flujo comercial se extendió al norte
europeo, encontrando en Flandes y el mar Báltico las
condiciones necesarias para su desarrollo.
• Los dos grandes centros del comercio marítimo eran el
mar Mediterráneo y la región del mar Báltico y mar del
Norte, en torno a los cuales prosperaron importantes
ciudades.
55. • El aumento de los bienes intercambiados
entre las regiones europeas fue tan
considerable, que el sistema económico se
hizo muy complejo.
• Para organizar las transacciones de tantos
productos, debieron perfeccionarse los
sistemas de pago.
• Diferentes monedas comenzaron a circular
(maravedíes, florines, ducados), el crédito se
hizo cada vez más común y aparecieron las
primeras entidades de préstamo de dinero,
conocidas como banca.
56. • Los artesanos también se organizaron para
protegerse de la competencia desleal y el
descontrol de los precios; todos los que
trabajaban en un mismo oficio se agrupaban
en calles o barrios y se organizaban en
corporaciones o gremios: asociaciones
encargadas de reglamentar, entre otros
aspectos, la duración del trabajo, el salario, la
calidad de los productos y los precios.
57. La vida intelectual: las universidades
• Durante los siglos IX al XI d.C., los únicos focos
importantes de la cultura europea fueron los
monasterios.
• En ellos se preparaban los futuros religiosos, monjes o
seglares, estudiando teología y artes (literatura y
ciencia).
• En el siglo XII aparecieron las escuelas urbanas y
episcopales, que reemplazaron a las monacales.
• En el siglo XIII, los profesores y alumnos de estas
escuelas decidieron agruparse al igual que lo hacían los
artesanos, formando su propia corporación o
universitas, como se llamaban en latín, donde se dio un
gran impulso al desarrollo intelectual.
58. • Las universidades eran corporaciones laicas de
maestros y estudiantes que buscaban liberarse del
poder episcopal y lograr la autonomía, para lo cual
contaban con el apoyo de los reyes y los papas.
• En ellas se estudiaba el derecho romano, para
adaptarlo a las nuevas necesidades, y el pensamiento
filosófico de Aristóteles, que había llegado a Europa
traído por los árabes a través de la península ibérica.
• Las universidades se regían y gobernaban por
reglamentos propios, elaborados por sus miembros, y
tenían el derecho de juzgar a maestros y estudiantes.
• Todas se dividían generalmente en cuatro facultades:
Teología, Derecho, Medicina y Artes. A la cabeza de
cada facultad estaba el decano, y a la cabeza de toda la
universidad, el canciller.
60. Los últimos siglos de la Edad Media:
la transición al mundo moderno
• A partir de 1318, Europa sufrió una sucesión de malas
cosechas que generó una gran escasez de
alimentos, principalmente de cereales.
• Fue un duro período de hambrunas que provocó
muchas muertes y debilitó a la población en general.
• Esta población, ya debilitada, fue azotada por una
terrible epidemia (la peste negra) que llegó desde
Oriente y mató a un tercio de la población europea.
• En consecuencia, en este período Europa experimentó
un dramático descenso demográfico.
61. El azote de la peste negra
• Se cree que la peste negra o peste bubónica llegó
a Europa en un navío genovés cuya tripulación se
habría contagiado del mal en la actual Crimea.
• Esto es muy posible si se consideran los intensos
contactos comerciales que las importantes
ciudades, Estados y potencias mercantiles
sostenían con Asia.
• Desde Italia, la peste se extendió hacia
Francia, España y el centro de Europa.
• Más tarde llegó a Inglaterra, el norte de Europa y
Escandinavia.
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63. Transformaciones políticas
• Entre los siglos XII y XV, Europa sufrió transformaciones
importantes: los cambios socioeconómicos, la
reaparición de los estudios y el cambio de mentalidad
política fueron debilitando el feudalismo y
fortaleciendo la unidad nacional.
• A la cabeza de este proceso se encontraba el rey
apoyado por la burguesía, grupo social que sustentaría
económicamente a las cortes reales y a los incipientes
Estados.
• Para poder gobernar, los monarcas debían recurrir a la
reunión en asamblea de los estamentos: nobleza, clero
y campesinos.
• Estas reuniones eran conocidas como: Parlamentos en
Inglaterra, Cortes en España, Dietas en Alemania y
Estados Generales en Francia.
64. • En Italia y Alemania, principales territorios del
Sacro Imperio romano germano, el proceso de
unificación nacional no funcionó, a causa de la
debilidad de los lazos que unían al emperador
con sus súbditos, a la independencia que
habían logrado las ciudades y a la pugna con
el papado.
65. • Por el contrario, en Francia, Gran Bretaña,
Portugal y España, los monarcas, entre los
siglos XIV-XV, lograron unificar sus territorios y
someter a la nobleza, debilitada por las
continuas guerras.
• Con este proceso, se inició el período histórico
conocido como Edad Moderna.