Este documento describe una aplicación que permite a los estudiantes denunciar casos de acoso escolar de forma confidencial. Muchos estudiantes acosados no informan a sus padres o maestros por miedo a represalias. La aplicación permite presentar una denuncia formal directamente al equipo de la escuela. También se ofrecen talleres para estudiantes y padres sobre cómo prevenir el acoso escolar y generar espacios de diálogo, e instar a las administraciones a establecer protocolos de actuación. Sin embargo, para muchos estudiantes
Tema 8.- PROTECCION DE LOS SISTEMAS DE INFORMACIÓN.pdf
Articulo bulling 3
1. ARTICULO3
En muchos casos, los niños y adolescentes que sufren acoso escolar no cuentan sus
problemas a sus padres y profesores por miedo a que los agresores les sigan haciendo
la vida imposible. A través de esta aplicación, el alumno agredido puede formalizar una
denuncia confidencial que llegaría directamente al equipo de convivencia de su centro
educativo. Según Rodríguez, ''muchos de los niños no dicen nada por miedo a
represalias y es aquí cuando tienen la gran oportunidad de hacer uso del canal de
denuncia confidencial, que permite que los casos de bullying salgan a la luz''.
Trabajamos en la prevención de situaciones de acoso escolar o bullying en las escuelas,
teniendo en cuenta a los niños y las niñas, al centro educativo, a las familias y a las
administraciones. Ofrecemos talleres y cursos sobre bullying o acoso escolar dirigidos a
padres y a niños, para que estén preparados frente a estas situaciones y para que se
generen espacios de diálogo en los que los niños puedan compartir sus vivencias e
incidimos sobre las administraciones regionales para que se instauren protocolos de
actuación en los centros educativos. La escuela debería ser siempre un espacio en el
que sentirse seguro.
Sin embargo, para muchos niños, la escuela se ha convertido en la fuente de un tipo
de violencia del que son víctimas y que ejercen sus propios compañeros, se trata del
acoso escolar o bullying. Hay niños que, por distintas razones, sufren maltrato físico o
psicológico por parte de otros niños a través de actitudes como la represión, la
discriminación, la homofobia, la violencia sexual o el castigo corporal.
El bullying cibernético presenta los tres últimos factores mencionados: la fuerza verbal,
generalmente vulgar, hace que la víctima se niegue a responder al mismo nivel de
vulgaridad con el que es atacada. El alcance que este tipo de acoso llega a tener en las
redes sociales puede hacer aun más grave el daño psíquico y emocional
La falta de empatía, que bloquea la capacidad de congratularse y ser solidario, debe
hacer sufrir también al que lleva a cabo el bullying, pero no por lo anterior merece un
perdón a la ligera, pues en cualquiera de sus manifestaciones esa conducta daña: es
por ello que es una acción que requiere una sanción o al menos una consecuencia.