Campaña mundial encabezada por la OMS. Lanzada el 6 de diciembre de 2007, su objetivo consiste en aumentar la sensibilización y acelerar las acciones destinadas a mejorar la disponibilidad y el acceso a medicamentos específicos para los menores de 15 años.
QUE En pleno siglo XXI, un tercio de la población mundial no tiene acceso a los medicamentos necesarios para gozar de buena salud. Las áreas prioritarias son el VIH/SIDA, el paludismo, la neumonía, la tuberculosis y la diarrea, que en su conjunto son responsables de más del 50% de las muertes de menores de 5 años. Cada año unos 40 millones de personas mueren en los países del sur, de los que un tercio corresponde a niños menores de 5 años. Diez millones se deben a infecciones respiratorias agudas, enfermedades diarreicas, tuberculosis o malaria. Todas ellas son fáciles de evitar con el acceso a los medicamentos esenciales, seguros, baratos y que deberían ser fáciles de conseguir. Ejemplo en el SIDA: Cada minuto un niño muere como consecuencia del sida en el mundo. Una de las razones por las que la mitad de todos los menores con sida mueren antes de cumplir los dos años es que las compañías farmacéuticas no producen versiones de sus medicamentos para tratarlos
Se continúa produciendo, vendiendo y utilizando medicamentos que, a causa de las resistencias desarrolladas, han dejado de ser útiles pero son los que están disponibles, para enfermedades como el paludismo, la tuberculosis y las principales enfermedades transmisibles. En gran medida la investigación en esta área se encuentra en manos de las grandes compañías transnacionales. Por lo que los criterios de mercado son los que orientan esta investigación y por lo tanto existe déficit, abandono de sectores vitales y múltiples imperfecciones que son conocidas pero no corregidas. Las enfermedades globales , como el cáncer, enfermedades cardiovasculares, enfermedades mentales y disturbios neurológicos, representan la mayor concentración de I + D de la industria farmacéutica Las enfermedades olvidadas , como la malaria y la tuberculosis, provocan en la industria farmacéutica basada en la investigación, un interés solamente secundario Las enfermedades extremamente olvidadas afectan exclusivamente a las poblaciones de los países subdesarrollados. Como la mayoría de estos pacientes es demasiado pobre para pagar cualquier tratamiento, y en la práctica casi no representan ningún mercado, son excluidos de los objetivos y los esfuerzos de I + D de la industria. En contraste con esta situación, los productos que se destinan a condiciones que no son puramente médicas (como celulitis, calvicie, arrugas, dietas, estrés, entre otras) constituyen un segmento de mercado altamente lucrativo en los países ricos.
QUE Carencias prioritarias en: Carencias prioritarias en materia de investigación: no existen medicamentos o se desconoce su eficacia y seguridad Carencias prioritarias en materia de desarrollo: existen medicamentos, investigaciones o conocimientos, pero es necesario desarrollar o adaptar los medicamentos Carencias prioritarias en materia de acceso: existen medicamentos, pero no llegan a quines los necesitan
En los países subdesarrollados, sobretodo en los niños y en las mujeres. El continente más afectado es África subsahariana. En las partes más pobres de Asia. ¿QUIÉN? Las mujeres y los niños son los más afectados. Los niños menores de cinco años padecen principalmente de paludismo, neumonía y diarrea. La malaria causa daños permanentes. Más de 9,5 millones de personas mueren cada año a causa de estas enfermedades
Razones principales para este cambio 1. Costes y riesgos de I + D en relación con el bajo nivel adquisitivo de los países subdesarrollados 2. Giro hacia una producción más rentable consolidación se centró en los segmentos más rentables del mercado (enfermedades infecciosas, afecciones cardiovasculares, cáncer, dermatología y neurología), dejando la medicina tropical al margen. 3. Competencia y falsificación de medicamentos. Algunos medicamentos patentados en los países desarrollados son copiados en los países subdesarrollados en que los derechos de patentes de los productos farmacéuticos no están protegidos. Este tipo de producción compite entonces, con el laboratorio innovador. Además de las copias de medicamentos, existen casos de simple piratería (apropiación del nombre y apariencia de un medicamento de marca) que son frecuentes en aquellos países en los que los mercados informales desempeñan una función importante. 4. Costes de adhesión a los estándares de calidad. Ha existido una tendencia general a fortalecer las normativas que las compañías deben cumplir para obtener la aprobación previa a la comercialización de un medicamento, lo que ha incrementado el costo del desarrollo clínico. La necesidad de minimizar los riesgos terapéuticos lleva a reforzar varios estándares de calidad (buenas prácticas c Lo que indica que el reforzar varios estándares de calidad en la producción de medicamentos es un instrumento de dominación de las transnacionales, ya que muchos países subdesarrollados no tienen los recursos tecnológicos, financieros o humanos necesarios para poner en práctica los nuevos estándares, que no significan precisamente una mejoría clínica del medicamento y sí una monopolización de la gran industria que es la única que puede alcanzarlos. Precios prohibitivos La industria tiene el poder absoluto en el tema de los precios, en ocasiones establecidos libremente, con la filosofía de que el mercado se encargará de situarlos finalmente en el nivel adecuado debido a los mecanismos reguladores de la competencia. A esto se le suma, los presupuestos que la industria farmacéutica destina a publicidad y "marketing" de sus productos, que son como mínimo, similares al que destina a I + D, con la consiguiente repercusión en el precio de los medicamentos. Las patentes en la Industria Farmacéutica En el contexto político neoliberal que impera hoy en el mundo, la concentración del poder y la riqueza en manos de unas pocas transnacionales, unida a presiones políticas para el aumento del beneficio de estas es una de las tendencias más significativas del poder económico a nivel mundial. Sin interés científico Ya que investigar y desarrollar pruebas del VIH/SIDA y medicamentos para niños en los países en desarrollo no resulta rentable, son pocas las compañías farmacéuticas que invierten en este campo. El sida prenatal está prácticamente abolido en los países ricos, gracias a la prevención, el tratamiento y la no utilización de la leche materna cuando las madres tienen VIH. En los países pobres, los bebés siguen infectándose.
Aumenta la desigualdad entre los países. Injusticias sociales Frena el proceso de desarrollo de los países del tercer mundo. Desigualdad de derechos y oportunidades
Empresas farmacéuticas: interés económico Los países subdesarrollados : interés por curarse y poder acceder a los medicamentos que les salvarán la vida. Los países desarrollados: interés económico y político. MSF y las ONGs que intentan ser intermediarios y velar porque se cumplan todos los derechos y para que todo el mundo tenga acceso a los medicamentos.
ARTICULO 3 Todo individuo tiene derecho a la vida, a la libertad y a la seguridad de su persona . ARTICULO 22 Toda persona, como miembro de la sociedad, tiene derecho a la seguridad social (…) ARTICULO 25 Toda persona tiene derecho a un nivel de vida adecuado que le asegure (…) la salud y el bienestar, y en especial (…) la asistencia médica y los servicios sociales necesarios (…) 2. La maternidad y la infancia tienen derecho a cuidados y asistencia especiales. (…)
Igualdad y Equidad Justicia Solidaridad Derechos de las personas: Derecho a la salud y a la vida
Hace unos años, la producción de medicamentos genéricos era libre: cada país podía establecer el precio adecuado y comerciar según sus propias normas. Sin embargo, con los años se crearon leyes que defienden la propiedad intelectual y que dieron lugar a la creación de las patentes. Estas patentes, además de garantizar el derecho de sus creadores a recibir los beneficios que producen, también acrecentaron el precio de los medicamentos. Así, actualmente el problema es que se ha de ayudar a estos países intentando no violar las leyes de patentes. FARMACEUTICAS Actualmente se rigen por un sistema ético materialista. Sus objetivos se materializan en alguna concreta: obtener el máximo beneficio. Son multinacionales con mucho poder y mediante las patentes defienden su derecho a la propiedad intelectual, a pesar de que ello encarezca los precios y haga que los medicamentos resulten inaccesibles para muchas personas. Sudáfrica Es el país más afectado en el mundo por el SIDA, con uno de cada nueve habitantes infectados con el VIH, es decir, alrededor de 4,7 millones de personas. Hace unos meses, el Gobierno de Sudáfrica decidió suministrar fármacos genéricos para tratar el sida, con lo que expropió los derechos de propiedad intelectual de los inventores y violó el derecho internacional en materia de patentes. No es de extrañar que unas cuarenta multinacionales farmacéuticas llevaran al gobierno a los tribunales. Por un lado, no hay duda de que es inhumano impedir que millones de seres humanos enfermos mueran simplemente porque son pobres y no pueden pagar el precio de los fármacos patentados. Las empresas farmacéuticas perderán beneficios, eso es verdad, pero servirá para salvar millones de vidas humanas. España Firmó un “Marco de Cooperación” con la Organización Mundial de la Salud En su declaración tras la Cumbre de la FAO celebrada en Roma en junio de 2008, el Gobierno español declaró que la seguridad alimentaria de los niños menores de 5 años constituía una prioridad inmediata de su política de Cooperación. Por esta razón, las propuestas de MSF tenían una orientación sencilla: que los “hechos” de la Cooperación Española confirmaran los compromisos políticos expresados en este y otros foros por el Gobierno. En este sentido, las aportaciones de MSF al Plan Director abogaron por la firma de programas con países afectados por la emergencia de la desnutrición infantil -con los que España mantenga relaciones de cooperación-, para apoyar técnica y financieramente estrategias de tratamiento ambulatorio en sus programas de salud, y de forma más general, por la revisión de la calidad de las ayudas alimentarias que España, como país donante, canaliza a través de las Agencias especializadas en la alimentación y la infancia de Naciones Unidas, entre otras. ONGS La ONG Oxfam Internacional denuncia que las farmacéuticas y los países ricos impiden el acceso a medicamentos que podrían salvar millones de vidas en los países más desfavorecidos. La Declaración de Doha, aprobada hace cinco años y que permite a países en desarrollo acceder a genéricos para garantizar su salud pública, "sigue sin poder aplicarse", Las personas más pobres de los países en desarrollo encuentran dificultades para acceder "a medicamentos baratos que pueden salvar sus vidas”. En un documento titulado "Patentes contra pacientes: Cinco años después de la Declaración de Doha", Oxfam señala que los países ricos hacen "muy poco, o nada", para cumplir sus obligaciones. En algunos casos, incluso, "debilitan de forma consciente el alcance de este acuerdo". Los países en desarrollo "pueden anteponer las garantías de salud pública a las reglas de propiedad intelectual de la Organización Mundial del Comercio -conocidas como ADPIC- con el fin de asegurar el acceso a medicamentos genéricos más baratos", según se afirma en la declaración. Sin embargo, "los países ricos han traicionado el espíritu de la Declaración de Doha", aseguró la directora general de la organización en España, Ariane Arpa. "La declaración contempla las medidas adecuadas, pero exige voluntad política para ponerlas en marcha, y los países ricos no la tienen", afirmó. "Vamos hacia atrás, y hay gente que sufre y muere innecesariamente“ Los países subdesarrollados son víctimas que no intervienen en el conflicto porque prácticamente no tienen ni voz ni voto. Obviamente, sus intereses son el de acceder a los medicamentos, lo que provoca el conflicto que intentamos de analizar.
Las farmacéuticas se mueven por sus propios intereses, buscan su propio placer sin tener en cuenta las consecuencias que esto conlleva para otras personas. El exceso puede causar dolor, y eso es lo que ocurre actualmente, porque la obsesión por la retribución económica afecta a los países subdesarrollados que no pueden permitirse pagar la medicación. Por lo que respecta al gobierno de España, su postura es también un poco hedonista porque a pesar de firmar marcos de cooperación y distintos acuerdos, no focaliza toda su atención en atender los problemas de otros países. Por lo tanto, aunque en menor medida, también podría considerarse una ética teleológica hedonista cuando antepone sus propios intereses al bienestar de las personas desfavorecidas. El gobierno de Sudáfrica comercializó medicamentos genéricos en su país cuando estaba prohibido. Esto se considera una actuación hedonista porque, aunque lo hizo con el objetivo de beneficiar a sus habitantes, perjudicó a las empresas farmacéuticas que tenían propiedad intelectual sobre estos medicamentos. La postura de las ONGs no es hedonista, ya que es justamente en el placer y el bienestar de los demás en los que se centra su actuación
A unque las farmacéuticas reciban muchos beneficios, su actuación no es ética porque perjudica a un gran número de personas. Por lo tanto, la postura correcta sería la de las ONGs, que defienden el mayor bien de todas las personas y no sólo de un grupo y en ocasiones la postura de España, que, como hemos dicho anteriormente, también toma parte en campañas para la salud mundial y coopera (sobre todo mediante ONGs como Intemón Oxfam) con estos países en vías de desarrollo, que figuran entre los objetivos del Milenio. El gobierno de Sudáfrica no actúa de forma utilitarista porque antepone sus propios intereses a los de los demás, sin tener en cuenta las consecuencias que ello pueda ocasionar.
Por lo tanto, lo que deberían hacer las farmacéuticas es contemplar los Derechos Humanos. No sólo se debe decretar sino que es importante actuar. Por ejemplo, el gobierno de Sudáfrica intenta poner remedio al SIDA en su país mediante medicamentos, pero de una forma “ilegal” porque no respeta el derecho de autor de las farmacéuticas. Lo que deberían hacer las empresas farmacéuticas es ayudar a estos países en vías de desarrollo haciendo accesibles sus medicamentos, a pesar que vean reducidos sus beneficios durante un tiempo. Lo que dicta la conciencia es que todas las personas somos iguales y tenemos los mismos derechos, entre los que se encuentra el derecho a obtener medicamentos. Si obramos de esta manera, este comportamiento beneficiará directamente a las personas necesitadas e indirectamente a todo el mundo, porque será un comportamiento que podrá convertirse en una norma universal y que por lo tanto podrá ser aplicado en múltiples ocasiones.
Consiste en trasladar el conflicto a una situación de diálogo imaginaria e idónea, donde todos los implicados tengan las mismas oportunidades y exista una igualdad de participación y que las soluciones sean beneficiosas para todos: velo de la ignorancia. Pase lo que pase todo el mundo saldrá beneficiado. Cual es la solución en este caso: Creemos que una solución posible aunque un poco utópica es la siguiente: Deslocalizar las fábricas o centros de producción de medicamentos. Contratar a personas de los propios países subdesarrollados y a expertos que puedan enseñarles y a voluntarios de todo el mundo que se ofrezcan. De esta manera, los ciudadanos están pagando parte del medicamento. Esta ética nos lleva a desarrollar otra solución más compleja del conflicto, según la cual todas las personas, en la misma medida, tiene que salir beneficiadas de la situación. Si se aplicara esta solución saldrían beneficiadas todas las partes: para empezar, las empresas farmacéuticas conseguirían una mano de obra más barata que implicaría que el coste de los fármacos se redujera. Si el coste se reduce, el número de pacientes con posibilidad a acceder a elles es mayor y como consecuencia cuantos más fármacos se compren más beneficios se obtienen. Los enfermos tendrían que pagar un precio más bajo y accesible. Es justo que todo el mundo tenga que pagar algo para comprar un medicamento. Por otro lado, los trabajadores natales de las empresas farmacéuticas recibirían un pequeño sueldo que les ayudaría a sobrevivir y gracias a esto se crearían más puestos de trabajo. Los voluntarios de MSF y otras ONGs podrían participar en la causa ya que son los primeros que buscan la justicia e igualdad. Se crearía una situación de igualdad de condiciones, se obtendrían beneficios y se acabaría el problema.
Para ello es imprescindible: Ampliar la investigación Desarrollar más medicamentos y mejorar el acceso. Muchos de los medicamentos actuales no han sido desarrollados para los niños o no están disponibles en formas o dosis adecuadas para ellos, y cuando lo están, no les llegan a los niños que más los necesitan. La campaña Medicamentos a la medida de los niños trata de cambiar esta realidad. Para alcanzar estas metas, la OMS está alentando a las partes interesadas a que adopten medidas en materia de investigación, producción, reglamentación y legislación, creación de capacidad y financiación. Asimismo, está proporcionando a la industria farmacéutica información clave sobre las necesidades de salud pública, asesorando a los países con respecto a la calidad, seguridad y eficacia de los medicamentos específicos para los niños y a la gestión de los suministros, y proporcionando a las partes interesadas y compartiendo con ellas información acerca de la posología, estructura y directrices terapéuticas. Gobiernos Los gobiernos deben considerar prioritarios la adquisición y el suministro de medicamentos de uso pediátrico. Para ello puede ser necesario: efectuar ajustes de la reglamentación y la legislación que faciliten investigaciones y ensayos clínicos éticos y seguros en niños para garantizar que los medicamentos, tanto nuevos como ya existentes, sean seguros en la población pediátrica; mejorar los requisitos para la autorización de comercialización y el etiquetado; ofrecer capacitación técnica a los organismos de reglamentación para que se ajusten a las normas de la OMS, y poner medios para que los profesionales sanitarios tengan conocimientos técnicos, recursos y capacidades que les permitan mejorar el uso de los medicamentos en los niños. En segundo lugar, será necesario apoyo financiero a la investigación y desarrollo para explorar la necesidad de tratamientos para enfermedades concretas, investigar las dosis apropiadas o fortalecer las estructuras legislativas y de reglamentación en los países en los que no son adecuadas. Investigadores Hay escasos conocimientos sobre los efectos que pueden tener algunos medicamentos en los niños. Es fundamental que la comunidad investigadora colabore con la OMS en la realización de las investigaciones necesarias para crear y mejorar los medicamentos de uso pediátrico. La OMS espera su ayuda continua en la fijación de metas, la formulación de una estrategia de investigación y la investigación propiamente dicha, que es crucial para alcanzar estos objetivos Industria Sociedad civil y dispensadores de atención de salud La sociedad civil, los profesionales sanitarios y sus asociaciones tienen un papel central en el esfuerzo de investigación necesario. No sólo tienen gran influencia en las instancias decisorias, sino que muchos de ellos también poseen conocimientos técnicos esenciales. Padres y población en general A los padres y al público en general se les alienta a que se informen sobre el tema y conozcan mejor lo que están haciendo sus gobiernos, los organismos de reglamentación, los institutos de investigación y desarrollo, la industria y los fabricantes para solucionar esta necesidad mundial. Unas buenas condiciones de salubridad, unos sistemas limpios de suministro de agua y el acceso a una sanidad básica impiden a los habitantes de los países más ricos ser víctimas de estas dolencias Su primer desafío es conseguir que las compañías farmacéuticas aflojen el control que ejercen sobre tratamientos potenciales que ya tienen en las estanterías Por lo tanto, por una parte las farmacéuticas conservan sus patentes pero garantizando el acceso a todo el mundo. Quizás, entonces, se verán obligados a ceder un poco en su postura. Los gobiernos modificaran sus acciones y ayudaran a los países subdesarrollados si no lo hacen ya y también a las empresas investigadoras. Las empresas de investigación invertirán también en enfermedades menos rentables pero más importantes y que afectan a más gente. Se concienciará a todo el mundo de la necesidad de garantizar el acceso a la medicación para todo el mundo.