1. NOMBRE DE LA INSTITUCIÒN:
INTITUCIÒN EDUCATIVA FISCAL MIGUEL DE SANTIAGO
NOMBRE DEL ESTUDIANTE: Myrian ILaquiche
CURSO: 1 E2
FECHA: 01/03/2021
TITULO: Memoria
PROYECTO Nº4
* Con la información analizada, elabore una memoria de los 5 mitos y leyendas más
conocidas del Ecuador
1- Cantuña y su pacto con el diablo
Cantuña era un respetado indígena en los tiempos coloniales al que le
fue encomendada la construcción del atrio de la Iglesia de San Francisco
en Quito.La paga por dicha labor era muy buena, pero la condición era
que debía realizarse en el menor tiempo posible. Cantuña entonces
decidió vender su alma al diablo con la condición que todas las piedras
del atrio estuvieran allí puestas antes de que salieran los primeros rayos
del sol. Éste grabó en una piedra que cualquier persona que la tocara
reconocería únicamente a Dios. Tres pequeños demonios que trabajaban
esa noche no pudieron tocar la piedra y dejaron incompleta la
construcción. Cuando el diablo llegó para llevarse el alma de Cantuña,
éste reclamó que la obra no había sido completada y que por tanto no se
podía cumplir el trato, ganando su alma de vuelta.
2- La doncella de Pumapungo
Pumapungo, localizado en Cuenca, era el destino de descanso preferido
por los emperadores incas. Este lugar estaba impresionantemente
decorado y hoy en día es posible visitar sus ruinas. El lugar contaba con
una fuente sagrada que era usada exclusivamente por el emperador.
También se encontraba atendido por unas doncellas conocidas como las
Vírgenes del Sol. Estas mujeres eran criadas desde pequeñas en
distintas artes y habilidades que usaban para entretener a los
emperadores. Nina era una de las Vírgenes del Sol residentes en
Pumapungo y aunque estaba prohibido, se enamoró de uno de los
sacerdotes del templo. Este par solía reunirse en las noches de luna
llena en los jardines del lugar. Cuando el Emperador se enteró de este
hecho mandó a matar al sacerdote, pero prohibió que se informara a
Nina de esto. La doncella al ver que su amante no acudía a sus
encuentros finalmente murió de pena moral. Se dice que hoy en día en
2. las mismas noches de luna llena se puede oír su lamento entre las ruinas
del lugar.
3- El Guagua Auca
Se dice que el Guagua Auca es un demonio creado por el alma de un
niño que nació y murió sin llegar a ser bautizado. Éste aterra a
borrachines en los caminos a altas horas de la noche. Se manifiesta con
un chillido incesante que desespera a cualquiera. Los incautos sin
saberlo buscan el origen del chillido hasta que encuentran lo que parece
ser un niño envuelto en una manta. Más tarde las personas descubren
como la fisionomía del supuesto niño cambia y se dan cuenta de que en
realidad estaban cargando a un demonio. Cuentan que muchos han sido
encontrado muertos y con espuma en la boca como resultado del
encuentro con el Guagua Auca.
4- Los orígenes de los Cañaris
Los cañaris eran una etnia que estuvieron asentadas a lo largo de las
provincias de Azuay y de Cañar. El término cañari viene a ser
descendientes de la culebra y la guacamaya, lo que da una pista sobre la
leyenda que se ha formado acerca de sus orígenes. Según cuenta, en
aquellas tierras Pachamama mandó un diluvio que cubrió hasta la cima
de la montaña más alta. Todo se destruyó y solo dos hermanos
sobrevivieron, los cuales estuvieron viviendo en la cima esperando a que
el nivel del agua bajara. A punto de morir por hambre, los hermanos
descubrieron una cueva en la que había comida. Al día siguiente
volvieron y de nuevo apareció comida. No entendían como llegaba hasta
allí, hasta que un día se percataron que dos mujeres con forma de
guacamaya eran las que dejaban allí el alimento cada día. Los hermanos
y las guacamayas se enamoraron y tuvieron muchos hijos, siendo los
primeros pobladores del Cañar moderno.
5- La veleta de la catedral de Quito
Durante la etapa colonial de Quito vivía en la ciudad un poderoso
caballero lleno de riquezas, pero también de orgullo y prepotencia. No
dudaba en insultar o despreciar a todo aquel que se cruzase por su
camino, ya que se sentía el hombre más importante del mundo. Tanto
era su desprecio por todo, que un día volviendo borracho a su casa se
detuvo frente a la majestuosa veleta en forma de gallo de la catedral de
Quito. La observó y de sus palabras solo salieron barbaridades como
“¡ese gallo es patético!”, “¡Menuda broma de gallo!” o “Es más bien un
gallito en vez de gallo”.Para sorpresa del caballero, el gallo tomó vida y
se descolgó de la veleta, atacándole ferozmente. Le hizo heridas por
todas partes y luego volvió a su posición original. A la mañana siguiente,
el hombre despertó con todas las marcas de picotazos y sangre por el
3. cuerpo. No supo si fue verdad o producto de su imaginación por los
efectos del alcohol, pero desde entonces no volvió a pasar por delante
de la catedral ni abrió el pico para humillar a nadie más.