1. Deudas
del
teólogo
cristiano
El
teólogo
católico
y
en
general
el
cristiano,
tiene
deudas
con:
1. Los
movimientos
de
retorno
a
los
orígenes:
el
redescubrimiento
de
la
Biblia
y
el
de
la
humanidad
de
Cristo
en
un
hombre
concreto
y
en
un
contexto
concreto
2. Al
reconocimiento
de
la
legitimidad
y
necesidad
de
los
estudios
histórico,
crítico
y
filosóficos
3. Al
retorno
a
las
fuentes
litúrgicas
no
como
oficio
a
cumplir
o
deber
religioso,
sino
como
iglesia
en
acto,
lugar
y
nacimiento
de
esa
Iglesia
sobre
todo
el
bautismo
y
eucaristía
4. A
los
movimientos
de
tendencia
a
las
propias
metas,
presencia
eficaz
de
los
cristianos
en
aquellas
fronteras
de
acción:
presencia
obrera,
presencia
cristiano
en
el
mundo
de
la
pobreza,
en
la
investigación,
etc.
5. A
los
movimientos
generales
del
pensamiento
contemporáneo
extraeclesiales:
personalismo
filosófico
con
Max
Scheller
o
Mounier,
o
al
existencialismo
que
ha
mostrado
que
Dios
y
el
hombre
no
son
antagónicos,
y
la
libertad
del
hombre
como
don
6. A
los
grandes
desmitificadores:
Nietzsche,
Freud
y
Marx,
porque
han
forzado
a
los
creyentes
a
reflexionar
sobre
su
propia
fe
para
una
crítica
tras
haber
aceptado
el
reto.