Bolivia tiene la mayor carga impositiva para empresas en América Latina, equivalente a cerca del 34% del PIB, según un informe del Banco Interamericano de Desarrollo. Esto desincentiva las inversiones y reduce la productividad económica. Perú tiene la menor carga tributaria en la región, alrededor del 19% del PIB. La elevada carga impositiva en Bolivia, junto con los altos incrementos salariales, restan competitividad a la producción nacional.