Dejar de comer carbohidratos refinados reduce la acumulación de grasa abdominal, los ataques de hambre y la hinchazón, al tiempo que disminuye el riesgo de diabetes y aumenta la energía y resistencia muscular. El documento no recomienda eliminar panes, pastas y tortas, sino reducir su consumo y preferir alternativas más saludables de acuerdo con el peso y actividad de cada persona.