Este documento describe la creación de un abono orgánico hecho de desechos como cáscaras de frutas y verduras, melaza, aserrín y tierra. Explica el proceso de elaboración, que incluye cortar los desechos en pedazos pequeños, mezclarlos con melaza y levadura, agregar capas en un contenedor y dejarlo descomponer por 5-6 semanas. Finalmente, concluye que este abono es viable técnica, financiera y socialmente para mejorar la calidad del suelo y reducir el