SELECCIÓN DE LA MUESTRA Y MUESTREO EN INVESTIGACIÓN CUALITATIVA.pdf
Amistad a bordo
1. Amistad a bordo
Pasados unos años luego de la segunda guerra mundial, tras recuperar partes y partes de barcos que
cayeron en medio de fuego y sangre, fueron vendidas a empresarios de distintas islas de mar caribe para
reconstruir barcos e iniciar nuevas rutas para el traslado de personas y así expandir el comercio marítimo.
El Capitán Francesco Cantando un hombre italiano de unos 30 años de edad de tez blanca, impecable
postura y un temperamento exigente y perfeccionista. era quien comandaba el barco ¨La vela de oro¨. Que tras
su reconstrucción, su altura y anchura doblaba en tamaño a cualquiera de los demás barcos. La cantidad de
personas que circulaban era incontable para cualquier lento con los números. Pero su peculiar restaurante
asombraba a cualquiera. era una zona exclusiva para quienes tenían mucho dinero.
esa mañana de agosto, un sol celoso de la vistosidad del mar, alumbraba mucho mas que otros días y
a través de las ventanas del restaurante de aquel gran barco se atravesaban como flechas los rayos de luz.
entre el claro oscuro, se veía una niña quien jugaba detrás de las mesas del rincón.
El pequeño Mario. Un niño de unos 7 años de edad, con un traje tan pulcro como la imagen de su
padre, El Capitán Francesco, entro a aquel restaurante y sus ojos no pudieron observar nada mas que a esta
misteriosa niña que estaba medio alumbrada por los rayos de sol en aquel rincón.
Aunque un poco tímido no bacilo en ir y hablar con aquella niña.
-Hola como te llamas? Preguntó Mario.
- Mi nombre es Camila. Contestó escondiéndose de manera que el sol ya no dejaba ver su rostro.
Porque te escondes Camila.? Me llamo Mario. Mi papa es el capitán de ¨la vela de Oro¨ y tengo dos
hermanas y una hermosa mama.
-Tu papa es el Capitán? Pregunto Camila con voz temblorosa como si no hubiese asimilado lo que le
había dicho Mario.
- Si, si ya te había dicho. Porque me preguntaste de nuevo?. Quedando Mario pensativo.
- No, no por nada. Solo soy Camila y tengo 9 años.
Mario debía marcharse pues su cuidadora lo estaba buscando ya casi era la hora de comer y la
puntualidad era lo primero en los cantando. Así que se despidió de Camila con profundas ansias que pasara
otro día y la volvería a ver.
Al siguiente día Mario fue justo al mismo sitio donde había visto a Camila y la encontró y esta vez la
luz vestía su lindo rostro que se complementaba con su personalidad. Una linda niña de ojos negros tan
grandes como un bombon de chocolate, de piel color tostada por el sol y cabello marrón con rayos claros en
las puntas. Era una niña muy hermosa pero su ropa no hacia conjunto con ella, pues era vieja y sucia pero un
tanto remendada. Al parecer por ella misma.
Mario y Camila jugaban por horas día tras día. Vivieron las mejores aventuras por los pasillos de
aquel barco. Pasada una semana mientras el barco navegaba por las nuevas rutas que El Capitán Francesco se
había trazado, a un par de días de llegar a su nuevo destino, Mario no sabia lo que sucedería.
Mario invito a Camila a comer con el y su familia y le pregunto por sus padres.
- Mario mi mama es una mujer muy ocupada y mi padre no tiene tiempo para mi. Por favor sigamos
jugando como siempre y algún día te los presentare. Lamento no poder cenar contigo. Dijo Camila con un
tono de voz poco usual en ella. Lo que hizo que Mario quedara mas pensativo.
2. -bueno esta bien. ¡Pero entonces vas a conocer a mi padre mañana!.
-Esta noche le contare de ti y que cenaras con nosotros por que tus padres no pueden. Cenaras con
nosotros. Si, ¡eso harás!
Camila lo vio con ojos de miedo y ansias al mismo tiempo. Mario no entendió la razón sin embargo
se fue y la dejo allí parada.
Lo que Mario no sabia era que los padres de Camila habían muerto, solo era una niña fugitiva que no
se adaptaba a ninguna ciudad ni hogar para huérfanos , debido al maltrato que estos recibían allí.
Llego el día de la cena. Justo terminando de llegar a una nueva cuidad esa tarde. Mario emocionado
por cenar con sus padres , hermanas y Camila, se alisto mejor que nunca. Se baño, se peino y hasta uso
perfume de su papa.
Guardaba en su bolsillo una nota para darle una linda sorpresa a Camila, pero ella nunca llego.
Su cara de tristeza invadió la mesa aquella noche. Su madre con una mirada de desprecio y
decepción miraba al Capitán Francesco y la velada no termino en mas que silencio y solo el ruido de los
cubiertos al ser recogidos.
La noche anterior a la cena luego de Mario contarle a su padre acerca de esta niña, lo que para el era
una emoción y alegría, para su padre representaba un problema y un estorbo.
El Capitán había dado la orden de que todos los indocumentados del barco debían ser dejados en el
próximo destino para evitar intrusos, ladrones, y niños sin padres. Entre esos se encontraba la linda Camila,
quien solo quería una familia y en especia un amigo.
Tras la horrible velada y cena de la Familia Cantando, Mario sentado frente a la ventana de aquel
lujoso restaurante en el barco, donde frente a el veía caer la noche, metió su mano en su bolsillo y leyó la
pequeña nota que decía ¨ para mi amiga a bordo.¨
y un torcido y esforzado corazón dibujado a un lado con dos caras felices que justo en ese instante
era lo contrario al reflejo del rostro del tris te Mario.
Fin.
Ruth Ballesteros
25.506.532