La hipertensión arterial es la causa principal de accidente cerebrovascular. Afecta al 50% de adultos entre 60-69 años y 25.5 millones de personas la padecen, aunque el 40% no lo sabe y de los que lo saben solo la mitad toma medicamentos para controlarla. El objetivo del tratamiento de la hipertensión es disminuir el riesgo cardiovascular mediante fármacos que actúan sobre la contractilidad cardíaca, el tono venoso, el volumen sanguíneo y los vasos para provocar relajación.